La caja de preguntas
● ¿Qué podemos hacer individualmente para mantener el Salón del Reino nítido y limpio?
El Salón del Reino es el centro de la adoración pura en la comunidad. Cuando se mantiene limpio y atractivo tanto en el interior como en el exterior, puede servir para representar a Jehová y a su organización de un modo excelente. El siervo de la congregación es, por supuesto, responsable de superentender las cosas. Pero todos los que están asociados con la congregación pueden ayudar y se les anima a hacerlo.
Por lo general el siervo de la congregación prepara un horario para que los diferentes grupos de estudio de libro de congregación aseen por turno el salón. Es útil hacer una lista de las cosas que hay que hacer cada semana. Cuando llegue el turno de su grupo de estudio, asegúrese de hacer su parte. ¿Pero qué puede hacerse en otras ocasiones?
Quizás usted pueda hacer algunas cosas semanalmente para ayudar. No vacile en tomar la iniciativa. En algunas congregaciones los publicadores más jóvenes trabajan juntos después de cada reunión recogiendo las cosas del suelo y enderezando las sillas. En algunas congregaciones un grupo de familia se ha encargado de esa responsabilidad. Por supuesto, el resultado es que la apariencia del salón siempre es excelente.
Los padres hacen bien al enseñar a sus hijos a recoger las cosas que caen en el suelo, y deben asegurarse de que sus hijos no escriban en las sillas o en las paredes, o desfiguren de algún modo la propiedad. El tiempo de limpiar el Salón del Reino puede ser un tiempo muy agradable. Ofrece una buena oportunidad para que los padres entrenen a los hijos en cuanto a aceptar responsabilidad y mostrar aprecio por el lugar de adoración de Jehová. La fidelidad en estos asuntos puede conducir a privilegios mayores.
¿Necesita atención el exterior de su Salón del Reino? ¿Se mantienen bien arreglados los arbustos y se corta el césped? En toda ocasión esté alerta para ocuparse de las cosas que necesiten atención. Nuestra fidelidad al cuidar del Salón del Reino da evidencia de nuestro amor a Jehová y de nuestro deseo de que su lugar de adoración sea un testimonio excelente en la comunidad y para su honra.