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Jehová dirige a su puebloLa Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová (estudio) 2017
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Jehová dirige a su pueblo
“Jehová no podrá menos que guiarte constantemente” (IS. 58:11).
1, 2. a) ¿En qué se diferencian los que dirigen a los testigos de Jehová de los dirigentes de otras religiones? b) ¿Qué analizaremos en este artículo y en el siguiente?
“¿QUIÉN es su líder?”. Esta pregunta se nos hace con frecuencia a los testigos de Jehová. No debería sorprendernos, ya que muchas religiones tienen a alguien —un hombre o una mujer— al que consideran su líder o jefe. Pero nosotros somos diferentes. Nos sentimos orgullosos de responder que no seguimos a ningún humano imperfecto, que nuestro Líder es Cristo. Él a su vez sigue la guía de su Padre, Jehová (Mat. 23:10).
2 Es cierto que hay un grupo de hombres, “el esclavo fiel y discreto”, que supervisa la obra del pueblo de Dios en la actualidad (Mat. 24:45). A ellos los podemos ver, pero ¿cómo sabemos que en realidad es Jehová quien nos dirige mediante su Hijo, a quien no podemos ver? En este artículo y en el siguiente, analizaremos cómo Jehová, durante miles de años, ha encargado la supervisión de su pueblo a algunos hombres. Veremos tres pruebas de que él ha estado detrás de ellos, lo que demuestra que siempre ha sido el verdadero Líder de su pueblo (Is. 58:11).
RECIBIERON PODER DEL ESPÍRITU SANTO
3. ¿Qué hizo Jehová para que Moisés pudiera dirigir a su pueblo?
3 El espíritu santo les dio poder a los representantes de Dios. Piense en Moisés, a quien Dios escogió para que dirigiera a Israel. ¿Qué lo preparó para asumir una responsabilidad tan importante? Que Jehová “puso dentro de él Su propio espíritu santo” (lea Isaías 63:11-14). Dios siguió siendo el Líder de su pueblo, ya que fue él quien le dio poder a Moisés con su espíritu.
4. ¿Qué indicaba a los israelitas que Moisés tenía el espíritu de Dios? (Vea el dibujo del principio).
4 Pero, si el espíritu santo es una fuerza invisible, ¿cómo podían ver los israelitas que estaba actuando en Moisés? Gracias a este espíritu, Moisés hizo milagros y le reveló el nombre de Dios al faraón (Éx. 7:1-3). También adquirió bonitas cualidades que lo facultaban para dirigir a los israelitas, como el amor, la apacibilidad y la paciencia. Moisés era muy diferente de los gobernantes de otros pueblos, que eran duros y egocéntricos (Éx. 5:2, 6-9). No cabe duda, Jehová había elegido a Moisés para guiar a su pueblo.
5. ¿De qué maneras les dio poder Jehová a otros israelitas para que guiaran a su pueblo?
5 Más adelante, el espíritu santo les dio poder a otros hombres que Jehová nombró para dirigir a su pueblo. Por ejemplo, “Josué hijo de Nun estaba lleno del espíritu de sabiduría” (Deut. 34:9). El espíritu de Jehová también actuó en Gedeón (Juec. 6:34). Y la Biblia relata: “El espíritu de Jehová empezó a entrar en operación sobre David” (1 Sam. 16:13). Estos hombres confiaron en que el espíritu los ayudaría, y gracias a él realizaron hazañas que no habrían podido lograr con sus propias fuerzas (Jos. 11:16, 17; Juec. 7:7, 22; 1 Sam. 17:37, 50). Como resultado, Jehová recibió la alabanza que merecía por estos actos poderosos.
6. ¿Por qué quería Jehová que su pueblo respetara a los líderes que había nombrado?
6 ¿Cómo tendrían que haber reaccionado los israelitas ante la clara evidencia de que esos hombres contaban con el espíritu santo? Cuando se quejaron de que Moisés los dirigiera, Jehová preguntó: “¿Hasta cuándo me tratará sin respeto este pueblo [...]?” (Núm. 14:2, 11). Así es, fue Jehová quien escogió a Moisés, Josué, Gedeón y David para que lo representaran a él, el verdadero Líder. Al obedecer a estos hombres, en realidad estaban reconociendo que Jehová era su Gobernante.
