Sobreviviendo en el lado victorioso en Har-Magedón
“Y gritaron juntos: ‘¡Victoria a nuestro Dios que se sienta en el trono, y al Cordero!’”—Rev. 7:10, New English Bible.
1. ¿Qué vendrá después de la guerra universal venidera en Har-Magedón? Hacemos bien si ahora hacemos ¿qué?
UNA paz de mil años vendrá después que termine la guerra universal en el campo de batalla de Har-Magedón. Será algo muy deseable el sobrevivir esa guerra final de este sistema de cosas mundano. La supervivencia será el privilegio dichoso de los que resulten estar del lado victorioso. Esto presenta una manera de ver las cosas muy diferente del punto de vista funesto de pronosticadores políticos y militares de que una tercera guerra mundial, peleada con armas nucleares, no significará victoria para ningún lado. Ambos lados serán perdedores. Junto con eso se predice que esa guerra mundial significará suicidio para la familia humana. No obstante, no hay necesidad de que nos asustemos por esos razonamientos humanos. En el conflicto venidero en Har-Magedón habrá un lado ganador. Hacemos bien si ahora nos formamos del lado que sin falta ganará, para disfrutar después del excelente fruto de la victoria.
2. ¿Por qué el que nos ubiquemos ahora en el lado ganador no exige que participemos en política alguna de este mundo?
2 En este caso no se tratará de que un solo partido político o bloque de naciones venza a otro partido político o bloque de naciones. No habrá la imposición de una sola idea de gobernación humana a un pueblo derrotado y renuente que tenga su afecto puesto en otra idea de gobernación política. Y los vencedores no obligarán a los perdedores a entrar en un solo campo político que abarque a todo el mundo de la humanidad. Tal cosa no resulta en una paz permanente en la Tierra ni produce sumisión anuente en el pueblo vencido. La victoria que se ganará no será un triunfo político, sino que abolirá de la Tierra toda la política humana. El que nos ubiquemos en el lado ganador no exigirá que participemos en la política divisoria de este mundo.
3. Por eso, ¿qué preguntas son del mayor interés para nosotros ahora?
3 Este hecho vital es lo que hace que la guerra universal venidera que se ha de pelear en Har-Magedón tenga su atractivo, aunque hoy es cada vez mayor el número de las personas a quienes les disgusta hablar de guerra o pensar en ella. Preguntas del mayor interés para nosotros son: ¿Qué gana con su victoria el ganador? ¿Qué significará la victoria para los de nosotros que nos pongamos ahora del lado del ganador? ¿Hará que valga la pena para nosotros sobrevivir el Har-Magedón?
4. Si una de las potencias políticas o todas ellas ganaran en otro conflicto mundial, ¿qué nos podría ofrecer el vencedor?
4 La dura experiencia nos ha hecho saber lo que nos podrían ofrecer las potencias políticas de este sistema de cosas, si todas ellas juntas o un solo bloque de ellas obtuviera la victoria. A lo más, no podría ser nada mejor de lo que le han ofrecido a la humanidad desde que estalló la I Guerra Mundial en el año 1914 E.C. ¿Y qué ha sido eso? Nada sino tiempos penosos, que se hacen cada vez más difíciles para la gente en general. Cada vez hay menos razón para considerar con optimismo la situación mundial. Va haciéndose más amplia la base para el pesimismo. A pesar de las contribuciones de la ciencia moderna y la tecnología adelantada y de las Naciones Unidas como agencia para la cooperación internacional, economistas de clara percepción, estudiantes de lo social y estudiantes del ambiente nos advierten que estamos metiéndonos en un callejón sin salida, sin que haya legislador, político, autoridad policíaca ni educador que sepa el camino de escape. Encima de esto hay que añadir los costos aturdidores de una victoria que se lograra en otra guerra mundial en cuanto a vidas humanas, propiedades materiales y efectos en el ambiente. En vista de esto, con toda probabilidad las potencias políticas solo podrían ofrecernos algo que sería mucho peor de lo que nos han suministrado desde 1914 hasta ahora.
5. Por lo tanto, ¿quién tiene que ser el vencedor deseable en Har-Magedón, y por qué?
5 Con certeza, por lo tanto, toda persona de corazón que comprende las cosas rectamente tiene que esperar que la victoria en la guerra venidera en Har-Magedón sea el galardón de alguien que nos pueda ofrecer un futuro para el cual quisiéramos sobrevivir. Ese deseable vencedor en Har-Magedón no pudiera ser otro sino el Creador del ambiente terrestre original del hombre, a saber, Dios mismo. Esto es lo razonable, porque lo que envuelve el ambiente natural del hombre envuelve a Dios. Lo que afecta a toda la humanidad afecta a Dios.
