ARTÍCULO DE ESTUDIO 40
Mantengámonos ocupados en la parte final de los últimos días
“Manténganse firmes, inamovibles, y estén siempre muy ocupados en la obra del Señor” (1 COR. 15:58).
CANCIÓN 47 Voy a buscar a los amigos de la paz
AVANCEa
1. ¿Qué nos convence de que vivimos en “los últimos días”?
SI HEMOS nacido después de 1914, hemos vivido toda nuestra vida durante “los últimos días” de este mundo (2 Tim. 3:1). Todos hemos escuchado noticias sobre los sucesos que Jesús predijo para nuestro día: guerras, hambre, terremotos, epidemias, aumento de la maldad y la persecución de los siervos de Dios, entre otros (Mat. 24:3, 7-9, 12; Luc. 21:10-12). También hemos visto a la gente comportarse como predijo el apóstol Pablo (vea el recuadro “Cómo son las personas hoy”). Los siervos de Jehová estamos convencidos de que vivimos en “la parte final de los días” (Miq. 4:1).
2. ¿A qué preguntas debemos dar respuesta?
2 Como han pasado muchos años desde 1914, esta debe ser la parte final de “los últimos días”. El fin de este mundo está muy cerca, así que debemos dar respuesta a dos preguntas importantes: ¿Qué sucederá al final de “los últimos días”? Y ¿qué espera Jehová que hagamos mientras tanto?
QUÉ OCURRIRÁ AL FINAL DE “LOS ÚLTIMOS DÍAS”
3. Según la profecía de 1 Tesalonicenses 5:1-3, ¿qué proclamarán las naciones?
3 (Lea 1 Tesalonicenses 5:1-3). Pablo habla del “día de Jehová”. En este contexto, esta expresión se refiere al periodo que comienza con el ataque a “Babilonia la Grande” —el conjunto de todas las religiones falsas del mundo— y termina en Armagedón (Apoc. 16:14, 16; 17:5). Justo antes de que comience ese “día”, las naciones proclamarán que han logrado “paz y seguridad”. Los líderes mundiales a veces utilizan expresiones similares cuando hablan sobre mejorar las relaciones internacionales.b Pero el anuncio que menciona la Biblia será diferente. ¿Por qué? Porque, cuando se dé ese anuncio, mucha gente creerá que los gobernantes mundiales han conseguido que el mundo sea un lugar más seguro. Sin embargo, la realidad será que estallará “una gran tribulación” que terminará en “destrucción repentina” (Mat. 24:21).
4. a) ¿Qué cosas no sabemos sobre la proclamación de “paz y seguridad”? b) ¿Qué sabemos ya sobre ella?
4 Conocemos algunos detalles sobre la proclamación de “paz y seguridad”. No obstante, hay cosas que desconocemos, como qué llevará a las naciones a hacer ese anuncio y cómo lo harán. Tampoco sabemos si se tratará de una sola declaración o de una serie de anuncios. Sea como sea, hay algo que sí sabemos: que no debemos dejarnos engañar y creer que los líderes de las naciones traerán la paz mundial. Al contrario, esta es la proclamación que estamos esperando, la señal de que “el día de Jehová” está a punto de comenzar.
5. ¿Cómo nos ayuda 1 Tesalonicenses 5:4-6 a estar listos para “el día de Jehová”?
5 (Lea 1 Tesalonicenses 5:4-6). Pablo nos dice lo que debemos hacer a fin de estar listos para “el día de Jehová”. No debemos dormirnos “como hacen los demás”, sino estar despiertos y permanecer alerta. Por ejemplo, tenemos que estar al tanto del peligro de mezclarnos en las cuestiones políticas del mundo y así violar nuestra neutralidad. Si lo hiciéramos, podríamos llegar a ser “parte del mundo” (Juan 15:19). Sabemos que solo el Reino de Dios traerá paz mundial.
6. ¿Qué ayuda deseamos dar a las personas, y por qué?
