Volviéndose a Jehová
1. (a) ¿Qué hizo brillar el rostro de Moisés, con qué resultados? (b) ¿Cómo mostró Pablo la causa verdadera de la dificultad?
“CUANDO hay un volverse a Jehová, se quita el velo.” Así escribió el apóstol Pablo cuando consideraba la gloria superior del nuevo pacto en comparación con el pacto de la ley hecho con Israel por medio de Moisés como mediador. Cuando Moisés descendió del monte Sinaí con las dos tablas del Testimonio, su rostro brillaba, de modo que la gente temía acercársele. Por consiguiente, tuvo que ponerse un velo en su rostro. Pero, como Pablo explicó, la dificultad estribaba realmente en el mismo pueblo israelita. Su corazón y mente no se hallaban en la actitud correcta. “Sus facultades perceptivas fueron embotadas. . . . De hecho, hasta el día de hoy cuando se lee a Moisés, un velo está puesto sobre el corazón de ellos.” Su corazón y mente no estaban vueltos en devoción amorosa a Jehová. En cambio, endurecieron su corazón en obstinación, como Jehová dijo de ellos: “Siempre se descarrían en su corazón, y ellos mismos no han llegado a conocer mis caminos.”—2 Cor. 3:12-16; Exo. 34:29-35; Heb. 3:10.
2. (a) ¿Puede jactarse el mundo como superior a Israel en este respecto? (b) ¿Cómo se manifiesta la causa básica de la dificultad?
2 Hablando del mundo en general, Pablo continúa con la misma manera de hablar cuando dice que las “buenas nuevas que declaramos están de hecho veladas . . . entre los que están pereciendo, entre quienes el dios de este sistema de cosas ha cegado las mentes de los incrédulos, para que la iluminación de las gloriosas buenas nuevas acerca del Cristo . . . no resplandezca a través.” (2 Cor. 4:3, 4) Como dijo Isaías: “Como ovejas todos nosotros nos hemos extraviado; fue cada cual por su propio camino.” (Isa. 53:6) Esa es la dificultad. Nos gusta nuestro propio camino. Esa fue la causa básica del paso que dieron en falso cada uno de los hijos en la ilustración del hijo pródigo que se acaba de considerar. El hijo más joven quería una vida de autocomplacencia. El hijo mayor quería su propio camino con orgullo, al grado de oponerse a los deseos de su padre.
3. ¿Cómo podemos evitar estos pasos dados en falso, y a qué pregunta conduce esto?
3 La única cosa que nos salvará de estos pasos dados en falso debido a querer nuestro propio camino es el volver nuestro corazón sinceramente a Jehová. Esto no es fácil. Significa ir de manera contraria al espíritu y el camino del mundo y de nuestra carne caída. ¿Ha hecho Jehová algo en años recientes para ayudar a los que están deseosos de regresar a él, o a los que a tientas andan buscándolo?
4. (a) ¿Qué provisión misericordiosa señala la profecía de Malaquías? (b) ¿Qué expresión final se hace en este respecto?
4 Retrocediendo a la profecía de Malaquías, se recordará que en los últimos dos capítulos de Malaquías vimos la evidencia de que Jehová de veras suministraría misericordiosamente el estímulo necesario para ayudar a las personas que se hallan necesitadas espiritualmente. Se ve cumplido esto hoy en día en el cuerpo de personas dedicadas a quienes Jehová ha bendecido ricamente y a quienes ha hecho resaltar de modo distinto, bien conocidas en toda la Tierra como testigos de él. En ese repaso de los capítulos tres y cuatro de Malaquías, sin embargo, no nos detuvimos a notar las palabras finales de la profecía, donde Jehová dice: “¡Miren! Les estoy enviando a Elías el profeta antes de la venida del día grande e inspirador de temor de Jehová. Y él debe volver el corazón de los padres de vuelta hacia los hijos, y el corazón de los hijos de vuelta hacia los padres; para que yo no venga y de hecho hiera la tierra con una dedicación de ella a la destrucción.”—Mal. 4:5, 6.
CUMPLIMIENTO EN MINIATURA
5. ¿Qué expresiones, y por quiénes, dan la clave en cuanto al cumplimiento en miniatura?