6. ¿Qué relación tendrá la venidera guerra universal en Har-Magedón con el ambiente terrestre original del hombre?
6 El ambiente original del hombre no fue nada imaginario como de hombre de las cavernas como lo enseñan los defensores de la teoría de la evolución humana. La realidad histórica del caso es que el primer ambiente natural del hombre fue un jardín perfecto, un paraíso de belleza natural y deleitables condiciones de vida. Por eso uno de los gloriosos frutos de la victoria divina en Har-Magedón será el restablecimiento del paraíso en la Tierra, pero en escala global. El regreso de la humanidad al Paraíso no puede venir de ninguna otra manera sino por victoria divina en Har-Magedón. Esa es una de las cosas que elimina lo que sea desagradable de pensar en una guerra universal... la de Har-Magedón.
UNA GUERRA QUE NO ES CONTRA EL HOMBRE, SINO CONTRA DIOS
7. Entonces, ¿contra quién estarán peleando todas las naciones, pero cuál es el punto de vista de ellas mismas acerca de tal cosa?
7 ¿Significa esta línea de razonamiento que todas las naciones de la Tierra han de pelear contra Dios el Creador en el campo de batalla de Har-Magedón? ¡Exactamente eso! Pero las naciones hoy se resienten de que se les diga que se encaminan a esa confrontación con Dios. De hecho, sería difícil convencer a las naciones políticas, especialmente a las de la religiosa cristiandad, de que es contra el Dios de la Santa Biblia que ahora se preparan para pelear. Los clérigos religiosos siempre han afirmado a las naciones de la cristiandad que éstas siempre han peleado por Dios, del lado de Dios, en todos los conflictos internacionales desde que la cristiandad fue fundada en el cuarto siglo E.C. En sus esfuerzos de guerra se han dejado mover por un sentimiento religioso como el del emperador romano Constantino, quien, antes de fundar la cristiandad, peleó bajo la señal de la cruz. Este Constantino, antes de pelear una batalla decisiva con su rival político, afirmó haber tenido una visión celestial de una cruz brillante junto con las relucientes palabras: “Por esto vence” (en griego, En touto nika).
8. ¿Qué nombre se le ha dado al venidero campo de batalla, y cuánto territorio abarca?
8 No obstante, es Dios mismo quien advierte a todas las naciones que es contra Él que estarán guerreando. Es Él quien menciona el lugar donde se peleará hasta el fin la guerra, a saber, Har-Magedón. Ese campo de batalla tiene que estar en la Tierra, porque es aquí donde se encuentran las naciones, sin vía de escape al espacio sideral. De hecho, ese campo de batalla abarca toda la Tierra... lo cual hará imposible que haya alguien en la Tierra que escape de sus efectos.
9. El que continuemos acompañando a las naciones llevará a pelear contra ¿quién? pero ¿qué consejo inspirado de Lucas 14:31, 32 bien podemos escuchar?
9 Puede ser que las naciones no se dejen convencer de que es contra Dios que estarán peleando, pero ¿qué hay de nosotros como individuos, prescindiendo de la nación de que seamos? ¿Nos agrada el pensamiento de pelear contra Dios? Si no es así, ¿qué haremos en cuanto a ello, puesto que todos somos parte de las diferentes naciones? ¿Vamos a dejar que se nos maniobre por medio de astutos proyectos hasta que peleemos junto con las naciones contra Dios? Si no queremos eso, entonces tenemos que ir a la propia Palabra escrita de Dios, la Santa Biblia, para aprender lo que Él nos dice que hagamos en cuanto a ello. Nos incumbe seguir el consejo del Hijo de Dios, quien dio a sus discípulos la amonestación de contar el costo de lo que emprendieran, diciendo: “¿Qué rey, marchando al encuentro de otro rey en guerra, no se sienta primero y delibera si puede con diez mil soldados hacer frente al que viene contra él con veinte mil? Si, en realidad, no puede hacerlo, entonces mientras aquél todavía está lejos envía un cuerpo de embajadores y pide paz.” (Luc. 14:31, 32) Igualmente, ¿continuaremos marchando con las naciones mundanas a Har-Magedón, o pediremos paz con Dios ahora mismo, sin tardanza?
