ARTÍCULO DE ESTUDIO 25
Ancianos, sigan el ejemplo de Gedeón
“Me faltaría tiempo para hablarles de Gedeón” (HEB. 11:32).
CANCIÓN 124 Siempre fieles y leales
AVANCEa
1. Según 1 Pedro 5:2, ¿qué honor tienen los ancianos cristianos?
JEHOVÁ les ha encargado a los ancianos cristianos la responsabilidad de cuidar a sus queridas ovejas. Ellos valoran el honor de servir a sus hermanos y se esfuerzan por ser buenos pastores (Jer. 23:4; lea 1 Pedro 5:2). ¡Qué bueno que en las congregaciones hay hermanos tan trabajadores!
2. ¿Qué desafíos enfrentan algunos ancianos?
2 Al atender sus responsabilidades, los ancianos afrontan muchos desafíos. Por ejemplo, para cuidar a la congregación, tienen que trabajar mucho. Pensemos en lo que le pasó a Tony, un anciano de Estados Unidos. Él se dio cuenta de que tenía que ser más modesto a la hora de aceptar responsabilidades. Tony explica: “Cuando empezó la pandemia del COVID-19, había mucho trabajo para organizar las reuniones y la predicación, y yo no le decía que no a nada. Pero, por mucho que me esforzara, siempre había algo más que hacer. Con el tiempo, empecé a descuidar la lectura de la Biblia, el estudio personal y mis oraciones”. Ilir, un anciano de Kosovo, enfrentó una situación distinta. Vivía en una zona de guerra y se le hacía muy difícil seguir las instrucciones de la organización. Él dice: “Cuando la sucursal me pidió que ayudara a los hermanos que vivían en un lugar peligroso, me dio miedo. Ser valiente no era tan fácil, y encima las instrucciones no parecían muy prácticas”. Y a un misionero de Asia llamado Tim se le hacía cuesta arriba mantener el ritmo para cumplir con todas sus obligaciones. Él confiesa: “A veces estaba agotado mental y emocionalmente”. ¿Qué pueden hacer los ancianos para superar situaciones como estas?
3. ¿Por qué es bueno que todos nos fijemos en el ejemplo de Gedeón?
3 Los ancianos pueden aprender mucho del ejemplo del juez Gedeón (Heb. 6:12; 11:32). Él protegía y pastoreaba al pueblo de Dios (Juec. 2:16; 1 Crón. 17:6). Los ancianos de la actualidad, igual que Gedeón, tienen la responsabilidad de cuidar del pueblo de Dios en una época muy complicada (Hech. 20:28; 2 Tim. 3:1). Por lo tanto, pueden extraer valiosas lecciones si se fijan en la modestia, la humildad, la obediencia y el aguante de Gedeón. Además, el ejemplo de este juez ayudará al resto de la congregación a valorar cada día más la labor de los ancianos y a apoyarlos de todo corazón (Heb. 13:17).
CUANDO SEA DIFÍCIL SER MODESTO Y HUMILDE
4. ¿Cómo demostró Gedeón que era modesto y humilde?
4 Gedeón era modesto y humilde.b Cuando un ángel le dijo que Jehová lo había elegido para liberar a los israelitas del control de los poderosos madianitas, Gedeón respondió con humildad: “Mi clan es el menos importante de Manasés y yo soy el más insignificante de la casa de mi padre” (Juec. 6:15). Él pensaba que no estaba a la altura de ese trabajo. Pero Jehová sabía que él podía lograrlo, y con su ayuda Gedeón tuvo éxito.
5. ¿Qué situaciones podrían poner a prueba la modestia y la humildad de los ancianos?
5 Los ancianos hacen todo lo posible por ser siempre modestos y humildes (Miq. 6:8; Hech. 20:18, 19). No presumen de sus habilidades ni de sus logros, y tampoco son demasiado duros con ellos mismos cuando se equivocan o algo no les sale bien. Pero hay situaciones que pueden poner a prueba su modestia y su humildad. Pongamos un par de ejemplos. Quizás un anciano acepte muchas responsabilidades y luego vea que no puede con todas. Tal vez reciba críticas por cómo manejó un asunto o elogios por un trabajo bien hecho. En casos como estos, ¿cómo podría el ejemplo de Gedeón ayudar a los ancianos?