5 Estas palabras hablan de un trabajo de volver los corazones, y por consiguiente se hallan justamente en armonía con nuestra investigación. En el cumplimiento, ¿cómo han de entenderse, y a quién se refiere la expresión “Elías el profeta”? Como guía, primero tenemos que ver si hubo algún cumplimiento en la primera venida de Cristo. Como ya se notó, muchas profecías tuvieron un cumplimiento en miniatura entonces, dando un modelo en escala pequeña o vista anticipada del cumplimiento mayor en estos días de la segunda venida. Esta profecía de Malaquías no es ninguna excepción. El ángel Gabriel, cuando dijo al sacerdote judío Zacarías que tendría un hijo, predijo de él que “a muchos de los hijos de Israel los volverá a Jehová, Dios de ellos. También, irá delante de él con el espíritu y poder de Elías, para volver los corazones de padres a hijos y los desobedientes a la sabiduría práctica de los justos, para alistar para Jehová un pueblo preparado.” El hijo de Zacarías llegó a ser Juan el Bautista. Jesús mismo dijo de Juan: “Este es ‘Elías, que está destinado a venir.’” ¿Cómo llevó a cabo Juan este trabajo de volver los corazones?—Luc. 1:16, 17; Mat. 11:14; 17:10-13.
6. (a) ¿Por qué fueron necesarios el mensaje y la obra de Juan el Bautista? (b) ¿De qué maneras se hicieron volver los corazones?
6 El mensaje de Juan el Bautista fue directo: “Arrepiéntanse, porque el reino de los cielos se ha acercado.” Fue urgente. Aquél era un tiempo de juicio inminente para aquella generación, como dijo Juan: “Ya el hacha yace a la raíz de los árboles.” También, estaba por anunciarse el representante del reino de los cielos, Jesucristo. El pueblo tenía que estar preparado. Tenía que recobrar el juicio. Sus caudillos religiosos habían ‘invalidado la palabra de Dios’ por su tradición, y su corazón se había alejado mucho de él. De modo que sus corazones tenían que efectuar un volverse. Juan dio “sabiduría práctica” cuando dio consejo sano a los que venían a él, incluyendo a recaudadores de impuestos y a soldados y hasta a los fariseos y saduceos. Su obra fue educativa y tuvo éxito. Suministró el estímulo necesario. ‘Alistó para Jehová un pueblo preparado,’ con su corazón vuelto, listo para llegar a ser hijos de Dios, como israelitas espirituales. Sus corazones también se volvieron hacia sus padres, los patriarcas, estando listos para ejercer fe como la de Abrahán. Como dijo Pablo: “Los que se adhieren a la fe, éstos son hijos de Abrahán.”—Mat. 3:2, 7-12; 15:1-9; Luc. 3:10-14; Juan 1:35-40; Gál. 3:7.
CUMPLIMIENTO MAYOR
7. ¿Cómo sabemos que Juan no cumplió completamente el cuadro?
7 El cumplimiento mayor de esta profecía de Malaquías acontece cuando el Señor Jesús regresa en poder y gloria del reino. Jesús se refirió a esta venida del Hijo del hombre en poder del reino, enlazándola con la visión de la transfiguración, dada en presencia de Pedro, Santiago y Juan, cuando estaba en una montaña alta. (Mar. 9:1-8; Mat. 17:1-9) Elías figuró en esa visión, indicando que habría un cumplimiento futuro y más grande de Malaquías 4:5, 6. Puesto que esta visión se dio después de la muerte de Juan el Bautista, es evidente que Juan mismo no cumplió completamente el cuadro.
8. ¿A quién se identifica como el moderno “Elías el profeta”?
8 ¿Quién, entonces, es el moderno “Elías el profeta” a quien se le confía el dar la advertencia del “día grande e inspirador de temor de Jehová,” además del trabajo de volver los corazones? Jesús indicó la respuesta en la profecía ya mencionada, cuando habló del “esclavo fiel y discreto,” que está distribuyendo el alimento espiritual “a su debido tiempo,” y que por lo tanto está nombrado por el Señor “sobre todo lo suyo.” (Mat. 24:45-47) Esta clase del esclavo fiel, el resto ungido, hoy en día se destaca como distinta. Como Elías y Juan el Bautista, declaró denodadamente los juicios de Dios contra toda la adoración falsa hasta que los enemigos interrumpieron las cosas en 1918. Sin embargo, en 1919 hubo un reavivamiento de la obra de volver la gente a Dios y declarar la destrucción venidera, primero de “Babilonia la Grande,” luego del sistema político visible de Satanás en el Armagedón.—Rev. 18:21; 19:11-16.
