31 Pues he oído una voz como la de una mujer con dolores,
una angustia como la de una mujer dando a luz a su primer hijo;
la voz de la hija de Sion, que respira con dificultad.
Mientras extiende las manos,+ dice:
“¡Ay de mí! ¡Estoy exhausta por culpa de los asesinos!”.