Donde más proclamadores de las buenas nuevas se necesitan especialmente
“Pasa a Macedonia y ayúdanos.”—Hech. 16:9.
1, 2. ¿Cuál fue la experiencia de Pablo cuando visitó por primera vez a Éfeso, y qué reconoció y prometió?
PARA los que reconocen la responsabilidad cristiana de proclamar las buenas nuevas del reino de Dios, es una experiencia conmovedora hallar personas que les supliquen que se queden y les enseñen la verdad. Pablo, un apóstol de Jesucristo, tuvo esta experiencia cuando visitó por primera vez la ciudad de Éfeso en Asia Menor. Fue a mediados del primer siglo de nuestra era común. Se detuvo brevemente allí cuando regresaba a Antioquía, Siria, durante su segunda gira misional. Cuando las personas que estaban en una sinagoga lo oyeron proclamar las buenas nuevas, lo instaron a quedarse para poder escuchar más.
2 Pablo reconoció que había mucha necesidad de predicadores de las buenas nuevas en Éfeso. No podía quedarse y ayudarlos en aquella ocasión, pero prometió volver, diciendo: “Volveré otra vez a ustedes, si Jehová quiere.” (Hech. 18:21) Esto lo hizo en su tercera gira misional, quedándose allí durante tres años fructíferos. Formó en Éfeso una congregación que el resucitado Jesucristo mencionó específicamente más de cuarenta años después. Jesús inspiró al apóstol Juan para que diera encomio a la congregación de Éfeso por su aguante y labor pero también para que la reprendiera por haber “dejado el amor que tenías al principio.”—Rev. 2:2-4.
3. ¿Cómo manifestó Pablo la actitud correcta cuando habló con los efesios en su tercera gira misional?
3 Al concluir su tercera gira misional, Pablo se detuvo en Mileto, un pueblo pequeño un poco al sur de Éfeso, y mandó llamar a los hombres de mayor edad de la congregación de Éfeso. Cuando éstos llegaron habló con ellos y les recordó como él se había gastado para que ellos pudieran aprender las buenas nuevas. Desde el instante en que había puesto pie en la provincia romana de Asia, que era una zona que abarcaba la parte occidental de la península del Asia Menor y que tenía a Éfeso como capital, siguió predicando las buenas nuevas a pesar de la persecución. Esta actitud excelente es lo que necesitan hoy las personas que van a lugares donde hacen mucha falta los proclamadores de las buenas nuevas.
4. ¿Cómo respondió Pablo a la súplica de ir a Macedonia y ayudar a la gente que estaba allá?
4 En una ocasión anterior Pablo manifestó su disposición de servir donde se necesitaban más predicadores. Esto fue en su segunda gira misional. Estaba en el pueblo de Troas en el extremo noroeste de la península de Asia Menor. Allí recibió una visión en que un hombre de Macedonia le suplicaba que fuera allá y ayudara a la gente de Macedonia. (Hech. 16:9, 10) Reconociendo esto como la dirección de Jehová para que fuera a este territorio donde hacía mucha falta un proclamador, Pablo prontamente abordó una nave y zarpó para Neápolis en Macedonia. De allí fue a la ciudad de Filipos, que estaba en una ruta comercial. Siempre fue su norma establecerse en ciudades que se hallaban en rutas comerciales, evidentemente para que la predicación que efectuaba fuera llevada por los viajantes a otras ciudades. La congregación que él formó en Filipos siempre se mostró especialmente agradecida a él por sus labores y a menudo le enviaba regalos.
5. ¿Qué ejemplo nos pusieron para el día actual Pablo, Aquila y Priscila?
5 Pablo les puso un excelente ejemplo a los siervos dedicados de Jehová del día actual. Puso los intereses del reino de Dios en primer lugar en su vida y estuvo dispuesto a ir a otros lugares donde había gran necesidad de predicadores. Parece que esto también era cierto de Aquila y Priscila. Pablo los conoció en Corinto durante su segunda gira misional, y, cuando se fue, ellos lo acompañaron hasta Éfeso. Allí se quedaron y predicaron. Las personas que hoy son siervos dedicados de Jehová pueden manifestar la misma disposición de servir donde hay más necesidad de predicadores de las buenas nuevas que donde están.
