18 Y lo oyeron los sacerdotes principales y los escribas, y se pusieron a buscar cómo destruirlo;+ porque le temían, pues toda la muchedumbre estaba continuamente atónita de su enseñanza.+
20 Jesús le contestó: “Yo he hablado públicamente al mundo. Siempre enseñé en una sinagoga y en el templo,+ donde concurren todos los judíos; y no hablé nada en secreto.