RECIBIERON AYUDA DE LOS ÁNGELES
7. ¿Cómo ayudaron los ángeles a Moisés?
7 Los ángeles ayudaron a los representantes de Dios (lea Hebreos 1:7, 14). Jehová usó a ángeles para comisionar, preparar y guiar a Moisés. Lo envió “como gobernante y también como libertador por mano del ángel que se le apareció en la zarza” (Hech. 7:35). Transmitió “mediante ángeles” la Ley, que Moisés usó para instruir a los israelitas (Gál. 3:19). Y le dijo: “Conduce al pueblo al lugar del que te he hablado. ¡Mira! Mi ángel irá delante de ti” (Éx. 32:34). La Biblia no dice que los israelitas vieran a un ángel materializado hacer estas cosas. Sin embargo, la forma en que Moisés instruyó y guió al pueblo dejó claro que tenía ayuda sobrehumana.
8. ¿Cómo ayudaron los ángeles a Josué y a Ezequías?
8 El “príncipe del ejército de Jehová” fortaleció a Josué, el sucesor de Moisés, para que condujera a los israelitas a la victoria en una batalla contra los cananeos (Jos. 5:13-15; 6:2, 21). Tiempo después, el rey Ezequías se enfrentó a una intimidante fuerza militar asiria que amenazaba con invadir Jerusalén. En una sola noche, “el ángel de Jehová” mató a 185.000 soldados (2 Rey. 19:35).
9. ¿Servían como excusa los errores de los representantes de Dios para que los israelitas no siguieran sus instrucciones? Explique.
9 Desde luego, los ángeles son perfectos, pero los hombres a los que ayudaron, no. Una vez, Moisés cometió el error de no santificar a Jehová (Núm. 20:12). Josué no buscó la guía de Dios antes de celebrar un pacto con los gabaonitas (Jos. 9:14, 15). Y por un breve período de tiempo, el corazón de Ezequías “se hizo altivo” (2 Crón. 32:25, 26). Pero los israelitas debían seguir las instrucciones de estos hombres imperfectos, pues Jehová los apoyaba con sus poderosos ángeles. Era él quien dirigía a su pueblo.
LOS GUIÓ LA PALABRA DE DIOS
10. ¿Cómo guió a Moisés la Palabra de Dios?
10 La Palabra de Dios guió a sus representantes. La Biblia llama a la Ley que recibió Israel “la ley de Moisés” (1 Rey. 2:3). Pero también indica que fue Jehová quien dio esa Ley, así que el mismo Moisés debía obedecerla (2 Crón. 34:14). Cuando Dios le dijo cómo construir el tabernáculo, “Moisés procedió a hacer conforme a todo lo que le había mandado Jehová. Hizo precisamente así” (Éx. 40:1-16).
11, 12. a) ¿Qué tenían que hacer Josué y los reyes que gobernaban al pueblo de Dios? b) ¿Qué efecto tuvo la Palabra de Dios en los líderes del pueblo?
11 Desde que Josué fue nombrado líder, tenía la Palabra de Dios por escrito. Se le dijo que debía leerla en voz baja “día y noche”, para obedecer cuidadosamente todo lo que estaba escrito en ella (Jos. 1:8). Los reyes de Israel tenían la obligación de hacer algo parecido: leer la Ley todos los días, hacer una copia de ella y obedecer todas sus palabras y normas (lea Deuteronomio 17:18-20).
12 ¿Qué efecto tuvo la Palabra de Dios en los que dirigían al pueblo? Veamos el caso del rey Josías. Cuando se encontró la Ley de Moisés, su secretario comenzó a leérsela.a ¿Cómo reaccionó el rey? “Inmediatamente rasgó sus prendas de vestir”. Pero no se quedó ahí. Siguiendo la guía de la Palabra de Dios, inició una campaña intensa contra la idolatría e hizo preparativos para celebrar la Pascua como nunca se había hecho antes (2 Rey. 22:11; 23:1-23). Como Josías y otros líderes fieles fueron guiados por las Escrituras, estuvieron dispuestos a cambiar y aclarar las instrucciones que le daban a la nación. Estos cambios hicieron que el pueblo de Dios de la antigüedad actuara en armonía con la voluntad de Jehová.
