Gemas deslumbrantes para su deleite
Por el corresponsal de “¡Despertad!” en el Brasil
“¿EN QUÉ puedo servirle, señora? ¿Desea escoger una gema? ¡Por supuesto! ¿Se interesa en pendientes, en un broche, brazalete, collar o anillo? ¿Cuál es su color favorito? Permítame mostrarle algunas gemas. ¿Se le hace difícil escoger? Concuerdo con usted; todas son preciosas.
“¿El precio? Bueno, los diamantes son de tamaño pequeño pero el precio de ellos es grande. Los cuarzos son grandes y vistosos, pero son de precio más bajo. ¿Qué le parece este resplandeciente citrino de color amarillo? ¿o esta amatista? ¿Le gusta su brilloso color violeta? ¡Ah!, ¿le atrae la lustrosa aguamarina?
“¿Desea saber si podría ver cómo se talla una piedra de esa clase? Puede, por supuesto. Permítame conducirla al taller. Pero prepárese para recibir una sacudida. Las piedras preciosas en bruto no se parecen en nada a las piedras correspondientes talladas y bien pulimentadas.
La talla y el pulimento
“¿Ve usted? No hay brillo aquí, solo pedazos de roca de aspecto desagradable o formaciones cristalinas faltas de lustre. ¿Nota usted ese trozo ‘inútil’ de roca cristalina? ¡Pero, espere! El lapidario o tallista está sosteniéndolo frente a la luz. ¿Puede notar usted un destello de luz escondido dentro? ¿Qué clase de piedra es ésta? Aguamarina. ¡Sí, ciertamente es grande la diferencia entre ésta y la gema pulida que usted vio sobre el mostrador!
“El tallista insiste en que usted sea testigo de una transformación espectacular. Observe la habilidad que despliegan sus dedos. Con movimientos rápidos y precisos él corta la piedra con una sierra diamantada. Luego emplea una rueda de carborundo para dar forma a los contornos.
“¿Qué se toma en consideración para la forma final de la piedra? Puesto que el valor está relacionado con el peso y la cantidad de quilates, el tallista busca cómo sacar el máximo rendimiento posible de la piedra en bruto. El pedazo que está empleando en la demostración sugiere una gema de forma ovalada.
“¿Ve cómo se engasta la piedra con la ayuda de una cera especial en la punta del ‘dop,’ un instrumento en forma de lápiz? Ahora la piedra está lista para que se le labren las facetas. Con la punta del lápiz recostada sobre un soporte angular ajustable, el lapidario apenas toca con la piedra el disco giratorio de estaño aleado. El polvo de esmeril muy fino que está en el disco es lo que esmerila o corta caras en la piedra. Hay que rociar constantemente con agua para que no haya un exceso de calor, lo cual podría arruinar la piedra.
“Primero el lapidario esmerila la parte superior plana. Después corta una faceta en un lado, entonces otra precisamente en el lado contrario, y así sucesivamente. El arreglo geométrico de las facetas sirve para hacer resaltar la belleza de color y luz en las gemas transparentes. Cuando el lapidario termina la porción superior, o haz, pule ligeramente la arista o borde de la piedra para evitar que se agriete.
“Ahora ablanda la cera sobre una lámpara, saca la piedra y la vuelve al envés. De nuevo corta facetas, pero dos más que en la haz, para que la luz se refleje con más eficacia.
“Sí, la parte inferior o el envés se parece al fondo curvado de un bote. Pero quizás usted se pregunte dónde está todo el lustre.
“Este es el trabajo del pulidor y su rueda de cobre. Observe. Con destreza él pule, exactamente al mismo ángulo, cada una de las facetas, que al principio no muestran lustre. Una faceta tras otra comienza a brillar. Realmente el pulimento saca el ‘fuego’ que está escondido. ¡Fascinante! ¡Lo que era un pedazo de cristal oscuro se convierte en una deslumbrante gema en unos 40 minutos!
“Claro, puede tomarla en la mano. ¡Esos exquisitos destellos de color verde azulado se deben en parte a las facetas! El labrar facetas produce brillo por la reflexión y refracción de la luz.
¿Qué son las piedras preciosas?
“¿Cómo obtenemos las piedras preciosas, y qué son? La mayoría de las gemas son minerales producidos por procesos inorgánicos naturales. Cada mineral tiene su propia estructura atómica y composición química. De las más de 1.600 formas minerales, solo unas 16 sobresalen debido a belleza, color, dureza, brillantez y rareza. A las formas minerales que satisfacen estos requisitos se les llama gemas. A las más duras se les considera piedras preciosas, y a las que están en un nivel menor de 8 en la escala de dureza se les considera piedras finas, o, según algunos, semipreciosas.
“Usted tiene razón: el conocimiento de la estructura cristalina le es muy valioso al lapidario. Si la piedra no se corta de acuerdo con esa estructura, puede agrietarse o romperse.
“¿De dónde viene el color de las gemas? La mayoría de los minerales que se utilizan para gemas son incoloros cuando son puros. El diamante, por ejemplo, es más valioso sin color. Sin embargo, todavía no se entiende completamente lo que produce el color en otras gemas. Por supuesto, es cierto que las impurezas químicas pueden contribuir al color. Sin embargo, la misma sustancia química en cantidad microscópica puede hacer que una gema sea de color rojo y otra de color verde, como en el caso del rubí y la esmeralda.
“¿Cómo identifica el experto la piedra? Toma en consideración el color, la forma del cristal, el peso, las propiedades ópticas y otras propiedades físicas, y también su composición química. Generalmente las pruebas incluyen una prueba de dureza, gravedad específica y refracción. Estas cualidades difieren de una clase de gema a otra, pero dentro de cada clase las cualidades son las mismas.
