¿Cómo toma usted sus decisiones?
“Sigan percibiendo cuál es la voluntad de Jehová” (EFES. 5:17).
1. a) ¿Cuáles son algunos mandatos que aparecen en la Biblia? b) ¿Cómo nos beneficia obedecerlos?
JEHOVÁ nos da mandatos muy claros por medio de su Palabra. Por ejemplo, prohíbe los pecados sexuales, la idolatría, el robo y la borrachera (1 Cor. 6:9, 10). Por su parte, Jesucristo mandó a sus discípulos que realizaran una tarea difícil, pero emocionante: “Vayan, [...] y hagan discípulos de gente de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del espíritu santo, enseñándoles a observar todas las cosas que yo les he mandado. Y, ¡miren!, estoy con ustedes todos los días hasta la conclusión del sistema de cosas” (Mat. 28:19, 20). No cabe duda, los mandatos y las leyes de Jehová nos sirven de protección. Obedecerlos contribuye a nuestra autoestima, buena salud y felicidad familiar. Y lo que es más importante, quien sigue con cuidado los mandatos divinos, incluido el de predicar, tiene la aprobación de Dios y recibe sus bendiciones.
2, 3. a) ¿Por qué la Biblia no nos da leyes para todo aspecto de la vida? b) ¿Qué preguntas contestaremos en este artículo? (Vea la foto del principio).
2 Ahora bien, la Biblia no contiene leyes específicas para cada situación. Por ejemplo, no encontramos en ella instrucciones detalladas sobre cómo deben vestir los cristianos. Eso demuestra la sabiduría de Dios. ¿Por qué? Porque alrededor del mundo la gente tiene diferentes costumbres y formas de vestir. Además, las modas cambian cada pocos años. Si en la Biblia hubiera una lista de las cosas que podemos ponernos o de los estilos que son aceptables, hace tiempo que habría quedado anticuada. Por razones similares, la Palabra inspirada de Dios no está llena de reglas sobre el trabajo, la salud y el entretenimiento. Cada cristiano y cada cabeza de familia es libre de tomar sus decisiones en estos asuntos.
3 Ahora bien, ¿significa eso que a Jehová no le importa lo que decidamos? Como sabemos, algunas decisiones pueden tener un profundo efecto en nuestra vida. ¿Aprobará Jehová cualquier opción que escojamos, siempre y cuando no viole ninguna ley bíblica? ¿Cómo podemos tomar decisiones que agraden a Dios cuando no hay una ley específica sobre un asunto?
¿IMPORTA LO QUE DECIDAMOS?
4, 5. ¿Qué efecto pueden tener nuestras decisiones en nosotros y en los demás?
4 Hay quienes piensan que da lo mismo lo que decidamos, pero no es así. Si queremos tomar decisiones que agraden a Jehová, tenemos que analizar las leyes y los principios que están en su Palabra, y obedecerlos. Por ejemplo, para ganarnos la aprobación de Dios, tenemos que obedecer su ley sobre la sangre (Gén. 9:4; Hech. 15:28, 29). Orar también nos servirá para tomar decisiones que cumplan con los principios y las leyes de las Escrituras.
5 Hay decisiones personales muy importantes que pueden afectar bastante nuestra salud espiritual. Lo que hagamos influirá, para bien o para mal, en nuestra amistad con Dios. Una buena elección nos acercará a Jehová, mientras que una mala podría alejarnos de él. Además, si tomamos una mala decisión podemos debilitar la fe de otros. ¿De qué maneras? Quizás alguien se moleste o tropiece por nuestra culpa; hasta podríamos poner en peligro la unidad de la congregación. No cabe duda: las decisiones que tomamos tienen consecuencias (lea Romanos 14:19 y Gálatas 6:7).
6. ¿En qué deben basarse nuestras decisiones?
6 ¿Cómo podemos tomar buenas decisiones cuando la Biblia no diga claramente qué hacer? Cada uno es responsable de analizar todos los factores y no dejarse llevar por sus preferencias personales. Debemos pensar en qué le agrada a Jehová y dejarnos guiar por su voluntad. Así tomaremos decisiones que él podrá bendecir (Sal. 37:5).
PERCIBAMOS CUÁL ES LA VOLUNTAD DE JEHOVÁ
7. Si la Biblia no contiene una ley específica sobre un asunto, ¿cómo podemos saber cuál es la voluntad de Jehová?
7 Alguien podría preguntarse: “Si la Biblia no dicta una ley específica sobre un asunto, ¿cómo puedo saber qué espera Jehová de mí?”. Efesios 5:17 tiene la respuesta. Allí dice: “Sigan percibiendo cuál es la voluntad de Jehová”. De modo que, si la Biblia no habla directamente de un asunto, tenemos que percibir, o averiguar, qué piensa Dios al respecto. ¿Cómo? Orando y aceptando que nos guíe con su espíritu santo.
