9 ”Seguí contemplando hasta que se colocaron tronos*+ y el Anciano de Días*+ se sentó. La ropa de él era blanca justamente como la nieve,+ y el cabello de su cabeza era como lana limpia.+ Su trono era llamas de fuego;+ sus ruedas eran un fuego ardiente.+
2 Y fue transfigurado delante de ellos, y su rostro resplandeció como el sol,+ y sus prendas de vestir exteriores se hicieron esplendorosas como la luz.+