9. ¿Por qué se introduce en el cuadro otro profeta, y quién es él?
9 Esta clase moderna de Elías así ha estado efectuando un trabajo de volver los corazones. Ya hemos rastreado la obra preliminar hecha a favor de las “otras ovejas” hasta 1935, incluyendo a aquellas “ovejas” a quienes en particular representa el hijo pródigo que habían desperdiciado oportunidades más tempranas de servir a Jehová. ¿Qué se ha hecho desde entonces? A fin de apreciar esto debemos tener cuidado de considerar el modelo profético original de Elías en su totalidad. Esto introduce en el cuadro a otro profeta, aunque esto no indicó alguna falta o fracaso de parte de Elías. Cuando fue comisionado Elías a ungir a ciertos individuos para ejecutar Sus juicios contra la adoración de Baal, Dios dijo: “A Eliseo . . . deberás ungir como profeta en tu lugar.” Elías prestamente lo hizo así y, como resultado, Eliseo dejó de hacer lo que estaba haciendo y “se puso a seguir a Elías y comenzó a ministrarle.” Así tuvo la ventaja de muchos años de entrenamiento bajo la dirección de Elías.—1 Rey. 19:15-18, 21.
10. ¿Cuál fue el último milagro de Elías, resultando en qué, y cómo se cumplió?
10 ¿Recuerda usted el último milagro de Elías? Fue el dividir las aguas del río Jordán golpeándolas con su prenda de vestir oficial, lo cual hizo posible que él y Eliseo pasaran hacia el oriente sobre tierra seca. (2 Rey. 2:8) Como resultado, las aguas de abajo de la división fluyeron descendiendo hacia el inerte mar Muerto, pero las aguas de arriba de ese sitio se detuvieron. De manera semejante sucede con la clase de Elías hoy en día. “Las aguas . . . significan pueblos y muchedumbres y naciones y lenguas.” (Rev. 17:15) Una clase terrestre de personas había sido prevista durante muchos años y miembros de ella estaban apareciendo en número creciente, pero no fue sino hasta 1935 que comenzó a tener lugar la división verdadera de las aguas simbólicas y la obra de recoger a las “otras ovejas,” como ya se mencionó. Los que fueron recogidos fueron detenidos del derrotero descendente que conduce a la destrucción. Jehová usó a la clase Elías para comenzar esta división de las aguas simbólicas. Empezó bien, y la clase de Eliseo la llevó adelante.
11. (a) ¿Por cuál milagro fueron separados los dos profetas? (b) ¿Cómo y cuándo se cumplió esto?
11 ¿Recuerda usted el primer milagro de Eliseo? Fue lo mismo que el último de Elías, usar la prenda de vestir oficial que se había caído de Elías con el mismo propósito, lo que capacitó a Eliseo para volver a cruzar el lecho del río a pie enjuto. Pero ahora estaba solo, salvo que Jehová estaba apoyándolo. En medio de aquellos dos milagros ocurrió otro notable, cuando Elías ascendió a los cielos en un torbellino después de ser separado de Eliseo por un carro de guerra ardiente y caballos. Eso representó proféticamente el fin de la obra efectuada por la clase de Elías y la continuación de la misma obra, solo que intensificada, por la clase de Eliseo. Los acontecimientos históricos que tuvieron lugar a principios del año bélico de 1942 señalaron el cumplimiento de este cambio. Justamente antes de ese tiempo, en medio de la II Guerra Mundial, parecía como si la obra de testimonio pudiera estar llegando a su fin. Las perspectivas eran muy inciertas. El 8 de enero de 1942, el presidente de la Sociedad Watch Tower, J. F. Rutherford, murió. ¿Se detuvo la obra?—2 Rey. 2:11-14.
12. ¿Qué muestra que la clase de Eliseo reconoció su comisión?
12 Al contrario, la clase de Eliseo, compuesta de los miembros que quedaban del resto ungido, inmediatamente siguió adelante con la misma obra de dividir, las aguas simbólicas, así como lo hizo Eliseo de manera literal. La misma Sociedad Watch Tower se usó como agencia de publicación, pero con un nuevo presidente electo. En el mismo número de The Watchtower que anunció la muerte del presidente Rutherford, se publicó el artículo principal intitulado “Recogimiento final,” basado en Jeremías 16:16, que habló de una pesca y caza intensivas de los que todavía podrían ser recobrados. A fines del verano de 1942 los testigos de Jehová celebraron una asamblea de tres días en Cleveland, Ohio, con programas repetidos en muchas ciudades de otros países. El tema principal se basó en Isaías, capítulos 59 y 60, que pedía al pueblo de Dios: “Levántate . . . despide luz,” con el resultado de que viniera a la luz una gran bandada de personas, “volando exactamente como una nube.” (Isa. 60:1-3, 8; Rev. 7:9) ¡No había duda en cuanto a ello! ¡La clase de Eliseo reconoció su comisión y no estaba perdiendo tiempo alguno!
