¿Se ha preguntado usted alguna vez . . . ?

¿Dejará de subir alguna vez el costo de vida?

SI SE le preguntara cuál, en su opinión, es el problema más importante que afronta el país, ¿qué contestaría usted? Pues bien, en una encuesta reciente casi la mitad de las personas a quienes se hizo esta pregunta en cierto país de Occidente dijeron: ‘El alto costo de la vida.’

Pero la preocupación por el alza en los precios no se limita a un solo país. Toda nación del mundo ha sido afectada.

¿CÓMO LO AFECTA A USTED?

Sin importar la cantidad de dinero que usted tenga, éste ahora le consigue cada vez menos de las cosas que usted necesita. Considere solo cuatro de las muchas cosas en las que usted gasta su dinero.

ALIMENTO: En muchos lugares, los precios han subido vertiginosamente hasta tal punto que, como dijo un comprador enojado: “La situación está llegando a tal extremo que no podemos darnos el lujo de comer.” En algunos lugares ha alcanzado la condición predicha en la Biblia: “Un kilo de trigo por el salario de un día.”—Apo. Rev 6:6, Versión Popular.

ROPA: Un ejemplo de esto es que una nación informa un aumento de 50 por ciento en los precios durante los pasados cinco años. En otros lugares es mayor.

ATENCIÓN MÉDICA: Muchas personas afrontarían el desastre financiero si necesitaran hospitalizarse, ¡pues algunos hospitales cobran cientos de dólares por día por el alojamiento del paciente!

IMPUESTOS: ‘Lo único que pude hacer fue sentarme a llorar,’ dijo la dueña de una casa cuyos impuestos sobre su propiedad se habían hecho el doble en un solo año. Ella no pudo darse el lujo de tener su propia casa por más tiempo, pues estos impuestos por sí solos representaban más de la cuarta parte de su salario neto. Esta señora no es la única que ha pasado por esa situación. Sin duda usted ha notado que una creciente cantidad de su salario se gasta en el pago de varios impuestos. Con frecuencia, el pago de impuestos representa una tercera parte o más de los gastos de la gente. ¡En Suecia es más de la mitad!

¿POR QUÉ SIGUE EL ALZA EN LOS PRECIOS?

Algunas razones que dan los expertos son: Agudo aumento en los precios del petróleo. Escasez de suministros. Gastos excesivos en forma de deudas por parte de la gente y los gobiernos. Las razones son variadas y complejas.

Sin embargo, la Biblia claramente señala a una de las razones básicas. Dice: “Cuando gobierna el inicuo, el pueblo gime.” (Pro. 29:2, Versión Moderna) Es obvio que la gente está ‘gimiendo’ bajo pesadas presiones financieras. Pero, ¿está correcta la Biblia al culpar a personas de autoridad?

Por un lado, es del conocimiento de muchas personas que algunos gobiernos destruyen carretadas de alimento para mantener altos los precios. Además, en zonas donde el precio del alimento es tan alto que millones de personas están hambrientas, la contienda política a menudo impide la distribución de alimentos que abundan en otros lugares.

Aunque cierta porción de los impuestos se usa para servicios beneficiosos, una gran parte se usa para armas bélicas. ¡Los gastos militares ahora le están costando al mundo casi un millón de dólares por minuto! “La carga de pagar por estas armas,” dice una autoridad, “recae en las personas en forma de impuestos que se hacen cada vez más pesados.” En algunos países el gasto promedio en armas alcanza a 468 dólares (E.U.A.) por persona anualmente. ¡Piense en lo que usted podría hacer si cada año se le eximiera del gasto de 468 dólares (E.U.A.) por cada miembro de su familia!

Hay otra razón para el ascendente costo de la vida. La Biblia predijo lo siguiente respecto a un período llamado “los últimos días”: “Los hombres serán egoístas, [y] avaros.” (2 Tim. 3:1, 2, Besson) ¿No le suena eso como la descripción de muchas personas de hoy? ¿No ha visto usted aumentar los precios debido a la avaricia? Por supuesto, algunas personas tienen que subir los precios debido a que tienen gastos mayores.

¿CÓMO REDUCIR ALGUNOS GASTOS?

ALIMENTO: Compre frutas y vegetales frescos cuando estén en su temporada. Coma menos carne. Busque las ventas especiales de alimentos que se anuncian en los periódicos. O, mejor aún, si tiene unos cuantos metros cuadrados de terreno, ¿por qué no cultiva parte de su propio alimento?

ROPA: Cuando sea posible, compre en tiendas en las cuales se paga al contado y uno mismo se lleva la mercancía. Los expertos dicen que esto puede significar un ahorro de 25 por ciento o más. Además, si alguien aprende a coser y hacer la ropa de su familia puede ahorrar de 35 a 50 por ciento del precio que piden en las tiendas. Si usted quiere aprender a coser, quizás descubra que una de sus amigas está dispuesta a enseñarle. A menudo, en el caso de la ropa de niños, es práctico iniciar un programa de intercambio de ropa usada con los familiares y vecinos.

ATENCIÓN MÉDICA: El evitar malos hábitos como el fumar, tomar bebidas alcohólicas en exceso, comer sin moderación y tener asociaciones inmorales puede tener un efecto muy beneficioso en la salud, y esto puede ayudarle a evitar grandes cuentas de hospital. También, coma alimento sano y obtenga suficiente descanso y ejercicio.

IMPUESTOS: ¿Está usted familiarizado con lo que la ley permite en cuanto a deducciones y exenciones? A menudo vale la pena el gasto de conseguir ayuda profesional para averiguar esto.

Sin embargo, a pesar de lo que usted haga para enfrentarse al ascendente costo de la vida, no es probable que las personas avaras y los gobiernos opresivos cambien de actitud.

¿QUÉ SOLUCIÓN HAY?

La Biblia revela que Dios entrará en acción, y pronto. Él usará su gobierno celestial, su reino, para destruir a los gobiernos opresivos y a las personas avaras.—Dan. 2:44.

El gobierno de Dios verdaderamente atenderá a sus súbditos. El Salmo 72 describe la gobernación de Salomón y la usa como modelo de la gobernación que ejercerá sobre toda la Tierra el rey nombrado por Dios. Dice que este rey librará de la opresión al pobre y al necesitado y traerá justicia a la Tierra. Esto eliminará las divisiones nacionalistas, que contribuyen al aumento de precios de hoy. Entonces habrá una abundancia de alimento y nadie carecerá de lo necesario. Habiendo paz por toda la Tierra, habrá desaparecido la aplastante carga de la guerra. Hasta las enfermedades serán eliminadas permanentemente bajo esa gobernación. ¡Qué alivio traerá eso!—Sal. 46:8, 9; 72:1, 4, 12-16; Rev. 21:3, 4.

La Biblia también nos dice que esas bendiciones se hallan muy cerca. Los testigos de Jehová se complacerán en mostrarle esto en su propia Biblia y ayudarle a edificar una esperanza verdadera.

[Ilustración en la página 3]

COSTO DE VIDA