La actividad del espíritu derramado desde lo alto
1. Antes de que terminara la I Guerra Mundial en 1918, la heredad espiritual del resto del Israel espiritual había sido abatida a ¿qué condición?
ANTES de que terminara la I Guerra Mundial el 11 de noviembre de 1918, la heredad espiritual del resto perseguido de los israelitas espirituales experimentó desolación. Espiritualmente, llegó a asemejarse a un desierto, en el cual los ‘frutos del reino’ no se estaban produciendo públicamente por la predicación denodada de “estas buenas nuevas del reino” por el resto ungido. (Mat. 21:43; 24:14) La incertidumbre y el abatimiento se posaron sobre el resto de embajadores del Reino bajo odio y opresión internacionales.
2. ¿Qué indicaba si el estado de desolación del resto habría de continuar indefinidamente o no, y qué se necesitaba para alterar la situación?
2 ¿Aprobó Jehová Dios que su pueblo dedicado continuara en este estado de desolación para siempre? ¡No! En tiempos de antes del cristianismo decretó que Jerusalén y la tierra de Judá yacieran desoladas por un tiempo limitado, por no más de setenta años. El Imperio Babilónico no habría de gloriarse para siempre en sus víctimas, Jerusalén y Judá. De modo que Dios tampoco se proponía que las víctimas de Babilonia la Grande, a saber, el resto del Israel espiritual, quedaran en condición de desolación indefinidamente. Pues bien, ¿qué se necesitaba entonces para cambiar la situación para la gloria del Dios de ellos, Jehová? ¡Se necesitaba un funcionamiento especial de espíritu santo para con ellos!
3. Según Isaías 32:15, 16, la condición de desolación del pueblo de Jehová continuaría hasta que aconteciera ¿qué?
3 En Isaías 32:15 Jehová le aseguró a su pueblo que la triste condición de desolación en que se hallaban solo duraría “hasta que sobre nosotros sea derramado el espíritu desde lo alto.” Después de eso, ¿qué? “Y,” como sigue diciendo la profecía, “el desierto se haya convertido en huerto, y el huerto mismo sea considerado como verdadero bosque. Y en el desierto ciertamente residirá el derecho, y en el huerto morará la justicia misma.”—Isa. 32:15, 16.
4, 5. (a) Por eso, ¿qué habría de tener lugar sobre el resto de israelitas espirituales? (b) ¿Cómo se le confirmaba esto al resto en la visión que se le dio a Ezequiel en la cual se mostraba un valle lleno de huesos de muertos?
4 ¡Ah, sí! para el resto de los israelitas espirituales habría de haber un derramamiento de espíritu, acompañado de ser liberados de Babilonia la Grande. Se les confirmaba esta expectativa brillante por la visión que Jehová le dio a su profeta Ezequiel, mientras este profeta todavía estaba desterrado en la Babilonia antigua. En la visión Ezequiel vio una llanura de valle que estaba llena de los huesos desunidos de innumerables israelitas muertos.
5 La situación de aquellos israelitas muertos de la visión parecía irremediable. Igual de irremediable parecía la situación para los israelitas vivos en el exilio en la antigua Babilonia a centenares de kilómetros de su desolada tierra natal. Pero no era irremediable desde el punto de vista del Dios Todopoderoso. Él es un Dios que puede resucitar hasta a los muertos. Siglos antes había usado a sus profetas Elías y Eliseo para resucitar literalmente a personas muertas, por medio de espíritu santo. Así es que, en la visión que le dio a Ezequiel, realmente recreó y reanimó a todos aquellos israelitas muertos. Al explicar el significado de la visión, Jehová dijo: “Tendrán que saber que yo soy Jehová cuando abra sus sepulturas y cuando los haga subir de sus sepulturas [en Babilonia], oh pueblo mío. Y ciertamente pondré mi espíritu en ustedes, y tendrán que llegar a vivir, y ciertamente los estableceré sobre su suelo; y tendrán que saber que yo mismo, Jehová, he hablado y lo he hecho.”—Eze. 37:13, 14.
6. ¿De qué manera aconteció una resurrección espiritual, y qué dijeron, asombradas por lo que vieron, las naciones que observaban?
