Nota
a Jehová se dirigió en esta ocasión a Israel, el reino del norte, compuesto de diez tribus, cuyos habitantes ya habían pasado unos cien años en el exilio para cuando Jeremías transmitió este mensaje. Con sus palabras dejó claro que, hasta aquel día, la nación no se había arrepentido (2 Rey. 17:16-18, 24, 34, 35). Sin embargo, sus integrantes podían recuperar el favor de Dios e incluso regresar del exilio.