Nota
b Para la enseñanza de la Biblia acerca de si el alma muere, y si es que el hombre está consciente para sufrir después de la muerte o no, vea Ezequiel 18:4, 20 y Eclesiastés 9:5, 10. Estos puntos y muchos otros acerca de los cuales la doctrina religiosa moderna y la inspirada Biblia están en desacuerdo se consideran en el libro La verdad que lleva a vida eterna.