6 En cumplimiento fiel de esta profecía, Babilonia cesó de ser la sepultura de la nación judía. Aconteció una resurrección espiritual. Como por un milagro, en 537 a. de la E.C. un grupo de israelitas desterrados y sus servidores se marcharon de Babilonia y se establecieron en su tierra natal. Se aplicaron con vigor a reconstruir a Jerusalén y su templo y a hacer que su tierra por tanto tiempo desolada llegara a ser como un paraíso. Ya no había razón alguna para que se golpearan el pecho en “lamentación por los campos deseables, por la vid fructífera,” que los conquistadores babilonios habían dejado a la desolación en 607 a. de la E.C. ¡Qué manifestación hubo entonces de espíritu santo en acción! ¡Las naciones paganas que observaban se asombraron! Salmo 126:2 informa que dijeron: “Jehová ha hecho una cosa grande en lo que ha hecho con ellos.”
7. En nuestro siglo veinte las palabras de Salmo 126:2 se dijeron en cuanto a ¿quiénes? ¿y por qué?
7 Se ha dicho eso mismo en nuestro propio siglo veinte. ¿Respecto a quiénes? No respecto a los judíos naturales que se radicaron en Palestina después de la I Guerra Mundial y que más tarde pelearon con “una fuerza militar” para establecer la República de Israel en 1948. No, sino que las palabras proféticas de Salmo 126:2 se dijeron respecto a los Estudiantes de la Biblia a quienes se odiaba y perseguía internacionalmente, los cuales fueron librados en el año posbélico de 1919 del cautiverio en que los tenía Babilonia la Grande. Sobre estos cristianos restaurados, que eran israelitas espirituales, descendió desde lo alto un derramamiento de espíritu. Esto hizo que los Estudiantes de la Biblia recordaran el Pentecostés de 33 E.C., aunque no estuvo acompañado de “lenguas como de fuego” que se hicieran visibles y que se asentaran sobre la cabeza de los discípulos e hicieran que hablaran milagrosamente lenguajes extranjeros diferentes, que no hubieran aprendido.—Hech. 2:1-4; Joel 2:28, 29; Isa. 32:15.
8. ¿Para qué obra posbélica se había preservado al resto del Israel espiritual, y por qué podían abrazar legítimamente el nombre de “testigos de Jehová”?
8 Como resultado de esto, estos cristianos espiritualmente cargados de energía estuvieron más animados que nunca en el servicio activo de Jehová. ¡Testificar, testificar, testificar del reino establecido de Dios... por todo el mundo! llegó a ser su grito entusiástico. Ese era ahora su propósito principal en la vida. Según la Biblia, ésa fue la razón por la cual Dios los conservó vivos a través de la I Guerra Mundial y los liberó del cautiverio a Babilonia la Grande. (Mat. 24:9-14) De modo que volvieron a juntar sus miembros que habían sido esparcidos y se reorganizaron para llevar a cabo la testificación del Reino en todo el mundo hasta el mismo fin. Llegó el año de 1931. Por medio de centenares de millones de tratados gratuitos, por decenas de millones de libros encuadernados, por una campaña mundial de conferencias bíblicas, por centenares de radiodifusoras, habían dado para entonces un testimonio mundial acerca del nombre de Jehová y su reino mesiánico. Todo esto lo hicieron libres del “espíritu de cobardía.” (2 Tim. 1:7) De modo que ahora, con las palabras de Isaías 43:10 resonando en sus oídos, aquellos campeones ungidos de Jehová y de Su reino por Cristo adoptaron el nombre de “testigos de Jehová,” que tiene apoyo en la Biblia.
9, 10. (a) ¿Quiénes no han podido quitar de la Tierra ese nombre? (b) ¿Quiénes además del resto del Israel espiritual tienen la resolución de que el nombre permanezca vivo, y por eso, qué han hecho?
9 Hasta el día de hoy todas las fuerzas religiosas de Babilonia la Grande y sus secuaces políticos, judiciales y militares han tratado de quitar de la Tierra ese nombre que está sobre los proclamadores del Reino, pero no han podido. ¡Sigue viviendo! ¡Y también sus portadores!
10 Por toda la Tierra hay una “grande muchedumbre” de personas temerosas de Dios cuya resolución es que ese nombre permanezca vivo y significativo, aunque ellas mismas no son israelitas espirituales. Han observado lo que el Dios que se llama Jehová ha hecho para el pueblo que lleva su nombre, el resto del Israel espiritual. Han detectado sobre qué personas ha sido derramado el espíritu de Dios desde lo alto. Por eso los que componen la “grande muchedumbre” hoy día son los de “entre las naciones” que están diciendo: “Jehová ha hecho una cosa grande en lo que ha hecho con ellos.” (Sal. 126:2) El Dios que pudo hacer cosa semejante con un resto tan pequeño de israelitas espirituales es el Dios a quien la “grande muchedumbre” quiere adorar y servir. Sin temer el odio y la persecución internacionales, se han dedicado al mismo Dios por medio de Cristo y se han alineado con el resto ungido de los testigos cristianos de Jehová. También han asumido la responsabilidad de ser Testigos de Él, sin avergonzarse.—Rev. 7:9-17; Zac. 8:23.