6. ¿Cómo pueden los ancianos ser modestos como Gedeón? (Vea también la imagen).
6 Pidan ayuda. La persona modesta sabe que no puede con todo. Como Gedeón era modesto, pidió ayuda a los demás (Juec. 6:27, 35; 7:24). Los ancianos prudentes hacen lo mismo. Tony, mencionado en el párrafo 2, explica: “Por mi crianza, solía aceptar más trabajo del que en realidad podía asumir. Por eso decidí hablar de la modestia en nuestra adoración en familia y le pedí a mi esposa que me diera su opinión. También repasé un video que está en jw.org y que se titula Tal como Jesús, capacitemos a otros y confiemos en ellos”. Tony empezó a pedirles ayuda a los demás, y él nos dice cuál fue el resultado: “En la congregación está todo bien atendido, y ahora yo tengo más tiempo para fortalecer mi amistad con Jehová”.
7. ¿Cómo pueden los ancianos imitar a Gedeón cuando alguien los critica? (Santiago 3:13).
7 Mantengan la calma si los critican. Recibir una crítica puede poner a prueba a un anciano. Una vez más, el ejemplo de Gedeón puede ser útil. Él tuvo presente que no era perfecto y, cuando los hombres de Efraín lo criticaron, mantuvo la calma (Juec. 8:1-3). En lugar de enojarse, fue humilde y los escuchó, y con mucha bondad logró calmar los ánimos. Los ancianos sabios son como Gedeón. Cuando alguien los critica, lo escuchan con atención y le responden con apacibilidad (lea Santiago 3:13). Haciendo esto contribuyen a que reine la paz en la congregación.
8. ¿Cómo deberían reaccionar los ancianos cuando reciben alabanzas? Ponga un ejemplo.
8 Denle todo el mérito a Jehová. Cuando honraron a Gedeón por vencer a los madianitas, él centró la atención del pueblo en Jehová (Juec. 8:22, 23). ¿Cómo pueden los ancianos seguir su ejemplo? Dándole toda la gloria a Jehová cuando logran algo (1 Cor. 4:6, 7). Por ejemplo, si a un anciano lo felicitan por su manera de enseñar, él puede responder que lo que ha dicho viene de la Palabra de Dios y que todos aprendemos mucho gracias a la educación que nos da la organización de Jehová. Es bueno que a veces los ancianos se pregunten si su forma de enseñar honra a Jehová o solo los honra a ellos. Pensemos en lo que le pasó a un hermano llamado Timothy. Cuando lo nombraron anciano, le encantaba presentar discursos públicos. Él cuenta: “Solía preparar unas introducciones y unos ejemplos largos y elaborados, y por eso los hermanos me echaban muchas flores. Por desgracia, el centro de atención era yo, y no Jehová o la Biblia”. Con el tiempo, Timothy vio que tenía que hacer cambios en su manera de enseñar para no llamar la atención más de la cuenta (Prov. 27:21). ¿Cómo le fue? Él explica: “Ahora hay hermanos que me dicen que mi discurso los ayudó a sobrellevar un problema, a aguantar una prueba o a sentirse más cerca de Jehová. Soy más feliz con estos comentarios que con aquellas alabanzas que recibía hace años”.
CUANDO SEA DIFÍCIL OBEDECER Y SER VALIENTE
9. ¿En qué situaciones se pusieron a prueba la obediencia y la valentía de Gedeón? (Vea el dibujo de la portada).
9 Después de que Jehová nombrara juez a Gedeón, su obediencia y su valentía se pusieron a prueba. Él recibió una misión muy peligrosa: destrozar el altar de Baal que tenía su padre (Juec. 6:25, 26). Más adelante, Gedeón formó un gran ejército, y en dos ocasiones Jehová le dijo que tenía que reducirlo (Juec. 7:2-7). Finalmente, por orden de Jehová tuvo que atacar al campamento enemigo en medio de la noche (Juec. 7:9-11).