8. Explique con un ejemplo por qué Jesús podía saber cuál era la voluntad de Jehová.
8 Jesús podía percibir cuál era la voluntad de su Padre. Por ejemplo, la Biblia cuenta que en dos ocasiones, después de orar, hizo un milagro y alimentó a multitudes (Mat. 14:17-20; 15:34-37). Pero en otra ocasión que estaba en el desierto y tenía hambre, se negó a convertir piedras en panes, tal como el Diablo le pidió (Mat. 4:2-4). Actuó así porque conocía la forma de pensar de su Padre. Sabía que no debía hacer este milagro, pues Jehová no quería que usara el poder que tenía para su propio beneficio. Al negarse a escuchar a Satanás, demostró que confiaba en la guía de Dios y en que él cubriría sus necesidades.
9, 10. ¿Qué nos ayudará a tomar buenas decisiones? Dé un ejemplo.
9 Nosotros también podemos tomar buenas decisiones, pero, al igual que Jesús, tenemos que confiar en la guía de Jehová. Debemos obedecer estas sabias palabras: “Confía en Jehová con todo tu corazón, y no te apoyes en tu propio entendimiento. En todos tus caminos tómalo en cuenta, y él mismo hará derechas tus sendas. No te hagas sabio a tus propios ojos. Teme a Jehová y apártate de lo malo” (Prov. 3:5-7). Al estudiar la Biblia, conoceremos cómo Jehová ve las cosas y percibiremos qué desea que hagamos en cualquier situación. Mientras más conozcamos la forma de pensar de Dios, más receptivo será nuestro corazón a sus instrucciones (Ezeq. 11:19).
10 Para ilustrarlo: imagínese a una mujer casada que va de compras y ve unos zapatos que le encantan. Como son muy caros, se pregunta: “¿Qué diría mi esposo si gasto tanto dinero?”. Aunque él no está ahí, ella ya sabe la respuesta, pues lo conoce desde hace tiempo y sabe lo que piensa sobre los gastos que se puede permitir la familia con sus recursos limitados. Puede percibir cuál es la opinión de su esposo. Algo parecido pasa cuando conocemos cada vez más la forma de actuar de Dios y su manera de ver las cosas: llegamos a comprender mejor lo que quiere que hagamos en cada situación.
CÓMO PODEMOS CONOCER LA FORMA DE PENSAR DE JEHOVÁ
11. ¿Qué preguntas podemos hacernos al leer o estudiar la Biblia? (Vea el recuadro “Cuando estudie la Biblia, pregúntese”).
11 Si queremos conocer la forma de pensar de Jehová, es vital que dediquemos tiempo al estudio personal. Cuando leamos o estudiemos la Biblia, podríamos preguntarnos: “¿Qué me enseña esto sobre Jehová, sus justos caminos y su forma de pensar?”. Tengamos la misma actitud de David, que cantó: “Hazme conocer tus propios caminos, oh Jehová; enséñame tus propias sendas. Hazme andar en tu verdad y enséñame, porque tú eres mi Dios de salvación. En ti he esperado todo el día” (Sal. 25:4, 5). Al leer un relato de la Biblia, reflexionemos en lo siguiente: “¿Cómo nos beneficia a mi familia y a mí? ¿Dónde puedo usarlo? ¿En casa, en el trabajo, en la escuela, en la predicación...?”. Una vez descubramos dónde podemos usar lo aprendido, nos será más fácil percibir cómo hacerlo.
12. ¿Cómo nos ayudan nuestras publicaciones y las reuniones?
12 Otra manera de llegar a conocer la forma de pensar de Dios es prestando atención a los consejos basados en la Biblia que nos da su organización. Por ejemplo, para saber qué piensa Jehová sobre una decisión que debemos tomar, podemos consultar el Índice de las publicaciones Watch Tower y la Guía de estudio para los testigos de Jehová. También nos beneficiará muchísimo escuchar y participar en las reuniones. Si meditamos en lo que se nos enseña en ellas, comprenderemos mejor la forma de pensar de Jehová y aprenderemos a ver las cosas igual que él. Si sabemos aprovechar el alimento espiritual que Dios nos da, entenderemos cada día mejor su manera de actuar. Entonces estaremos mejor preparados para tomar decisiones personales que cuenten con su bendición.
TOME EN CUENTA LO QUE PIENSA JEHOVÁ
13. Explique con un ejemplo que conocer la forma de pensar de Dios nos ayuda a tomar buenas decisiones.
13 Veamos un ejemplo que muestra cómo nos ayuda a tomar buenas decisiones conocer la forma de pensar de Dios. Supongamos que estamos pensando en hacernos precursores regulares. Para lograrlo, decidimos llevar una vida más sencilla, pero al mismo tiempo nos preguntamos si seremos felices con menos dinero y menos cosas. Desde luego, la Biblia no dice que tengamos que ser precursores; podríamos seguir sirviendo fielmente a Jehová como publicadores. Pero Jesús prometió que quienes hicieran sacrificios por el Reino recibirían muchas bendiciones (Mar. 10:29, 30). Es más, las Escrituras dicen que a Jehová le gusta que le hagamos “ofrendas voluntarias” de alabanza. También dicen que él desea que hagamos todo lo posible por servirle y que lo hagamos con alegría (Sal. 119:108; 2 Cor. 9:7). ¿Verdad que al analizar estos textos y orar a Jehová podemos llegar a saber lo que piensa sobre el asunto? Meditar en estos pasajes nos ayudará a tomar una buena decisión, que cuente con la bendición de Jehová.
