El cristianismo y el registro de la religión verdadera
1, 2. ¿Qué comparación existe entre lo que por lo general se llama “cristianismo” y la religión de Jesucristo?
EL PERIÓDICO Free Press de Detroit del 24 de diciembre de 1976 preguntó:
¿DIRIGIRÍAN UNA SEGUNDA CRUCIFIXIÓN LOS CRISTIANOS DE HOY?
En el artículo que seguía, el columnista Sydney J. Harris escribió:
“Si en el día de la Navidad hubiera una segunda venida, ¿no habría pronto una segunda crucifixión? ¿Y esta vez, no por los romanos ni los judíos, sino por los que orgullosamente se llaman cristianos?
“Me pregunto cómo consideraríamos y trataríamos hoy a este hombre con sus extrañas y atemorizantes e ‘imprácticas’ doctrinas de comportamiento humano y relaciones sociales. . . .
“¿No lo atacarían los militaristas de entre nosotros y lo llamarían pacifista cobarde porque él nos insta a no resistir el mal, sino devolver bien por mal?
“¿No lo atacarían como un peligroso fomentador de sedición los nacionalistas de entre nosotros porque nos dice que todos somos de una sola carne? . . . ¿No lo rechazarían los sentimentalistas de entre nosotros como un cínico porque nos advierte que el camino a la salvación es angosto y difícil? . . .
“Esto me hace pensar. Me pregunto si habrá comenzado todavía la era cristiana.”
2 Este artículo enfatiza dramáticamente algunas de las diferencias principales entre las enseñanzas de Jesucristo y el punto de vista que tienen hoy muchas personas que alegan creer en la religión verdadera como se presenta en la Biblia.
JESÚS Y LA RELIGIÓN VERDADERA
3, 4. ¿Qué comparación existe entre el punto de vista corriente acerca de Adán y Eva y lo que creían (a) Jesús? (Gén. 1:26) (b) sus discípulos?
3 Pues bien, hemos visto que el libro bíblico de Génesis enseña que Jehová Dios creó a los primeros seres humanos, Adán y Eva. Aunque muchos clérigos y personas que asisten a las iglesias que prefieren la teoría de la evolución consideran como mito el relato de Génesis, ¿qué hay de Jesús, el Fundador del cristianismo?
4 No se puede negar que Jesús estaba seguro de que Dios había creado a Adán y Eva, los padres de la raza humana. Sus discípulos también creían esto. (Gén. 2:21-24; 1 Cor. 6:16; 15:45; Efe. 5:31; Luc. 3:23-38) En cierta ocasión, respondiendo a una pregunta acerca del divorcio, Jesús dijo:
“¿No leyeron que el que los creó desde el principio los hizo macho y hembra y dijo: ‘Por esto el hombre dejará a su padre y a su madre y se adherirá a su esposa, y los dos serán una sola carne’? De modo que ya no son dos, sino una sola carne. Por lo tanto, lo que Dios ha unido bajo un yugo, no lo separe ningún hombre. . . . Yo les digo que cualquiera que se divorcie de su esposa, a no ser por motivo de fornicación, y se case con otra comete adulterio.”—Mat. 19:4-9.
5. ¿Qué actitud para con la Biblia nos ayuda a identificar la religión verdadera?
5 Por esta declaración de Jesús podemos estar seguros de que él y sus seguidores aceptaban la Biblia como inspirada y confiable. Dicha aceptación es una importante marca distintiva de la religión verdadera. (2 Tim. 3:16, 17) Cada uno de nosotros puede preguntar, entonces: ‘¿Acepta mi religión a la Biblia como inspirada y exacta, incluso lo que dice acerca de la creación? ¿Creo yo personalmente como lo hacían Jesús y los apóstoles?’
