a El hermano de Abrán, Nacor, se quedó en Ur, quizás para ultimar algunos negocios o cuestiones personales. Pero más tarde, los descendientes de Nacor también se marcharon de Ur y adoraron a Jehová en Harán. (Génesis 11:31; 24:1-4, 10, 31; 27:43; 29:4.)