¿Por qué se le llamará pasionaria?
¿TENDRÁ algo ver con el apasionamiento romántico? Al parecer no. Cuenta la historia que el nombre de la planta se lo pusieron sacerdotes católicos en el siglo XVI, pues veían en la flor partes que les recordaban la pasión (sufrimiento) y muerte de Jesucristo. (Si el lector examina con cuidado la ilustración, podrá seguir la explicación que daban.) Según ellos, los cinco pétalos y los cinco sépalos —parecidos a los anteriores— representaban a los diez apóstoles fieles que se mantuvieron junto a Cristo durante sus padecimientos. (Les venía bien excluir al traidor Judas y a Pedro, que negó tres veces a Cristo.) Hasta vieron la corona de espinas de Cristo en los apéndices ligulares (los “rayitos”) situados encima de los pétalos. Los cinco estambres (órganos masculinos que producen el polen) representarían las supuestas cinco heridas que recibió Cristo. Cada uno de los tres estilos, que se alzan sobre el ovario, termina en un estigma semejante a un botón, como si fuera un clavo de cabeza grande. De ahí la asociación con los clavos utilizados en la ejecución de Jesús. No, aquellos eclesiásticos no andaban nada escasos de imaginación...
En el momento de su descubrimiento, aquella hermosa flor crecía tan solo en lo que hoy llamamos Latinoamérica, pero actualmente se cultiva en muchas regiones del mundo, a veces en jardines botánicos. Tiene un diámetro que oscila entre 1 y 15 centímetros, y se presenta en una amplia gama de colores.
Existen unas cuatrocientas especies de pasionarias, que por lo general crecen en las zonas cálidas del globo. Algunas dan un fruto comestible que puede ser levemente agrio o muy dulce. Con él se elaboran jugos, confituras y hasta helados. En el caso de la parcha granadilla (Passiflora quadrangularis), el fruto es como una calabaza y puede llegar a pesar tres kilos y medio.
Como verá, las flores no se quedan en las apariencias. Además, hay unas doscientas cincuenta mil especies de angiospermas (plantas que dan flores). Así pues, constituyen todo un campo de interés para el apasionado estudiante de floricultura.
[Ilustración de la página 24]
SÉPALOS
APÉNDICES LIGULARES
PÉTALOS
ESTILOS
ESTAMBRES