13. ¿Cuál era la diferencia entre los líderes del pueblo de Dios y los de las naciones paganas?
13 Los gobernantes de otras naciones se guiaban por la sabiduría humana y su visión limitada de las cosas. ¡Qué diferentes de los reyes fieles a Dios! Los dirigentes cananeos fomentaban que la gente hiciera cosas detestables, como el incesto, la homosexualidad, el bestialismo, el sacrificio de niños y la idolatría extrema (Lev. 18:6, 21-25). Además, los líderes de Babilonia y Egipto no tenían las normas de higiene que Jehová le dio a Israel y que, como ha demostrado la ciencia, eran saludables (Núm. 19:13). En cambio, el pueblo de Dios de la antigüedad podía ver que sus líderes fieles promovían la limpieza espiritual, moral y física. No cabe duda de que Jehová los guiaba.
14. ¿Por qué disciplinó Jehová a algunos de los líderes de su pueblo?
14 No todos los reyes del pueblo de Dios de la antigüedad siguieron las instrucciones divinas. Los que desobedecieron a Jehová se negaron a aceptar la guía de su espíritu, de los ángeles y de las Escrituras. En ocasiones, Jehová disciplinó o hasta reemplazó a aquellos líderes (1 Sam. 13:13, 14). A su debido tiempo, nombró a alguien que sería superior a todos los hombres que había usado hasta entonces.
JEHOVÁ NOMBRA UN LÍDER PERFECTO
15. a) ¿Qué dijeron los profetas sobre la venida de un líder perfecto? b) ¿Quién fue ese líder?
15 Durante siglos, Jehová profetizó que nombraría a un líder capacitado como ningún otro para dirigir a su pueblo. Moisés les dijo a los israelitas: “Un profeta de en medio de ti mismo, de tus hermanos, semejante a mí, es lo que Jehová tu Dios levantará para ti —a él ustedes deben escuchar—” (Deut. 18:15). Isaías predijo que este llegaría a ser un “caudillo [o líder] y comandante” (Is. 55:4). Y Jehová inspiró a Daniel para que escribiera sobre “Mesías el Caudillo” (Dan. 9:25). Finalmente, Jesucristo se llamó a sí mismo el Caudillo del pueblo de Dios (lea Mateo 23:10). Sus discípulos lo siguieron con gusto y reconocieron que Dios lo había elegido (Juan 6:68, 69). ¿Qué los convenció de que Jehová había nombrado a Jesucristo para dirigir a su pueblo?
16. ¿Qué pruebas demuestran que Jesús había recibido poder del espíritu santo?
16 El espíritu santo le dio poder a Jesús. Cuando Jesús se bautizó, Juan el Bautista “vio que los cielos se abrían, y que, como paloma, el espíritu descendía sobre él”. A continuación, el espíritu impulsó a Jesús a ir al desierto (Mar. 1:10-12). Durante el resto de su ministerio en la Tierra, el espíritu santo le dio poder para hacer milagros y hablar con autoridad (Hech. 10:38). También produjo un fruto perfecto en Jesús, que incluía amor, gozo y una fe inquebrantable (Juan 15:9; Heb. 12:2). Ningún otro líder pudo demostrar tan claramente que contaba con el espíritu de Dios. Jehová lo había elegido.
17. ¿Cómo ayudaron los ángeles a Jesús?
17 Los ángeles ayudaron a Jesús. Poco después de que Jesús se bautizara, “vinieron ángeles y se pusieron a ministrarle” (Mat. 4:11). Y unas horas antes de morir, “se le apareció un ángel del cielo y lo fortaleció” (Luc. 22:43). Jesús estaba seguro de que Jehová enviaría ángeles para ayudarlo cuando lo necesitara para cumplir con la voluntad divina (Mat. 26:53).
18, 19. ¿Cómo guió la Palabra de Dios la vida y enseñanza de Jesús?
