La conversión de Constantino... ¿a qué fue?
POR mucho tiempo los estudiantes de asuntos religiosos se han interesado en la presunta conversión del emperador romano Constantino. Según su propio relato, en vísperas de una batalla de 312 E.C., ganada por él, el pagano Constantino tuvo una visión de una cruz acompañada del lema: “Con esta [señal] vencerás”. Poco después, en 313 E.C., al “convertirse”, puso fin a la persecución de los cristianos en el Imperio Romano. Constantino apoyó como religión estatal la forma que el cristianismo había adoptado en su tiempo, y hasta intervino en disputas internas de la iglesia. Sin embargo, también cometió actos que pusieron en tela de juicio lo genuino de su conversión, y no se bautizó sino hasta poco antes de su muerte unos 24 años después.
En un artículo reciente de Bible Review, Stanley A. Hudson, numismático y docto en teología, reveló que las monedas acuñadas durante el reinado de Constantino añaden interesante información a lo que se sabe de este asunto. Hasta el tiempo de Constantino era común que en las monedas romanas se representara a las deidades romanas populares. Pero el señor Hudson informa que después de la conversión de Constantino las representaciones paganas fueron desapareciendo... con una sola excepción. Se acuñaron profusamente monedas en las que aparecía el dios Sol, que anteriormente era el dios favorito de Constantino. ¿Por qué?
Hudson sugiere dos posibilidades. En primer lugar, puede que la conversión de Constantino haya sido muy gradual... a pesar de su dramática visión. O puede que Constantino en realidad haya confundido al dios Sol con Jesús. Hasta en nuestros días no es raro el sincretismo (la conciliación de doctrinas diferentes). Por ejemplo, en la América Latina todavía se adora a las diosas precolombinas Pacha Mama y Tonantzin en la forma de la Virgen María. Puede que de ese mismo modo Constantino haya adorado al dios Sol en la forma de Jesús.
Ese sincretismo explicaría por qué se escogió el 25 de diciembre, ‘el cumpleaños del Sol invicto’, como el día para conmemorar el nacimiento de Jesús. También nos ayudaría a comprender por qué en una moneda acuñada para conmemorar la muerte de Constantino aparece la inscripción “DV Constantinus” (“Divino Constantino”), lo cual muestra que, a pesar de su conversión y posterior bautismo, al difunto Constantino se le consideró un dios, como se acostumbraba hacer con los emperadores paganos que lo precedieron.
[Reconocimiento en la página 7]
The Metropolitan Museum of Art
Legado de la Sra. F.F. Thompson, 1926 (26.229)