6 Además de estar despiertos, deseamos ayudar a otras personas a “despertar”, es decir, ayudarlas a conocer lo que la Biblia dice que le sucederá a este mundo. Recordemos que, una vez que comience la gran tribulación, será muy tarde para que busquen a Jehová. Por eso es tan urgente la predicación.c
MANTENGÁMONOS OCUPADOS EN LA PREDICACIÓN
7. ¿Qué espera Jehová que hagamos ahora?
7 En el poco tiempo que queda antes de que llegue “el día de Jehová”, él espera que nos mantengamos ocupados en la predicación. Debemos asegurarnos de que estamos “muy ocupados en la obra del Señor” (1 Cor. 15:58). Cuando Jesús habló de los importantes sucesos que ocurrirían durante los últimos días, predijo lo que haríamos los siervos de Dios. Dijo: “Además, primero se tienen que predicar las buenas noticias en todas las naciones” (Mar. 13:4, 8, 10; Mat. 24:14). Pensemos en lo siguiente: cada vez que salimos al ministerio, participamos en el cumplimiento de esta profecía bíblica.
8. ¿Qué datos demuestran que la predicación del Reino está aumentando?
8 Año tras año, más personas escuchan las buenas noticias del Reino. Veamos cómo ha crecido en todo el mundo la cantidad de proclamadores del Reino durante los últimos días. En 1914, había 5.155 publicadores en 43 países. En la actualidad, somos unos 8.500.000 publicadores en 240 países y territorios. Pero nuestra obra no ha finalizado todavía. Debemos seguir proclamando que solo el Reino de Dios resolverá los problemas del hombre (Sal. 145:11-13).
9. ¿Por qué debemos seguir predicando el mensaje del Reino?
9 Seguiremos predicando hasta que Jehová diga que esta obra ha terminado. ¿Cuánto tiempo le queda a la gente para conocer a Jehová y a Jesucristo? (Juan 17:3). No lo sabemos. Lo que sí sabemos es que, mientras no comience la gran tribulación, toda persona con “la actitud correcta para obtener vida eterna” tiene la oportunidad de prestar atención a las buenas noticias (Hech. 13:48). ¿Cómo ayudaremos a estas personas antes de que sea demasiado tarde?
10. ¿Qué ayuda nos da Jehová para que enseñemos la verdad a la gente?
10 Jehová nos está dando mediante su organización todo lo necesario para enseñar la verdad a la gente. Por ejemplo, todas las semanas nos capacita mediante la reunión de entre semana, donde aprendemos qué decir en la primera visita y en las revisitas, y cómo dirigir los cursos bíblicos. La organización de Jehová también nos ha dado las herramientas del kit de enseñanza. Estas pueden ayudarnos de las siguientes maneras:
a empezar conversaciones,
a despertar el interés de la gente,
a motivarla a querer saber más,
a enseñar la verdad en los cursos bíblicos y
a invitar a quienes demuestren interés a visitar nuestro sitio de Internet y el Salón del Reino.
Claro, además de tener estas herramientas, debemos usarlas.d Por ejemplo, si tenemos una conversación agradable con alguien que muestra interés y le dejamos un tratado o una revista, la persona podrá leer más sobre el tema hasta que volvamos a hablar con ella. Cada uno de nosotros tiene la responsabilidad de mantenerse ocupado en la predicación todos los meses.
11. ¿Por qué se ha preparado el curso bíblico en línea?
11 Veamos de qué otro modo está ayudando Jehová a las personas a conocer la verdad. En jw.org®, se puede realizar un curso bíblico en línea.e ¿Por qué se ha preparado? Todos los meses, decenas de miles de personas de todo el mundo buscan en Internet cursos bíblicos. El que se ofrece en nuestro sitio puede darles a conocer la verdad de la Palabra de Dios. Algunas personas con las que hablamos quizás duden en aceptar que les demos clases de la Biblia. En tal caso, enseñémosles esta sección de nuestra página o enviémosles un enlace en un idioma que entiendan.
12. ¿Qué se puede aprender en el curso bíblico en línea?