6. (a) ¿Qué pensaba Jesús del matrimonio y el divorcio, y qué comparación existe entre la religión verdadera y la información de Génesis sobre estos temas? (b) ¿Qué proceder siguieron los cristianos primitivos en cuanto a las relaciones sexuales y el matrimonio? (Heb. 13:4)
6 Lo que Jesús dijo en Mateo 19:4-9 ilustra también la consistencia que existe en la religión verdadera en lo que respecta a la conducta correcta. Jesús concordó en que el matrimonio es sagrado y en que el pacto matrimonial es valedero y obliga; el divorcio y el volver a casarse han de ser permitidos por las Escrituras solo si el cónyuge de uno es culpable de crasa inmoralidad. Al adherirse a esta norma piadosa, la religión verdadera mueve a las personas casadas a esforzarse por hacer que su unión sea una unión de éxito. No deben ver el matrimonio como un contrato social temporáneo que pueda ser fácilmente terminado por el Estado. Por consiguiente, al practicar la religión verdadera los cristianos primitivos evitaban la promiscuidad sexual; se adherían al punto de vista del Creador acerca del matrimonio y lo veían como una unión sagrada, de obligaciones valederas. Así, el Dr. C. J. Cadoux escribió lo siguiente acerca de los cristianos del siglo segundo E.C.:
“Todo coito fuera de los límites del matrimonio se prohibía severamente. Con frecuencia los cristianos lanzaban invectivas contra los excesos que reinaban en el mundo pagano que los rodeaba.”—The Early Church and the World, pág. 283.
7, 8. Según lo que usted conoce por experiencia, ¿ha descubierto que la mayoría de las personas que asisten a las iglesias se adhieran a la norma moral bíblica, o es imposible hacer eso hoy?
7 ¿Diría usted que la mayoría de las iglesias se adhieren vigorosamente a la norma moral de la Biblia, o es común que personas que afirman ser cristianas obtengan un divorcio y se casen de nuevo aunque no tengan fundamento bíblico para ello? Además, ¿no retienen muchas religiones como miembros hasta a personas que viven juntas inmoralmente y a individuos que practican la poligamia?
8 Por supuesto, muchos dirían que aunque la alta moralidad de la Biblia es admirable, fundamentalmente no es posible adherirse a ella en nuestro tiempo. Pero definitivamente es posible para un pueblo religioso el adherirse a elevadas normas morales a pesar de ‘los excesos que reinan en el mundo que nos rodea.’ (Heb. 13:4) Note este informe del Daily Telegraph de Londres acerca de centenares de miles de personas en el continente africano:
“En el África, los testigos de Jehová han mostrado que son ciudadanos decentes, ordenados, que cumplen con un alto código moral. . . . La promiscuidad sexual y la poligamia que caracterizan a la sociedad africana es sencillamente inconcebible entre los Testigos. Esta secta inculca hábitos de economía, puntualidad, honradez y obediencia.”—26 de octubre de 1972.
9. (a) ¿Por qué hay relación entre lo que la Biblia dice acerca de la moralidad sexual y el hurto? (Deu. 5:19, 21; 1 Tes. 4:4-6) (b) La religión verdadera está señalada por ¿qué acción para con el que se hace malhechor persistente y sin arrepentimiento?
9 De modo que, desde el principio, vemos como marcas distintivas de la adoración verdadera la insistencia en la moralidad sexual y el respeto al matrimonio. Esto hasta está envuelto en el interés de la Biblia en los derechos de propiedad y su condenación del hurto. Eso incluiría el hurtar el cónyuge de otra persona o la pureza moral de otra persona. (Gén. 2:24; Efe. 4:28) Además, la Biblia dice claramente que los individuos que afirman tener la religión verdadera pero que sin arrepentirse continúan siendo ‘fornicadores, adúlteros ladrones o avarientos’ tienen que ser expulsados de la congregación cristiana de acuerdo con este requisito de Dios: “Remuevan al hombre inicuo de entre ustedes mismos.” (1 Cor. 5:11-13; 6:9, 10) La firme adherencia a tal moralidad divina ha identificado consistentemente a la religión verdadera. Podemos preguntar: ¿Cómo vemos la adoración que damos a Dios al compararla con eso?
