1969 un año de alabanza
Los testigos cristianos de Jehová disfrutaron de su más excelente año en estos últimos días de este inicuo sistema de cosas en el año de servicio de 1969. Acontecieron muchísimas cosas que fueron sobresalientes en comparación con años anteriores, y esto se puede comprender al leer este resumen de la obra que se logró.
Probablemente el modo más rápido de decir que 1969 fue un año de alabanza de parte de los testigos de Jehová es señalar que 120.905 personas dedicaron su vida a hacer la voluntad de Jehová Dios y se bautizaron durante el año de servicio. Esto, pudiéramos decir, es un resultado del hecho de que los testigos de Jehová alabaron a Dios por todo el mundo. Ellos han convencido a muchas personas de que la Biblia es un libro que se tiene que estudiar y de que el proceder sabio es seguir sus enseñanzas. Debido al conocimiento que han obtenido de tal estudio ellos ahora están alabando a Jehová Dios junto con centenares de miles de otras personas que están haciendo lo mismo. Esta es la historia en breve:
El año de servicio de 1968 terminó con un promedio de 1.155.826 publicadores regulares del Reino predicando las buenas nuevas cada mes. Al fin del año de servicio de 1969 el informe mundial mostró que había 1.256.784 publicadores declarando con regularidad las buenas nuevas del reino de Dios cada mes. Esto fue un aumento de más de 100.000 publicadores que participaron en la actividad de casa en casa, revisitas y de estudios bíblicos sobre el número del año anterior. ¡Esto es verdaderamente sobresaliente! En Babilonia la Grande hay personas que están escuchando el mensaje de Dios de huir para que no compartan con ella sus plagas y su destrucción. Han buscado refugio bajo el cuidado de Jehová y en la organización de Jehová.
Este tremendo aumento, por supuesto, hace muy dichosos a los testigos de Jehová, y cuando consideramos el nuevo máximo de publicadores para el año de servicio de 1969 vemos que la cuenta final llegó a 1.336.112. Esto significa que muchas personas han participado en el ministerio del campo en algún tiempo durante los pasados doce meses. Eso significa que 114.608 más publicadores participaron en la obra que en cualquier tiempo antes.
Todo esto es prueba de que más de 100.000 personas emprendieron la predicación, así como dedicaron su vida a hacer la voluntad de Jehová en el futuro. De modo que podemos esperar que 1970 resulte ser otro grandioso año de declarar las buenas nuevas del Reino. De estos 1.336.112 publicadores del Reino, hubo, como promedio, 76.515 precursores participando en el ministerio del campo. Cada mes durante todo el año los que fueron precursores regulares se esforzaron por pasar 100 ó más horas predicando las buenas nuevas. Muchos fueron precursores de vacaciones que pudieron pasar solo un mes o dos en tal servicio, pero nos alegramos mucho de ver su diligencia al querer esparcir las buenas nuevas del Reino. La mayoría de los que sirvieron fueron precursores regulares, y del número total de precursores, 12.612 fueron precursores especiales, lo cual quiere decir que pasaron 150 ó más horas cada mes predicando las buenas nuevas. El número total de precursores especiales de 12.612 también incluye a los misioneros que trabajan en campos extranjeros alrededor del mundo. Y el total de 63.903 otros precursores incluye a los que están en la obra de circuito y distrito por todo el mundo. Hubo 2.252 en la obra de circuito y 292 en la obra de distrito. Estos pasan de 85 a 100 ó más horas en el servicio ministerial del campo cada mes.
La Sociedad Watch Tower Bible and Tract da ayuda financiera a los siervos de circuito y distrito, precursores especiales y misioneros alrededor del mundo. El año pasado la Sociedad gastó 6.265.364,28 dólares ayudando a estos hermanos y hermanas a permanecer en estos campos de servicio de tiempo cabal. Para ayudar a los precursores especiales y misioneros por todo el mundo la Sociedad gastó 5.478.221,51 dólares y el sobrante de 787.142,77 dólares se usó para ayudar a los siervos de circuito y distrito en sus viajes para visitar y animar al pueblo de Dios en las congregaciones. Apreciamos muchísimo la ayuda que los publicadores de congregación dieron a los representantes viajantes de la Sociedad hospedándolos y suministrándoles necesidades en sus hogares en todo caso posible. Por supuesto, los gastos de hospedaje y suministro de alimento de esta manera por publicadores locales no están incluidos en los fondos mencionados arriba.
