Suministremos con gozo lo que se necesita en el tiempo de la siega
1 Sí, es el tiempo de la siega. Nos hallamos en la conclusión del sistema de cosas, y como Jesús declaró en una de sus parábolas: “La siega es una conclusión de un sistema de cosas”. (Mat. 13:39.) En Juan 5:17 Jesús dijo: “Mi Padre ha seguido trabajando hasta ahora, y yo sigo trabajando”. En este tiempo de la siega, el pueblo de Jehová no solo se mantiene ocupado predicando las buenas nuevas del Reino, sino también proveyendo lugares de adoración. Hoy, más que nunca antes, se necesitan Salones del Reino. Jehová ha impulsado a sus siervos leales a ofrecer voluntariamente sus habilidades para la construcción de estos salones, y por ello debemos estar agradecidos. No solo trabajan duro, sino que también demuestran un espíritu de gozo.
2 La situación ahora es muy similar a la de los días de Nehemías, cuando los israelitas estaban ocupados en construir el muro de Jerusalén. Nehemías 4:6 dice que “el pueblo continuó teniendo corazón para trabajar”. ¿En qué residía el secreto de esa buena condición de corazón? En Nehemías 8:10 tenemos la respuesta: “Porque el gozo de Jehová es su plaza fuerte”. Ciertamente hay toda razón para que seamos trabajadores gozosos. Tenemos la bendición de Jehová y su espíritu, y el gozo es parte del fruto de ese espíritu. (Gál. 5:22.)
3 Comités Regionales de Construcción: Los informes de la actividad mundial indican que ‘los campos están listos para la siega’. (Juan 4:35.) Con esa necesidad presente, en 1987 la Sociedad comenzó a nombrar Comités Regionales de Construcción para que ayudaran a las congregaciones en los proyectos de construcción de nuevos salones o de renovación de los ya existentes. Los ancianos nombrados a servir en esos comités son hombres espirituales que por lo general tienen mucha experiencia en los campos de la construcción y de los negocios. Sus consejos han resultado muy útiles, especialmente cuando hay un espíritu de cooperación entre ellos y los hermanos que sirven en los comités locales de construcción.
4 Tres congregaciones que recibieron ayuda de voluntarios que trabajaban con un Comité Regional de Construcción de California escribieron al comité para expresar su agradecimiento. Comentaron discernidoramente: “Sírvanse expresar nuestro amor y agradecimiento a sus esposas, a sus hijos y a sus respectivas congregaciones. Agradecemos muchísimo los sacrificios que hacen al permitir que ustedes ayuden a tantos en el pueblo de Jehová”.
5 Un comité regional informó: “Recibimos mucha ayuda del comité local de construcción. Nos parece [...] que la relación que desarrollamos con el comité local de construcción es uno de los aspectos más remuneradores del papel que desempeñamos”. En una carta reciente, el comité local de construcción que representaba a dos congregaciones del oeste del país dijo lo siguiente: “Este programa resulta en bendiciones para la congregación. Vamos a mencionar algunas: Provee guía especializada para el proyecto a través del comité de construcción, organiza a centenares de hermanos capaces y espirituales para que ayuden, lo que permite que el proyecto se complete con rapidez y sin que debilite la espiritualidad de las congregaciones, sino que fortalece el amor entre los hermanos, también resulta en buen testimonio para la comunidad, y más importante aún, produce un hermoso lugar en el cual alabar a Jehová”.
6 Comuníquese con anticipación con el Comité Regional de Construcción: Cuando las congregaciones estén planeando renovar o construir un salón, los ancianos deben comunicarse con el presidente del comité regional desde el mismo comienzo del proyecto. La Sociedad ha dado instrucciones específicas a los Comités Regionales de Construcción, y los hermanos que los componen tienen mucha experiencia que ayudará a evitar obstáculos al comprar una propiedad o al planear un proyecto de construcción. Si se les mantiene bien informados de todos los proyectos en la zona que se les ha asignado, el comité puede programar un horario para los voluntarios a fin de que todos los proyectos se puedan completar sin sobrecargar a los trabajadores experimentados. Cada Comité Regional de Construcción mantiene listas de personal y programa el trabajo para los voluntarios dentro de la zona en que opera.