18 La Palabra de Dios guió a Jesús. Desde el principio de su ministerio, Jesús se dejó guiar por las Escrituras (Mat. 4:4). Fue tan obediente a la Palabra de Dios que estuvo dispuesto a morir en un madero de tormento. Incluso en sus últimas palabras citó de profecías mesiánicas (Mat. 27:46; Luc. 23:46). Los líderes religiosos de ese tiempo eran muy diferentes. Despreciaban la Palabra de Dios cuando contradecía sus tradiciones. Hablando de ellos, Jesús citó lo que Jehová dijo mediante el profeta Isaías: “Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está muy alejado de mí. En vano siguen adorándome, porque enseñan mandatos de hombres como doctrinas” (Mat. 15:7-9). ¿Verdad que Jehová no pudo haber escogido a ninguno de estos hombres para que dirigiera a su pueblo?
19 Jesús dejó que la Palabra de Dios guiara tanto su conducta como su enseñanza. No recurrió a su profunda sabiduría ni a su experiencia sin igual al enfrentarse a controversias doctrinales. Más bien, se aferró a las Escrituras como máxima autoridad (Mat. 22:33-40). En vez de deslumbrar a los que lo escuchaban con historias sobre la vida en el cielo o la creación del universo, “les abrió la mente por completo para que captaran el significado de las Escrituras” (Luc. 24:32, 45). Jesús amaba la Palabra de Dios y deseaba mucho enseñarla a los demás.
20. a) ¿Cómo reconoció Jesús que Jehová es el auténtico Líder? b) ¿Qué diferencia entre Jesús y Herodes Agripa I indica a qué clase de persona escoge Jehová como líder?
20 Aunque Jesús impresionó a la gente con sus “palabras llenas de gracia”, le dio todo el mérito a su Maestro, Jehová (Luc. 4:22). Cuando un hombre rico trató de darle honra llamándolo “Buen Maestro”, respondió con modestia: “¿Por qué me llamas bueno? Nadie es bueno, sino uno solo, Dios” (Mar. 10:17, 18). Herodes Agripa I, quien fue rey o líder de Judea unos ocho años después, fue muy distinto. En un acto con varios diplomáticos, “se vistió de ropaje real”. La multitud de admiradores reunidos gritaron: “¡Voz de un dios, y no de un hombre!”. Sin duda, a Herodes le encantó recibir esas alabanzas. ¿Qué ocurrió entonces? “Al instante el ángel de Jehová lo hirió, porque no dio la gloria a Dios; y llegó a estar comido de gusanos, y expiró” (Hech. 12:21-23). Sin duda, ningún observador imparcial pensaría que Jehová lo había escogido como líder. Jesús, por el contrario, demostró de sobra que había sido nombrado por Dios, y siempre dio gloria a Jehová, el Gobernante Supremo de su pueblo.
21. ¿Qué analizaremos en el siguiente artículo?
21 Jehová no quería que Jesús fuera líder solo unos años. “Toda autoridad me ha sido dada en el cielo y sobre la tierra”, dijo Jesús después de su resurrección. Y añadió: “¡Miren!, estoy con ustedes todos los días hasta la conclusión del sistema de cosas” (Mat. 28:18-20). Pero ¿cómo guiaría al pueblo de Dios en la Tierra si él es un ser invisible en el cielo? ¿A quiénes usaría Jehová para trabajar bajo la dirección de Cristo y darle instrucciones al pueblo de Dios? ¿Cómo podrían reconocer los cristianos a los representantes de Jehová? El próximo artículo responderá estas preguntas.
a Quizás se trataba del original escrito por Moisés.
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¿Quién dirige hoy al pueblo de Dios?La Atalaya. Anunciando el Reino de Jehová (estudio) 2017
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¿Quién dirige hoy al pueblo de Dios?
“Acuérdense de los que llevan la delantera entre ustedes” (HEB. 13:7).
1, 2. ¿Qué es posible que se preguntaran los apóstoles después que Jesús ascendió al cielo?
LOS apóstoles están en el monte de los Olivos con la vista clavada en el cielo. Acaban de ver a Jesús, su amo y amigo, ascender hasta que lo oculta una nube (Hech. 1:9, 10). Durante unos dos años, ha sido su maestro y les ha dado ánimo y dirección, pero ahora se ha ido. ¿Qué harán sin él?