10. ¿Cómo puede ponerse a prueba la obediencia de un anciano?
10 Los ancianos deben estar listos para obedecer (Sant. 3:17). Cuando un anciano es obediente, sigue con gusto la guía que dan las Escrituras y la organización de Dios, y así les da ejemplo a los demás. Pero quizás no siempre le resulte fácil obedecer. A veces es posible que le cueste trabajo mantenerse al día con todas las instrucciones que van llegando. En algunas ocasiones puede que se pregunte si seguir cierta pauta es lo más práctico o lo más sabio. O tal vez se le pida que haga algo que ponga en peligro su libertad. En situaciones como estas, ¿cómo pueden los ancianos imitar la actitud obediente de Gedeón?
11. ¿Qué puede ayudar a los ancianos a ser obedientes?
11 Presten atención a las instrucciones y síganlas. Dios le dijo a Gedeón cómo destruir el altar de su padre, dónde construir un altar para Jehová y qué animal tenía que sacrificar. Gedeón no cuestionó las instrucciones; las siguió sin pensarlo dos veces. Hoy en día, los ancianos reciben instrucciones de la organización de Jehová mediante cartas, anuncios y pautas. Todo esto es para cuidarnos en sentido físico y espiritual. Como nuestros ancianos siguen al pie de la letra la guía de la organización de Jehová, los queremos mucho. Gracias a su obediencia, toda la congregación se beneficia (Sal. 119:112).
12. ¿Cómo pueden los ancianos poner en práctica Hebreos 13:17 cuando la organización de Jehová recomienda un cambio?
12 Estén dispuestos a adaptarse a los cambios. Recordemos que Jehová le dijo a Gedeón que tenía que quedarse con menos del 1 % de sus soldados (Juec. 7:8). Tal vez pensó: “¿Pero será necesario hacer este cambio? ¿Saldrán las cosas bien?”. A pesar de todo, Gedeón obedeció. ¿Cómo siguen su ejemplo los ancianos? Aplicando los cambios que recomienda la organización de Jehová (lea Hebreos 13:17). Por ejemplo, en el 2014, el Cuerpo Gobernante cambió la forma de financiar los Salones del Reino y los Salones de Asambleas (2 Cor. 8:12-14). En el pasado, se les hacía un préstamo a las congregaciones para que construyeran el salón, y luego estas tenían que devolver el dinero. Pero ahora hay un fondo común con el dinero de todas las congregaciones del mundo para construir lugares de reunión donde se necesiten, sin importar cuánto puedan contribuir las congregaciones del lugar. Cuando un anciano llamado José se enteró de este cambio, tuvo sus dudas. Pensó: “Eso funcionará en otras partes del mundo, pero aquí no. Ya verás, no se va a construir ni un solo Salón del Reino”. Sin embargo, apoyó esta nueva medida. ¿Por qué? Él cuenta: “Recordé lo que dice Proverbios 3:5, 6, que tengo que confiar en Jehová. ¡Y los resultados han sido una maravilla! No solo construimos más Salones del Reino, sino que hemos aprendido a aportar nuestro granito de arena para que se produzca una compensación”.
13. a) ¿De qué estaba convencido Gedeón? b) ¿Qué pueden hacer los ancianos para ser como Gedeón? (Vea también la imagen).
13 Hagan la voluntad de Jehová con valor. Gedeón obedeció a Jehová a pesar de los peligros y de sus propios temores (Juec. 9:17). Después de que Jehová le confirmara su apoyo, Gedeón estaba completamente convencido de que Dios lo ayudaría a proteger a su pueblo. Los ancianos que viven en lugares donde nuestras actividades están prohibidas son como Gedeón. Con valor, organizan las reuniones y dirigen la predicación a pesar de que puedan ser arrestados, interrogados, despedidos de sus trabajos o tratados con violencia.c Durante la gran tribulación, los ancianos tendrán que ser muy valientes para seguir las instrucciones sin importar el peligro que corran. Tal vez las instrucciones tengan que ver con la proclamación del mensaje de condena simbolizado por grandes piedras de granizo. O quizás se relacionen con lo que tengamos que hacer para sobrevivir al ataque de Gog de Magog (Ezeq. 38:18; Apoc. 16:21).