7 Las pautas que los comités regionales han recibido incluyen factores que se deben pesar cuidadosamente antes de comprar una propiedad, tales como leyes federales, estatales y de la ciudad, las cuales gobiernan una variedad de situaciones que afectan un proyecto para construir un Salón del Reino. Las congregaciones muestran discernimiento y se benefician de las observaciones de los ancianos nombrados a servir en el Comité Regional de Construcción cuando se comunican con estos desde el comienzo del proyecto, incluso mucho antes de adquirir la propiedad. (Pro. 15:22.)
8 Los ancianos pueden comunicarse con el Comité Regional de Construcción a través del superintendente de circuito. Este tiene el nombre, la dirección y el número telefónico del presidente del comité asignado a ayudar en la construcción de Salones del Reino en la zona donde se halla su congregación.
9 Muestren discernimiento al hacer compras: En su mayoría, las congregaciones han mostrado discernimiento al comprar materiales de construcción. La Sociedad no tiene un programa nacional para la compra de materiales. Sin embargo, de vez en cuando algunas compañías ofrecen precios especiales directamente a las congregaciones. Cuando este sea el caso, la Sociedad notificará a los Comités Regionales de Construcción acerca de estos distribuidores. En este caso ni la Sociedad ni el comité regional están dando su recomendación o aprobación a esta compañía. Es sencillamente un asunto de pasar información a las congregaciones para que estas estén al tanto de los materiales y los precios que se ofrecen y hagan comparaciones.
10 Los ancianos deben asegurarse de que antes de comprar materiales se comparen cuidadosamente los precios. El comité regional puede ayudar al preparar una lista de lo que se necesite, lo cual incluye artículos para la decoración interior. Es probable que cada comité sepa de voluntarios experimentados en estas áreas que con gusto ayudarían a las congregaciones a preparar la lista de materiales que se deben comprar. Se pueden usar los servicios de otros hermanos que sepan de negocios a fin de obtener precios más bajos para los materiales. Deben comunicarse con diferentes distribuidores para determinar cuál es el mejor precio, a la vez que buscan buena calidad. Aunque a veces se hacen ofertas para suministrar materiales o servicios “al costo”, los ancianos deben cerciorarse cuidadosamente de los detalles, ya que a veces se incluyen gastos ocultos. Puesto que para este propósito se emplean fondos dedicados a Jehová, es necesario la cooperación de las congregaciones con el Comité Regional de Construcción para asegurarse de que estos fondos se empleen juiciosamente.
11 Mantengan sencillo el diseño del Salón del Reino: Aunque una congregación haya acumulado suficientes fondos como para incluir decoraciones adicionales sin tener que solicitar un préstamo, se debe dar consideración al uso de diseños convencionales y modestos. Eso permite que haya fondos adicionales disponibles para emplearlos en otras metas teocráticas. (om-S pág. 61; 2 Cor. 8:14.) Puesto que muchos ofrecen voluntariamente su labor en los proyectos de construcción de Salones del Reino, puede que los trabajadores sientan que se les impone trabajo adicional si se les pide que edifiquen o instalen decoraciones que consumen mucho tiempo. Aunque es necesario un buen sistema de sonido, por lo general sistemas muy complicados y con funciones adicionales no son ni económicos ni necesarios. Se debe dar consideración cuidadosa a estos asuntos antes de incluirlos en el proyecto. El Comité Regional de Construcción puede proveer información valiosa que ayudará a tomar decisiones equilibradas con relación al diseño.