LA OBRA DE LA “CLASE DE ELISEO” UNA OBRA DE EDUCACIÓN
13. (a) ¿De qué índole fueron los milagros de Eliseo, y quiénes sacaron provecho? (b) ¿Qué trabajo semejante se acometió en 1942, y cómo se ha desarrollado?
13 En los veinte años o más desde entonces esta misma clase ungida ha avanzado con vigor que no ha disminuido, ayudada por números que siempre aumentan de “otras ovejas,” incluyendo a muchos de la clase del “hijo pródigo.” Esto se debe a que el espíritu de Jehová descansa sobre ellos, como descansó sobre Eliseo, quien pidió a Elías la porción del primogénito de “dos partes de tu espíritu.” (2 Rey. 2:9) En aquel entonces esto se le concedió de manera manifiesta a Eliseo, porque la Biblia registra dieciséis milagros que se atribuyen a Eliseo, en comparación con ocho para Elías. Muchos de los milagros de Eliseo fueron de curación y restauración, beneficiando especialmente a los “hijos de los profetas,” tales como el sanar un abastecimiento de agua mala, también algún potaje envenenado, además de un aumento milagroso de alimentos. Hubo el levantar al hijo de la sunamita, y la curación de la lepra de Naamán. (2 Rey. 2:15–6:23) El grupo de profetas fieles prosperó bajo el ministerio de Eliseo. De manera correspondiente, después de la asamblea de 1942 en Cleveland, los responsables del centro de dirección de Brooklyn decidieron abrir una escuela para entrenar a misioneros para que sirvieran en todo el mundo en la predicación y la enseñanza y la obra de recoger a las “otras ovejas,” incluyendo a aquellos que eran como el hijo pródigo. Esta escuela misional se inauguró el 1 de febrero de 1943, y desde entonces ha sido ensanchada, capacitando a los individuos a quienes se equipa a rendir servicio excelente en edificar la organización de los testigos de Jehová en muchos países, también haciendo accesible la obra en nuevos lugares. Entonces se mostró interés en la clase del “hijo pródigo” mediante la publicación de dos artículos: “El hijo pródigo necesitado,” y “La vuelta del hijo pródigo a su casa,” en los números de La Atalaya del 15 de marzo y 15 de abril de 1944. Ese año se celebró una campaña especial que duró un mes a través de toda la Tierra, en octubre de 1944, intitulada “Período de testimonio ‘hijo pródigo.’”
14, 15. (a) ¿Qué programa adicional se inició en 1942, y cómo ha progresado? (b) ¿Qué curso de entrenamiento nuevo se inició en 1959?
14 Además, en 1942 se inició un programa mediante el cual pudo tenerse un curso de entrenamiento en nuestro ministerio cristiano en toda congregación de los testigos de Jehová por toda la Tierra. En 1943 se anunciaron planes en la asamblea “Llamada a acción” para establecer una Escuela del Ministerio Teocrático en cada congregación. A todos se les invitó a asistir y llegar a estar más plenamente equipados y capacitados, aunque solo los estudiantes varones daban conferencias desde la plataforma. Pero en 1958 se hicieron arreglos para que todos los estudiantes tuvieran una parte activa, tanto varones como hembras. Estas, sin embargo, no dan discursos, sino que demuestran cómo transmitir el mensaje del Reino de manera eficaz en medio de toda circunstancia.—1 Tim. 2:11, 12.
15 Otro rasgo nuevo de la obra de Eliseo se introdujo en 1959. Se preparó un curso de cuatro semanas para el entrenamiento de superintendentes de congregación, que habría de celebrarse en todos los países donde la Sociedad Watch Tower ha establecido una sucursal con su propio centro de dirección. A los superintendentes se les invita a asistir gratuitamente.
