“La escena de este mundo está cambiando”
“Esto digo, hermanos: el tiempo que queda está reducido.” (1 CORINTIOS 7:29.)
1, 2. ¿Qué cambios ha presenciado usted durante su vida?
¿QUÉ cambios ha presenciado usted durante su vida? ¿Puede recordar algunos? Piense, por ejemplo, en los adelantos de la medicina. Gracias a la investigación en este campo, la expectativa de vida en algunos países ha aumentado desde menos de 50 años al principio del siglo XX hasta bastante más de 70 en la actualidad. Piense también en los beneficios que nos ha reportado el uso apropiado de la radio, la televisión, el fax y los teléfonos celulares. Y no olvidemos los avances en la enseñanza, los medios de transporte y los derechos humanos, los cuales han mejorado la vida de millones de personas.
2 Por supuesto, no todos los cambios han sido para bien. Es imposible pasar por alto los devastadores efectos del aumento vertiginoso de la delincuencia, el derrumbe de los valores morales, el incremento de la drogadicción, la desenfrenada tasa de divorcios, la escalada de los precios y la creciente amenaza del terrorismo. En cualquier caso, es probable que concuerde con lo que escribió el apóstol Pablo hace mucho: “La escena de este mundo está cambiando” (1 Corintios 7:31).
3. ¿Qué quiso decir Pablo cuando escribió que “la escena de este mundo está cambiando”?
3 Con esta afirmación, Pablo estaba comparando el mundo a un escenario. Los actores —personalidades de la política, la religión y la cultura— hacen su aparición, representan sus respectivos papeles y entonces dejan la escena a otros. Este patrón se ha repetido por siglos. En el pasado, una dinastía podía gobernar durante décadas y hasta siglos, y los cambios eran lentos. Hoy, por el contrario, el curso de la historia puede cambiar en lo que tarda una bala asesina en alcanzar su objetivo. En efecto, en estos tiempos turbulentos no sabemos lo que nos deparará el día de mañana.
4. a) ¿Qué punto de vista equilibrado deben tener los cristianos respecto a los sucesos mundiales? b) ¿Qué dos convincentes líneas argumentales vamos a examinar?
4 Si el mundo es un escenario y sus dirigentes los actores, los cristianos son los espectadores.a Sin embargo, dado que “no son parte del mundo”, no se interesan demasiado por la actuación o siquiera la identidad de quienes salen a escena (Juan 17:16). Más bien, están muy alerta a las indicaciones de que la representación está alcanzando su culminación —un final catastrófico—, pues saben que este sistema debe desaparecer antes de que Jehová instaure el nuevo mundo de justicia que tanto han esperado.b Examinemos, pues, dos líneas argumentales que demuestran que estamos viviendo en el tiempo del fin y, por tanto, a las puertas del nuevo mundo. Estas son 1) la cronología bíblica y 2) el deterioro de las condiciones mundiales (Mateo 24:21; 2 Pedro 3:13).
Un misterio que al fin se resuelve
5. ¿Qué son “los tiempos señalados de las naciones”, y por qué son de interés para nosotros?
5 La cronología estudia la relación entre el tiempo y los sucesos. Jesús habló de una época en que los dirigentes del mundo tendrían todo el protagonismo sin interferencia alguna del Reino de Dios, y llamó a ese período “los tiempos señalados de las naciones” (Lucas 21:24). Cuando terminaran esos “tiempos señalados”, el Reino celestial de Dios asumiría el poder con Jesús como su legítimo Gobernante, quien al principio reinaría “en medio de [sus] enemigos” (Salmo 110:2). Luego, según Daniel 2:44, el Reino ‘trituraría y pondría fin’ a todos los gobiernos humanos y subsistiría para siempre.
6. ¿Cuándo empezaron “los tiempos señalados de las naciones”, cuánto duraron y cuándo terminaron?
6 ¿Cuándo terminarían “los tiempos señalados de las naciones” y empezaría a gobernar el Reino de Dios? La respuesta, que estuvo sellada “hasta el tiempo del fin”, guarda relación con la cronología bíblica (Daniel 12:9). A medida que se aproximaba aquel “tiempo”, Jehová dio pasos para revelarla a un grupo de estudiantes humildes de la Biblia. Guiados por el espíritu de Dios, estos determinaron que “los tiempos señalados de las naciones” habían comenzado con la destrucción de Jerusalén en 607 a.E.C., y que la duración de aquellos “tiempos” era de 2.520 años. A partir de este hecho, dedujeron que 1914 marcaba el fin de “los tiempos señalados de las naciones”. También comprendieron que 1914 constituía el principio del fin de este sistema de cosas. Si usted es un estudiante de la Biblia, ¿sabría explicar con las Escrituras el cálculo que lleva al año 1914?c
7. ¿Qué textos nos permiten calcular el principio, la duración y el final de los siete tiempos mencionados en el libro de Daniel?