DEFENSA CONTRA “EXPRESIONES INSPIRADAS POR DEMONIOS”
11. ¿Acerca de qué están croando el dragón, la bestia salvaje y el falso profeta, pero, no obstante, qué están haciendo que se oiga el resto y la “grande muchedumbre”?
11 Hoy el resto ungido y la “grande muchedumbre” se enfrentan unidamente al “dragón” diabólico, a la “bestia salvaje” que cuenta con energía nuclear y al “falso profeta” político. En Revelación 12:17 se dice claramente que el “dragón,” Satanás el Diablo, ha salido para guerrear contra el resto ungido. Al hacer esto el dragón usa a su “bestia salvaje” política y al “falso profeta” angloamericano aquí en la Tierra. De modo que continúan las expresiones semejantes a ranas y de inspiración demoníaca que salen de sus bocas, acerca de la adoración del Estado, acerca de la soberanía nacional, acerca del materialismo, acerca de la paz y seguridad mundial por medio de la Organización de las Naciones Unidas. No obstante, los testigos de Jehová han hecho que las buenas nuevas del reino mesiánico de Dios se oigan por todo el mundo. Este mensaje del Reino ha penetrado en más de doscientos países e islas del mar. Es obvio que el dragón que croa, la bestia salvaje y el falso profeta quisieran ahogar el sonido del mensaje del Reino. Babilonia la Grande, especialmente la cristiandad, quisiera hacer esto, puesto que la cristiandad alega que solamente ella habla por Dios.
12. Por lo tanto la situación hoy día es semejante a ¿qué situación del rey Acab y sus falsos profetas y Micaya el profeta de Jehová?
12 La situación es parecida a la de Micaya el profeta de Jehová y los falsos profetas de Acab, el rey de Israel, para el año 920 a. de la E.C. Los falsos profetas le habían pronosticado una victoria militar al rey Acab. Pero Micaya le pronosticó calamidad. Explicó que, por permiso de Jehová, el rey Acab estaba siendo engañado para su propia ruina por una engañosa declaración inspirada en la boca de sus falsos profetas. Un profeta falso que se llamaba Sedequías se opuso a aquello. Para citar de 1 Reyes 22:24, él “ahora se acercó y le dio un golpe a Micaya en la mejilla y dijo: ‘¿Precisamente por qué camino pasó el espíritu de Jehová desde mí para hablar contigo?’” Sin embargo Jehová realmente había hablado por medio de Micaya, porque el rey Acab no volvió vivo de la guerra.—1 Rey. 22:20-38.
13. ¿De qué manera resultó ser el resto ungido del Israel espiritual como el profeta Micaya?
13 Ese incidente tiene un paralelo moderno, especialmente desde el año 1919, cuando los aliados militares victoriosos de la I Guerra Mundial adoptaron la proposición de establecer una Liga o Sociedad de Naciones para salvaguardar la paz y seguridad mundial. Los del resto ungido de israelitas espirituales han sido como el profeta Micaya. Espíritu santo había sido derramado sobre ellos desde lo alto, y, como se profetizó, el efecto en ellos fue que profetizaron, declarando las profecías de la Biblia inspirada de Jehová. (Joel 2:28, 29) Con denuedo predijeron por lo que las profecías bíblicas indicaban que la Liga de las Naciones fracasaría. También, declararon un mensaje de advertencia contra los reyes o gobernantes políticos de la cristiandad, que corresponden con el rey Acab del Israel apóstata.
14. ¿Debido a qué mensaje concerniente a los gobernantes de la cristiandad se ha sentido agraviado el clero, y cómo han obrado como la reina Jezabel?