“La dureza se basa en la escala de dureza de Mohs. Mientras más dura sea la gema, más durable y valiosa es, puesto que se le puede pulir a mayor grado. Todos los minerales de alto grado pueden raspar a los minerales de menor grado cuando se frotan unos contra otros. El número más alto es 10, para el diamante, mientras que la familia de los cuarzos registra 7 en la escala. En comparación, un cuchillo de acero tiene dureza de 6,5, y la dureza de las uñas de los dedos es de aproximadamente 2.
Destellantes gemas brasileñas
“¿Por qué no regresamos a la sala de muestras y continuamos con su selección de gemas? De hecho, el Brasil suministra aproximadamente el 90 por ciento de las gemas de color que hay en el mundo. En ninguna otra parte del mundo hay piedras de variedad y abundancia tan espectacular.
“Todavía le agrada esa excelente aguamarina, ¿no es cierto? Pues bien, esa piedra es la piedra preciosa brasileña más popular, y pertenece a la familia de los berilos, al igual que la esmeralda. Permítame mostrarle los diferentes matices. ¿Ve? De verde azulado a azul oscuro. ¿Como las aguas claras del mar azul? Exactamente; eso es lo que significa aguamarina.
“Déjeme contarle la historia de un rico descubrimiento. En 1955 un hombre estaba cortando un árbol con su machete, pero falló, y el machete, al caer al suelo, dio contra una roca. Sorprendido, aquel hombre desenterró la piedra, y al principio pensó que tenía ante sí un pedazo de roca cristalina sin valor. ¡Pero cuánto se sorprendió cuando se enteró de que la piedra era una de las aguamarinas más hermosas que se han encontrado! ¡Fue cortada en numerosas piedras individuales, que alcanzaron un total de 80.000 quilates, con un valor que se calculó en dos millones de dólares!
“¿Le gusta el citrino? Es verdad que algunos lo llaman topacio de cuarzo, pero cuídese de los que lo llaman solo ‘topacio,’ porque no lo es. Aunque es una piedra bonita, el citrino pertenece a la familia de los cuarzos. Los cálidos tonos dorados de esta piedra hacen que millones de personas la estimen mucho. El color amarillo probablemente se deba a la minúscula cantidad de hierro que hay en el cristal.
“¿Qué diferencia hay entre el citrino y el topacio precioso, o imperial? El topacio imperial no es cuarzo, y es mucho más duro; de hecho, es de dureza 8. Por lo tanto, su brillantez es mucho más intensa. Es una piedra muy rara, especialmente en tamaños de más de 10 quilates. Las variedades azules, rosadas y de verde claro se cuentan entre las gemas más preciadas. Debido a su rareza es varias veces más costoso que el citrino.
“¿Ha oído usted del ‘mineral de mil colores’? Es éste: la turmalina. Examine estos especímenes. No hay dos que sean iguales. Su compleja composición química incluye varios metales y sustancias. Rara vez se encuentra un solo cristal que sea uniforme en cuanto a color; más bien, tiene matices que contrastan... una de las maravillas del reino mineral.
“¿Pensaba usted que la turmalina era solo verde? Es cierto que la más conocida es verde, pero también hay variedades azules y rojas. A diferencia de lo que sucede con el aguamarina, los tonos más claros de la turmalina son los de alta estima. El mejor verde es el que más se acerca al tono de la esmeralda. Hay berilos amarillos, rosados y blancos. Los granates, los ópalos, las piedras de la luna, las crisoprasas, y el cuarzo rosado también abundan en el Brasil. El crisoberilo verde es extraordinariamente brillante y sumamente raro.
“En cuanto a los diamantes, hoy la atención se dirige al África del Sur. Pero hubo un tiempo, antes del descubrimiento de diamantes en África, en que el Brasil disfrutó de un verdadero monopolio. El diamante de 120 quilates ‘Estrella del Sur’ es de origen brasileño. No hay duda de que los diamantes son las piedras preciosas más extensamente conocidas y más preciadas. Se le hace difícil a uno creer que, químicamente, el diamante sea puro carbono, al igual que el grafito. Desde luego, es de diferente forma cristalina.
“Un diamante bien tallado produce todos los colores del arco iris. Los diamantes del Brasil son aluviales, es decir, se encuentran solo en la gravilla a lo largo de los lechos de los ríos.
Cómo cuidar de sus gemas
“Con un poco de cuidado sus gemas siempre le serán un deleite. Pero hasta un diamante, a pesar del dicho en el sentido de que duran para siempre, puede perder su brillantez debido a la acumulación de partículas de polvo sobre sus facetas.
“Por eso, antes de lavarse las manos, o maquillarse, tenga cuidado de no llevar puesta su gema. El jabón, las cremas y el polvo talco opacan su brillantez. No raspe sus gemas sobre superficies duras. El diamante es la sustancia más dura que se conoce, pero puede ser rayado por otro diamante. Para evitar esto, envuelva las gemas por separado o manténgalas en diferentes joyeros.
“Para que su resplandor continúe, es necesario mantener limpia la gema. Esto se puede hacer por medio de dejarla por un rato en una solución tibia de dos tazas de agua, una cucharadita de amoniaco y un poco de jabón en polvo o cualquier buen detergente, y después cepillarla suavemente para remover el sucio. Después de haber hecho esto, enjuague la piedra con agua tibia solamente, luego sumérjala en un poco de alcohol para quitarle cualquier jabón que todavía se haya quedado en ella. Póngala a secar sobre un suave pañuelo absorbente.
“¿Dice que ya se ha decidido? Sí, por supuesto, el citrino y el aguamarina. Realmente son hermosas. Gracias. ¡Siempre al servicio de usted con gemas deslumbrantes para su deleite!”