LUGARES DONDE HACEN MUCHA FALTA
6, 7. (a) ¿Cómo puede hacer más fructíferos sus esfuerzos el publicador del Reino? (b) ¿Debe mudarse un cristiano a otro territorio si está obteniendo buenos resultados donde está?
6 Hay muchos lugares en la actualidad donde hay mucha necesidad de más predicadores de las buenas nuevas del Reino, y estos lugares suministran oportunidades excelentes para que los siervos dedicados de Jehová hagan sus esfuerzos en el ministerio tan fructíferos como sea posible en el corto tiempo que le queda al sistema de cosas actual.
7 Por supuesto, si uno de estos cristianos dedicados está obteniendo buenos resultados en el territorio asignado a su congregación, y la gente está respondiendo a las buenas nuevas del Reino asociándose con la organización de Jehová, se le necesita allí mismo. Tiene un campo fértil para el ministerio, y sería mejor que continuara trabajando en él en vez de irse a otro lugar. Pero supongamos que el territorio está trabajándose frecuentemente sin que se obtenga mucho fruto de sus esfuerzos, ¿entonces qué? ¿Debe aflojar el paso o desistir? ¡De ninguna manera! Su aguante con perseverancia le agrada a Jehová Dios.
8. ¿Por qué es aconsejable mudarse, si es posible, cuando un territorio no es productivo?
8 Sin embargo, si se encuentra en una situación que le permita ayudar en otro territorio donde hay más necesidad de predicadores, ¿no sería dar un paso prudente el ir a ese territorio? El pescador que descubre que su barco está en un sitio donde la pesca no da resultados muda su barco a pesqueras donde sea más prometedora la posibilidad de una pesca. Está interesado en pescar tantos peces como pueda antes que termine el día. Como pescadores espirituales los testigos de Jehová quieren trabajar hoy donde sus esfuerzos sean más productivos.
9, 10. Si una persona puede mudarse a otro país, ¿cuáles son algunos de los países donde hacen mucha falta proclamadores que ella pudiera considerar?
9 Posiblemente una familia pueda arreglar sus asuntos para ir a otro país donde hacen falta predicadores a grado excepcional. En los Estados Unidos la proporción de publicadores por habitantes es de uno por cada 524, pero hay varios países donde la proporción no es tan buena, lo que indica que hay una gran necesidad de más predicadores de las buenas nuevas del reino de Dios. Por ejemplo, en Bolivia la proporción es de un publicador por cada 4.222 habitantes; en El Salvador es de uno por cada 1.951; en Guatemala es de uno por cada 2.298; en Colombia es de uno por cada 3.021; en el Ecuador es de uno por cada 2.095; en el Paraguay es de uno por cada 2.963, y en el Perú es de uno por cada 3.007. Todos estos países están en la América Central y la América del Sur, donde la “pesca” ha resultado muy productiva. Sin embargo, algunos de esos países todavía tienen ciudades enteras en las cuales no hay una congregación del pueblo de Jehová.
10 Ahora supongamos que le echamos un vistazo al África y vemos cuánta falta hacen los predicadores del reino allí. En Burundi la proporción de testigos de Jehová por habitantes es de uno por cada 71.174; en Senegal es de uno por cada 20.339; en Gambia es de uno por cada 35.111; en Costa de Marfil es de uno por cada 9.513; en Kenia es de uno por cada 11.094; en la República de Malí es de uno por cada 700.000; en Níger es de uno por cada 106.296; en Chad es de uno por cada 50.000, y en Uganda es de uno por cada 98.234. Estos países ofrecen una excelente oportunidad de “pesca” a los siervos dedicados de Jehová que pueden mudarse a otro país.
11, 12. Describa lo que están descubriendo los misioneros Testigos en algunos países africanos.
11 Hay tantas personas interesadas en el mensaje en algunos de estos países que allí los Testigos tienen listas de espera de personas que quieren estudiar la Biblia con ellos. En Kenia, por ejemplo, no pierden el tiempo con las personas que no cumplen con sus citas para estudiar. Cuando una persona no está en casa unas cuantas veces cuando se ha de celebrar el estudio, el Testigo descontinúa el estudio y dedica su tiempo a otra persona que muestre tenerle más aprecio. Si después de haberse descontinuado el estudio la persona promete cumplir con sus citas para estudiar y quiere que se reanude el estudio, se le anota al fin de la lista de los que esperan estudios.
