¿Cuánta estabilidad en la nación más rica?
SI SE juzga a los Estados Unidos por el valor de las mercancías y servicios que producen, es la nación más rica del mundo. Además, su nivel de vida se cuenta entre los más altos.
En Vital Speeches of the Day, un economista comentó: “Es cierto que la economía de los Estados Unidos ha elevado nuestra norma de vida a un nivel de lujo nunca antes conocido. Pero es igualmente cierto que en el espacio de una generación le hemos impuesto a nuestra economía la mayor estructura de deuda en la historia humana.”
Sí, gran parte de la actual norma de vida elevada se ha logrado con dinero que se ha tomado prestado.
Enormes deudas
Como resultado, los Estados Unidos tienen una enorme carga de deudas, con más deudas amontonándose cada año. En el exterior, el país a menudo tiene déficits. En el interior, sus deudas son enormes.
Robert Swinarton, vicepresidente de la empresa Dean Witter & Co., declara: “Como nación, sufrimos del impulso desenfrenado de dejarnos en prenda, o como lo expresó recientemente un artículo de fondo de Barron: ‘Casi la entera nación, desde el burócrata hasta el que se gana la vida para su familia, ha demostrado un anhelo extraordinario de pedir prestado. Estamos convencidos de que esta propensión más o menos universal de agotar el futuro permanece como uno de los excesos con el cual algún día tendrá que habérselas.’”
¡La deuda total de los Estados Unidos actualmente excede por mucho tres billones (tres millones de millones) de dólares! Eso es aproximadamente dos veces más que el valor de todas las mercancías y servicios que se producen en el país en un año entero.
El U.S. News & World Report pregunta respecto a esta deuda tremenda: “¿Está fuera de control?” Contesta: “La montaña de deudas se ha hecho demasiado gravosa para muchísimos prestatarios.”
De la gigantesca deuda total, el gobierno federal debe unos 650.000 millones de dólares, las corporaciones como un billón y medio de dólares, los individuos como un billón de dólares, y los gobiernos de ciudad y estado como unos 230.000 millones de dólares.
Deuda federal
El gobierno federal ha tenido tremendos déficits en los años recién pasados. Por supuesto, éstos han resultado de gastar mucho más dinero que el que cobra en impuestos.
En cada uno de los últimos dos años, los déficits han sido tremendos. En el año fiscal de 1975, el déficit ascendió a 43,6 mil millones de dólares, mayor que en cualquier otro tiempo desde la II Guerra Mundial. ¡En el año fiscal de 1976 ascendió a 65.600 millones de dólares, el mayor en la historia de los EE. UU.! ¡Pues, tan solo el interés en la deuda federal es ahora de aproximadamente 40.000 millones de dólares anuales! En 1939 fue de mil millones de dólares.
Tampoco sería fácil reducir los costos. Las obligaciones “intraconstruidas” del gobierno siguen aumentando. Por ejemplo, el costo de los armamentos modernos sigue subiendo, habiendo llegado actualmente a más de 100.000 millones de dólares anuales. El costo de las pensiones para empleados gubernamentales es seis veces mayor que lo que fue hace diez años, y se espera que en otros diez años aumente al doble o triple. El Fondo de Jubilación para el Ramo Civil de la Administración Pública está pagando más dinero que el que recibe. Lo mismo es cierto del Seguro Social.
El periódico The Wall Street Journal afirma que tan solo las obligaciones que el gobierno tiene de hacer los pagos a los ancianos, jubilados e incapacitados bajo el sistema del Seguro Social representará un déficit futuro de unos dos y medio billones (2,5 millones de millones) de dólares. Dice adicionalmente: “Como les gusta argüir a los liberales, la nación debe esta deuda a sí misma, y se pagará por medio de subir los impuestos en el futuro. Por supuesto ésta es una tontería. El aumentar los impuestos futuros por semejante magnitud solo puede desintegrar la base de la tributación.”
