Nota
b Hay quienes creen que en tiempos bíblicos existía algún tipo de telescopio muy rudimentario. Según ellos, si no hubiera sido por eso, la gente de aquel tiempo no habría podido saber que la cantidad de estrellas es incalculable. Esas teorías infundadas no toman en cuenta a Jehová, el autor de la Biblia (2 Timoteo 3:16).