7 Una de las claves se halla oculta en el libro de Daniel. Puesto que Jehová usó al rey Nabucodonosor de Babilonia para destruir Jerusalén al principio de “los tiempos señalados”, en 607 a.E.C., Él reveló mediante aquel gobernante que las naciones dominarían el mundo sin interferencia divina por un total de siete tiempos simbólicos (Ezequiel 21:26, 27; Daniel 4:16, 23-25). ¿Cuánto duran esos siete tiempos? De acuerdo con Revelación (Apocalipsis) 11:2, 3 y 12:6, 14, tres tiempos y medio son 1.260 días. Por lo tanto, siete tiempos deben ser el doble, es decir, 2.520 días. ¿Acaba aquí el cálculo? No, pues Jehová dio a un contemporáneo de Daniel, el profeta Ezequiel, la regla para interpretar el simbolismo: “Un día por un año, un día por un año, es lo que te he dado” (Ezequiel 4:6). De modo que los siete tiempos durarían en realidad 2.520 años. Si a partir del año 607 a.E.C. contamos 2.520 años, llegamos a la conclusión de que los tiempos señalados tendrían que acabar en 1914.
Se confirma “el tiempo del fin”
8. ¿Qué pruebas puede usted señalar de que las condiciones mundiales han empeorado desde 1914?
8 Los acontecimientos mundiales que han ocurrido desde 1914 confirman la exactitud de este entendimiento basado en la cronología bíblica. Jesús mismo dijo que “la conclusión del sistema de cosas” estaría marcada por guerras, hambres y pestes (Mateo 24:3-8; Revelación 6:2-8). Ciertamente, este ha sido el caso desde 1914. El apóstol Pablo agregó elementos al cuadro cuando dijo que las actitudes de las personas para con su prójimo experimentarían un gran cambio. Su descripción de los cambios que todos hemos presenciado dio justo en el blanco (2 Timoteo 3:1-5).
9. ¿Qué comentarios se han hecho respecto a las condiciones mundiales desde 1914?
9 ¿Realmente ha cambiado tanto “la escena de este mundo” desde 1914? En el libro The Generation of 1914 (La generación de 1914), el profesor Robert Wohl hace esta observación: “Los que sobrevivieron a la guerra jamás pudieron deshacerse de la idea de que en agosto de 1914 terminó un mundo y empezó otro”. Confirmando este hecho, el director de salud mental de la Organización Mundial de la Salud, el doctor Jorge A. Costa e Silva, escribió: “Vivimos en un tiempo de cambios vertiginosos, lo que acaba generando unos niveles de ansiedad y estrés desconocidos en la historia del hombre”. ¿Ha sido esta su experiencia personal?
10. ¿Cómo arroja luz la Biblia sobre la causa del deterioro de las condiciones mundiales desde 1914?
10 ¿Quién es el malvado que está tras el deterioro de las condiciones mundiales? Revelación 12:7-9 desenmascara al culpable: “Estalló guerra en el cielo: Miguel [Jesucristo] y sus ángeles combatieron con el dragón [Satanás el Diablo], y el dragón y sus ángeles combatieron, pero este no prevaleció, ni se halló ya lugar para ellos en el cielo. De modo que hacia abajo fue arrojado el gran dragón, [...] que está extraviando a toda la tierra habitada”. De modo que Satanás es el instigador de las dificultades. Cuando en 1914 fue expulsado de los cielos, se cumplieron estas palabras: “¡Ay de la tierra y del mar!, porque el Diablo ha descendido a ustedes, teniendo gran cólera, sabiendo que tiene un corto espacio de tiempo” (Revelación 12:10, 12).
¿Qué sucederá en el último acto de esta gran obra?
11. a) ¿Qué métodos emplea Satanás para extraviar “a toda la tierra habitada”? b) ¿A qué esfuerzo especial de Satanás señaló el apóstol Pablo?