12 Muchas congregaciones han construido nuevos Salones del Reino mediante usar fondos que han prestado los que se asocian con la congregación. A veces se ha vendido un Salón del Reino y el dinero recibido de la venta ha sido suficiente para sufragar el costo de un local más grande y nuevo. Sin embargo, algunas congregaciones tienen que conseguir ayuda financiera adicional. Estas pudieran comunicarse con la Sociedad para averiguar si pueden obtener un préstamo, siguiendo las instrucciones que se suministraron en una carta dirigida a los ancianos con fecha del 18 de julio de 1990. Antes de solicitar un préstamo de la Sociedad, los ancianos deben hacer una encuesta en la localidad para determinar: 1) cuánto se contribuirá desde el mismo comienzo para ayudar con la compra de la propiedad y el costo de la construcción, 2) cuánto se puede conseguir prestado de los que se asocian con la(s) congrega(ción)(ciones) envuelta(s) en el proyecto y 3) cuánto se contribuirá mensualmente para cubrir los gastos de operación del salón y para pagar el préstamo que se obtenga de la Sociedad. No deben aparecer nombres en las hojas que se entreguen en respuesta a la encuesta. Es importante que todos provean cifras exactas, teniendo un punto de vista realista en cuanto a lo que pueden contribuir para el salón y el pago del préstamo, ya que los ancianos usarán esas cantidades al tomar decisiones de peso en nombre de la congregación.
13 Cuando se termina el proyecto de construcción de un Salón del Reino a veces sobran fondos. Si se consiguió el préstamo a través de la Sociedad, entonces lo que sobre debe devolverse inmediatamente a esta. Así se podrán compartir esos fondos con otras congregaciones que los necesiten. La(s) congrega(ción)(ciones) no debe(n) guardar los fondos sobrantes ni prestarlos a otras congregaciones.
14 Estimación del costo y procedimientos de contabilidad: Antes de emprender un proyecto para construir un Salón del Reino, se deben hacer cuidadosos estimados. Esto debe hacerse antes de presentar la solicitud final para un préstamo. Así se evita el sobrecargar a los publicadores con un plan de pagos que sea mayor de lo necesario. Además, deja dinero disponible en el fondo de la Sociedad para que lo usen otras congregaciones que necesitan urgentemente un mejor lugar donde reunirse. (Fili. 4:5.) Puesto que los que sirven en el comité regional tienen mucha experiencia al respecto, esas estimaciones deben resultar bastante exactas. Aunque gastos imprevistos pueden hacer que el proyecto cueste más de lo planeado, se pueden hacer estimados bastante exactos con buena planificación y un análisis de los factores que resultan en mayores gastos, eliminando así el tener que pedir una cantidad mayor de la necesaria para incluirla en el costo planeado.
15 El proyecto de construcción de un Salón del Reino implica el gasto de una gran cantidad de dinero por parte de la congregación. Los ancianos deben encargarse de que los fondos se manejen de manera responsable. Hay que mantener registros exactos de contabilidad, y cada mes presentar informes claros a la(s) congrega(ción)(ciones) implicada(s). El superintendente presidente debe encargarse de que se intervengan trimestralmente los fondos para la construcción y todas las cuentas asociadas con el proyecto, en los mismos meses que se intervienen las cuentas regulares de la congregación. La congregación tiene que aprobar el proyecto una vez que se le dé un informe completo de los detalles y el costo estimado. (km-S 9/84 pág. 3.) Luego, se deben aprobar adecuadamente todos los pagos antes de hacerlos. Al concluir el proyecto se debe presentar un informe claro de todo lo que se gastó. El proveer una copia de este resumen al Comité Regional de Construcción ayudará a esos hermanos a ser más exactos en sus estimados a medida que ayudan a otras congregaciones que piensan construir un salón.
16 Lo que se ha logrado: Ahora hay más de 70 Comités Regionales de Construcción en los Estados Unidos. Estos informan que cada año se construyen unos 200 nuevos Salones del Reino y se completan otros 200 proyectos de renovación en los 48 estados continentales. Eso es prueba de la unidad y del espíritu dispuesto que manifiestan los que aman a Jehová y a sus hermanos. (Juan 13:34, 35.)