La Sociedad Watch Tower Bible and Tract agradece mucho a los hermanos de todo el mundo sus contribuciones que hicieron posible alistar muchos más precursores especiales este año y añadir más personas a la obra misional.
Por un momento miremos al testimonio que dieron los publicadores de congregación, los precursores de vacaciones y regulares y especiales así como los misioneros y los que participaron en la obra de circuito y distrito. Consideremos ante todo el número total de horas que todas estas personas dedicaron a predicar las buenas nuevas del Reino. La cifra final llegó a 239.769.076. En el tiempo que se pasó predicando incluimos horas usadas yendo de casa en casa, haciendo revisitas y conduciendo estudios bíblicos de casa, así como el tiempo que se pasó dando testificación incidental. El número total de revisitas llegó a 106.883.499. Lo que verdaderamente tuvo un efecto en las personas recientemente interesadas fue la obra de instrucción efectuada en la actividad de estudios bíblicos. Como bien sabemos, estamos haciendo una obra de carácter doble, el de dar el testimonio acerca de las buenas nuevas del Reino, según se bosqueja en Mateo 24:14, y, en segundo lugar, el hacer discípulos de gente de todas las naciones, como bosquejó Jesús en Mateo 28:19, 20. Esta obra de impartir enseñanza ha seguido adelante constantemente durante el año pasado porque semanalmente los testigos de Jehová estuvieron conduciendo 1.097.237 estudios bíblicos de casa. Como ya se ha señalado, más de 120.000 de estas personas con quienes estos testigos cristianos de Jehová han estado conduciendo estudios bíblicos de casa se bautizaron durante el año, y se declararon como personas que desean hacer la voluntad de Dios. Lo han probado por medio de salir en el servicio del campo y caminar en los pasos de Cristo Jesús, haciendo la misma clase de trabajo que él hizo.
La predicación que hacen los testigos de Jehová, por supuesto, es realzada por el uso de la Biblia. Todos los testigos de Jehová en todos los países usan la Biblia en sus estudios bíblicos de casa. Además de eso, al efectuar su testificación y su obra de enseñanza alrededor del mundo usan otras publicaciones que la Sociedad imprime, tales como libros empastados, que se colocaron a la gente del mundo en la cantidad de 14.474.862 ejemplares. También distribuyeron 11.111.743 folletos.
Una de las publicaciones principales que los testigos de Jehová usan hoy día al ayudar a la gente a comprender y apreciar la Palabra de Dios son revistas, La Atalaya y ¡Despertad! Ellos distribuyen estas revistas individualmente y también obtienen suscripciones para ellas. Durante el año pasado los testigos de Jehová obtuvieron 2.131.667 suscripciones nuevas y distribuyeron 186.257.878 ejemplares individuales de estas revistas de casa en casa, de tienda en tienda y en las calles.
Se ve fácilmente que se dio un maravilloso testimonio por la página impresa, y los testigos de Jehová se alegran de colocar esta literatura. Ella les muestra a las personas lo que son sus responsabilidades al leer y seguir lo que las Escrituras enseñan. La gente tiene que saber acerca de la venganza de Jehová contra este inicuo sistema de cosas y las gloriosas buenas nuevas acerca de su reino, que traerá bendiciones a todas las familias de la Tierra.
Además de la amplia distribución de literatura, los testigos de Jehová también tuvieron discursos bíblicos en sus Salones del Reino mundialmente, hasta la cantidad de 1.053.316.