CUANDO SEA DIFÍCIL AGUANTAR
14. ¿Cómo se puso a prueba el aguante de Gedeón?
14 Como juez de Israel, Gedeón tuvo que desgastarse mucho físicamente. Cuando los madianitas huyeron en aquella batalla nocturna, él los persiguió desde el valle de Jezreel hasta el río Jordán, que probablemente tenía sus orillas llenas de matorrales con espinos (Juec. 7:22). ¿Qué hizo entonces? ¿Se detuvo? ¡Por supuesto que no! Aunque él y sus 300 hombres estaban cansados, cruzaron el río y continuaron con la persecución. Al final, alcanzaron a los madianitas y los derrotaron (Juec. 8:4-12).
15. ¿Qué puede poner a prueba el aguante de un anciano?
15 Cuidar a la congregación y a la familia puede desgastar a un anciano en sentido físico, mental o emocional. ¿Cómo pueden seguir el ejemplo de Gedeón los ancianos que se sientan así?
16, 17. a) ¿Qué ayudó a Gedeón a aguantar? b) ¿De qué pueden estar seguros los ancianos? (Isaías 40:28-31; vea también la foto).
16 Confíen en que Jehová les dará fuerzas. Eso es lo que hizo Gedeón, y Jehová no le falló (Juec. 6:14, 34). En una ocasión, Gedeón y sus hombres persiguieron a pie a dos reyes madianitas que, al parecer, huían montados en sus camellos (Juec. 8:12, 21). Pero, con la ayuda de Jehová, estos israelitas tan perseverantes los alcanzaron y los vencieron. Los ancianos de la actualidad también pueden confiar en Jehová, el Dios que “jamás se cansa ni se agota”. Él les dará fuerzas siempre que las necesiten (lea Isaías 40:28-31).
17 Veamos la experiencia de Matthew, que es miembro de un Comité de Enlace con los Hospitales. ¿Qué lo ayuda a aguantar? Él dice: “He vivido en carne propia lo que dice Filipenses 4:13. Muchas veces, cuando estoy cansado y siento que ya no puedo más, le oro intensamente a Jehová y le ruego que me dé las fuerzas físicas y mentales que necesito para apoyar a los hermanos. En esos momentos siento que Jehová me da una inyección de energía para aguantar”. Igual que Gedeón, los ancianos se desviven para pastorear con amor al rebaño a pesar de los obstáculos. Claro está, tienen que ser modestos y darse cuenta de que no siempre pueden hacer todo lo que les gustaría hacer. Pero, en cualquier caso, los ancianos confían en que Jehová oirá sus ruegos y les dará las fuerzas para seguir adelante (Sal. 116:1; Filip. 2:13).
18. Según lo que hemos visto, ¿cómo pueden los ancianos imitar a Gedeón?
18 Como hemos visto, los ancianos pueden aprender mucho del ejemplo de Gedeón. Deben ser modestos y humildes a la hora de aceptar más responsabilidades y al recibir críticas o elogios. También deben ser obedientes y valientes, especialmente ahora que se acerca el fin de este sistema. Y deben confiar en que pase lo que pase Jehová les dará las fuerzas para aguantar. Sin duda, apreciamos mucho y tenemos “siempre en alta estima” a estos pastores que trabajan tan duro (Filip. 2:29).
CANCIÓN 13 Cristo es nuestro modelo
a Jehová eligió a Gedeón para que guiara y protegiera a su pueblo en una época muy difícil de la historia de la nación de Israel. Y él cumplió fielmente con ese encargo por unos 40 años a pesar de que surgieron muchas dificultades. En este artículo, veremos cómo pueden los ancianos imitar su ejemplo cuando se enfrentan a situaciones que los ponen a prueba.
b La modestia y la humildad son cualidades que están muy relacionadas. La persona modesta tiene un punto de vista equilibrado de sí misma y conoce cuáles son sus límites. Alguien humilde respeta a los demás y los considera superiores (Filip. 2:3). Por lo general, quien es modesto también es humilde.