16 ”Porque Dios amó tanto al mundo que entregó a su Hijo unigénito*+ para que nadie que demuestre tener fe en él sea destruido, sino que tenga vida eterna.+
40 Porque esta es la voluntad de mi Padre: que todo el que reconozca al Hijo y demuestre fe en él tenga vida eterna,+ y yo lo resucitaré+ en el último día”.