10. ¿Dónde, y con qué lenguaje descriptivo, dice Dios que peleará contra las naciones en Har-Magedón?
10 ¿Cómo, pues, podemos salirnos de la línea de marcha a Har-Magedón para no formarnos allí del lado de las naciones? ¿Dónde nos informa Dios que batallará en Har-Magedón con las naciones? Es en el libro bíblico de Revelación o Apocalipsis, Rev. capítulo dieciséis, versículo dieciséis. Los versículos anteriores predicen que las naciones serían conducidas por influencia sobrehumana invisible, es decir, por influencia demoníaca maligna, a esta guerra extraordinaria. Describiendo las influencias antiDios como “expresiones inspiradas” por demonios invisibles, el escritor bíblico Juan el Evangelista dice: “Son, de hecho, expresiones inspiradas por demonios y ejecutan señales, y salen a los reyes de toda la tierra habitada, para reunirlos a la guerra del gran día de Dios el Todopoderoso. . . . Y los reunieron en el lugar que en hebreo se llama Har-Magedón.”
11. ¿Qué significa el nombre del campo de batalla en hebreo mismo?
11 Esas palabras proféticas fueron escritas originalmente por Juan el Evangelista en el griego común. Pero cuando fueron traducidas al hebreo mismo en el siglo diecinueve, el versículo dieciséis decía: “Y los congregaron al lugar que los hebreos llaman La Montaña de Megido [Har Megiddon].”—Rev. 16:16, traducción hebrea por Salkinson-Ginsburg; también, por F. Delitzsch.
12. Por eso, ¿dónde afirman algunos que se peleará la guerra final, pero qué preguntas hace surgir esa idea?
12 Es debido a que el nombre Har-Magedón significa La Montaña de Megido que algunos expositores de la Biblia y algunos clérigos religiosos prominentes que transmiten mensajes por la radio mundialmente han dicho que la guerra universal venidera se peleará en la tierra de Israel, en el valle de Megido, en las ruinas de la antigua ciudad de Megido. De hecho, si un turista visita esas ruinas hoy lee un rótulo que marca el lugar y que dice que aquí, según el punto de vista de algunos, se peleará la guerra final. Pero, ancha como es la llanura de valle enfrente del cerro de ruinas del antiguo Megido, nunca podría acomodar una congregación de los ejércitos de los reyes y gobernantes de toda la tierra habitada. ¿Y qué cuestión resolvería realmente una guerra allí enfrente de la ubicación literal de Megido? ¿Han de pelear las naciones no judías, con sus buques de guerra, sus flotas aéreas, sus tanques bélicos, sus proyectiles balísticos intercontinentales y sus ejércitos motorizados contra la República de Israel en Megido como el campo de batalla estratégico central de toda la Tierra? ¿Será, por lo tanto, la República de Israel la que se hallará en el lado victorioso en el lugar que se llama Har-Magedón?
13. ¿Qué hecho acerca de Revelación pasan por alto los que hacen tal aplicación, como se ilustra en el caso del uso que hace del “gran río Éufrates”?
13 Los que toman de manera literal el nombre Har-Magedón o La Montaña de Megido provocan preguntas como ésas. Pasan por alto el hecho digno de nota de que el libro bíblico de Revelación o Apocalipsis fue escrito en su mayor parte en lenguaje pictórico, con el uso de un gran número de simbolismos o expresiones figurativas. Por ejemplo, cuando el Rev. 16 versículo doce de este mismo capítulo dieciséis dice que la sexta plaga de Dios se derrama sobre el “gran río Éufrates,” no significa que esta sexta plaga simbólica se cumple en el río Éufrates literal cuyas riberas están en el país de Irak. En los tiempos bíblicos de la antigüedad, el punto de principal importancia de ese río era la ciudad de Babilonia, que encabezaba a la tercera potencia mundial de la historia bíblica, el Imperio Babilonio. El uso del Éufrates como símbolo llama atención, por lo tanto, al imperio mundial de religión falsa que todavía existe, al cual el libro de Revelación llama Babilonia la Grande, mencionada por el Rev. 16 versículo diecinueve de este mismo capítulo dieciséis. De la misma manera, el Rev. 16 versículo dieciséis usa el nombre Har-Magedón simbólicamente debido a los asuntos históricos asociados con él.