2 Jesús les dio este mandato a sus discípulos: “Serán testigos de mí tanto en Jerusalén como en toda Judea, y en Samaria, y hasta la parte más distante de la tierra” (Hech. 1:8). Es cierto que les prometió que recibirían espíritu santo pronto, pero ¿cómo cumplirían con esa asignación? (Hech. 1:5). Una campaña internacional de predicación exigía dirección y organización. En la antigüedad, Jehová había usado a representantes visibles, así que es posible que los apóstoles se preguntaran si nombraría a un nuevo líder.
3. a) ¿Qué decisión importante tomaron los apóstoles fieles después que Jesús ascendió al cielo? b) ¿Qué analizaremos en este artículo?
3 Menos de dos semanas después, luego de consultar las Escrituras y pedir la guía de Dios, los discípulos escogieron a Matías para reemplazar a Judas como uno de los 12 apóstoles (Hech. 1:15-26). ¿Por qué era tan importante para ellos y para Jehová elegir a un nuevo apóstol? La elección de Matías satisfizo una necesidad fundamental en la organización.a Jesús no escogió a sus apóstoles solo para que lo acompañaran, sino para que desempeñaran un papel clave en el pueblo de Dios. ¿Cuál era? ¿Cómo los preparó Jehová mediante Jesús? ¿Realiza hoy alguien en el pueblo de Dios un papel similar? ¿Qué implica acordarse de “los que llevan la delantera”, especialmente de los que componen “el esclavo fiel y discreto”? (Heb. 13:7; Mat. 24:45).
UN CUERPO DE CRISTIANOS DIRIGIDOS POR UN LÍDER INVISIBLE
4. ¿De qué se encargaban los apóstoles y otros ancianos de Jerusalén?
4 Los apóstoles comenzaron a dirigir la congregación cristiana en el Pentecostés del año 33. Ese día, “Pedro se puso de pie con los once” y les explicó a una gran multitud de judíos y prosélitos verdades que podían salvarles la vida (Hech. 2:14, 15). Muchos se hicieron cristianos “y continuaron dedicándose a la enseñanza de los apóstoles” (Hech. 2:42). Los apóstoles administraban el dinero de la congregación (Hech. 4:34, 35). Atendían las necesidades espirituales del pueblo de Dios, pues, como ellos mismos dijeron, se dedicaban “a la oración y al ministerio de la palabra” (Hech. 6:4). Y enviaban a cristianos con experiencia a promover la predicación del Reino en nuevos territorios (Hech. 8:14, 15). Con el tiempo, otros ancianos ungidos empezaron a colaborar con los apóstoles en atender a todas las congregaciones. Formaban un cuerpo gobernante que las dirigía (Hech. 15:2).
5, 6. a) ¿De qué maneras le dio poder el espíritu santo al cuerpo gobernante? (Vea el dibujo del principio). b) ¿Cómo ayudaron los ángeles al cuerpo gobernante? c) ¿Cómo guió la Palabra de Dios al cuerpo gobernante?
5 Los cristianos del primer siglo sabían que Jehová dirigía al cuerpo gobernante mediante Jesús, a quien reconocían como su Líder. ¿Por qué? En primer lugar, el espíritu santo le dio poder al cuerpo gobernante (Juan 16:13). Aunque este fue derramado sobre todos los cristianos, capacitó específicamente a los apóstoles y a los ancianos de Jerusalén para cumplir con su papel de superintendentes. Por ejemplo, en el año 49, el espíritu santo guió al cuerpo gobernante para que tomara una decisión sobre el asunto de la circuncisión. Las congregaciones siguieron sus instrucciones, y “continuaron haciéndose firmes en la fe y aumentando en número de día en día” (Hech. 16:4, 5). La carta en la que el cuerpo gobernante comunicó su decisión revela que manifestaba fe y amor, aspectos del fruto del espíritu (Hech. 15:11, 25-29; Gál. 5:22, 23).