12 Una misionera que fue a Dahomey informó que en poco más de seis meses estaba conduciendo quince estudios bíblicos de casa. Escribe: “No hay suficiente tiempo para atender a todos los que quieren estudiar. Están llegando a conocernos bien en el pueblo y la gente simplemente nos detiene y nos pide que estudiemos con ellos.” Son evidencia de las buenas condiciones de “pesca” en estos países los excelentes aumentos que se han realizado en el número de los que se asocian con la organización de Jehová. Éstos también se mantienen activos en la proclamación de las buenas nuevas del Reino.
13. ¿Qué encontró un Testigo en las islas Truk, y qué pregunta afronta usted?
13 Como pudiera esperarse, los que han ido a países donde hay mucha necesidad de predicadores han tenido algunas experiencias estimulantes. Un publicador que visitó algunas de las muchas islas del distrito Truk halló a personas que jamás habían visto una Biblia y que nunca habían oído las buenas nuevas del Reino. Ansiosamente le escucharon. Cuando partió de una isla después de predicarle a la gente por algún tiempo, repetidas veces le preguntaron: “¿Cuándo vuelve?” ¡Qué parecido a lo que sucedió entre la gente de Éfeso de la antigüedad cuando el apóstol Pablo los visitó por primera vez! ¿Puede usted responder a la siguiente súplica que hacen personas de diferentes países: “Pasa . . . y ayúdanos”?
DENTRO DE SU PROPIO PAÍS
14. ¿Cómo puede una persona servir donde se necesitan más proclamadores del Reino dentro de su propio país?
14 Si una familia no puede ir a otro país, quizás pueda mudarse a uno de los territorios aislados dentro de su propio país. Muchos Testigos han hecho esto con buenos resultados. Algunos se han mudado a territorios a gran distancia de su propio pueblo, y otros se han mudado a solo unos cuantos kilómetros más allá a donde se necesita más ayuda. En algunos casos el territorio está aislado de una congregación de testigos de Jehová. Es menester ayudar a los que muestran interés a progresar para que se pueda formar una congregación. En otros casos quizás haya una congregación, pero pequeña y débil. Necesita ayuda y estímulo. En otros casos quizás una congregación necesite acaudillamiento más fuerte, y esto suministra oportunidad para que un ministro maduro de la organización de Jehová se mude con su familia a ese pueblo y ayude a esa congregación.
15. ¿Cómo pueden ayudar los Testigos maduros a una congregación pequeña?
15 Los Testigos maduros que se mudan a donde hay una congregación pequeña que necesita ayuda pueden efectuar mucho bien. Al llevar la delantera celosamente en el ministerio pueden infundir nueva vida a la congregación y ayudar a los Testigos locales a hacerse más productivos “pescadores de hombres.” (Mat. 4:19) Pueden ser un ejemplo estimulante a la congregación local, como lo fueron Pablo y sus compañeros a la congregación de Tesalónica. Escribiendo a los cristianos de esa congregación, Pablo dijo: “Porque sabemos, hermanos amados por Dios, que él los escogió a ustedes, porque las buenas nuevas que predicamos no resultaron estar entre ustedes con habla solamente, sino también con poder y con espíritu santo y fuerte convicción, así como saben ustedes qué clase de hombres llegamos a ser para con ustedes por causa de ustedes; y ustedes llegaron a ser imitadores de nosotros y del Señor.”—1 Tes. 1:4-6.
16. ¿De qué gozo especial disfrutó el apóstol Pablo, y cómo pueden participar hoy los Testigos de ese gozo dentro de sus propios países?
16 El apóstol Pablo tuvo mucho gozo al iniciar la predicación de las buenas nuevas del Reino en nuevos territorios. En su carta a los cristianos romanos, los que vivían en Roma, reveló este gozo al decir: “De este modo, en realidad, hice mi meta el no declarar las buenas nuevas donde Cristo ya había sido nombrado, para no estar edificando sobre fundamento ajeno; mas, así como está escrito: ‘Aquellos a quienes no se les ha hecho anuncio acerca de él verán, y los que no han oído entenderán.’” (Rom. 15:20, 21) Hoy pueden disfrutar de este mismo gozo los Testigos que están dispuestos a mudarse a un territorio aislado donde no hay congregación establecida.