16. (a) ¿Cómo ha beneficiado toda esta obra a la clase del “hijo pródigo”? (b) ¿Cómo mostró The Watchtower del 1 de mayo de 1937 que algunos quizás no hayan trabajado para mejorar su ministerio?
16 Solo hemos bosquejado brevemente la obra educativa que se emprendió, pero téngase presente que, aunque ésta ha sido una rica bendición para los testigos de Jehová mismos, no ha parado allí. Por supuesto que no. En gran parte es un medio hacia un fin. Hace posible un ministerio más eficaz y más extenso que ha de ejecutarse a favor de todos los que se hallan necesitados, incluyendo a la clase del “hijo pródigo.” En cuanto a los testigos de Jehová, ellos pueden y seguramente deben mostrar aprecio aprovechándose de estos medios para mejorar su ministerio. ¿No sería una cosa triste el que, por alguna razón indigna o insuficiente, alguien rehusara usar estos medios, posiblemente permitiendo así que se desarrollara un espíritu de resentimiento semejante al que mostró el hermano mayor de la ilustración de Jesús? (Luc. 15:25-30) Al esforzarnos sincera y humildemente por usar estos medios, podemos mostrar verdadero amor al prójimo, no excluyendo a los de la clase del “hijo pródigo.” No querríamos mostrar la ‘falta de celo’ y sufrir las consecuencias, como se notó en la página 130 de The Watchtower del 1 de mayo de 1937, bajo el encabezamiento “Siervo de compañía,” que dice: “La proclamación del mensaje del reino es importantísima ahora. Es el deber de los ungidos votar en cuanto a quién será el siervo de compañía; pero ‘leñadores y aguadores’ (Jos. 9:21-27) pueden servir. (Deu. 16:12-15; 29:11) Cuando no haya nadie en la compañía que esté capacitado para llenar los lugares de siervos de compañía o comités de servicio y haya Jonadabs que tengan la habilidad y el celo, que los Jonadabs sean colocados en el comité de servicio y se les dé oportunidad de servir. El trabajo no debe retrasarse debido a que algunos de la compañía carezcan de celo. El evangelio tiene que ser proclamado ahora.—Mat. 24:14.”
17. (a) ¿Qué derrotero incorrecto quizás han emprendido tanto algunos del resto como de las otras ovejas? (b) Sin embargo, ¿cómo han mostrado arrepentimiento verdadero?
17 Muchos individuos de aun el resto de los coherederos de Cristo así como de la clase de las “otras ovejas” en alguna ocasión en su vida han emprendido un derrotero semejante al del hijo pródigo. Después de dedicarse a Jehová, más tarde dejaron la casa de su Padre, y algunos de ellos hasta hicieron cosas que requirieron que se les expulsara de la congregación. A éstos se les expulsó, pero desde entonces han mostrado arrepentimiento verdadero y han regresado a la congregación de Jehová Dios y han reconocido tanto ante ella como ante su Padre celestial el error de su camino. Se han arrepentido y han cambiado su proceder. Algunos de ellos quizás estuvieron viviendo en fornicación o adulterio, pero ahora han manifestado el espíritu que tuvo el hijo pródigo cuando regresó a la casa de su padre; han mostrado la correcta condición de corazón, han orado a su Padre que los perdone y han regresado y han pedido que se les permita ser esclavos en la organización de Jehová. Los que han mostrado arrepentimiento verdadero, como el hijo pródigo, se están regocijando otra vez debido a habérseles restablecido en la congregación. Ahora están mostrando una disposición humilde y, junto con los que permanecieron en la casa de su Padre, otra vez están proclamando las buenas nuevas del reino de Dios.
18. Después de un período de tiempo de probarse sin tacha después de la expulsión y el restablecimiento, ¿qué oportunidades de servicio pudieran serle hechos accesibles a una persona?