12 Este curso trata temas como la Biblia y su autor, los principales personajes de la Biblia y el mensaje de esperanza que esta nos da. Al estudiar estas lecciones, la persona aprenderá lo siguiente:
cómo nos ayuda la Biblia,
quiénes son Jehová, Jesús y los ángeles,
por qué creó Dios a los seres humanos y
por qué existen el sufrimiento y la maldad.
En este curso también se analizan estos temas:
qué hará Jehová para acabar con el sufrimiento y la muerte,
cómo devolverá la vida a los muertos y
de qué manera reemplazará a los inútiles gobiernos del hombre con el Reino de Dios.
13. Explique si el curso bíblico en línea sustituye a nuestro programa de clases bíblicas particulares.
13 Este curso no sustituye a nuestro programa de clases bíblicas particulares. Jesús nos ha dado el honor de hacer discípulos. Deseamos que las personas interesadas lean el curso en línea, valoren lo que aprenden y quieran saber más. Si eso ocurre, quizás acepten que un publicador les dé clases de la Biblia. Al final de cada lección, se invita al lector a solicitar que lo visite alguien para que lo ayude a aprender más. Todos los días, recibimos de todo el mundo a través de nuestro sitio de Internet un promedio de 230 solicitudes de cursos de la Biblia. Es fundamental que las personas reciban una enseñanza individualizada.
SIGAMOS ESFORZÁNDONOS POR HACER DISCÍPULOS
14. De acuerdo con lo que mandó Jesús en Mateo 28:19, 20, ¿qué nos esforzamos por hacer, y por qué?
14 (Lea Mateo 28:19, 20). Al dirigir cursos bíblicos, debemos esforzarnos por hacer discípulos y enseñarles a obedecer todo lo que ha mandado Jesús. Tenemos que ayudarlos a comprender que es muy importante que se pongan de parte de Jehová y su Reino. Esto significa tratar de motivarlos a hacer suya la verdad aplicando lo que aprenden, dedicando su vida a Jehová y bautizándose. Solo así sobrevivirán al día de Jehová (1 Ped. 3:21).
15. ¿Para qué no tenemos tiempo, y por qué?
15 Como ya vimos, queda muy poco para que se acabe este mundo. Por ello, no tenemos tiempo para seguir dando cursos a quienes no muestran el deseo de ser discípulos de Cristo (1 Cor. 9:26). Nuestra obra es urgente, pues aún hay muchas personas que tienen que escuchar el mensaje del Reino antes de que sea demasiado tarde.
ABANDONEMOS LA RELIGIÓN FALSA
16. De acuerdo con Apocalipsis 18:2, 4, 5, 8, ¿qué debemos hacer todos? (Vea también la nota).
16 (Lea Apocalipsis 18:2, 4, 5, 8). Estos versículos indican algo más que Jehová espera que hagamos. Todos los cristianos verdaderos debemos alejarnos por completo de Babilonia la Grande. Es posible que quienes reciben clases de la Biblia hayan pertenecido a una religión falsa antes de conocer la verdad. Tal vez asistían a sus servicios religiosos, participaban en sus actividades o le daban dinero. Antes de que se les apruebe para ser publicadores no bautizados, deben romper con todo lo que los una a la religión falsa. Tienen que presentar una carta de renuncia o cortar de cualquier otro modo su relación con su anterior iglesia o con cualquier otra organización que forme parte de Babilonia la Grande.f
17. ¿Qué clase de empleo debemos rechazar los cristianos, y por qué?
17 Los cristianos verdaderos debemos asegurarnos de que nuestro empleo no tiene nada que ver con Babilonia la Grande (2 Cor. 6:14-17). Por ejemplo, no seremos empleados de ninguna iglesia. Además, si trabajamos para una empresa, no haremos trabajos extensos en instalaciones que se utilizan para la adoración falsa. Y, si tenemos nuestro propio negocio, ni ofreceremos nuestros servicios ni aceptaremos ofertas para trabajar para alguna parte de Babilonia la Grande. ¿Por qué adoptamos una postura tan firme? Porque no deseamos ser cómplices de las obras y los pecados de las organizaciones religiosas que están contaminadas para Dios (Is. 52:11).g
18. ¿Cómo actuó un hermano cuando se le pidió trabajar en una iglesia?