6 En segundo lugar, los ángeles ayudaron al cuerpo gobernante. Antes de que Cornelio se bautizara y llegara a ser el primer gentil incircunciso que se hacía cristiano, un ángel le dijo que mandara llamar al apóstol Pedro. Este les predicó a Cornelio y a sus parientes, y entonces se derramó el espíritu sobre ellos, aunque no estaban circuncidados. Esto motivó a los apóstoles y a otros hermanos a aceptar la voluntad de Dios y recibir a los gentiles incircuncisos en la congregación cristiana (Hech. 11:13-18). Además, los ángeles promovieron y aceleraron la predicación, que supervisaba el cuerpo gobernante (Hech. 5:19, 20). En tercer lugar, la Palabra de Dios guió al cuerpo gobernante. Las Escrituras dirigieron las decisiones de aquellos ancianos ungidos, tanto en cuestiones doctrinales como de organización (Hech. 1:20-22; 15:15-20).
7. ¿Por qué podemos afirmar que Jesús dirigía a los primeros cristianos?
7 Aunque los ancianos que componían el cuerpo gobernante tenían autoridad en la congregación, reconocían que su Caudillo era Jesús. El apóstol Pablo escribió que Cristo “dio algunos como apóstoles” y aconsejó: “Por el amor crezcamos en todas las cosas en aquel que es la cabeza, Cristo” (Efes. 4:11, 15). Los discípulos no llevaron el nombre de ningún apóstol importante, sino que Dios hizo que se les llamara cristianos (Hech. 11:26). Pablo admitió que era importante apegarse a “las tradiciones”, o sea, a las costumbres basadas en las Escrituras, que habían enseñado los apóstoles y otros cristianos que estaban al frente de la congregación. Sin embargo, también dijo: “Pero quiero que sepan que la cabeza de todo varón [incluidos los miembros del cuerpo gobernante] es el Cristo; [...] a su vez, la cabeza del Cristo es Dios” (1 Cor. 11:2, 3). Jesucristo, en su gloria celestial, dirige la congregación bajo las órdenes de Jehová Dios, quien es su cabeza.
“ESTA OBRA NO ES DEL HOMBRE”
8, 9. ¿Qué importante papel cumplió el hermano Russell desde finales del siglo diecinueve?
8 A finales del siglo diecinueve, Charles Taze Russell y algunos colaboradores se esforzaron por restaurar la adoración cristiana verdadera. Con el fin de predicar la verdad de la Biblia en varios idiomas, en 1884 se constituyó legalmente la Zion’s Watch Tower Tract Society. El presidente era el hermano Russell.b Él era un estudiante sobresaliente de la Biblia que desenmascaró sin temor doctrinas falsas como la Trinidad y la inmortalidad del alma. Entendió que la vuelta de Cristo sería invisible y que “los tiempos señalados de las naciones” terminarían en 1914 (Luc. 21:24). Dedicó sin reservas su tiempo, energías y dinero a divulgar estas verdades. Está claro que Jehová y la cabeza de la congregación usaron al hermano Russell durante esa época crucial.
9 Russell no quería recibir honra de los hombres. Por ejemplo, escribió en 1896: “No deseamos que se nos dé honra ni reverencia, ni a nosotros mismos ni a lo que escribimos; tampoco deseamos que se nos llame Reverendo o Rabino, ni que se use nuestro nombre para designar a nadie”. Más adelante, declaró: “Esta obra no es del hombre”.
10. a) ¿Cuándo nombró Jesús al “esclavo fiel y discreto”? b) Explique cómo se han ido diferenciando el Cuerpo Gobernante y la Sociedad Watch Tower.
10 En 1919, tres años después de la muerte de Russell, Jesús nombró al “esclavo fiel y discreto”. ¿Para qué? Para darles a sus domésticos “alimento al tiempo apropiado” (Mat. 24:45). Ya en aquellos años, en la central mundial de Brooklyn (Nueva York) había un grupito de hermanos ungidos que preparaban el alimento espiritual y lo hacían llegar a los discípulos de Jesús. La expresión “cuerpo gobernante” comenzó a aparecer en nuestras publicaciones en la década de 1940. Entonces se asumía que este cuerpo y la Watch Tower Bible and Tract Society estaban estrechamente relacionados. Sin embargo, en 1971 se hizo una distinción entre el Cuerpo Gobernante y los directores de la Sociedad Watch Tower, que es un instrumento legal, no una institución bíblica. A partir de entonces, el Cuerpo Gobernante incluyó entre sus miembros a ungidos que no eran directores de la Sociedad. En años más recientes, hermanos responsables de las “otras ovejas” han sido directores de esta entidad legal y de otras corporaciones que usa el pueblo de Dios, lo que permite que el Cuerpo Gobernante se concentre en impartir enseñanza y guía espiritual (Juan 10:16; Hech. 6:4). La Atalaya del 15 de julio de 2013 explicó que “el esclavo fiel y discreto” es un grupo pequeño de hermanos ungidos que componen el Cuerpo Gobernante.