17 Otros observan: El apóstol Pablo dijo: “Hemos llegado a ser un espectáculo teatral al mundo, tanto a ángeles como a hombres”. (1 Cor. 4:9.) Los cristianos hoy están a la vista de todos, y eso es especialmente cierto mientras se construye un Salón del Reino. El trabajo que se efectúa y el espíritu de gozo de los trabajadores no pasa desapercibido. Como resultado de esto en los periódicos aparecen titulares como: “Testigos de Jehová: un trabajo hecho a la medida”, “Una muestra del verdadero espíritu de colaboración” y “En el tercer día, descansaron”.
18 La unidad entre los trabajadores voluntarios siempre ha maravillado a los observadores. En Massachusetts, un artículo de periódico mencionó que el sonido que emanaba del proyecto daba la impresión de que se trataba de “una gran reunión familiar”, pues el ruido del trabajo iba acentuado por “exclamaciones de saludos gozosos”.
19 El alcalde de un pueblo en Minnesota visitó el lugar donde se construía un Salón del Reino. Luego, el periódico local informó que el alcalde “comentó sobre la organización y el profesionalismo de los voluntarios”. Un periódico citó las palabras de un administrador de zonificación del estado de Nueva York, quien dijo: “Puede que este trabajo se haya hecho rápidamente, pero es de calidad”. En Carolina del Norte un inspector de construcción dijo: “Esto es algo de lo que hablan los inspectores de construcción cuando se reúnen, un proyecto de edificación en un fin de semana”.
20 Una congregación de Texas expresó su agradecimiento por los preparativos hechos por el Comité Regional de Construcción y declaró que el proyecto de construcción resultó en muchísima alabanza y honra al nombre de Jehová. Informan que cierto clérigo observó el proyecto sin creer lo que veía y luego le contó a su clase semanal nocturna que ‘esta era una prueba verdadera del espíritu cristiano’.
21 Un redactor de noticias comentó: “El dicho dice que Roma no fue edificada en un día, pero la congregación local de los testigos de Jehová casi acabó con esa teoría con la construcción de su nuevo Salón del Reino”. En Alabama un reportero informó lo siguiente sobre la construcción de un Salón del Reino de la localidad: “Esto parece algo de lo que uno solo oye hablar, pero ocurrió aquí mismo. [...] Lo que algunos consideran casi milagroso, los testigos de Jehová lo ven como rutina. [...] Aunque no les gusta vanagloriarse por sus logros, su espíritu dispuesto y su cooperación dan el ejemplo para que muchos lo imiten”.
22 En Texas una persona que no es Testigo escribió lo siguiente a un periódico después de observar un proyecto de construcción rápida: “Solo miraba con asombro mientras el edificio crecía ante mis ojos. Había gente por todas partes, por dentro y por fuera. [...] No gritaban ni se decían malas palabras ni había alguien mandando. Desde lejos parecía como si una mano invisible dirigía a cada uno de ellos. Tal vez la había. Aún me asombro ante la realidad de lo que se logró”. Terminó su carta diciendo: “Cuando lo visitan en su hogar no van con el propósito de molestarlo. Solo desean compartir su amor y gozo con todos. Quizás deberíamos por lo menos escucharles. Yo sé que lo haré la próxima vez. Porque lo que vi la semana pasada fue como un rayo de luz en un mundo en oscuridad, y hoy, amigos, necesitamos un poco de esa luz y de ese amor”.
23 Ayuda voluntaria amorosa: Los millares de voluntarios, incluyendo a los trabajadores especializados que ayudan en la construcción de Salones del Reino, son dignos de encomio. El que hagan esto sin esperar pago por sus esfuerzos es prueba del espíritu de Jehová operando entre ellos. (Hech. 20:35; 1 Juan 4:12, 13, 21.) Se logra tanto mediante estos trabajadores gozosos.
24 Muchos hermanos capacitados dan de su tiempo y habilidades para ayudar con la compra de propiedad, diseño del edificio, construcción e ingeniería, decoración, jardinería, dirección de la obra, compra de materiales, servicio de alimentación, control del tráfico, prevención de accidentes, etc. Los hermanos contribuyen el uso de sus propios equipos para estos proyectos. ¡Cuánto debe regocijar esto a nuestro Padre, Jehová, cuando ve que usan sus posesiones y habilidades de manera tan amorosa! (Compárese con 1 Tesalonicenses 2:6-9 y 2 Tesalonicenses 3:8b.)