18 Los que han recibido el perdón de su Padre y humildemente han probado ser buenos esclavos después de regresar de su condición de inmundos y expulsados, con el tiempo quizás hasta resulten ser mayordomos adecuados en la casa de su Padre. A través de un período extenso de tiempo borran la mancha de vituperio que han acarreado sobre su registro personal, y las malas impresiones también en la gente de afuera. Si, debido a la conducta sin tacha de un individuo desde su restablecimiento, la congregación ha llegado a considerarlo como buen ejemplo, entonces si tal individuo que en un tiempo estuvo expulsado pero ahora ha regresado y ha demostrado humildad, ha probado su amor a la Palabra y obra de Jehová durante diez años después de ser restablecido, estaría en armonía con la parábola del hijo pródigo el que a tal individuo se le usara como conductor de estudio de libro de congregación y se le permitiera dar conferencias bíblicas. Más tarde, quizás hasta tenga el privilegio de servir en una capacidad mayor en la organización de Jehová. Si, desde su restablecimiento, ha resultado ser un ejemplo para el rebaño de Dios durante diez años de servicio fiel, y si el comité de congregación ve que tal individuo puede recibir un privilegio mayor de servicio, ¿por qué no concedérselo? Si ha demostrado que ahora va a permanecer en la casa de su Padre por toda la vida, y que es leal en su devoción a los intereses de esa casa, parecería que otra vez pudiera confiársele, con seguridad, mayor responsabilidad en la congregación del pueblo de Jehová.
19, 20. (a) ¿Qué papel desempeñan en nuestro ministerio la Palabra y el espíritu de Dios? (b) ¿Qué dos aspectos es importante apreciar?
19 Hoy, como nunca antes, la misma Palabra de Dios es la cosa sobresaliente del programa educativo que abarcan todos los rasgos que se acaban de mencionar. Más que cualquier otra cosa, la Palabra de Dios es el medio para hacer volver los corazones. Pablo tuvo presente eso cuando consideró los beneficios superiores del nuevo pacto y su ministerio. Enunciando los términos del nuevo pacto, Jehová dijo: “Pondré mi ley dentro de ellos, y en su corazón la escribiré.” (Jer. 31:33) De manera semejante, Pablo dijo a los de Corinto: “Queda mostrado que ustedes son carta de Cristo escrita por nosotros como ministros, no inscrita con tinta, sino con espíritu de un Dios vivo, no en tablas de piedra, sino en tablas de carne, en corazones.” Sí, “Jehová es el Espíritu,” y cuando nos volvemos a él y dejamos que su espíritu fluya libremente en nuestro corazón al adherirnos estrechamente a su Palabra, entonces podemos “estar con los rostros descubiertos reflejando cual espejos la gloria de Jehová.” Así él puede usarnos en el magnífico privilegio de ayudar a otros a volverse a él, o regresar a él. Y no olvide que “el que hace volver a un pecador del error de su camino, salvará su alma de la muerte y cubrirá una multitud de pecados.”—2 Cor. 3:3, 17, 18; Sant. 5:20.
20 En conclusión, consideremos brevemente para nuestro estímulo una ilustración que muestra ambos aspectos, que los corazones todavía pueden ser cambiados y volverse a Jehová, y que él mismo tiene un gran corazón de amor para todos los que verdaderamente son sus hijos y se vuelven a él.
ILUSTRACIÓN
21. ¿Cómo y por qué manifestaron una actitud mala los diez hermanastros de José?
21 Nuestra ilustración se encuentra en el bien conocido drama de Jacob y sus doce hijos, registrado en los capítulos 37 a 45 de Génesis. A dos de estos hijos, José y Benjamín, Jacob los quería especialmente, pues eran hijos de su amada esposa Raquel. Debido a que José era notablemente favorecido por su Padre y también debido a los sueños que Dios le dio, sus diez hermanastros lo odiaron amargamente y se pusieron sumamente celosos, al grado de conspirar para matarlo. Sin embargo, en vez de matarlo lo vendieron como esclavo para que se le enviara a Egipto. Tomaron su prenda larga de vestir, la empaparon en sangre y se la mostraron a su padre, quien concluyó que su muchacho había sido devorado por una bestia salvaje. Ciertamente mostraron una actitud de corazón terriblemente mala tanto para José como para su padre.—Gén. 37:2-36.
22, 23. ¿Cómo fue puesta a una prueba escrutadora la actitud de su corazón, y con qué resultado?