11. ¿Cómo funciona el Cuerpo Gobernante?
11 El Cuerpo Gobernante toma decisiones importantes de manera conjunta. Sus miembros se reúnen cada semana, lo que promueve una buena comunicación y unidad (Prov. 20:18). El presidente de estas reuniones cambia todos los años, pues ninguno se considera más importante que los demás (1 Ped. 5:1). Lo mismo se hace en cada uno de los seis comités de este cuerpo. Ninguno de los miembros del Cuerpo Gobernante se considera el líder de sus hermanos, sino uno de los “domésticos”, que reciben alimento del esclavo fiel y se someten a su supervisión.
“¿QUIÉN ES, VERDADERAMENTE, EL ESCLAVO FIEL Y DISCRETO?”
12. Puesto que el Cuerpo Gobernante no es infalible ni actúa por inspiración divina, ¿qué preguntas surgen?
12 El Cuerpo Gobernante no recibe revelaciones divinas ni es infalible. Por lo tanto, puede equivocarse en temas doctrinales y cuestiones de organización. De hecho, el Índice de las publicaciones Watch Tower contiene la entrada “Aclaración de creencias”, donde aparece una lista de cambios en nuestra manera de entender las Escrituras desde 1870. Desde luego, Jesús no dijo que el esclavo fiel produciría alimento espiritual perfecto. Por lo tanto, ¿cómo podemos responder a su pregunta sobre quién es verdaderamente el esclavo fiel y discreto? (Mat. 24:45). ¿Qué pruebas tenemos de que el Cuerpo Gobernante es este esclavo? Analicemos las tres mismas cosas que guiaron al cuerpo gobernante del siglo primero.
13. ¿Cómo ha ayudado el espíritu santo al Cuerpo Gobernante?
13 Prueba de la guía del espíritu santo. El espíritu ha ayudado al Cuerpo Gobernante a comprender verdades bíblicas que no se entendían. Por ejemplo, piense en la lista de creencias que mencionamos en el párrafo anterior. Desde luego, ningún ser humano tiene el mérito de haber descubierto y explicado “las cosas profundas de Dios” (lea 1 Corintios 2:10). El Cuerpo Gobernante hace suyas estas palabras del apóstol Pablo: “De estas cosas también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las enseñadas por el espíritu” (1 Cor. 2:13). Solo la ayuda del espíritu santo puede explicar el fenomenal aumento del conocimiento espiritual a partir de 1919, después de siglos de apostasía y oscuridad.
14. Según Revelación 14:6, 7, ¿cómo ayudan los ángeles al pueblo de Dios en la actualidad?
14 Prueba de la ayuda de los ángeles. El Cuerpo Gobernante se enfrenta a una tarea inmensa: dirigir la predicación de más de ocho millones de evangelizadores en todo el mundo. ¿Por qué ha habido tanto éxito? Una razón es la ayuda de los ángeles (lea Revelación 14:6, 7). ¿Cuántas veces no ha tocado un hermano a la puerta de alguien que acababa de pedirle ayuda a Dios?c Y solo una ayuda sobrehumana puede explicar el crecimiento en la obra de predicar y hacer discípulos incluso en lugares donde hay fuerte oposición.
15. ¿Qué diferencia hay entre el Cuerpo Gobernante y los líderes de la cristiandad? Dé un ejemplo.
