Preguntas de los lectores
● ¿Por qué Mateo y Marcos hablan de que la transfiguración tuvo lugar seis días después que Jesús hubo hecho cierta promesa a sus discípulos, mientras que el Evangelio de Lucas dice que sucedió ocho días después?—J. S., EE. UU.
Aparentemente Mateo y Marcos no contaron ni el primer día ni el último; más bien, contaron seis días enteros que se atravesaron entre la promesa del Señor Jesús a sus apóstoles y la transfiguración misma. (Mat. 17:1; Mar. 9:2) Lucas, debemos notar, no profesa dar el intervalo exacto. Él informa que la transfiguración aconteció “unos ocho días después de estas palabras.” (Luc. 9:28) Puesto que Lucas cuenta las porciones del primer día y el último como días enteros, prefiere dar el período en números redondos—“unos ocho días.” Así Lucas informó el número de días desde un punto de vista diferente, y realmente no hay contradicción.
● ¿Por qué dice la Traducción del Nuevo Mundo en Mateo 5:5: “Felices son los de genio apacible,” mientras que en Salmo 37:11 dice “los mansos”?—D. B., EE. UU.
La razón por la cual Salmo 37:11 en la Traducción del Nuevo Mundo dice “los mansos” es que la palabra hebrea ‘anav, que allí se vierte “mansos,” encierra la idea de “pobre, humilde, manso,” más bien que de genio apacible. ‘Anav por lo tanto se vierte consistentemente “manso” por todas las Escrituras Hebreas de la Traducción del Nuevo Mundo. Según el American College Dictionary, uno que es manso es “uno que es humildemente paciente o sumiso, como bajo provocación por otros.”
Ahora bien, en cuanto a Mateo 5:5, debe notarse que Jesús no estaba leyendo o citando directamente de un rollo hebreo de los Salmos. En cuanto a cómo vierte el texto la Traducción del Nuevo Mundo, es cierto que la expresión “los de genio apacible” pudiera haberse vertido de otra manera, como, por ejemplo, “mansos.” ¿Por qué, entonces, “los de genio apacible”?
Muchas personas se han familiarizado con la manera en que se vierte Mateo 5:5 en la Versión Valera, “Bienaventurados los mansos.” Muchos también han pensado que lo que Jesús quiso decir fue ‘bienaventurados son los enseñables.’ Por eso frecuentemente se ha expresado que el ser manso es ser enseñable. Es verdad que el que es manso es enseñable, pero el ser enseñable es solo una de las cualidades que tiene una persona mansa. Además, el significado fundamental de la palabra griega original en Mateo 5:5 no es “enseñable.” Según el Lexicon de dos tomos de griego e inglés por Liddell y Scott la palabra griega de Mateo 5:5 significa, en cuanto a personas, “apacible, benigno, manso,” y la forma adverbial de ella significa “apaciblemente, benignamente.” Es interesante el hecho de que La Nueva Biblia Inglesa dice, en Mateo 5:5: “Cuán benditos son los de espíritu benigno.”
También el Lexicon griego-inglés por Westcott y Hort declara en cuanto a esta palabra griega, praús o praos: “Genio apacible, y, de animales, dócil, benigno. Mateo 5:5 (Aquí la VA y la AN la vierten mansos, pero las palabras nunca, en ningún tiempo, ni en pasaje alguno de cualquier otro autor significaron mansos.).”
El Comité de la Traducción del Nuevo Mundo, al verter la palabra griega “de genio apacible,” cree que ha logrado una manera de verter la palabra que es muy superior a “mansos.” La manera en que la vierte la Traducción del Nuevo Mundo define la palabra griega y no le deja a ningún lector el asignarle un significado arbitrario a la palabra, como el decir que “manso” significa “enseñable.”
● ¿Tiene aplicación el texto de Salmo 34:7, “El ángel de Jehová está acampando todo alrededor de los que le temen, y los libra,” a librar de desastres naturales tales como inundaciones y terremotos?—R. E., EE. UU.
Este texto debe entenderse a la luz de su contexto. El sobrescrito del Salmo 34 dice: “De David, cuando disfrazó su cordura ante Abimelec, de modo que él lo echó, y él se fue.” De modo que David habla en el marco de circunstancias de estar en territorio enemigo, donde tuvo que disfrazarse fingiendo estar demente ante el rey Abimelec (también llamado Aquís) para no ser ejecutado por este rey filisteo, quien si no fuese por esto hubiera considerado a David como un israelita inteligente, intrigante, espía. En medio de esas circunstancias el ángel de Jehová preservó a David y lo libró. Esto es muy diferente de rescatar o librar a uno de una inundación o un terremoto. Las circunstancias son enteramente diferentes, y no tienen relación una con otra.—1 Sam. 21:10-15.