14. ¿Qué doble significado tomó el nombre Megido, y por qué?
14 El nombre Megido es dinámico. En la historia seglar y en la historia bíblica el nombre despertaba memorias de batallas decisivas. ¿Por qué? Porque la ciudad dominaba entonces un paso estratégico por tierra entre Europa, Asia y África, y por lo tanto los invasores podían ser ventajosamente desafiados y detenidos allí por los habitantes. De manera que Megido tomó un significado doble, el de derrota drástica para un lado y el de victoria gloriosa para el otro lado.
15. ¿Qué personaje especialmente llegó a estar asociado con Megido, y cómo?
15 El Dios de la Biblia llegó a estar asociado con aquel lugar, y con el cercano río de Cisón. Este Dios estuvo con el juez Josué, quien fue sucesor del profeta Moisés cuando Josué estuvo subyugando la Tierra Prometida y capturó a Megido. (Jos. 12:21; 17:11) Durante el período de los jueces que vinieron después de Josué, Dios dio una victoria señalada a su pueblo escogido en la vecindad de Megido. Esto sucedió en los días del juez Barac y la profetisa Débora.
16, 17. (a) ¿Para quién no fue de poca importancia la batalla, y, por eso, qué se hizo a favor de los israelitas? (b) ¿A quién atribuyeron la victoria Barac y Débora en canción?
16 En comparación con las cifras y materiales que se emplean en las batallas modernas, la batalla allá fue un asunto pequeño, pues el juez Barac tenía solo diez mil hombres y a la profetisa Débora con él, mientras que el general enemigo Sísara tenía, además de infantería, novecientos carros de guerra tirados por caballos y armados con guadañas. No obstante, no fue asunto de poca importancia para Dios, porque él intervino en la batalla a favor de su pueblo escogido. Solo él pudiera haber causado un fuerte aguacero al momento psicológico, para producir una inundación en el valle del río Cisón que inmovilizara a aquellos temidos novecientos carros del enemigo. En la canción de victoria que Barac y Débora cantaron a Dios después de la derrota milagrosa del ejército opresor, llamaron atención al papel totalmente imprescindible que desempeñó Dios en este derribo del enemigo, diciendo:
17 “Reyes vinieron, pelearon; fue entonces que los reyes de Canaán pelearon en Taanac junto a las aguas de Megido. Ninguna ganancia de plata tomaron. Desde el cielo pelearon las estrellas, sí, desde sus órbitas pelearon contra Sísara. El torrente de Cisón los arrolló, el torrente de la antigüedad, el torrente de Cisón. Fuiste hollando fuerza, oh alma mía. Fue entonces que los cascos de los caballos piafaban a causa de arranque tras arranque de sus fuertes corceles. ‘Maldigan a Meroz,’ dijo el ángel de Jehová, ‘maldigan a sus habitantes incesantemente, porque no vinieron a la ayuda de Jehová, a la ayuda de Jehová con los poderosos.’”—Jue. 5:19-23; 4:1-3, 10, 12, 13.
18. ¿Cómo se declara en Jueces 4:14-16 la razón que hubo tras la supervivencia de Débora y Barac y sus tropas?
18 La profetisa Débora y el juez Barac y sus guerreros compañeros sobrevivieron la batalla en el lado victorioso en Megido. La razón de esto se declara también en el relato de Jueces 4:14-16: “Débora ahora le dijo a Barac: ‘Levántate, porque éste es el día en que Jehová ciertamente dará a Sísara en tu mano. ¿No es Jehová quien ha salido delante de ti?’ Y Barac vino descendiendo del monte Tabor [al lado opuesto del valle desde Megido] con diez mil hombres detrás de él. Y Jehová empezó a poner en confusión a Sísara y todos sus carros de guerra y todo el campamento a filo de espada delante de Barac.” Después de eso el perseguir al enemigo desorganizado y destruirlos a todos fue asunto sencillo para el juez Barac y sus fuerzas.
19. (a) ¿Respecto a qué guerra venidera aplican las palabras de oración al fin de la canción de Barac y Débora? (b) ¿Qué cosa significativa vino después de aquella victoria cerca de Megido?