25 Se necesitan más voluntarios: Los Comités Regionales de Construcción informan que se necesitan más voluntarios. Este es un servicio necesario en apoyo de los intereses del Reino. (1 Cor. 15:58.) Se necesitan trabajadores especializados, así como otros hermanos maduros con cualidades espirituales aunque no sepan de construcción. Si llena estos requisitos, ¿pudiera hacer algunos ajustes para ofrecerse como voluntario? (Isa. 6:8.) Por ejemplo, algunos ancianos o siervos ministeriales pueden ayudar en la construcción de Salones del Reino durante un fin de semana cada mes o cada dos meses. Pudieran recibir entrenamiento para que se encarguen de responsabilidades adicionales, a menudo en departamentos no relacionados directamente con la construcción. Esto ayudará a los hermanos que trabajan duro en dirigir estos proyectos.
26 Los Comités Regionales de Construcción y los comités locales de construcción programan el trabajo de los voluntarios para que estén en el lugar de la obra cuando se necesite su ayuda. Estos regresan a sus congregaciones y familias tan pronto como sea posible, y no pierden innecesariamente sus reuniones ni tiempo que pudieran emplear en el servicio del campo. Los que estarán en la construcción serán: 1) los voluntarios aprobados que han sido asignados específicamente por los encargados de departamentos y 2) los voluntarios de las congregaciones de la zona donde se construye el Salón del Reino y que componen la mano de obra no especializada. A los demás se les insta a apoyar la actividad en el servicio del campo y las reuniones de su propia congregación.
27 Procedimiento para ofrecerse de voluntario: ¿Cómo se ofrece uno de voluntario? En agosto de 1990 se envió a cada cuerpo de ancianos un suministro de formularios “Kingdom Hall Construction Worker Questionnaire”. Estos están a la disposición de los trabajadores que los soliciten y que llenen los requisitos. Si se necesitan más formularios, los ancianos pueden solicitarlos del superintendente de circuito. Los ancianos tienen instrucciones detalladas respecto a los voluntarios que se necesitan y los requisitos que deben llenar.
28 Si desea ofrecerse como voluntario para ayudar en la construcción de Salones del Reino en la zona donde vive, y si es siervo ministerial, anciano o es un cristiano ejemplar y un obrero especializado, puede solicitar un formulario de los ancianos de su congregación. Después de llenarlo, entrégueselo a los ancianos. Ellos añadirán sus comentarios y lo remitirán al superintendente de circuito, quien a su vez terminará de llenar el formulario y lo enviará al Comité Regional de Construcción. Si sus circunstancias personales le permiten ofrecerse como voluntario, y usted llena los requisitos, recibirá muchas bendiciones al ver el gozo de los hermanos y hermanas una vez que se complete la construcción de un Salón del Reino, y esto para la alabanza de Jehová.
29 Todos pueden ayudar: Los que no se pueden ofrecer como voluntarios también desempeñan un papel importante. Ayudan a atender las necesidades de la congregación mientras otros trabajan en un proyecto de construcción de un Salón del Reino. Por necesidad, algunos voluntarios tienen que faltar a veces a las reuniones de su congregación a fin de dar su ayuda amorosa a otras congregaciones que están construyendo su Salón del Reino.
30 Además, cuando se construye un salón cerca de donde usted vive, puede que se presente la oportunidad de que publicadores que no sepan de construcción ayuden como parte de la mano de obra. Estos no tienen que llenar un formulario de voluntario. Cuando se necesite ayuda, esto se dará a conocer por medio de los ancianos de la(s) congrega(ción)(ciones) implicada(s) en el proyecto y de congregaciones vecinas, quienes harán los preparativos solo para ese proyecto.