14 El resto declaró que en la venidera “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón aquellos gobernantes que afirmaban ser “cristianos” serían derrotados y destruidos cuando Dios ejecutara juicio contra ellos. Esto sucederá a pesar del hecho de que el clero de la cristiandad, lo mismo que Sedequías y su grupo de falsos profetas, ha bendecido los gobiernos y las fuerzas militares de los gobernantes de la cristiandad. El clero alega que tiene el derecho exclusivo de hablar por Dios y de tener Su espíritu. Por eso se sienten agraviados por el mensaje calamitoso que el resto ungido ha proclamado respecto a los gobernantes y ejércitos políticos por los cuales ellos, el clero, han pedido en oración la bendición divina. Han tratado de suprimir la predicación que el resto ungido efectúa, como si ésta no estuviera autorizada por Dios y no se efectuara por medio del espíritu de Jehová. Han suscitado violenta persecución contra el resto ungido, así como la esposa de Acab, la reina Jezabel, persiguió a Elías y a otros cien profetas de Jehová.—1 Rey. 18:13.
15. ¿Cuándo se le aclarará al clero de la cristiandad si alguna vez tuvieron espíritu de Dios o no, y por qué no verán que los gobernantes de la cristiandad ganen la victoria?
15 De esta manera, el clero de la cristiandad en realidad le ha dado un golpe en la cara al resto ungido y ha dicho: “¿Precisamente por qué camino pasó el espíritu de Jehová desde mí para hablar contigo?” (1 Rey. 22:24) Ya dentro de poco se le hará ver claramente al clero si es que alguna vez ha tenido el espíritu de Jehová. Nunca verán que los gobernantes y ejércitos de la cristiandad consigan la victoria. En realidad, tampoco vivirán para ver la destrucción de sus amigos políticos y militares en la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso.” ¿Por qué no? Porque antes de que siquiera empiece esa guerra en Har-Magedón, esos elementos políticos que todavía son amigables, que hoy participan activamente en la Organización de las Naciones Unidas, cambiarán de actitud a una de odio al clero de la cristiandad y a los otros líderes religiosos de Babilonia la Grande y los aniquilarán.—Rev. 16:14, 16; 17:3-18.
16. Sin embargo, el resto que se asemeja a Micaya, ¿qué verá?
16 ¿Qué hay, sin embargo, del resto ungido, sobre quienes Jehová ha derramado su espíritu desde lo alto? Han sobrevivido después del golpe que les infligió en la mejilla el clero de la cristiandad. Verán que se realizará el mensaje sacado de la Biblia que les fue impartido por el espíritu de Dios. Sí, ciertamente verán la destrucción de los gobernantes del mundo que fueron llevados a Har-Magedón por la propaganda semejante a ranas arrojada por el dragón, la bestia salvaje y el falso profeta.
“EL ESPÍRITU DE GLORIA, SÍ, EL ESPÍRITU DE DIOS”
17. ¿Por qué, en esta “conclusión del sistema de cosas,” el vituperio y la persecución que les sobrevienen al resto y la “grande muchedumbre” no significan que no tengan el espíritu de Dios?
17 Se ha amontonado violenta persecución sobre el resto ungido y sobre sus compañeros testigos, la “grande muchedumbre” de las “otras ovejas” de Cristo del día actual. (Juan 10:16) ¿Demuestra esto que ninguno de estos testigos cristianos de Jehová tenga Su espíritu? ¡No! De hecho, suministra evidencia de lo contrario, porque Cristo predijo que esto sucedería en esta “conclusión del sistema de cosas.” Todas las naciones odiarían a sus discípulos verdaderos y los perseguirían por dar testimonio de su reino mesiánico. (Mat. 24:3, 9-14) El odio, el oprobio y la persecución que recibimos por adherirnos firmemente al nombre de Cristo como el actual Rey reinante no son verdadera razón por la cual avergonzarnos como si estuviéramos haciendo algo incorrecto.
18. Según 1 Pedro 4:14, ¿por qué son verdaderamente felices los que son vituperados por el nombre de Cristo?
18 Un mártir cristiano del primer siglo, el apóstol Pedro, escribió: “Si a ustedes los están vituperando por el nombre de Cristo, son felices, porque el espíritu de gloria, sí, el espíritu de Dios, descansa sobre ustedes.” (1 Ped. 4:14) O, según lo expresa El Nuevo Testamento (Versión Popular): “Si les insultan por causa de Cristo, felices ustedes; porque el glorioso Espíritu de Dios descansa sobre ustedes.”
19. ¿Con qué objeto en mira nos vitupera la gente por el nombre de Cristo, pero qué clase de espíritu es el que nos da Dios?