19 Indudablemente las palabras inspiradas que Barac y Débora cantaron al fin de su canción después de aquella victoria antigua en Megido aplican como oración respecto a la guerra venidera en Har-Magedón. Cantaron: “Así perezcan todos tus enemigos, oh Jehová, y sean los que te aman como cuando sale el sol en su poderío.” (Jue. 5:31) El cumplimiento de esa oración inspirada significa un futuro brillante para todos los que aman a Jehová que estarán del lado victorioso en Har-Magedón. Es significativo con relación a esto el hecho de que, allá en los días de Barac y Débora, como nos dice el registro, “la tierra no tuvo más disturbio por cuarenta años.”
20. ¿Qué cosa de nuestro día representa el “lugar que en hebreo se llama Har-Magedón”?
20 ¿Qué representa ahora, en nuestro día, el “lugar que en hebreo se llama Har-Magedón”? Como en el caso del Megido antiguo, denota una situación mundial que envuelve una guerra decisiva. Denota aquella etapa de la hostilidad del mundo contra Dios que exige que se resuelva la cuestión por la cual ha surgido la hostilidad. Puesto que la antigua Megido en su elevación de terreno dominaba estratégicamente el paso por tierra desde una gran extensión de tierra o continente a otra, así Har-Magedón denota aquella condición final a que llegan los asuntos del mundo en la cual los gobernantes políticos aplican fuerza unidamente para abrirse camino y en la cual Dios tiene que responder con una fuerza de oposición según Su propósito. Así, el futuro del universo se habrá de determinar por lo que resulte de la oposición de fuerzas contrarias una a la otra.
21. (a) Con ese punto de vista acerca de Har-Magedón, ¿a qué no estaremos mirando o qué no estaremos esperando? (b) El que continuemos examinando las Escrituras nos capacitará ahora para hacer ¿qué?
21 El tener ese punto de vista bíblico de lo que Har-Magedón realmente significa evitará que miremos en la dirección incorrecta y esperemos lo equivocado. No estaremos poniendo la mirada en la ubicación geográfica de la antigua Megido en la tierra de Israel. No estaremos esperando que todas las fuerzas armadas de las naciones converjan allí con la República de Israel como el blanco de su ataque. No estaremos esperando conversión en masa de los judíos de la República de Israel de modo que acepten a Jesús de Nazaret como el Mesías. No se nos llevará a tener la idea de que tenemos que formarnos con los judíos naturales de la República de Israel para sobrevivir en el lado victorioso en Har-Magedón. Al contrario, veremos que ni el valle de Megido, no, ni la República de Israel entera, es la cuestión que tiene que ser resuelta. Diligentemente examinaremos todas las sagradas Escrituras inspiradas y, con la ayuda del espíritu de Dios, determinaremos cuál es la verdadera cuestión que hay en Har-Magedón. Entonces sabremos de qué lado de la cuestión declararnos para sobrevivir con los victoriosos en el verdadero Har-Magedón.
LA CUESTIÓN EN HAR-MAGEDÓN
22. Hoy hay un movimiento de ¿quiénes, hacia el verdadero Har-Magedón?
22 No nos equivoquemos: hoy hay un movimiento hacia el verdadero Har-Magedón. Cuando vemos quiénes son los que se mueven en esa dirección, podemos discernir lo que la cuestión es. Leamos una vez más Revelación 16:14, que predijo quiénes son los que marcharían a Har-Magedón en el punto de viraje de la historia universal: “Son, de hecho, expresiones inspiradas por demonios y ejecutan señales, y salen a los reyes de toda la tierra habitada, para reunirlos a la guerra del gran día de Dios el Todopoderoso.”
23. (a) El hecho de que haya de haber guerra en Har-Magedón indica ¿qué? y esto ¿con quiénes? (b) Entonces, ¿cuál es la cuestión en Har-Magedón, y hasta qué grado?
23 El mismo hecho de que el recogimiento sea a una guerra indica que hay una cuestión envuelta en la situación. La guerra se peleará para resolver la cuestión. Puesto que ésta es “la guerra del gran día de Dios el Todopoderoso,” esto significa que hay quienes están en disputa con Dios el Todopoderoso y quienes desean resolver esa cuestión peleando con Él. ¿Qué perderían los que entran en disputa con él y quieren arreglar los asuntos por medio de la guerra? Bueno, sírvase notar la posición oficial de éstos en cuanto a toda la tierra habitada. Son gobernantes políticos, “los reyes de toda la tierra habitada.” Sus reinos están en juego. Ellos provocan esta guerra en Har-Magedón con el propósito de defender su gobernación política, su calidad de reyes, aun por las armas. ¡Como se ve, pues, la cuestión principal en Har-Magedón es REINO! No “reino” sobre la Gran Bretaña, no “reino” sobre Tailandia, no “reino” sobre Suecia, sino “reino” sobre “toda la tierra habitada.”