11 Al tanto de que su fin se acerca, desde 1914 Satanás ha redoblado sus esfuerzos para extraviar “a toda la tierra habitada”. Este maestro del engaño actúa entre bastidores poniendo en el escenario a dirigentes y personajes influyentes del mundo para que representen su papel (2 Timoteo 3:13; 1 Juan 5:19). Uno de sus objetivos es llevar a la humanidad a pensar que su modo de gobernar puede traer verdadera paz. Su propaganda ha tenido mucho éxito, pues la gente sigue siendo optimista a pesar de las crecientes pruebas de que las condiciones van de mal en peor. El apóstol Pablo predijo que justo antes de la destrucción de este sistema de cosas se producirá una notable manifestación de propaganda satánica. “Cuando los hombres estén diciendo: ‘¡Paz y seguridad!’ —escribió—, entonces destrucción repentina ha de sobrevenirles instantáneamente, como el dolor de angustia a la mujer encinta.” (1 Tesalonicenses 5:3; Revelación 16:13.)
12. ¿Mediante qué iniciativas se ha intentado traer la paz en nuestros tiempos?
12 En los últimos años, la clase política ha empleado con frecuencia la frase “paz y seguridad” en alusión a distintas iniciativas humanas. Incluso declararon 1986 el Año Internacional de la Paz, si bien aquel año no estuvo a la altura de su nombre. ¿Constituyen tales tentativas de los dirigentes mundiales el cumplimiento total de 1 Tesalonicenses 5:3, o se refería Pablo a un suceso concreto de tanta magnitud que atraería la atención mundial?
13. Cuando Pablo predijo el grito de “¡Paz y seguridad!”, ¿a qué comparó la destrucción que le seguiría, y qué aprendemos de ello?
13 Puesto que las profecías bíblicas a menudo solo se comprenden del todo después de cumplirse o mientras se van realizando, tendremos que esperar a ver lo que sucede. Es interesante, sin embargo, que Pablo comparara la destrucción súbita que seguiría al grito de “¡Paz y seguridad!” a los dolores de parto. Durante unos nueve meses, la futura madre siente crecer al bebé dentro de ella. Quizás oiga sus latidos o note cómo se mueve en la matriz. Puede que hasta le dé patadas. Las señales suelen intensificarse hasta que, un día, un dolor agudo le indica que ha llegado el ansiado momento, el del nacimiento del bebé. Por consiguiente, sin importar de qué forma se cumpla el profetizado grito de “¡Paz y seguridad!”, sabemos que conducirá a un acontecimiento súbito, doloroso, pero feliz en definitiva: la eliminación de la maldad y el comienzo de un nuevo sistema mundial.
14. ¿En qué orden general se sucederán los acontecimientos futuros, y a qué desenlace llevarán?
14 La venidera destrucción será inspiradora de temor para los cristianos fieles, que la observarán como si ocurriera en un escenario. En primer lugar, los reyes de la Tierra (el brazo político de la organización de Satanás) atacarán y destruirán a quienes apoyan a Babilonia la Grande (la facción religiosa) (Revelación 17:1, 15-18). De ese modo, en un sorprendente giro de la trama, el reino de Satanás llegará a estar dividido contra sí mismo, con una parte atacando a la otra, sin que el Diablo pueda impedirlo (Mateo 12:25, 26). Jehová infundirá en el corazón de los reyes de la Tierra el deseo de “llevar a cabo Su pensamiento”, a saber, acabar con Sus adversarios religiosos. Una vez que la religión falsa sea destruida, Jesucristo dirigirá a sus ejércitos celestiales a una victoria total sobre lo que quedará de la organización de Satanás, es decir, los elementos comercial y político. Por último, Satanás mismo será puesto fuera de combate. En ese momento caerá el telón, y la larga representación llegará a su fin (Revelación 16:14-16; 19:11-21; 20:1-3).
15, 16. ¿Qué efecto debería tener en nuestra vida el recordatorio de que “el tiempo que queda está reducido”?
15 ¿Cuándo ocurrirán todos estos sucesos? No sabemos el día ni la hora (Mateo 24:36). No obstante, lo que sí sabemos es que “el tiempo que queda está reducido” (1 Corintios 7:29). Es vital, por tanto, que usemos sabiamente el tiempo que resta. ¿De qué manera? El apóstol Pablo explica que debemos ‘comprar el tiempo oportuno’ para dedicarlo a las cosas más importantes a costa de las innecesarias, así como aprovechar bien cada día. ¿Por qué razón? “Porque los días son inicuos.” Y si ‘percibimos cuál es la voluntad de Jehová’ para nosotros, no malgastaremos el poco y valioso tiempo que queda (Efesios 5:15-17; 1 Pedro 4:1-4).