JESÚS Y EL ALMA
10. ¿Qué comparación existe entre las Escrituras Cristianas y Génesis con relación al asunto del “alma”?
10 Recuerde que en nuestra consideración anterior de Adán notamos que la Biblia no decía que Adán poseyera un alma inmortal, sino que decía que él era un alma. ¿Encontramos que este asunto se entienda de la misma manera en las Escrituras Cristianas o “Nuevo Testamento”? Sin lugar a dudas. El apóstol Pablo hasta citó del registro de Génesis al considerar el asunto de la resurrección, y dijo: “Así también está escrito: ‘El primer hombre Adán vino a ser alma viviente.’ El último Adán [Jesucristo] vino a ser un espíritu dador de vida.” (1 Cor. 15:45) De modo que en este asunto, también, hay consistencia respecto a las creencias de la religión verdadera.
11. ¿Qué esperanza tenían los discípulos de Jesús, y cómo podían estar seguros de que era real, no solo imaginarse lo que deseaban? (1 Ped. 1:3, 4; Hech. 10:39, 40; 17:31; 1 Cor. 15:3-8)
11 Los seguidores primitivos de Cristo podían estar seguros de esa manera de entender aquel asunto por lo que sucedió en el caso de Jesús mismo. Él, un alma humana, fue muerto. Permaneció muerto por tres días, y durante ese espacio de tiempo no estuvo vivo en otro lugar. (Hech. 2:22-27; 1 Cor. 15:3, 4) Estuvo en el sepulcro hasta que Dios lo resucitó con un cuerpo de espíritu al tercer día, para que posteriormente ascendiera de regreso al cielo. (1 Ped. 3:18) Antes de eso, después de comparar la muerte a la inconsciencia del sueño, Jesús dijo a los creyentes: “Yo soy la resurrección y la vida. El que ejerce fe en mí, aunque muera, llegará a vivir.” (Juan 11:11-14, 25; 5:28, 29) Por eso, no había razón alguna para que sus discípulos creyeran en alguna filosofía griega que dijera que el hombre tenía un alma inmortal.
12. ¿Por qué es importante con relación a la religión la creencia acerca del “alma”?
12 A la luz de esto, cada uno de nosotros puede considerar precisamente qué enseña nuestra religión. ¿Ha sido moldeado nuestro pensamiento religioso en armonía con lo que la religión verdadera ha sostenido consistentemente, que el hombre es un alma y que para toda vida futura hay que esperar una resurrección? Este asunto no se ha de considerar livianamente; nuestra esperanza está en cuestión.
LOS CRISTIANOS Y LOS MANDATOS A NOÉ
13, 14. ¿Por qué es importante con relación a la adoración verdadera el asunto de la sangre?
13 Sería razonable que esperáramos que tal como las enseñanzas de Jesús concordaban con el relato de Génesis acerca de Adán, concordarían con lo que notamos en la Biblia acerca de Noé. Y así es. Usted recordará que en Génesis 9:3-6 el Creador dio instrucciones que eran mandatos para toda la humanidad. Dios allí se expresó en contra del comer carne en la cual se hubiera dejado la sangre y en contra de robar la vida a otros seres humanos.
14 Desde aquel tiempo en adelante, la religión verdadera incluyó respeto a la sangre, de la cual Dios mismo dijo que había de representar la vida que venía de Él y pertenecía a Él. (Lev. 17:13, 14; Sal. 36:9) En armonía con esto, fue la sangre vital de Jesús lo que se derramó en sacrificio para toda la humanidad. (Efe. 1:7; Heb. 9:11-14; 1 Ped. 1:19) Pero ¿se requiere también de los cristianos que se abstengan de comer sangre o carne de la cual no haya sido escurrida la sangre? Al buscar en las Escrituras Cristianas, hallamos que el capítulo 15 de Hechos contiene una decisión valedera de los apóstoles y ancianos de Jerusalén que formaban el cuerpo central o gobernante de ancianos cristianos. La Biblia nos dice que ellos, ayudados por el espíritu santo de Dios, confirmaron que los cristianos deben abstenerse de sangre, tal como se mandó por medio de Noé.—Hech. 15:28, 29; 21:25.
