25 Mientras tanto, Simón Pedro seguía allí de pie, calentándose. Entonces le preguntaron: “¿No eres tú también uno de sus discípulos?”. Él lo negó. Dijo: “No, no lo soy”.+
25 Mientras tanto, Simón Pedro seguía allí de pie, calentándose. Entonces le preguntaron: “¿No eres tú también uno de sus discípulos?”. Él lo negó. Dijo: “No, no lo soy”.+