15 Aceptan la guía de la Palabra de Dios. (Lea Juan 17:17). Pensemos en lo siguiente. La revista The Watchtower del 1 de junio de 1973 (en español, La Atalaya del 15 de octubre) preguntó: “¿Satisfacen los requisitos para el bautismo las personas que no han roto su afición al tabaco?”. La respuesta fue: “La evidencia bíblica señala a la conclusión de que no los satisfacen”. Después de citar varios textos relacionados con el tema, la revista explicó por qué tenía que ser expulsado quien no quería dejar de fumar (1 Cor. 5:7; 2 Cor. 7:1). Indicó que esta medida no era el resultado de una actitud arbitraria o dictatorial, sino de obedecer las estrictas normas que Dios puso en la Biblia. ¿Ha estado dispuesta alguna otra organización religiosa a dejarse guiar totalmente por la Palabra de Dios, aunque eso sea una verdadera prueba para algunos de sus miembros? Recientemente, un libro sobre la religión en Estados Unidos afirmó: “Los líderes cristianos revisan sus enseñanzas con frecuencia para ajustarlas a las creencias y opiniones que ganan popularidad entre sus miembros y la sociedad en general”. Si los miembros del Cuerpo Gobernante permiten que guíe sus decisiones la Palabra de Dios y no la opinión popular, ¿quién dirige hoy en realidad al pueblo de Dios?
“ACUÉRDENSE DE LOS QUE LLEVAN LA DELANTERA”
16. Mencione una manera de recordar al Cuerpo Gobernante.
16 (Lea Hebreos 13:7). La palabra que se traduce “acuérdense” también puede traducirse “mencionen”. Por eso, una forma de acordarse “de los que llevan la delantera” es mencionar al Cuerpo Gobernante en las oraciones (Efes. 6:18). Piense en sus responsabilidades: suministrar alimento espiritual, supervisar la predicación mundial y administrar las donaciones. ¿Verdad que necesitan que oremos constantemente por ellos?
17, 18. a) ¿Cómo colaboramos con el Cuerpo Gobernante? b) ¿De qué otra manera demostramos que apoyamos al esclavo fiel y a Jesús?
17 Desde luego, acordarse o tener presente al Cuerpo Gobernante implica más que palabras; debemos obedecer sus instrucciones, que nos llegan mediante las publicaciones, las reuniones y las asambleas. El Cuerpo Gobernante también nombra superintendentes de circuito, que a su vez nombran a los ancianos. Todos ellos se acuerdan del Cuerpo Gobernante al seguir estrictamente sus instrucciones. Si somos obedientes y sumisos a los hombres que nuestro Líder, Jesús, usa para dirigirnos, lo estaremos respetando a él (Heb. 13:17).
18 Otra manera de acordarnos del Cuerpo Gobernante es dando el máximo en la predicación. Pablo animó a los cristianos a imitar la fe de los que están al frente de la congregación. El esclavo fiel ha demostrado que tiene una fe excepcional al promover con entusiasmo la predicación de las buenas nuevas del Reino. ¿Es usted una de las “otras ovejas” que apoya a los ungidos en esta obra tan importante? Se sentirá muy feliz cuando su Líder, Jesús, diga: “Al grado que lo hicieron a uno de los más pequeños de estos hermanos míos, a mí me lo hicieron” (Mat. 25:34-40).
19. ¿Por qué está usted decidido a seguir a nuestro Líder, Jesús?
19 Jesús no abandonó a sus seguidores cuando regresó al cielo (Mat. 28:20). Sabía muy bien lo mucho que el espíritu santo, los ángeles y la Palabra de Dios lo habían ayudado a dirigir a sus discípulos mientras estuvo en la Tierra. Por eso, le ha dado al esclavo fiel esa misma ayuda. Los miembros de ese esclavo, igual que todos los demás ungidos, “van siguiendo al Cordero no importa adónde vaya” (Rev. 14:4). Cuando seguimos su dirección, en realidad seguimos a Jesús, nuestro Líder, que pronto nos llevará a la vida eterna (Rev. 7:14-17). Y eso es algo que ningún líder humano puede prometer.
a Todo indica que la voluntad de Jehová era que los 12 apóstoles fueran las 12 piedras de fundamento de la Nueva Jerusalén (Rev. 21:14). Así que no había necesidad de sustituir a los apóstoles que murieran fieles.
b Desde 1955, esta corporación se llama Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania.
c Vea el libro “Testimonio cabal” del Reino de Dios, páginas 58 y 59.
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