24. ¿Qué preguntas surgen, por lo tanto, en cuanto a dejar que las cosas queden como están?
24 Pero, ¿por qué debería ser reino sobre toda la tierra habitada lo que esté en cuestión en Har-Magedón? ¿Por qué deberían perturbarse ahora reyes, emperadores, presidentes y otros gobernantes políticos de la Tierra y ser puesta en cuestión la continuación de su gobierno? El mundo de la humanidad se las ha arreglado con estos gobernantes políticos por muchísimo tiempo; de hecho, por más de cuatro mil años, o desde los días del rey Nemrod de Babilonia en el río Éufrates. Por eso, ¿por qué no dejar que el status quo, el patrón o modelo político de gobierno terrestre que ha sobrevivido por tanto tiempo, sencillamente siga funcionando, mientras la gente misma esté dispuesta a tolerarlo o tenga sus elecciones democráticas con alguna frecuencia? ¿Por qué no, por lo menos, dejar que la gente haga lo que quiera en cuanto a ello? ¿Por qué producir un cambio mundial en cuanto a la gobernación de la Tierra? ¿No tiene el mundo suficiente dificultad según está la situación?
25. (a) ¿Qué preguntas surgen en cuanto a un “cambio” como el que desean los que ven que es tiempo para él? (b) Pero, ¿en qué insisten los “reyes de toda la tierra habitada,” y bajo la influencia de quiénes?
25 No obstante, cada vez es mayor el número de personas hoy día que se está convenciendo de que “¡ha llegado el tiempo para un cambio!” Pero un “cambio” de la situación gubernamental mundial de la actualidad a ¿qué? Además, ¿están en unión estas personas acerca de a qué han de cambiar, y cómo hacerlo? A pesar de que tienen esa agencia de veintinueve años para acción internacional, las Naciones Unidas, no se le puede dejar a la gente confusa encargarse del asunto de un “cambio” a algo en que todos concuerden, algo adecuado para todas las necesidades humanas y que con certeza dure para todo tiempo en el futuro. Además, según Revelación, capítulo dieciséis, versículo catorce, los gobernantes políticos que en la actualidad están en función de ninguna manera están a favor de un cambio pacífico. Insisten en hacer necesario que se pelee hasta el fin la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso.” Y detrás de estos gobernantes hay fuerzas malignas superiores al hombre.
26. Por lo tanto, ¿qué tiene que pelearse, y por qué no querrían ciertas personas evitar eso?
26 Por consiguiente, la guerra tiene que pelearse. No puede ser evadida o evitada. ¿Qué personas informadas, con el punto de vista bíblico, querrían evitarla? Están a favor de la victoria para el lado apropiado. Con intenso anhelo esperan el cambio que vendrá después de esa guerra universal para toda la tierra habitada. Ante la oportunidad que se le ofrece a la gente de esta generación, quieren sobrevivir la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” y participar en los gloriosos privilegios del período posbélico.
27. ¿En vista de qué hechos se necesita la acción correcta ahora, y con qué guía y ayuda?
27 Ahora no hay posición neutral en cuanto a la guerra venidera, que será universal. Es necesario tomar acción correcta ahora antes que estalle esa guerra si uno quiere hallarse del lado victorioso en Har-Magedón. Solo al hallarse de todo corazón en ese lado puede sobrevivir cualquiera en la Tierra para ver el cambio que tan urgentemente necesita la superficie de nuestro globo terrestre. Para guiarnos y ayudarnos a obrar correctamente ahora, tenemos que considerar cuál es la cuestión y qué lado tiene la razón en la controversia. ¡Ese lado será victorioso!
[Ilustración de la página 229]
Reconstrucción de la antigua Megido, según un artista
[Mapa de la página 231]
(Para ver el texto en su formato original, consulte la publicación)
Mte. Carmelo
R. Cisón
Haroset
Nazaret
Mte. Tabor
Con la ayuda de Jehová, Barac derrotó al ejército de Sísara
MEGIDO
Josué derrotó al rey de Megido
Colina de Moré
Jehová dio a Gedeón, con 300 hombres, la victoria sobre 120.000 madianitas
Pozo de Harod