15, 16. ¿Qué comparación existe entre la conducta de los cristianos primitivos y la conducta de los testigos de Jehová respecto a la sangre vital?
15 Los cristianos primitivos se adhirieron firmemente a esta ley de Dios. Según el escritor latino Tertuliano, los cristianos de los siglos segundo y tercero no tenían ‘siquiera la sangre de animales en sus comidas de alimento sencillo y natural; se abstenían de cosas estranguladas y que morían por muerte natural.’ Hasta los perseguidores se dieron cuenta de que los que se adherían a la religión cristiana verdadera no comían carne en la cual se hubiera dejado la sangre. Por eso ‘tentaban a los cristianos con morcilla, precisamente porque estaban perfectamente al tanto de que aquello con lo cual trataban así de hacer que los cristianos transgredieran era considerado ilícito por los cristianos.’—Apologética de Tertuliano, Parte 1, capítulo 9.
16 ¿Ha sido abandonado desde entonces este rasgo distintivo de la religión verdadera? Aunque la mayoría de las iglesias pasan por alto o no enseñan lo que la Biblia dice con relación a esto, todavía es una marca de identificación del cristianismo genuino. Un informe de 1976 procedente de una nación africana hablaba de un grupo de testigos de Jehová que habían sido encerrados en prisión por observar neutralidad con relación a la política, como lo hicieron los cristianos primitivos. Sus guardas en la prisión pusieron a prueba la fe de los Testigos por medio de tratar de obligarlos a ‘escribir una carta en la cual negaran sus creencias, cambiaran de religión, aceptaran el principio de poligamia o comieran carne de la cual no se había escurrido la sangre.’ Nos complacemos en relatar que aquellos cristianos respondieron como hicieron los apóstoles: “Tenemos que obedecer a Dios como gobernante más bien que a los hombres.”—Hech. 5:29.
17. ¿Qué otra evidencia de religión verdadera pueden notar los cristianos en lo que Dios dijo a Noé?
17 Otra evidencia de religión verdadera que se puede considerar tiene relación también con lo que Dios dijo a Noé. En aquel tiempo, cuando toda la familia humana constaba de solo ocho almas, Dios aclaró que ellos no deberían pelear unos contra otros y matarse. (Gén. 9:5, 6) Este sentimiento de hermandad para con la humanidad y respeto a la vida humana es una de las más fuertes marcas de identificación de la religión verdadera.—Éxo. 20:13.
18. (a) ¿Qué dijo Jesús mismo que identificaría a sus discípulos? (b) Debido a las palabras de Jesús, ¿qué posición adoptaron los cristianos primitivos en cuanto a la guerra? (Mat. 5:43-45; 26:52)
18 Poco antes de su muerte, Jesús dijo: “Les doy un nuevo mandamiento: que se amen unos a otros; así como yo los he amado, que ustedes también se amen los unos a los otros. En esto todos conocerán que ustedes son mis discípulos, si tienen amor entre ustedes mismos.” (Juan 13:34, 35) Por consiguiente, los cristianos primitivos se negaban a unirse al ejército romano o pelear en los ejércitos de cualquiera de las demás naciones antiguas. En su ensayo: “Una investigación sobre si hay acuerdo entre la guerra y los principios del cristianismo,” Jonathan Dymond informó lo siguiente acerca de la investigación que hizo acerca de este asunto:
“Los cristianos que vivieron más cerca del tiempo de nuestro Salvador creían, con confianza en la cual no había dudas, que inequívocamente él había prohibido la guerra... que ellos admitían públicamente esta creencia, y que, en apoyo de ella, estaban dispuestos a sacrificar, y de hecho sacrificaban, su fortuna y su vida.
“Sin embargo, después los cristianos se hicieron soldados. —¿Y cuando? Cuando su fidelidad general al cristianismo se hizo laxa;— cuando, en otros respectos, violaron los principios de éste; . . . Dicho sencillamente, se hicieron soldados cuando habían cesado de ser cristianos.”—Págs. 60, 61.