16 ¿Qué efecto debería tener en cada uno de nosotros saber que todo el sistema de cosas mundano desaparecerá? El apóstol Pedro escribió para nuestro bien: “Puesto que todas estas cosas así han de ser disueltas, ¡qué clase de personas deben ser ustedes en actos santos de conducta y hechos de devoción piadosa[!]” (2 Pedro 3:11). ¡Sí, qué clase de personas! En armonía con el sabio consejo de Pedro, necesitamos 1) vigilar nuestra conducta para cerciorarnos de que sea santa y 2) asegurarnos de que nuestros actos celosos en el servicio a Jehová siempre reflejen el profundo amor que sentimos por él.
17. ¿Contra qué trampas de Satanás deben estar alerta los cristianos fieles?
17 El amor a Dios impedirá que nos apeguemos al mundo y sus atractivos. En vista de lo que aguarda a este sistema de cosas, es peligroso dejarse seducir por el brillo y los encantos de su modo de vida mundanal, centrado en los placeres. Aunque vivimos y trabajamos en el mundo, debemos seguir el sabio consejo de no usarlo a plenitud (1 Corintios 7:31). De hecho, tenemos que hacer todo lo posible para no dejarnos engañar por su propaganda. El mundo no logrará resolver sus problemas ni se sostendrá indefinidamente. ¿Por qué estamos tan seguros de ello? Porque así lo garantiza la Palabra inspirada de Dios: “El mundo va pasando, y también su deseo, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre” (1 Juan 2:17).
¡Lo mejor está por llegar!
18, 19. ¿Qué cambios anhela usted contemplar en el nuevo mundo, y por qué habrá valido la pena esperar?
18 Jehová pronto bajará el telón sobre Satanás y sus partidarios. A continuación, los fieles sobrevivientes al fin de este sistema comenzarán a trabajar con la bendición divina y efectuarán en la “escena” cambios que serán eternos. Ya no se verán en ella enfrentamientos armados, pues Dios hará “cesar las guerras hasta la extremidad de la tierra” (Salmo 46:9). En lugar de hambrunas, “llegará a haber abundancia de grano en la tierra; [...] habrá sobreabundancia” (Salmo 72:16). Desaparecerán las cárceles, las comisarías de policía, las enfermedades de transmisión sexual, los magnates del narcotráfico, los juicios de divorcio, los procedimientos de quiebra y el terrorismo (Salmo 37:29; Isaías 33:24; Revelación 21:3-5).
19 Se vaciarán las tumbas conmemorativas, y miles de millones de resucitados aparecerán como actores en la escena. Apenas podemos imaginar el gozo que se producirá a medida que una generación vaya reuniéndose con otra, y seres queridos que lleven mucho tiempo separados se estrechen en un fuerte y sentido abrazo. Con el tiempo, todo el que viva adorará a Jehová (Revelación 5:13). Cuando los cambios se completen, subirá el telón sobre un paraíso que cubrirá toda la Tierra. ¿Qué sentirá usted ante esa escena? Sin duda exclamará: “¡He esperado mucho este momento, pero la espera ha valido la pena!”.
[Notas]
a En un contexto diferente, Pablo dijo que los cristianos ungidos constituían “un espectáculo teatral al mundo, tanto a ángeles como a hombres” (1 Corintios 4:9).
b Por ejemplo, respecto a la identidad del “rey del norte” mencionado en Daniel 11:40, 44, 45, véase el libro Prestemos atención a las profecías de Daniel, pág. 281.
c La Biblia misma indica que Jerusalén cayó setenta años antes del 537 a.E.C., fecha en que los judíos regresaron del exilio (Jeremías 25:11, 12; Daniel 9:1-3). Para un análisis detallado de “los tiempos señalados de las naciones”, véanse las págs. 167-170 del libro Razonamiento a partir de las Escrituras, editado por los testigos de Jehová.
¿Qué contestaría?
• ¿Cómo se cumplen en nuestro tiempo estas palabras del apóstol Pablo: “La escena de este mundo está cambiando”?
• ¿Cómo establece la cronología bíblica cuándo terminan “los tiempos señalados de las naciones”?
• ¿De qué modo confirman las condiciones mundiales que 1914 marca el principio del “tiempo del fin”?
• ¿Qué efecto debería tener en nosotros el hecho de que “el tiempo que queda está reducido”?
[Ilustración de la página 20]
¡Por fin se resuelve el misterio!