Financiando las deudas
Cuando el gobierno sale con un déficit al fin del año, tiene que pedir prestado dinero para pagar sus gastos. Un modo que tiene de hacer esto es vender valores, como, por ejemplo, bonos del gobierno, a individuos, bancos y corporaciones.
Pero el gobierno también tiene otra manera de financiar lo que toma prestado. Puede ‘crear dinero de la nada.’ En cuanto a esto, el Times de Nueva York comenta: “Solo hay una cosa en que se conviene enteramente y que se acepta y entiende acerca de ese tema algo misterioso y a menudo polemístico respecto al sistema monetario del gobierno, dirigido por la Junta Federal de Reserva semi-independiente. Es que el Fed, como generalmente se le conoce, puede crear dinero de la nada por medio de escribir un cheque a favor de sí mismo sin tener depósitos para apoyar ese cheque. Puede hacerlo en cantidades sin límite.” Sí, es cierto que el Congreso continuamente tiene que aprobar nuevos límites más altos para las deudas, pero casi siempre los aprueba.
Naturalmente, el gobierno espera ganar suficiente dinero de los impuestos futuros para devolver el valor de los bonos que ha emitido, y así, en realidad, cancelar la deuda. Pero en los pasados dieciséis años, los Estados Unidos han tenido déficits todos los años salvo uno en que tuvieron un pequeño sobrante. Y en años recientes los déficits han sido mucho más grandes.
Dando pábulo a la inflación
Muchos economistas creen que una de las principales causas de la inflación es la deuda gubernamental. El introducir en la economía un exceso tan grande de dinero hace que suban los precios de las mercancías y servicios.
Como resultado de este gastar excesivo el dólar americano ha perdido aproximadamente el 75 por ciento de su poder adquisitivo en los últimos cuatro decenios. Pero esto ha sucedido en otras partes del mundo también.
El Instituto Americano para la Investigación Económica declara: “Todas las monedas corrientes han sido y están siendo degradadas constantemente. Todas ya han perdido aproximadamente tres cuartas partes, por lo menos, del poder adquisitivo que tenían antes de la II Guerra Mundial, y parece que todas están destinadas a una depreciación mucho mayor en los años que vienen... antes que queden sin casi ningún valor.”
El Instituto atribuye la principal responsabilidad por esta degradación del dinero a los “medios inflacionarios de comprar que se han creado para financiar los déficits gubernamentales.”
“Lecciones dolorosas” en el futuro
Este informe también declara tristemente: “Vemos poca posibilidad de que se logre volver a procedimientos sólidos relacionados con crédito monetario hasta después que se hayan aprendido algunas lecciones dolorosas durante una depresión futura.”
Así mismo dice Baxter: “El impacto inflacionario de los grandes y persistentes déficits en el presupuesto está destruyendo el fundamento financiero que sostiene la economía de los EE. UU.”
Gilbert M. Haas, jefe de una casa que aconseja sobre inversiones, también hizo notar: “La continua asignación de préstamos en exceso de límites seguros ha causado un deterioro constante en la liquidez financiera [efectivo, o activo que fácilmente se convierte en efectivo]. Con el tiempo esto resultará en un pánico o crisis monetaria internacional, tras el cual vendrá una depresión mundial.”
¿No podría el gobierno simplemente reducir los gastos y así nivelar el presupuesto? Sí, pero eso podría significar más desempleo. La estructura del sistema económico es tal que si el gobierno actualmente dejara de introducir dinero “creado” en la economía, muchas personas podrían perder sus trabajos. Y ya hay demasiados desempleados. Además, los impuestos ya son gravosos, de modo que el subirlos para tratar de nivelar el presupuesto pudiera dar con resistencia severa, tal vez hasta un ‘levantamiento contra los impuestos.’
Se ve pues que el país más rico del mundo tiene sus propios problemas monetarios y éstos son graves. Está metido en deudas hasta la coronilla, y está en malas condiciones para poder ayudar a otras naciones que están ahogándose en ellas.
[Ilustración de la página 8]
‘Todas las monedas corrientes han perdido aproximadamente tres cuartas partes del poder adquisitivo que tenían antes de la II Guerra Mundial’