17. ¿Qué clase de personas tienen que ser las que proyectan mudarse a donde hay una necesidad especialmente grande de predicadores?
17 Los que se mudan a donde hay más necesidad de predicadores forzosamente tienen que ser personas que aprecien intensamente la verdad de la Palabra de Dios y que manifiesten este aprecio por actividad celosa en el ministerio. Tienen que ser personas firmes en la verdad y que puedan “hacer una defensa ante todo el que les exija razón de la esperanza que hay en [ellas].” (1 Ped. 3:15) Tienen que ser personas que estén dispuestas a aguantar incomodidades, penalidades y hasta persecución a fin de llevar a cabo el ministerio. Esta fue la actitud que tuvo el apóstol Pablo. Él dijo: “Bien saben ustedes cómo desde el primer día que puse pie en el distrito de Asia estuve con ustedes todo el tiempo, sirviendo como esclavo al Señor con la mayor humildad de mente y con lágrimas y con las pruebas que me sobrevinieron.”—Hech. 20:18, 19.
LOS QUE NO PUEDEN MUDARSE
18, 19. ¿Cómo pueden hacerse arreglos para que los que no puedan mudarse puedan servir donde hay gran necesidad de predicadores?
18 Pero, ¿qué hay de los que no pueden mudarse? ¿Cómo pueden servir donde se necesitan más predicadores del reino de Dios? Es posible que dentro de su circuito de unas veinte congregaciones haya territorio en que vivan muchas personas que están interesadas en las buenas nuevas, pero quizás la congregación local tenga demasiado territorio y no pueda atender a estos interesados. Se pueden hacer arreglos con esa congregación para que Testigos de otra congregación vengan y ayuden a los interesados a progresar. ¿Por qué deberían dedicar su tiempo a territorio no fructífero cuando hay mejor “pesca” en territorio asignado a otra congregación pero que es demasiado grande para que pueda atenderlo esa congregación?
19 Los Testigos de otras partes del circuito que puedan viajar a un territorio de esta clase podrían ser asignados a trabajar allí para ayudar a los interesados de aquel lugar a progresar. Al hallar personas interesadas querrán iniciar estudios y conducir esos estudios con regularidad. Esto, por supuesto, exigirá que ellos gasten tiempo y dinero. Si pueden sufragar este gasto podrán servir donde se necesitan más proclamadores del Reino sin tener que mudarse de sus hogares.
AFRONTANDO PROBLEMAS
20-22. Describa los problemas que quizás se encuentren en relación con el alojamiento y el empleo y la manera en que se pueden vencer.
20 Como pudiera esperarse, es seguro que todo el que va a un territorio que está lejos de su hogar o que se muda a otra ciudad o país va a enfrentarse a problemas. Para los que se muden quizás signifique el tener que contentarse con alojamiento que es inferior al considerar su acostumbrada norma de vida. Esto requerirá un ajuste en su modo de pensar a fin de continuar predicando en ese territorio. Les sería difícil quedarse si continuaran pensando en lo que habrían dejado.
21 El hallar empleo puede ser otro problema, pero ¿podemos decir que es imposible resolverlo? En algunos casos los Testigos locales han podido ayudar a una familia a hallar trabajo. En otros casos ha sido necesario aceptar trabajo que difiere de aquel al cual la persona había estado acostumbrada a efectuar. Quizás hasta tenga que aceptar trabajo que no sea tan bien remunerado, pero quizás sea necesario hacerlo a fin de permanecer donde hay mayor necesidad de predicadores. Aquí de nuevo es importante desarrollar la actitud mental correcta. Pablo señaló el punto de vista que debe adoptarse cuando dijo: “Teniendo, pues, sustento y con qué cubrirnos, estaremos contentos con estas cosas.”—1 Tim. 6:8.
