30 Pero el rey Sehón de Hesbón no nos dejó pasar, porque Jehová tu Dios permitió que su espíritu se pusiera terco+ y su corazón se volviera obstinado a fin de entregarlo en tus manos, como puedes ver hoy.+
7 Pero, mediante esa visita a Jehoram, Dios causó el hundimiento de Ocozías. Cuando llegó allí, salió con Jehoram para encontrarse con Jehú,+ el nieto* de Nimsí, a quien Jehová había ungido para acabar con la casa de Acab.+