19 Las personas que nos vituperan porque obedecemos los mandatos de Dios mediante Cristo quieren que nos avergoncemos a tal grado que abandonemos el servicio de Dios y no sigamos predicando “estas buenas nuevas del reino” como testimonio mundial. Pero el espíritu que Dios pone sobre sus predicadores del Reino no es uno que produzca un sentimiento de vergüenza y de culpabilidad como si fuera porque estuvieran haciendo lo malo. Nos hace sentir honrados, glorificados, y está asociado con la gloria resplandeciente de Dios. Es un espíritu que hace que nos ‘alborocemos mientras estamos en tribulaciones, puesto que sabemos que la tribulación produce aguante; el aguante, a su vez, una condición aprobada; la condición aprobada, a su vez, esperanza, y la esperanza no conduce a la desilusión; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestro corazón por medio del espíritu santo, que nos fue dado.’—Rom. 5:3-5.
20. En armonía con Salmo 69:9, ¿está circunscrito el vituperio que nos viene a ser vituperados por el nombre de Cristo?
20 Nosotros que somos testigos cristianos de Jehová tenemos el privilegio de sufrir vituperio por más que solo “el nombre de Cristo.” Tenemos el privilegio de ser vituperados especialmente por el nombre de Aquel por quien Jesucristo sufrió oprobio. Se nos señala esto en Romanos 15:3, que dice: “Aun el Cristo no se agradó a sí mismo; sino que así como está escrito: ‘Los oprobios de los que te vituperaban han caído sobre mí.’” Esas palabras, citadas del Salmo 69:9, identifican a Jehová como el Vituperado, por cuya casa de adoración Jesús demostró tanto celo.—Juan 2:17.
21. ¿Qué se puede decir acerca de que el espíritu descanse sobre nosotros cuando se nos vitupera por el nombre de Jehová?
21 Es una honra gloriosa el sufrir vituperio por Jesucristo, el Hijo de Dios. Es una honra más magnífica todavía el sufrir vituperio por Jehová Dios, el Padre de Jesucristo, puesto que el Padre es mayor que el Hijo. (Juan 14:28) Puesto que el “espíritu de Dios” descansa sobre nosotros los que sufrimos oprobio por el nombre de Cristo, entonces debe descansar sobre nosotros en cantidad más plena cuando aguantamos oprobio por el nombre de su propio Padre y Dios, Jehová. Si guardamos integridad a Dios hasta que sean destruidos los vituperadores en la venidera “grande tribulación,” nunca se irá de nosotros el “espíritu de gloria” de Dios.—Rev. 7:14-17; 1 Ped. 4:14.
“EL ESPÍRITU Y LA NOVIA”
22. ¿Por qué no hace que vayamos junto con los gobernantes del mundo la propaganda parecida a ranas del “dragón,” la “bestia salvaje” y el “falso profeta,” y contra qué espíritu estamos protegidos?
22 Podemos esperar más oprobio del “dragón” diabólico y la “bestia salvaje” política y el “falso profeta” angloamericano porque no acompañamos a los gobernantes políticos y sus ejércitos en su marcha al campo de batalla de Har-Magedón. Su propaganda parecida a ranas y su hostilidad para con los testigos de Jehová jamás harán que adoremos a alguien o algo como a Dios, ni harán que renunciemos a estar bajo la soberanía universal de Él ni harán que dejemos de buscar primero las cosas preciosas de su reino mesiánico. Tenemos “el espíritu de gloria, sí, el espíritu de Dios,” para contrarrestar todas esas “expresiones inspiradas” demoníacas que están conduciendo a todas las naciones a la “guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” en Har-Magedón. (Rev. 16:13-16; 19:19-21) En cuanto a nosotros, escuchamos y tenemos en cuenta las “expresiones inspiradas” que provienen de la santa Palabra de Dios, la Biblia. Dirigimos el proceder de nuestra vida en armonía con esas expresiones inspiradas. Por eso el espíritu de Jehová, que inspiró a los profetas a escribir la Biblia, es lo que está en acción en nuestra vida. Nos protege contra infectarnos del “espíritu del mundo.”—1 Cor. 2:12.
23. Respetuosamente, ¿la voz de quiénes dejamos que se oiga en todas partes, y para quién se mantienen puros como vírgenes los del resto?
23 Respetuosamente, dejamos que la voz del “espíritu y la novia” se oigan por toda la Tierra. Reconocemos quién es esta “novia.” Es la congregación de discípulos engendrados por espíritu que están comprometidos para casarse con el Novio celestial, Jesucristo. Hoy la representa en la Tierra el resto ungido que en breve se unirá a Cristo en el cielo. A causa de esto el resto de la clase de la “novia” no participa en absoluto en la fornicación religiosa que Babilonia la Grande comete ahora con los gobernantes políticos de la Tierra. En vez de entremeterse en la política y hacerse amigos del mundo, los de la clase de la “novia” se mantienen puros como vírgenes para su Novio celestial, Jesucristo, a quien proclaman en todo lugar como el Rey reinante que está a la diestra de Dios en el cielo.—Rev. 17:5, 18; 21:2-14, 21-24; Sant. 4:4.
