Nota
b Optar por la escuela doméstica es una decisión personal. Véase el artículo “¿Le conviene la escuela doméstica?”, de la revista ¡Despertad! del 8 de abril de 1993.
b Optar por la escuela doméstica es una decisión personal. Véase el artículo “¿Le conviene la escuela doméstica?”, de la revista ¡Despertad! del 8 de abril de 1993.