Cuando se trata de inundaciones y tormentas, el pueblo de Jehová tiene que prestar atención a los avisos de tormenta como cualesquier otras personas. Es cierto que la tendencia de muchas personas es no hacer caso de las advertencias, como algunos han hecho en cuanto a huracanes e inundaciones, perdiendo así la vida. Los que deciden no prestar atención a las advertencias, pensando que ‘eso no me puede pasar a mí,’ deben aceptar las consecuencias de ello.
La protección después del Armagedón es otro asunto. Aun el Armagedón quizás no ponga fin a los terremotos. No podemos ser dogmáticos y decir que el Armagedón hará que todo el globo terráqueo llegue inmediatamente, interna y externamente, a su condición de terminado y por lo tanto no habrá necesidad de alteraciones en el interior o en la superficie de la Tierra. Pero si éstas fuesen necesarias mientras pasan los mil años, Dios puede dirigir el curso de éstas, y puede hacer que su pueblo quede protegido de cualquier daño o pérdida, en armonía con la promesa de Revelación 21:4.
● Cuando Eliseo oró para que Dios hiriera al ejército sirio con ceguera, ¿qué le sucedió al ejército en realidad?—K. K., EE. UU.
El relato en 2 Reyes 6:18, 19 esclarece el asunto, cuando dice: “Eliseo siguió orando a Jehová y diciendo: ‘Por favor, hiere a esta nación con ceguera.’ De modo que él los hirió con ceguera según la palabra de Eliseo. Eliseo ahora les dijo: ‘Este no es el camino, y ésta no es la ciudad. Síganme, y permítanme conducirlos al hombre que ustedes buscan.’ Sin embargo, los condujo a Samaria.” Si el entero ejército hubiera sido herido con ceguera física todos habrían tenido que ser llevados de la mano, pero el relato solo dice que Eliseo les dijo: ‘Este no es el camino. Síganme.’ Aparentemente lo que sucedió fue que ellos fueron heridos con ceguera mental para que no pudieran reconocer a Eliseo o adónde los estaba llevando.
Esta ceguera mental la reconocen los psicólogos. Por ejemplo, Guillermo James en sus Principles of Psychology, tomo 1, página 48, declara: “Un efecto sumamente interesante del desorden cortical es la ceguera mental. Esta no consta tanto de la insensibilidad a las impresiones ópticas como del no poder entenderlas. Psicológicamente se interpreta como la pérdida de asociaciones entre las sensaciones ópticas y lo que significan; y cualquier interrupción de las sendas entre los centros ópticos y los centros para otras ideas la producirían.”
● ¿Qué son las autoridades que se mencionan en Colosenses 1:16? ¿Incluirían estas autoridades las “autoridades superiores” de Romanos 13:1?—C. W., EE. UU.
Colosenses 1:16, 17 dice: “Por medio de él todas las otras cosas fueron creadas en los cielos y sobre la tierra, las cosas visibles y las cosas invisibles, no importa que sean tronos, o señoríos, o gobiernos, o autoridades. Todas las otras cosas han sido creadas mediante él y para él. También, él es antes de todas las otras cosas y por medio de él se hizo que todas las otras cosas existieran.”
¿A qué autoridades se refiere el apóstol Pablo aquí? ¿A las “autoridades superiores” o gobernantes de este mundo, que se mencionan en Romanos 13:1? No, de esas “autoridades superiores” se dice que están “colocadas por Dios en sus posiciones relativas,” no creadas por Dios. Pero de las autoridades de Colosenses 1:16 se dice que son creación de Dios mediante el Hijo de Dios. Además, de las “autoridades superiores” mundanas no se podría decir que han sido creadas para él, es decir, para Jesucristo, sino, más bien, para hombres sobre la Tierra. De modo que hay varias autoridades. Algunas son parte de la organización de Jehová y otras son parte de la organización y el mundo de Satanás. El contexto en el capítulo uno de Colosenses esclarece bastante este hecho, porque en el versículo 13 Pablo declara: “Él nos libró de la autoridad de la oscuridad y nos trasladó al reino,” o autoridad, “del Hijo de su amor.” De modo que aquí mismo en conexión con esto se hace referencia a dos autoridades distintas.
Las autoridades “del Hijo de su amor” le pertenecen a él, fueron creadas mediante el Hijo, siendo él el instrumento que Dios usó. Y estas autoridades incluyen no solo autoridades celestiales, espirituales, invisibles, sino también a los que son señalados para ejercer autoridad en la congregación cristiana. Tal como Jehová tenía un conducto para servir como autoridad o cuerpo gobernante en los días de los apóstoles y después del Pentecostés, en el 33 d. de J.C., así también hoy día Jehová Dios tiene una junta administrativa o cuerpo gobernante, una clase del “esclavo fiel y discreto” que tiene la superintendencia de la obra de los testigos cristianos de Jehová en la sociedad del nuevo mundo.—Mat. 24:45-47.