14. ¿Cómo podemos averiguar si cierta forma de arreglarnos agrada a Jehová?
14 Pensemos en otra situación. Digamos que nos gusta cierta forma de vestir que podría molestar a algunos hermanos de la congregación. Que sepamos, la Biblia no prohíbe ese tipo de ropa en particular. ¿Qué pensará Jehová? El apóstol Pablo escribió por inspiración: “Que las mujeres se adornen en vestido bien arreglado, con modestia y buen juicio, no con estilos de cabellos trenzados y oro o perlas o traje muy costoso, sino como es propio de mujeres que profesan reverenciar a Dios, a saber, mediante buenas obras” (1 Tim. 2:9, 10). El principio que contiene este consejo también es aplicable a los hombres. A los siervos de Jehová no solo nos preocupa satisfacer nuestros deseos. También pensamos en el efecto que tiene en los demás nuestra forma de vestir y arreglarnos. La modestia y el amor nos impulsan a tomar en cuenta las opiniones de los hermanos, pues no queremos llamar indebidamente su atención ni ofenderlos (1 Cor. 10:23, 24; Filip. 3:17). Si reflexionamos en los consejos que las Escrituras dan sobre este asunto, podremos percibir cuál es la opinión de Jehová y tomar decisiones que lo agraden.
15. a) ¿Cómo se siente Jehová si no dejamos de pensar en cosas inmorales? b) ¿Cómo podemos estar seguros de que el entretenimiento que escogemos le agrada a Jehová?
15 La Biblia enseña que Jehová se siente herido cuando la gente hace cosas malas o cuando la “inclinación de [sus] pensamientos” es “mala todo el tiempo” (Gén. 6:5, 6). Esto nos ayuda a entender que tener fantasías sexuales es incorrecto, pues choca con la forma de pensar de Dios y puede llevarnos a cometer un pecado grave. El discípulo Santiago escribió que la sabiduría de Jehová “es primeramente casta, luego pacífica, razonable, lista para obedecer, llena de misericordia y buenos frutos, sin hacer distinciones por parcialidad, sin ser hipócrita” (Sant. 3:17). Estar al tanto de este hecho debería impulsarnos a rechazar cualquier entretenimiento que alimente malos pensamientos o inclinaciones. Así es, si percibimos cómo piensa Jehová, entenderemos que no podemos entretenernos con libros, películas o juegos con contenidos que él odia. No necesitaremos que nadie nos lo diga, pues su Palabra nos lo deja bien claro.
16. ¿Qué deberíamos hacer antes de tomar decisiones importantes?
16 Al tener que tomar decisiones sobre diversos asuntos, puede que haya más de una opción que sea correcta y que agrade a Jehová. Ahora bien, si tenemos que tomar una decisión importante, ¿por qué no lo consultamos con un anciano o con otro hermano de experiencia? (Tito 2:3-5; Sant. 5:13-15). Claro, no estaría bien que les pidiéramos a otros que decidieran por nosotros. Debemos aprender a desarrollar nuestra capacidad para distinguir lo correcto de lo incorrecto (Heb. 5:14). Recordemos las palabras inspiradas de Pablo: “Cada uno llevará su propia carga de responsabilidad” (Gál. 6:5).
17. ¿Cómo nos beneficia tomar decisiones que le agraden a Jehová?
17 Tener en cuenta la forma de pensar de Jehová al tomar decisiones nos acerca más a él (Sant. 4:8). También nos permite disfrutar de su aprobación y sus bendiciones, lo que a su vez fortalece nuestra fe. Por lo tanto, dejémonos guiar por los principios y las leyes de la Biblia. Así conoceremos mejor lo que piensa Jehová. Desde luego, siempre tendremos cosas nuevas que aprender de él (Job 26:14). Pero si nos esforzamos de verdad, podremos adquirir la sabiduría, el conocimiento y el discernimiento suficientes para tomar buenas decisiones (Prov. 2:1-5). Las ideas y los planes de los humanos cambian constantemente, pero en el caso de Jehová es diferente. El salmista dijo: “Hasta tiempo indefinido el mismísimo consejo de Jehová subsistirá; los pensamientos de su corazón duran hasta una generación tras otra generación” (Sal. 33:11). ¿Deseamos tomar buenas decisiones en la vida? Entonces, aprendamos a pensar como Jehová, el ser más sabio que existe, y hagamos las cosas que le agradan.