18 Hace años, un contratista le pidió a un anciano que tenía su propio negocio que hiciera un pequeño trabajo de carpintería en una iglesia de la ciudad donde vivía. El contratista sabía que el hermano siempre había dicho que no trabajaría en ninguna iglesia. Pero en esta ocasión necesitaba urgentemente que alguien hiciera el trabajo. Pese a todo, el hermano respetó los principios bíblicos y rechazó la oferta. A la semana siguiente, el periódico local publicó la foto de otro carpintero colocando una cruz en la iglesia. Si el hermano hubiera cedido, podría haber aparecido él en el periódico. Pensemos en el daño que habría hecho eso a su reputación en la congregación y en cómo se hubiera sentido Jehová.
QUÉ HEMOS APRENDIDO
19, 20. a) ¿Qué hemos aprendido hasta ahora? b) ¿Qué más debemos aprender?
19 Según las profecías bíblicas, el próximo acontecimiento importante de la historia mundial es la proclamación de “paz y seguridad”. Pero Jehová nos ha enseñado que las naciones no lograrán paz real y permanente. ¿Qué debemos hacer antes de que esto ocurra y venga la destrucción repentina? Dios espera que sigamos ocupados predicando el mensaje del Reino y tratando de hacer más discípulos. Al mismo tiempo, debemos mantenernos alejados de la religión falsa. Eso implica dejar de ser miembros de las organizaciones religiosas falsas y que nuestro empleo no tenga nada que ver con Babilonia la Grande.
20 Hay más sucesos que ocurrirán durante la parte final de “los últimos días” y hay más cosas que Jehová espera que hagamos. ¿Cuáles son? Y ¿cómo podemos prepararnos para todo lo que vendrá en el futuro cercano? Lo veremos en el siguiente artículo.
CANCIÓN 18 ¡Somos los guerreros de Jehová!
a Esperamos que dentro de poco las naciones digan que han conseguido paz y seguridad. Esa será la señal de que la gran tribulación está a punto de comenzar. ¿Qué espera Jehová que hagamos hasta entonces? Este artículo nos ayudará a saber la respuesta.
b Por ejemplo, la Organización de las Naciones Unidas dice en su página oficial de Internet que su prioridad es “mantener la paz y la seguridad internacionales”.
c Vea el artículo de este número titulado “Cuando Dios castiga, ¿da siempre suficiente advertencia?”.
d Encontraremos detalles sobre cómo usar las herramientas del kit de enseñanza en el artículo “Enseñemos la verdad”, del número de octubre de 2018 de La Atalaya.
e Este curso está disponible actualmente en inglés y portugués, y en el futuro lo estará en otros idiomas.
f También debemos evitar los campamentos juveniles o las instalaciones de recreo que tengan relación con la religión falsa. Por ejemplo, con respecto a si se puede o no pertenecer a la YMCA (Asociación Cristiana de Jóvenes), podemos consultar la sección “Preguntas de los lectores” de La Atalaya del 1 de marzo de 1979. Lo mismo se puede decir sobre la YWCA (Asociación Cristiana de Mujeres Jóvenes). Aunque algunas filiales locales de estas asociaciones le restan importancia al aspecto religioso de sus actividades, en realidad sus raíces y sus objetivos son religiosos.
g En la sección “Preguntas de los lectores” de La Atalaya del 15 de abril de 1999, encontramos un análisis más detallado sobre lo que la Biblia dice respecto a los empleos relacionados con las organizaciones religiosas.
h DESCRIPCIÓN DE LA IMAGEN. La noticia que aparece en la televisión de que se ha conseguido “paz y seguridad” despierta el interés de los clientes de una cafetería. Este anuncio no engaña a una pareja de Testigos que ha parado para descansar durante la predicación.