22 De modo que la familia que se mude hará cuanto pueda para vivir con ingresos que posiblemente sean inferiores y alojamiento que tal vez sea menos deseable a fin de quedarse donde se necesitan más proclamadores del Reino. Esto sería poner los intereses del reino de Dios por delante de los intereses materiales, como recomendó Jesús.—Mat. 6:33.
23. ¿Qué actitud debe adoptar una persona en cuanto a dejar a buenos amigos para servir donde se necesitan más proclamadores de las buenas nuevas?
23 La dificultad de dejar a buenos amigos quizás sea otro problema. El mudarse no significa terminar con sus amistades, sino más bien la oportunidad de ensanchar las amistades. Una familia halla nuevos amigos para añadirlos a los que ya tiene. Recuerde la promesa de Jesús de que los que dejan parientes a fin de proclamar las buenas nuevas del Reino en otro lugar recibirán un céntuplo de parientes y casas. Los nuevos amigos que también son siervos dedicados de Jehová Dios llegarán a ser tan allegados como los parientes carnales. Por ser hospitalarios mantendrán abiertos sus hogares a estos proclamadores. Los graduados de la Escuela Bíblica de Galaad de la Watchtower que han ido como misioneros a otros países han tenido prueba de que es veraz la declaración de Jesús.—Mar. 10:29, 30.
24. ¿Qué ayuda a hacer insignificantes los problemas de servir donde se necesitan proclamadores del Reino?
24 Prescindiendo de cuáles sean los problemas al tratar de servir donde hay mayor necesidad de proclamadores del Reino, el gozo de poder ayudar a las personas a venir a un conocimiento de las verdades de la Palabra de Dios los hace desvanecerse hasta ser una insignificancia. Hace que valgan la pena el esfuerzo y el aguante. Hay una satisfacción interior de saber que uno está ayudando a otros y, ante todo, está haciendo lo que es grato a la vista de Dios. Testigos maduros conocen la satisfacción que sienten cuando sus esfuerzos en el ministerio llevan buen fruto. Piense en lo mayor que puede ser ese gozo cuando el fruto es abundante debido a trabajar en territorio donde hay gran necesidad de publicadores. Ciertamente hay felicidad en dar uno altruistamente su tiempo y energía para ayudar a la gente a aprender acerca de Jehová, su Hijo y sus maravillosos propósitos para la humanidad.
CONSIDERE EL COSTO
25. Antes de mudarse, ¿qué es preciso que haga la familia?
25 Los que son siervos dedicados de Jehová deben analizar su situación y considerar seriamente el ir a donde se necesitan más predicadores. Si una familia cree que puede mudarse a otro país o a otro sitio dentro de su propio país, forzosamente tiene que considerar el costo y decidir si puede hacer frente a éste o no. Jesús explicó por qué es tan necesario hacer esto cuando dijo: “¿Quién de ustedes que quiere edificar una torre no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo suficiente para completarla? De otro modo, pudiera poner el fundamento pero no poder terminarla.”—Luc. 14:28, 29.
26, 27. ¿Por qué no es sino sensato trabajar donde nuestros esfuerzos produzcan el mayor fruto, y cómo puso Pablo un ejemplo en cuanto a esto?
26 Puesto que el tiempo que le queda a este viejo sistema de cosas es muy corto, no es sino sensato trabajar donde nuestros esfuerzos produzcan el mayor fruto. Si podemos mudarnos, no es razonable continuar luchando con territorio no productivo cuando la “pesca” es mejor en otro territorio donde se necesitan predicadores. Pero cuando una familia se muda debe poder quedarse en el lugar adonde va. De modo que el planear y el considerar el costo con anticipación son esenciales.
27 El apóstol Pablo vio la sabiduría de mudarse a territorio más productivo cuando se encontraba en un sitio donde la “pesca” no era buena. Fue por esta razón que no permaneció más tiempo en Atenas. Era un territorio relativamente infructífero. De modo que se mudó a Corinto, donde permaneció año y medio durante su segunda gira misional. Eso era lo que el Señor quería que hiciera. En una visión le dijo a Pablo: “No temas, sino sigue hablando y no calles, porque yo estoy contigo y nadie te asaltará para hacerte daño; porque tengo mucho pueblo en esta ciudad.” (Hech. 18:9, 10) Así fue.