31 Todos tenemos la oportunidad de contribuir financieramente al Fondo de la Sociedad para Salones del Reino según lo permitan nuestras circunstancias. Desde su establecimiento en septiembre de 1983, se han provisto fondos para ayudar en la construcción de 1.000 nuevos Salones del Reino en el territorio que abarca la sucursal de los Estados Unidos. Estos salones permiten que 1.488 congregaciones tengan sus reuniones. Muchas congregaciones no hubieran podido conseguir lugares tan buenos para reunirse de no ser por el amor de nuestra hermandad, que ha quedado manifiesto por el apoyo generoso al Fondo de la Sociedad para Salones del Reino.
32 El fondo de la Sociedad hace préstamos para ayudar con la construcción de nuevos Salones del Reino. A medida que se paga el préstamo, junto con ciertos intereses, se prestan esos fondos a otras congregaciones que los necesiten. Hay ventajas en comunicarse primero con la Sociedad para solicitar un préstamo, en vez de buscar financiamiento de una firma comercial.
33 Expresiones de agradecimiento: Después de terminar de construir su nuevo Salón del Reino, una congregación de Pennsylvania expresó lo siguiente en una carta a la Sociedad: “Escribimos para agradecerles su ayuda amorosa en la construcción de nuestro nuevo Salón del Reino. El edificio está completamente terminado y dedicado a Jehová, y la congregación está sumamente agradecida de tener un lugar tan bello para la adoración de Jehová. Nuestra congregación siempre ha apoyado gustosamente el Fondo de la Sociedad para Salones del Reino y los proyectos locales de construcción, y lo seguirá haciendo, pues nos damos cuenta de que otras congregaciones necesitan de esta generosa e importante provisión”.
34 Una congregación de California expresó su agradecimiento por la ayuda amorosa que se le ofreció, escribió: “Queremos expresarles nuestro profundo agradecimiento por la ayuda del Fondo de la Sociedad para Salones del Reino. Sin este hubiera sido mucho más difícil construir nuestro salón y hubiera tomado más tiempo. Se hace patente la sabiduría de Jehová en este asunto”.
35 Cierta congregación de Wisconsin escribió: “Ha pasado poco más de un año desde que dedicamos a Jehová nuestro Salón del Reino, y deseamos expresarles nuestro agradecimiento por la ayuda que nos proveyó el Fondo [de la Sociedad] para Salones del Reino. Lo que parecía imposible hace dos años se ha convertido en realidad, y todo gracias a la generosidad de nuestros hermanos y hermanas”.
36 Desde Oregón se recibieron estas palabras de agradecimiento: “Qué bueno ha sido ver la mano de Jehová actuando en nuestro caso. Hemos experimentado el amor y la unidad de hermanos que trabajaron juntos para dar un gran testimonio acerca del nombre de Jehová en nuestra comunidad. Muchísimas gracias por animarnos a compartir nuestras cosas valiosas para una causa tan noble como lo es el Fondo de la Sociedad para Salones del Reino”.
37 El trabajo que queda por hacer: Sí, todos tenemos motivo para regocijo a medida que suministramos lo que se necesita en el tiempo de la siega. Debemos tener un espíritu cooperativo al trabajar juntos y apoyar plenamente esta actividad tan necesaria. (Sal. 133:1.) ¡Cuánto nos alegra tener hombres nombrados por la organización de Jehová para que lleven la delantera tanto en asuntos espirituales como también en la construcción de las instalaciones necesarias! Pablo hizo un llamado a los filipenses al decir: “Hagan pleno mi gozo por ser ustedes de la misma mente y tener el mismo amor”. (Fili. 2:2.) De seguro, tenemos toda razón para regocijarnos, pues se nos han encomendado las buenas nuevas del Reino establecido para ‘que se prediquen en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones’ antes de que venga el fin. (Mat. 24:14.) El que nos pongamos firmemente de parte de ese Reino y trabajemos con lealtad a favor de los intereses de este hace que se regocije el corazón de Jehová. “Sé sabio, hijo mío, y regocija mi corazón, para que pueda responder al que me está desafiando con escarnio.” (Pro. 27:11.) ¡Qué privilegio tan sobresaliente tenemos de poder trabajar y colaborar con Jesús en la obra de Jehová!