22 Los años pasaron. Bajo la maniobra de Dios, a José se le hizo administrador del alimento en Egipto. Después que había sobrevenido por toda la Tierra el hambre que se había predicho, Jacob tuvo que enviar a sus hijos a Egipto dos veces a comprar cereales. José reconoció a sus hermanos, pero ellos no lo reconocieron. En la primera ocasión sucedió que los diez hijos revelaron una conciencia atribulada a causa de José. Pero, ¿era un verdadero cambio de corazón? En la segunda ocasión José arregló la situación de tal manera que sus hermanos quedaron bajo una prueba severa. ¡Se hizo aparecer que Benjamín había robado la copa de plata sagrada de José! José, todavía no reconocido, exigió severamente que Benjamín se quedara como esclavo suyo. Los otros podrían regresar a casa. Al llegar a este punto, Judá, con el apoyo evidente de sus hermanos, hizo una de las súplicas más conmovedoras y espontáneas jamás habladas y, obsérvese, ¡a un oyente aparentemente duro y hostil! Judá hizo grandes esfuerzos para explicar exactamente cuánto significaba Benjamín para su padre. Concluyó diciendo que él mismo llegaría a ser esclavo de José, para que el joven Benjamín pudiera regresar a casa con sus hermanos. Entonces expresó aquel clamor vehemente que provino de su corazón: “¿Cómo puedo subir a mi padre sin el muchacho juntamente conmigo, por temor de que entonces mire la calamidad que hallará a mi padre?”—Gén. 44:34.
23 ¡No había la más leve duda en cuanto a su cambio de corazón! José se conmovió grandemente y lloró en voz alta al darse a conocer a sus hermanos. Pero consideremos la otra parte del drama, donde Jacob estaba esperando en casa.
24. ¿Cómo reaccionó Jacob a las nuevas en cuanto a José, y qué probó de su parte?
24 Podemos imaginarnos al padre anciano esperando ansiosamente y preguntándose qué sucedía al transcurrir lentamente los días y las semanas. ¿Vería otra vez a su amado Benjamín? ¿Iba a perderlo, así como a José? Al fin se le dijo que se alcanzaba a ver a sus hijos y que en breve llegarían. Aguardó en su tienda. Podemos imaginarnos la escena. Saludaría a sus hijos, cada uno a su vez, pero mantendría al joven Benjamín junto a él. Pero, ¿qué era esto que estaban diciendo? ¿Que aquel hombre encargado en Egipto era nada menos que José? ¡Imposible! Pues, si eso fuera así, José por lo menos le hubiera enviado un mensaje hace mucho tiempo. Probablemente raciocinó así. Sin embargo, sus hijos lo instaron a venir y ver lo que habían traído de vuelta. Bueno, él no podría negarse a hacer eso. Con un corazón agobiado, salió y examinó todos los alimentos y otros abastecimientos, sin decir nada de toda la plata y ropa que se le había dado a Benjamín. Pero cuando vio el carro enviado especialmente para llevarlo a Egipto, ¡eso lo convenció! Era tan lujoso y cómodo. ¡Exactamente adecuado! No solo era un eslabón visible, era el medio visible de transporte que lo llevaría a su José por largo tiempo perdido. Cogiéndose fuertemente del costado del carro, y vencido por la convicción y el sentimiento profundo, exclamó: “¡Basta! ¡José mi hijo todavía vive! ¡Ah, permítaseme ir y verlo antes de morir!”—Gén. 45:25-28.
25. (a) ¿Qué revelan estas cosas en cuanto a Jehová? (b) ¿Cómo podemos mostrar que somos verdaderamente sus hijos? (c) ¿Qué derrotero está abierto todavía para los que se han descarriado?
25 Jacob se sintió exactamente como el padre de la ilustración de Jesús que se regocijó por su hijo que “estaba muerto mas ahora está vivo, y estaba perdido pero ha sido hallado.” (Luc. 15:32) José, por supuesto, no se había descarriado como el hijo pródigo, pero la cosa principal que se recalca aquí es el profundo amor paternal que se muestra en cada caso. En cuanto a Aquel que hizo que estas cosas se representaran y se registraran en su Palabra, ¡seguramente su propio corazón de amor tiene que ser mayor y más profundo que el de los que sirven simplemente como ilustraciones! Si verdaderamente somos sus hijos, querremos ‘reflejar la gloria de Jehová,’ y mostrar estas mismas cualidades de amor y paciencia y misericordia, y usar toda ocasión para imitar a nuestro Padre que está en el cielo. (2 Cor. 3:18) Pero si quizás nos hemos descarriado, ¡ciertamente no podemos dejar de dirigirnos a él y responder a la súplica y estímulo que ha provisto tan bondadosamente! ¿No está usted de acuerdo? ¿No sería excelente si se pudiera decir de uno, como Pedro escribió, que “ustedes, como ovejas, andaban descarriados; pero ahora se han vuelto al pastor y superintendente de sus almas”?—1 Ped. 2:25.
[Ilustración de la página 18]
Judá hace súplica por Benjamín