28, 29. ¿Qué procedimiento se debe seguir si una familia decide que puede mudarse a un sitio donde puede ser más productiva?
28 Si una familia, después de considerar el costo, decide que de una manera u otra puede servir donde hay mayor necesidad de predicadores de las buenas nuevas, ¿qué debe hacer? Todos los de la familia deben presentar en oración el asunto a Jehová, pidiendo su guía y ayuda para tomar la decisión correcta. Entonces pueden proceder a efectuar todos los preparativos preliminares necesarios para asegurar el que puedan permanecer en el nuevo territorio una vez que lleguen. Si es posible, debe efectuarse de antemano un reconocimiento del nuevo territorio, especialmente si en los arreglos está envuelto el mudarse. Es necesario hallar alojamiento así como empleo.
29 Supongamos que la familia decida ir a otro país, ¿entonces qué? Puede escribir a la oficina de sucursal de la Sociedad Watch Tower en el país adonde quiera ir, pidiendo cualquier información que se necesite. Por otra parte, si la mudanza que se proyecta se va a efectuar dentro del país donde vive la familia, puede escribir a las oficinas de la Sociedad en ese país. La Sociedad tendrá gusto en informar a la familia en cuanto a lugares donde más proclamadores de las buenas nuevas se necesitan especialmente.
30. ¿Cuál es la mejor manera de seguir el ejemplo de Jesucristo y Pablo? ¿Por qué?
30 Sería muy excelente el que la familia pudiera dedicar la mayor parte de su tiempo al ministerio como precursores. Se efectuaría mucho más, y podrían atender mejor a las personas interesadas en la verdad que encontraran. Esta es la mejor manera de seguir el ejemplo que pusieron Jesús y el apóstol Pablo, que dedicaron la mayor parte de su tiempo al ministerio.
31. ¿De qué es evidencia el gran aumento de la organización de Jehová, y cómo ha demostrado la gente que ingresa en esa organización su gratitud porque alguien le haya predicado las buenas nuevas?
31 El tremendo aumento de la organización de Jehová tan solo desde el fin de la II Guerra Mundial es buena evidencia de lo fructífera que ha sido la proclamación de las buenas nuevas del Reino. También es buena indicación de que el método que se utiliza es el mejor. En 1945 hubo 141.606 Testigos que proclamaban las buenas nuevas en 68 países. Para 1970, veinticinco años después, la organización había aumentado a más de diez veces ese tamaño, a 1.483.430 proclamadores activos en 206 países. Para estas muchas personas que oyeron las buenas nuevas y respondieron a ellas los pies de aquellos que se las trajeron fueron “hermosos,” como predijo el profeta Isaías. (Isa. 52:7) Están agradecidos de que en estos tiempos modernos haya gente que esté dispuesta a proclamar las buenas nuevas del Reino aun en lugares lejanos. Están demostrando su gratitud por medio de proclamar también las buenas nuevas para provecho de otros más. Al hacer esto proceden de la manera que recomienda la organización de Jehová.
32. ¿Cómo estamos viendo ahora el cumplimiento de Isaías 60:22?
32 Aquí estamos viendo el cumplimiento de la profecía de Isaías 60:22: “El pequeño mismo llegará a ser mil, y el chico una nación poderosa. Yo mismo, Jehová, lo aceleraré a su propio tiempo.” Dado que el paso con que responden a la proclamación de las buenas nuevas del Reino está aumentando rápidamente, se hace muy patente que éste es el tiempo en que Jehová está acelerando el crecimiento de su organización terrestre.
33. ¿Por qué es necesario que los testigos de Jehová examinen seriamente de qué manera pueden aumentar su productividad como proclamadores de las buenas nuevas del Reino?
33 El recogimiento es grande, los trabajadores pocos y el tiempo que queda para efectuar la obra ha quedado muy reducido. Si usted está dedicado a Jehová como uno de sus testigos, examine seriamente de qué manera puede aumentar sus esfuerzos en el gran recogimiento de las personas que desean el favor de Jehová y los beneficios de su reino. Considere seriamente de qué manera puede aumentar su productividad en el ministerio cristiano trabajando donde más proclamadores de las buenas nuevas del reino de Dios se necesitan especialmente. ¿Pudiera ser eso donde usted vive actualmente?