Los testigos de Jehová están organizados en congregaciones tal como sucedió en los primeros días del cristianismo. Por toda la Tierra hay 25.694 congregaciones y éstas, en cambio, componen 2.252 circuitos y 292 distritos. Las congregaciones que componen un circuito tienen dos asambleas de circuito cada año, y entonces cada año hay una asamblea de distrito. No obstante, durante el año de servicio de 1969 el rasgo sobresaliente fue la Asamblea Internacional “Paz en la Tierra” de los Testigos de Jehová, acerca de la cual se dio un informe con detalles a principios de esta publicación. La Asamblea Internacional “Paz en la Tierra” de los Testigos de Jehová ciertamente estimuló la actividad de los testigos de Jehová. Esto se muestra por lo que sucedió en agosto, el mismísimo último mes del año de servicio. Este es un mes en que por lo general no hay nuevos máximos en el número de publicadores. Pero nos alegra mucho informar que muchos países sí alcanzaron nuevos máximos en el número de publicadores en agosto, el último mes del año de servicio de 1969. Sin duda comenzaremos el año de servicio de 1970 con algunos excelentes informes de servicio en el campo.
Los testigos de Jehová están tan resueltos a efectuar su actividad de predicación porque los fortalece el reunirse con regularidad. Este estímulo para seguir adelante con la obra que hay que hacer viene de un estudio de la Biblia junto con ayudas tales como la revista La Atalaya. También asisten con regularidad a la Escuela del Ministerio Teocrático y la reunión de servicio. Todas estas reuniones celebradas en las congregaciones edifican su espiritualidad y su aprecio a la Palabra de Dios. Los testigos de Jehová sienten su responsabilidad, y en la Asamblea Internacional “Paz en la Tierra” uno podía ver claramente el gozo y la felicidad de estos siervos del Altísimo.
Los testigos de Jehová han establecido fábricas impresoras alrededor del mundo, la principal de las cuales se encuentra en Brooklyn, Nueva York. Hay otra gran fábrica impresora en Alemania donde se producen libros empastados. En muchos países, tales como el Canadá, Inglaterra, Dinamarca, Suecia, Suiza, la República Sudafricana y Australia, se imprimen las revistas La Atalaya y ¡Despertad! Al combinar la actividad total de impresión de las diferentes sucursales se nota que durante el año de servicio de 1969 se imprimieron 27.936.033 libros empastados por todo el mundo además de 13.267.952 folletos. Estas publicaciones los testigos de Jehová las usan en todas partes de la Tierra para dar un testimonio acerca del reino de Dios y para comenzar estudios bíblicos. Estos estudios bíblicos en los hogares de la gente definidamente van aumentando. Así es cómo la gente aprende y decide en su corazón y mente qué hará personalmente acerca de servir a Jehová Dios. La impresión total de revistas durante el pasado año de servicio pone de manifiesto la gran demanda que hay por estas publicaciones. Se imprimieron 159.395.598 revistas La Atalaya y 166.356.756 revistas ¡Despertad! o un total de 325.752.354 revistas en las imprentas de la Sociedad. La revista La Atalaya se imprime en 72 idiomas y ¡Despertad! en 26 idiomas.
Es con verdadera excitación que los testigos de Jehová por todo el mundo esperan el año de servicio de 1970. Recuerdan su texto del año, que se encuentra en Mateo 28:19, 20: “Por lo tanto vayan y hagan discípulos . . . bautizándolos.” Estamos seguros de que con este tema en mente durante todo el año se dará un testimonio aun mayor acerca del reino de Dios. También creemos que se conducirá un mayor programa de enseñanza en los hogares privados de la gente en todas partes de la Tierra.
Después de la Asamblea Internacional “Paz en la Tierra” de los Testigos de Jehová parece que todos los testigos de Jehová van a ser más celosos en su actividad, reconociendo la urgencia de los tiempos en que vivimos. Aunque el testimonio acerca del reino de Dios continuará dándose con ímpetu aun mayor, confiamos en que la obra de impartir enseñanza también aumentará, y mejorará. Puede que aun más personas se bauticen, expresando que han dedicado su vida a hacer la voluntad de Jehová.