19. ¿Qué rasgo distintivo de la adoración verdadera recalcó Juan el escritor bíblico?
19 El apóstol Juan enfocó vigorosa atención en el amor como cualidad esencial de la religión verdadera, cuando escribió: “Porque éste es el mensaje que ustedes han oído desde el principio, que debemos tener amor los unos para con los otros; no como Caín, que se originó del inicuo y mató atrozmente a su hermano. . . . Hijitos, no amemos de palabra ni con la lengua, sino en hecho y verdad.”—1 Juan 3:11, 12, 18.
APOYADORES UNIDOS DEL REINO
20. Al ayudar a alguien a identificar la religión verdadera, ¿qué pudiéramos señalar acerca del Reino?
20 Otra razón para la unidad de la hermandad cristiana por todo el globo terráqueo se halla en el tema central de la predicación de Jesús: el reino de los cielos. Los cristianos verdaderos dan su apoyo y vida a la autoridad de este reino dondequiera que viven sobre la faz de la Tierra. Aunque millones de personas que concurren a las iglesias hoy repiten el “padrenuestro” u oración modelo que Jesús dio, y oran: “Venga tu reino,” ¿comprenden que el Reino es un verdadero gobierno que de hecho regirá sobre esta Tierra para beneficio de los habitantes de la Tierra, y traerá justicia, paz, salud y vida a la humanidad? (Rev. 21:3, 4; 2 Ped. 3:11-13) Acerca de ese reino, Jesús dijo lo siguiente cuando estuvo ante el gobernador romano Poncio Pilato:
“Mi reino no es parte de este mundo. Si mi reino fuera parte de este mundo, mis servidores habrían peleado para que yo no fuera entregado a los judíos. Pero, como es el caso, mi reino no es de esta fuente.”—Juan 18:36.
21. ¿A qué dirigen su lealtad y esfuerzos los cristianos genuinos?
21 Este reino es de fuente celestial. Por lo tanto los cristianos, aunque respetan los esfuerzos humanos por traer la paz, dedican toda su fortaleza y recursos a proclamar ese reino y la esperanza que éste ofrece a toda la humanidad. (Mat. 24:14; 28:18-20) Por consiguiente, el creer en el Reino y la lealtad a él son las cosas más importantes en la vida de los verdaderos seguidores de Cristo.
22. ¿Qué posición adoptaron los cristianos primitivos con relación a los gobiernos seglares? (Tito 3:1; 1 Ped. 2:17)
22 En el período posterior al de los apóstoles los cristianos primitivos demostraron creencia de esta índole en las palabras de Cristo. Pagaban sus impuestos, obedecían las leyes del país y en todo respecto normal eran ciudadanos ejemplares de los países en los cuales vivían. (Mat. 22:17-21; Rom. 13:1-7) Pero adoptaban una posición de neutralidad en medio de las facciones y las contiendas políticas de su día. La historia registra lo siguiente:
“Los cristianos eran extranjeros y peregrinos en el mundo que los rodeaba; su ciudadanía estaba en el cielo; el reino que esperaban no era de este mundo. Así, la consecuente falta de interés en los asuntos públicos vino a ser desde el principio un rasgo notable del cristianismo.”—Christianity and the Roman Goverment, por E. G. Hardy, pág. 39.
23. ¿Por qué es interesante la posición de neutralidad de los testigos de Jehová cuando se considera lo que es religión correcta? (Juan 15:19)
23 Con consistencia, al identificar a los que practican la religión verdadera hoy, deberíamos buscar a los que mantienen neutralidad en los asuntos de los gobiernos humanos, no por razones personales, sino porque esperan que el reino de Dios actúe para corregir las injusticias y e] sufrimiento de nuestro tiempo. ¿Puede haber cristianos de esa clase hoy? Un libro reciente acerca del cristianismo hizo notar lo siguiente:
“El que los testigos de Jehová se retiren del envolvimiento en la política, lo militar y lo social ha sido interpretado por sus enemigos como misantropía, y ha sido la causa principal de la atroz persecución que con frecuencia se les ha infligido.”—American Christianity, An Historical Interpretation.
Además, From State Church to Pluralism (De iglesia estatal a pluralismo [1971]), por F. H. Littell, dice:
“Increíble como pueda parecer la singular doctrina del Reino que sostienen los [testigos de Jehová], además del punto de vista literal, no debemos olvidar que en la religión bíblica el advenimiento del Reino es un momento de penetración y trastrueque dramático del curso normal de la expectación humana.”—Pág. 212.
La doctrina bíblica del Reino ciertamente es diferente del punto de vista del mundo, tal como lo fue cuando Jesús estuvo siendo juzgado por Poncio Pilato. Pero Jesús también dijo: “La sabiduría queda probada justa por sus obras.” Vale la pena examinar las obras de los que siguen el punto de vista bíblico si nos interesamos seriamente en lo que es religión verdadera.—Mat. 11:19.
¿QUÉ SIGNIFICADO TIENE ESTO?
24. En resumen, ¿cuáles son algunas marcas de identificación importantes de la religión verdadera?
24 Los puntos que hemos considerado aquí de ninguna manera son todas las marcas de identificación de la religión verdadera. Sin embargo, sí nos suministran base amplia sobre la cual pesar las creencias y prácticas de nuestra religión, y de nosotros mismos personalmente. De acuerdo con lo que hemos hallado en la Biblia y en la vida de los cristianos primitivos, fácilmente reconoceremos que la religión verdadera incluye lo siguiente: Que Dios creó directamente al hombre para que viviera en la Tierra; que los seres humanos no poseen un alma inmortal, sino que los muertos reciben una resurrección futura; que con firmeza tenemos que evitar la inmoralidad y sostener lo sagrado del arreglo matrimonial; que es importante adherirse a la ley de Dios sobre la sangre y ejercer amor para con los congéneres humanos, lo cual hace que la vida sea mucho más placentera; y que es necesario que los cristianos proclamen el reino de Dios con la mira de ayudar a otras personas a poseer la maravillosa esperanza que Dios suministra.
25, 26. ¿Por qué es necesario que cada uno de nosotros personalmente se interese en estos rasgos de la adoración verdadera? ¿Con qué resultado?
25 Algunos quizás descubran que su religión o sus creencias y prácticas personales difieren de lo que la Biblia identifica como religión verdadera. Si en su caso usted descubre que se necesita algún ajuste, no se demore en hacerlo. Siga el consejo inspirado que se halla en 1 Ped. 3:10-12: “Pues, ‘el que quiere amar la vida y ver días buenos, . . . apártese de lo que es malo y haga lo que es bueno; busque la paz y vaya en pos de ella. Porque los ojos de Jehová están sobre los justos.’”
26 ¿Cómo podemos ir en pos de lo que es correcto? No solo por abandonar lo que este fuera de armonía con la religión verdadera, sino también por medio de dar pasos positivos para vivir de acuerdo con la voluntad de nuestro Dios. Recuerde que Noé no fue simplemente un creyente. La Biblia nos dice que Noé anduvo con el Dios verdadero y era “predicador de justicia.” De manera similar, tanto Jesús como sus apóstoles creyeron y vivieron de acuerdo con la religión correcta. Esto incluía el que ellos compartieran con otros las buenas nuevas acerca del reino de Dios y el nuevo orden de paz en la Tierra que Dios promete. (Mat. 4:17; 10:7; 28:19, 20) El que nosotros hagamos lo mismo con todo el corazón nos dará gran gozo y llevará a otras personas esperanza, propósito en la vida y verdadera felicidad. Abundantes bendiciones les vendrán, por identificar y practicar la religión verdadera.
[Ilustración de la página 14]
En vez de envolverse en guerra y contienda, los cristianos verdaderos han hallado unidad en toda la Tierra, basándose en la esperanza que cifran en común en el reino de Dios