24. ¿Qué es el “espíritu” que se menciona en Revelación 22:17?
24 Refiriéndose a nuestro mismísimo día, Revelación 22:17 dice: “Y el espíritu y la novia siguen diciendo: ‘¡Ven!’ Y cualquiera que oye diga: ‘¡Ven!’ Y cualquiera que tenga sed venga; cualquiera que desee tome del agua de vida gratis.” Aquí el “espíritu” que se menciona es la fuerza activa de Jehová que se expresa por medio de las expresiones inspiradas que se encuentran en las profecías de la Biblia. Este espíritu está en acción dentro del resto de la clase de la “novia.”
25. ¿Quiénes han obrado en armonía con la invitación que extienden el “espíritu y la novia,” y a quién han venido por “agua” que apaga la sed?
25 ¿Hay alguien en la Tierra hoy que escuche y responda a la invitación que extienden “el espíritu y la novia”? Sí, en particular desde 1935 E.C., el año durante el cual se le hizo patente al resto de la clase de la “novia” la identidad de la “grande muchedumbre” de Revelación 7:9-17. En respuesta a la invitación divina, miles que tenían sed del “agua de vida” han salido de Babilonia la Grande, que está azotada por sequía. Se han apartado de las “cisternas” mundanas rotas que no pueden contener el “agua” sustentadora de la vida para la humanidad moribunda. Han venido a Jehová Dios, “la fuente de agua viva,” “la fuente de la vida,” por medio de Jesucristo, el Novio celestial.—Jer. 2:13; Sal. 36:9.
26. ¿En hacer qué se han unido los que llegan a ser miembros de la “grande muchedumbre” al resto de la clase de la “novia,” y con qué resultado?
26 Habiéndose refrescado espiritualmente por medio de beber el “agua de vida,” los miembros de la “grande muchedumbre” se unen al resto ungido de la clase de la “novia” en extender la invitación a más personas. Y así la “grande muchedumbre” de bebedores del “agua de vida” va creciendo. Jehová ha puesto su espíritu sobre los miembros de la “grande muchedumbre,” y ellos no se avergüenzan de sufrir oprobio por Su nombre y el de su Cristo. Así, por el resto y la “grande muchedumbre” unidos, sigue dándose extensión a la predicación de las buenas nuevas, y se da a conocer la provisión de Dios para que hombres y mujeres obedientes consigan vida eterna en un hogar paradisíaco aquí en la Tierra bajo el reino mesiánico de Dios. Estas “buenas nuevas” se continuarán predicando en todo el mundo hasta que le venga el fin a este sistema de cosas inicuo que todavía está bajo el control del “dragón,” la “bestia salvaje” y el “falso profeta.”
27. (a) ¿De qué única manera podemos dar razón de la predicación mundial del Reino que se ha efectuado hasta ahora? (b) Teniendo en mira la vida eterna, ¿para qué sembraremos de aquí en adelante?
27 Hasta ahora la predicación de “estas buenas nuevas del reino” en todo el mundo ha sido sencillamente milagrosa. ¿Cómo podemos explicarlo? No hay otra explicación salvo que ha habido espíritu santo en acción y todavía lo hay. Dios lo ha puesto en acción a favor de lo que predijo, a saber, la predicación de las buenas nuevas del reino en toda la Tierra habitada para testimonio a todas las naciones antes de que les venga el fin. Nada que hayan hecho hombres y demonios ha podido contrarrestar Su espíritu. Tomando en cuenta Su regla inflexible de que “cualquier cosa que el hombre esté sembrando, esto también segará,” abstengámonos de seguir sembrando para nuestra carne corrupta y, en cambio, sembremos para el espíritu santo de Dios. Al sembrar de aquí en adelante para éste, al debido tiempo segaremos de ese espíritu divino la vida eterna en el nuevo orden de Dios. (Gál. 6:7, 8) ¡Todas las gracias sean dadas a Jehová Dios por medio de Jesucristo porque, en este tiempo de apremiante necesidad por parte de todos los que aman la justicia y la paz, Su espíritu está poderosamente en acción!