Tenemos toda causa para regocijarnos en la obra que se hizo durante el año pasado. Plenamente comprendemos que esto no pudiera haberse hecho sin la bendición y la dirección de Jehová sobre Su pueblo. Es nuestra esperanza que por medio de nuestra predicación y de nuestros esfuerzos por predicar y enseñar muchos más hombres y mujeres y niños se unan al pueblo de Jehová y lleguen a ser creyentes y prueben que verdaderamente creen en la Palabra de Dios por medio de bautizarse y emprender el ministerio. Esto exigirá un esfuerzo diligente de parte de todo el que ya está dedicado. Debido al hecho de que tantos se han asociado con los testigos de Jehová durante el año pasado, una pesada responsabilidad descansa sobre los que han estado en la verdad por más tiempo, la de ayudar a los más nuevos a adelantar a la madurez para que obtengan un entendimiento pleno de lo que Jehová desea de todos los que le sirven.
Los testigos de Jehová se sienten tal como lo expresó el salmista al decir: “¡Feliz es el pueblo cuyo Dios es Jehová!” (Sal. 144:15) Aunque somos un pueblo feliz, debemos recordar que este viejo mundo de tristeza y descontento no se siente complacido con nuestra felicidad. Ocasionará pruebas y persecuciones a los que están dando las buenas nuevas. Todos nosotros con el tiempo afrontaremos algunas pruebas y oposición. Pero recuerden: “Considérenlo todo gozo, mis hermanos, cuando se encuentren en diversas pruebas.” (Sant. 1:2) También recuerden lo que el apóstol Pedro dijo: “Pero aun si sufrieran por causa de la justicia, son felices.” “Si a ustedes los están vituperando por el nombre de Cristo, son felices, porque el espíritu de gloria, sí, el espíritu de Dios, descansa sobre ustedes.” (1 Ped. 3:14; 4:14) Por la bondad inmerecida de Jehová continuaremos adelante durante los años venideros, predicando estas buenas nuevas y ayudando a los que desean entender. En todo lo que hacemos debemos dar gloria y honra a nuestro Padre. Tal como 1969 fue un año de alabanza, 1970, también, será un año de alabanza. Dejaremos que suenen en nuestros oídos estas palabras de Jesús: “Por lo tanto vayan y hagan discípulos de gente de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del espíritu santo, enseñándoles a observar todas las cosas que yo les he mandado.”—Mat. 28:19, 20.
Los siervos de sucursal, al enviar sus informes anuales de actividad a la oficina del presidente, concluyeron con la solicitud de que el amor afectuoso y los saludos de los hermanos de sus países fueran pasados a los hermanos y hermanas de todas partes de la Tierra. También expresaron su gratitud por los regalos generosos de ustedes que hicieron posible que los siervos de sucursal, misioneros, miembros de más edad de familias de Betel y algunos siervos de circuito y distrito y precursores especiales pudieran asistir a una de las grandes asambleas internacionales. Ellos apreciaron mucho el amor de los hermanos, y yo quiero pasar esta información a cada uno de ustedes porque todos ustedes juntos han hecho esta excelente contribución para ayudar a nuestros hermanos a ir a una asamblea y también para dar adelanto a la obra en campos extranjeros.
Sobre todo, es el amor de nuestros hermanos unos a otros por todo el mundo lo que nos mantiene estrechamente unidos. Fue Jesús quien hizo una súplica por unidad y unicidad en su oración a su Padre celestial en la última noche en que estuvo con sus discípulos. Dijo: “Yo hago petición, no respecto a éstos solamente, sino también respecto a los que ponen fe en mí por medio de la palabra de ellos, para que todos ellos sean uno, así como tú, Padre, estás en unión conmigo y yo estoy en unión contigo, que ellos también estén en unión con nosotros, para que el mundo crea que tú me enviaste.” (Juan 17:20, 21) De modo que continuaremos juntos declarando el gran nombre de Jehová Dios y hablando a la gente acerca de su Hijo amado, Cristo Jesús. Dejaremos que el mundo sepa que Jehová por medio de su Hijo ha establecido un Reino para bendición de la humanidad.
Yo también quisiera enviar mi amor y saludos afectuosos a todos ustedes y dejarles saber, también, que me regocijo con ustedes en esta grandiosa obra que Jehová Dios está logrando por medio de sus testigos cristianos en estos “últimos días.” “Que el Dios que da paz esté con todos ustedes.”—Rom. 15:33.
Su consiervo,
N.H. Knorr, Presidente
Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania