Restauración de la religión verdadera hoy día
1. ¿Por qué sabemos que la profecía en Amós 9:11-15 comenzó a tener su cumplimiento en los días de los apóstoles?
LA PROFECÍA registrada en Amós 9:11-15 empezó a cumplirse por la obra de Cristo Jesús y sus apóstoles en la primera presencia. Sabemos que esto es así porque Santiago citó esta profecía en una reunión especial celebrada en Jerusalén en aquel tiempo cuando había tanta discusión concerniente a la circuncisión de los gentiles que se volvían a la religión verdadera. Pedro primero testificó que “Dios hizo la selección entre ustedes de que mediante mi boca personas de las naciones oyeran la palabra de las buenas nuevas y creyeran; . . . Y no hizo absolutamente ninguna distinción entre nosotros y ellas, sino que purificó sus corazones por fe.” Bernabé y Pablo relataron las muchas señales y maravillas que Dios hizo por medio de ellos entre las naciones. Después de cesar ellos de hablar Santiago respondió, diciendo: “Hermanos, escúchenme. Simeón [Pedro] ha relatado cabalmente cómo Dios por primera vez dirigió su atención a las naciones para tomar de ellas un pueblo para su nombre. Y con esto las palabras de los Profetas están de acuerdo, justamente como está escrito: ‘Después de estas cosas regresaré y reedificaré el palacio real de David que se ha caído, y reedificaré sus ruinas y lo levantaré de nuevo, para que los que queden de los hombres sinceramente busquen a Jehová, junto con gentes de todas las naciones, personas que son llamadas de mi nombre, dice Jehová, quien está haciendo estas cosas que él ha conocido desde la antigüedad.’”—Hech. 15:7-18. NM.
2, 3. Explique por qué el propósito de Jehová de edificar el Palacio Real no fracasó.
2 No se comenzó ningún gran programa de edificación para levantar un palacio de piedra en ese tiempo, pero lo que sucedió fué que la prometida restauración de la línea real de Judá vino a ser un hecho, aunque sólo unos pocos en ese tiempo recibieron al Rey y la nación en conjunto fué desechada debido a incredulidad. Jesús dijo: “¡Miren! su casa se les deja a ustedes. Porque yo les digo: De ninguna manera me verán de aquí en adelante hasta que digan: ‘¡Bendito es el que viene en el nombre de Jehová!’” (Mat. 23:38, 39, NM) Como nación nunca lo hicieron. Sin embargo, el propósito de Jehová no fracasó, porque él se dirigió a las naciones para llamar de ellas el número requerido para el Palacio Real. Aunque Jehová tenía una brecha perpetua con la casa natural de Israel, no obstante la brecha fué cerrada para con los que componen la casa real espiritual por medio de Jesucristo, el gran cerrador de la brecha y restaurador de la religión verdadera.
3 Jesucristo era la “piedra de fundamento” de Sión. Él era el heredero del Reino y la “piedra angular de fundamento” del santuario. Él dijo a los judíos: “Demuelan este templo, y en tres días lo levantaré.” “Por lo tanto los judíos dijeron: ‘Este templo fué edificado en cuarenta y seis años, ¿y usted lo va a levantar en tres días?’ Pero él hablaba acerca del templo de su cuerpo.” (Juan 2:18-21, NM) También está registrado: “Jesús le dijo: ‘Yo soy el camino y la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí.”’ (Juan 14:6, NM) El templo de los judíos por lo tanto fué abandonado como santuario para la adoración verdadera de Jehová. La adoración verdadera después de eso sólo podía ofrecerse en y por medio de Cristo Jesús. Por consiguiente el cristianismo vino a ser la única religión verdadera.
4. ¿Cómo llegó a ser Jesús el “reparador de brechas” y “restaurador de senderos”?
4 Jesucristo restauró las “sendas antiguas” a sus discípulos, para que pudieran ejercer la misma fe que Abrahán y otras personas fieles habían ejercido. Como preparación para esta obra, Juan el Bautista había ministrado para volver el corazón de los hijos hacia los padres, para preparar un pueblo para Jehová y para preparar el camino delante de él. Esta fué una obra “Elías,” que exhortó a la gente al arrepentimiento para que Jehová no hiriera a la tierra con una maldición. Como nación los israelitas rehusaron arrepentirse y fueron heridos con una maldición de la cual jamás se recobraron. Sólo un resto pequeño permaneció leal y fiel, pero no en cantidad suficiente para formar la Casa Real celestial, que estaba predestinada a constar de 144,000 miembros. Pero debido al sacrificio de Cristo Jesús y la bondad inmerecida de Jehová la invitación salió a las naciones del mundo para sacar de ellas un pueblo para formar el Palacio Real. Quedó derrotado el proyecto de Satanás para impedir que la religión verdadera fuese restaurada, y la brecha que intentó crear mediante sus agentes fracasó. En este tiempo, entonces, Cristo Jesús fué el “reparador de brechas, restaurador de senderos donde se pueda habitar,” porque reparó y restauró la religión verdadera manteniendo integridad y fielmente adhiriéndose al propósito de su Padre, y honrando y ensalzando el nombre de Jehová, de tal modo suministrando el ejemplo perfecto para los que quisieran seguir en sus pisadas.
RELIGIÓN VERDADERA RESTAURADA HOY DÍA
5, 6. ¿Cuándo solamente podían ser separados el “trigo” y la “cizaña;” y por qué? y ¿cómo se ha hecho este trabajo en estos últimos días?
5 Hace setenta años los adoradores de Jehová se encontraban esparcidos y azorados en los numerosos sistemas religiosos falsos de este mundo, porque en aquellos días no había una organización a la cual pudieran congregarse. El “trigo” y la “cizaña” crecían juntos, y nadie había sido autorizado para recoger el “trigo.” No podía hacerse eso hasta que el Señor de la cosecha diera el mandato. Correspondiendo con los acontecimientos de la primera venida, primero se desempeña una obra “Elías,” semejante a la obra de Juan el Bautista, para amonestar a la gente, tratando de traerla al arrepentimiento. Dicho trabajo se prosiguió de manera particular de 1878 a 1918, aunque trabajo semejante todavía continúa con mayor intensidad, y se conoce como la obra “Elíseo,” y ésta continúa hasta el Armagedón, cuando Jehová “hiera la tierra con maldición.”
6 La ilustración del “trigo” y la “cizaña” indica que algunos siervos querían separar antes de que fuera tiempo. “Ellos le dijeron a él: ‘¿Quieres, entonces, que salgamos y la recojamos?’ Él dijo: ‘No; no sea que por casualidad, mientras recogen la cizaña, desarraiguen el trigo con ella. Dejen que ambos crezcan juntos hasta la siega. . . . La siega es la consumación de un sistema de cosas.’” El fin de este viejo sistema de cosas se ha manifestado desde 1914, y por lo tanto no podía efectuarse la gran obra de separación sino hasta después de ese tiempo, dividiendo el “trigo” de la “cizaña,” realmente los “hijos del reino” de los “hijos del inicuo.” Jesús profetizó respecto a esto: “Y él enviará a sus ángeles con un gran estruendo de trompeta y ellos juntarán a sus escogidos desde los cuatro vientos, desde una extremidad de los cielos hasta la otra extremidad.”—Mat. 13:28-30, 39; 24:31, NM.
7. ¿Qué sobresaliente verdad ha acompañado a la restauración de la religión verdadera?
7 Aunque las verdades de la Biblia estuvieron siendo restauradas durante esa obra “Elías” del pueblo de Dios, el nombre de Jehová como tal no se usaba libremente en las asambleas y en el ministerio del campo de sus siervos. Hace unos treinta años el pueblo reunido comprendió la gran importancia encerrada en este nombre santo, y se puso a aprender más acerca de él. En 1926 The Watchtower (La Atalaya) con fecha 1 de enero publicó el artículo principal “¿Quiénes honrarán a Jehová?” y desde ese tiempo el nombre ha llegado a ser más vital y significante para sus hijos. Luego en 1931, en una convención en Columbus, Ohío, el nombre fué adoptado por miles de cristianos fieles y desde entonces han llegado a ser conocidos como “testigos de Jehová.” Desde ese tiempo este pueblo ha ganado fama por todo el mundo por creer en este nombre, por integridad hacia este nombre, por sufrimiento, lealtad y amor a este nombre. En toda prueba ha honrado el nombre de Jehová hasta que hoy día cientos de miles de personas confían en él, y al mismo tiempo ha llegado a ser un nombre que impone temor en los enemigos de Dios. El levantar en alto este nombre ha traído gran reproche y sufrimiento, pero también ha traído gozo y deleite en abundancia. Jehová honra a los que lo honran.
8. ¿Cómo han actuado los religiosos falsos hacia el nombre de Jehová y la religión verdadera?
8 Durante los cuarenta años antes de 1914, y los casi cuarenta años desde entonces, todo esfuerzo se ha hecho para hacer que los religiosos falsos se arrepientan y vuelvan a Jehová. Con insolencia ellos dicen: “¿Quiénes son ustedes? ¡Apártense de nosotros! ¡No queremos que nos prediquen y tampoco queremos oír el nombre de Jehová en nuestros oídos!” En su arrogancia y blasfemia estos llamados cristianos en terquedad desprecian tanto al nombre de Jehová como a los que defienden ese nombre. Sí, han ido hasta el grado de erradicarlo del registro de la Santa Palabra. No quieren verlo ni quieren permitir que otros sepan acerca de él. Seguramente están tratando de borrar de la existencia el nombre para siempre. Esta es una actitud terrible y profanadora la que han adoptado, y sirve para probar de quién son siervos. Ciertamente no son religiosos verdaderos, porque en realidad ellos dicen: “Dejad de poner a nuestra vista al Santo de Israel.”—Isa. 30:11, NC.
9. ¿Tiene que decidir la gente hoy entre Jehová y Satanás, y por qué?
9 El tiempo se ha acercado para que Jehová castigue a estos destructores del Nombre. Se acercan terribles destrucciones y se requiere acción inmediata de todos los que oyen el mensaje de la religión verdadera y que están a favor de Jehová y contra la idolatría. Los profetas falsos dicen a la gente que estas cosas no sucederán, y que no tema el Armagedón. Ellos dicen: “¡Paz! ¡paz!,” pero no hay paz. Sí, ellos pueden decir cosas suaves, pero todas esas mentiras y cohonestación no cambian la verdad. La gente tiene que escoger a quién servirá, a Jehová o a Satanás. El nombre de Jehová ha sido ensalzado entre su pueblo recogido, y en su organización él es adorado. Las verdades que Cristo Jesús y los apóstoles enseñaron han sido restauradas. Las promesas que Jehová hizo mediante sus siervos fieles que vivieron antes de Cristo son promesas en que estas personas fieles creen hoy día.
EL PALACIO REAL REEDIFICADO Y BENDICIÓN PARA OTROS
10. Explique cómo ha sucedido que hay una rotura o brecha irreparable entre Jehová y los cristianos profesos.
10 Los de la cristiandad profesan ser los llamados a la gloria celestial, pero la vasta mayoría es infiel y es un pueblo rebelde. Han repudiado la palabra de Dios y se avergüenzan de su nombre Jehová, y aborrecen al pueblo que lleva su Nombre. Han sido juzgados indignos de seguir siendo reconocidos. Por más de treinta años han sido desechados de cualesquier favores dados por Jehová. La rotura con ellos es irreparable, y de entre los millones de cristianos profesos sólo unos cuantos han sido hallados fieles y han sido introducidos a los privilegios de servicio sagrado. Jehová dirige su favor a los otros y miles son invitados a ocupar los lugares hasta que el número completo se junta. Satanás ha tratado de producir una brecha aun con los “que quedan,” por medio de temor, persecución y trabajando por medio de individuos hipócritas, pero ha fracasado por completo; porque aunque una pequeña brecha vino de 1917 a 1919 ésta fué cerrada y para 1922 la brecha estuvo completamente reparada.
11. ¿Por qué nunca podrá Satanás y la religión falsa volver a causar el derrumbe de la religión verdadera?
11 El Señor Jesucristo volvió como Rey del nuevo mundo de Dios, apareciendo en su gloria. Es tiempo para el más grande programa de construcción que el mundo jamás ha conocido, porque la Casa Real en los cielos ha de ser edificada y se han de colocar los cimientos para un reinado de mil años. Jamás será posible que la religión falsa vuelva a tomar posesión, porque los esclavos fieles de Jehová serán los que cuidarán de los asuntos del nuevo mundo. Está escrito: “Te levantarás, y tendrás piedad de Sión; porque es tiempo de favorecerla, porque el plazo va llegando. . . . Así temerán las naciones el nombre de Jehová, y todos los reyes de la tierra tu gloria. Porque Jehová habrá edificado a Sión; habrá aparecido en su gloria. Habrá vuelto el rostro para escuchar la oración de los desamparados: pues no ha despreciado su oración. Esto será escrito para la postrera generación.” (Sal. 102:13-18) Desde 1918 la Sión celestial ha sido edificada y ahora sólo quedan unos cuantos de esa Casa Real sobre la tierra. El gran Edificador, Cristo Jesús, ejerce su gran poder y levanta del sepulcro a los que han muerto en unión con él y éstos son introducidos en su herencia celestial, siendo edificados en la permanente Casa Real de Jehová.—Juan 6:53, 54.
12, 13. (a) ¿Quiénes son estas personas, y de dónde vienen? (b) ¿Por qué es razonable concluir que Jehová no llama a dos clases al mismo tiempo?
12 La Casa Real es el santuario para todas las naciones. Todas las otras casas están representando alguna religión falsa. Las tales atesoran sus edificios literales, tradiciones, rituales, formas de adoración y antigüedad, pero al mismo tiempo aborrecen el nombre de Jehová y el pueblo de Jehová. Las tales jamás conseguirán salvación, pero todos los amadores del nombre de Jehová sí la conseguirán. Ahora que la Casa Real ha sido reedificada, es muy obvio que Jehová está reuniendo de todas las naciones otra clase además del resto “electo” de la Casa Real, a saber, las otras ovejas de su Pastor Propio, Jesucristo. Él no llama humanos a ser miembros de dos clases al mismo tiempo, y luego deja que escojan lo que quieren hacer. No, Jehová no es el autor de confusión. La invitación para una clase se cierra y para la otra se abre.
13 No hay nada extraño acerca de ello, porque Jehová tuvo la misma clase de tratos en los días de Cristo Jesús, cuando Jesús comenzó a predicar: “El reino de los cielos se ha acercado.” Entonces fué cuando Juan el Bautista dijo: “El que tiene la esposa es el esposo. Sin embargo, el amigo del esposo, cuando se pone de pie y lo oye, tiene mucho gozo a causa de la voz del esposo. Esto, verdaderamente, se ha cumplido como mi gozo. Aquél debe seguir aumentando, pero yo debo seguir menguando.”—Juan 3:29, 30, NM.
14. ¿Cómo apoya esto el texto en el Apocalipsis 7:4-14?
14 Así sucede en estos últimos días: la invitación general para ser del Cristo ha concluído y otra clase aparece, una enorme muchedumbre. Está escrito: “Y oí el número de los que fueron sellados, ciento cuarenta y cuatro mil, . . . Después de estas cosas yo vi, y, ¡he aquí! una grande muchedumbre, que ningún hombre podía contar, de entre todas las naciones y tribus y pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos de mantos blancos, . . . Y me dijo: ‘Estos son los que salen de la grande tribulación, y han lavado sus mantos y los han emblanquecido en la sangre del Cordero.’” (Apo. 7:4-14, NM) Note las palabras “Después de estas cosas yo vi,” lo cual claramente significa que después que los ‘electos’ han sido recogidos entonces otra clase aparece.
15. El estar “de pie delante del trono” ¿qué es? y ¿cuándo fué identificada públicamente esta clase por primera vez?
15 Todo esto sucede porque el Palacio Real ha sido reedificado y la religión verdadera ha sido restaurada, haciendo posible que la grande muchedumbre adore. La invitación para ser uno de los que están “de pie delante del trono” no es un asunto casual. Realmente es el más grande honor y privilegio que pueda tener alguna criatura de la tierra hoy día. Hasta el año 1935 el pueblo de Jehová no conocía la identidad de la “grande muchedumbre.” Pero en 1935 se publicó por todo el mundo que Jehová estaba llamando a esta clase; las puertas estaban abiertas de par en par. El acontecimiento que señaló esta vital revelación tuvo lugar en una convención del pueblo de Jehová en Wáshington, D. C. Jehová tenía algo en reserva para estos favorecidos, porque La Torre del Vigía, hoy La Atalaya, con fecha de mayo de 1935, declaró: “Se espera que muchos del resto y de los Jonadab [otras ovejas] puedan asistir a esta convención. Anteriormente no muchos de los Jonadab han tenido el privilegio de asistir a una convención, y la convención en Wáshington será un verdadero consuelo y beneficio para ellos.” (Página 66) ¡Cuán poco se dieron cuenta, a medida que los miles se dirigían a Wáshington, que Jehová iba a revelar esta gran verdad de que ahora estaba sacando de las naciones un pueblo que tenía una esperanza terrestre! En esta convención el mensaje principal tenía que ver con “la grande muchedumbre,” y explicaba en todo detalle los textos del Apocalipsis 7:9, 13. La Torre del Vigía de fecha de septiembre de 1935 claramente identificó a esta clase. Por primera vez se aclaró que esas muchas personas de buena voluntad que se estaban asociando con los ungidos no eran una indefinida conglomeración de gente, sino que fueron llamadas con un propósito y para un lugar claramente definido en la organización visible.
16. ¿Qué hace posible que estas dos clases adoren y sirvan juntas armoniosamente?
16 Desde esta identificación cada uno en la organización teocrática ha sabido si es uno de los pocos “que quedan” de los que han sido llamados a la Casa Real celestial o uno de los llamados a la posición terrestre delante del trono. La religión verdadera mantiene a ambas clases en su lugar adecuado, ambas teniendo la esperanza de vida en el nuevo mundo de Dios. Desde 1935 una clase ha estado menguando en números sobre la tierra, mientras que la otra clase ha estado aumentando hasta que hoy hay cientos de miles de la “grande muchedumbre” regocijándose en la esperanza de vida sobre la tierra, mientras que los otros ahora ascienden a sólo unos cuantos miles. A Sión estos miles crecientes se apresuran en bandadas como palomas que regresan a los palomares. “Tus hijos vendrán de lejos, y tus hijas serán llevadas en brazos. ¿Quiénes son estos que vuelan como una nube, o a la manera de las palomas que vuelven en bandadas a sus ventanas?”—Isa. 60:4, 8.
17. Explique por qué estos miles vienen a la organización de Dios.
17 El profeta habla de naves que los traen. “Porque me esperarán tierras lejanas, y las naves de Tarsis, como al principio, para traer tus hijos de lejos, y con ellos su plata y su oro, por amor al nombre de Jehová tu Dios, y a causa del Santo de Israel; porque él te ha glorificado.” (Isa. 60:9) Jehová es la meta y todos los que regresan se disponen para el servicio de Jehová, procedente de quien esperan toda cosa buena. La profecía indica que una flota entra trayendo a los hijos de lugares lejanos. ¿Cuán lejanos? Pues, desde los “fines de la tierra.” Ciertamente muy lejos de los cristianos profesos, que se entregan a adoración que profana a Dios. Es tiempo de que estos cientos de miles vengan, y están viniendo. Hoy las personas no son llamadas por las buenas nuevas de reconciliación para ser de la ciudad celestial, sino que son llamadas a una herencia terrestre. Esto se hace posible debido a la restauración de la religión verdadera y la reedificación del Palacio Real.
¿POR QUÉ TAN FAVORECIDOS?
18. El hecho de que esta clase terrestre está siendo recogida ahora, ¿aminora la importancia de su trabajo?
18 La religión verdadera será restaurada completamente y para siempre. El nombre de Jehová es de primera importancia, porque constituye el mismo centro de la religión verdadera, y sus obras están enlazadas con su nombre. Él se propone que su nombre sea conocido en todas partes de la tierra y ha creado este pueblo ahora justamente para dicho trabajo. Jehová se propone tener personas sobre la tierra después del Armagedón, establecidas en diferentes partes del mundo. Esta nación que ahora está siendo recogida forma el núcleo de la sociedad de después del Armagedón. Será la vanguardia de los súbditos terrestres del Reino que avanzarán en el camino de la justicia durante los mil años. Los de esta grande muchedumbre que son favorecidos así deben tener presente que aunque este recogimiento de las otras ovejas es el último acto en el horario de los acontecimientos que se han de verificar antes del Armagedón, de ninguna manera es un pensamiento de último instante. Los actos últimos muy frecuentemente son de la más grande importancia, a menudo constituyendo un grandioso final. Los que son favorecidos de tal modo tienen que abandonar la religión falsa por completo y adherirse a la verdadera para mantener su posición favorecida en la organización de Dios.
19. ¿Cómo sabemos por hechos físicos que Jehová debe tener una gran obra para que la haga esta clase terrestre?
19 Otra razón para sacar a estas personas es que él ahora tiene una gran obra para que ellas la hagan antes del Armagedón. Realmente hay una obra para que ellas la hagan que no podría ser ejecutada por el resto ungido solo, aunque tiene que ser que Jehová dirige sus actividades por medio de los ungidos fieles. Empero subsiste el hecho de que el trabajo mundial en gran parte se lleva a cabo por la “grande muchedumbre,” que hoy aproximadamente asciende a 500,000, mientras que la compañía ungida ha menguado a unos 20,000. Por lo tanto Jehová ha llamado a los de esta grande muchedumbre a su servicio porque requiere de ellos que hagan la obra que él se ha propuesto para ellos en unión con los ungidos. Jehová hace miles de años expresó su propósito de que esta enorme obra se haría en la tierra hoy día, y él produce la gente para hacerla.
20. Declare otra razón por la que ahora Jehová manifiesta su favor a los que han de ser bendecidos sobre la tierra.
20 Otra razón por la cual Dios da su favor a esta “grande muchedumbre” es que ésta se inclina hacia la justicia y detesta las abominaciones de la religión falsa. No está en armonía con la blasfemia, los escarnecedores, los despreciadores de lo que es bueno. Está afligida por la iniquidad de este mundo. Jehová oye “el gemido de los presos.” Semejante a Lot de la antigüedad, estas personas están “sumamente [angustiadas] por la entrega de la gente desafiadora de leyes a conducta relajada—porque aquel hombre justo por lo que veía y oía mientras moraba entre ellos de día en día estaba atormentando su alma justa a causa de los actos licenciosos de ellos—Jehová sabe librar de la prueba a gente de devoción piadosa.” (2 Ped. 2:7-9, NM) Jehová libra a ésta, pero ésta tiene que adherirse estrictamente a la religión verdadera y jamás apartarse de ella. “Pues ‘el que quiera amar la vida y ver buenos días, que reprima su lengua de lo que es perjudicial y sus labios de hablar engañosamente, pero que se aparte de lo que es perjudicial y haga lo que es bueno; que busque la paz y vaya en pos de ella. Porque los ojos de Jehová están sobre los justos.’”—1 Ped. 3:10-12, NM.
21. ¿Cuál es el galardón que se declara que recibirán los que demuestran bondad a “los hermanos del Rey”?
21 Todavía otra razón por la cual Jehová muestra favor a estos benditos es que ellos fueron buenos para con los hermanos de su Hijo, Cristo Jesús. Está escrito: “‘Porque yo tuve hambre y ustedes me dieron algo de comer, yo tuve sed y ustedes me dieron algo de beber. . . .’ Entonces dirá el rey [Jesús] a los que están a su derecha: ‘Vengan, ustedes que tienen la bendición de mi Padre, hereden el reino preparado para ustedes desde la fundación del mundo.’” (Mat. 25:34-36, NM) Es el propósito de Jehová llamar a estos favorecidos en estos últimos días porque ellos tienen un trabajo especial que hacer ahora y también están siendo preparados para servicio futuro durante el reinado de mil años.
22, 23. Explique cómo la viuda de Sarepta prefiguró a esta clase.
22 Un ejemplo brillante se nos suministra en el registro de la viuda pobre de Sarepta, en el distrito de Sidón. Elías había estado habitando en el desierto y luego fué dirigido a Sidón. Esta era la ciudad natal de la inicua Jezabel y era un distrito infestado de la religión demoníaca. Empero fué hacia allí que Jehová dirigió sus pasos. La viuda y su hijo estaban por tener su última comida y cuando Elías llegó pidió agua. Ella dejó su ocupación y le sirvió. Ella explicó a este extranjero como ésta era su última comida, y no obstante Elías pidió que la horneara para él y primero se la sirviera a él. Él dijo: “No temas; véte y haz como has dicho; . . . Porque así dice Jehová, el Dios de Israel: La orza de harina no vendrá a menos, ni menguará la alcuza de aceite, hasta el día que Jehová diere lluvia sobre la tierra.” (1 Rey.17:8-16) La viuda creyó y tuvo confianza firme en la palabra de Elías. ¡Cuán rico tesoro era ella en esa ciudad no israelita profanadora de Dios!
23 Jehová lo envió a esta viuda. “He aquí que yo he mandado a una mujer viuda de por allí que te sustente.” (1 Rey. 17:9) Ella le dió agua, porque él tenía sed, le dió alimento porque él tenía hambre, aunque era lo último que ella tenía; pero ¡cuán grandemente fué bendecida! Ella tuvo aumento de aceite y harina, y se multiplicaban al usarlos. También su hijo fué restaurado de entre los muertos. Sólo por una comida, ella consiguió todo esto y fué reconocida por el Altísimo Dios. Igualmente sucede con las otras ovejas del Señor. Sus atenciones para con los hermanos del Señor Jesús, aunque pequeñas, se conocen. “El que recibe a un profeta porque es profeta recibirá el galardón de un profeta, . . . Y cualquiera que dé a uno de estos pequeños sólo una taza de agua fría de beber porque es un discípulo, yo les digo verdaderamente, él de ninguna manera perderá su galardón.” (Mat. 10:41, 42, NM) ¡Qué gran bendición fluye para los que son amadores del pueblo de Jehová! La religión verdadera es la fuente de dicho amor.
ENSANCHANDO LA HABITACIÓN
24, 25. ¿Cómo está ahora la sociedad del Nuevo Mundo siendo ensanchada y aumentada en fruto?
24 Los límites de la sociedad del Nuevo Mundo tienen que ser extendidos. Todo tiene que ser fortalecido y ajustado a los justos requisitos de Jehová. La organización tiene que poder aguantar el peso y presión resultantes de los números crecientes. Tiene que ser fortificada contra posibles errores y corrupción causados por los que acaban de salir de la religión falsa. Los que van entrando en la organización de Dios no pueden traer con ellos enseñanzas falsas ni ideas y acciones incorrectas. No, éstas tienen que ser dejadas fuera como una prenda de vestir que se ha descartado, asquerosa y de mal olor. A ellos se les suministran limpias prendas de vestir de identificación. Nadie debe estorbar a estos cautivos que están de regreso. No se oponga a ensanchar las provisiones para recibirlos y ponerlos a trabajar. Que estos hijos de lejos sean acomodados. Todavía muchos más vendrán, y ellos van a estar en el servicio de Dios por largo tiempo—por lo menos mil años. Por esto ahora el resto restaurado les da la bienvenida a la única “morada tranquila.” “¡Mira a Sión, ciudad de nuestras fiestas solemnes! tus ojos verán a Jerusalem, morada tranquila, tienda que no ha de removerse; sus estacas no serán arrancadas jamás, ni ninguna de sus cuerdas será rota; sino que allí, en majestad, Jehová será para nosotros.” (Isa. 33:20, 21) Será una tienda de perpetuidad, jamás removida por poder del enemigo. Ciudades serán edificadas y el desierto ha de florecer. Las ciudades son las congregaciones de los justos, establecidas para la alabanza de Jehová. Los lugares desiertos son esas condiciones estériles que requieren la predicación de la verdad para regarlas, para que pueda haber crecimiento. Mucha agua se necesita, y los lugares estériles la están consiguiendo, ¡y contemplen el aumento maravilloso! Piensen en algunos países donde misioneros y otros han estado trabajando durante la década pasada, lugares que en un tiempo estaban desprovistos de religión verdadera, y ahora vean las ciudades (congregaciones) florecientes, los desiertos desabotonando como la rosa, las parras produciendo frutos de justicia, los árboles plantados y creciendo derechos.
25 La religión verdadera ha sido restaurada, y su gran obra de producir fruto está llevándose a cabo. Los extranjeros no pueden perder el camino. “Sino que en la ley de Jehová está su deleite, y en su ley medita de día y de noche. Y será como un árbol plantado junto a las corrientes de las aguas.” (Sal. 1:2, 3) “El fruto del justo es un árbol de vida.” (Pro. 11:30) “Edificarán las ruinas antiguas; y volverán a levantar las desolaciones anteriores; y restaurarán las ciudades arruinadas, las desolaciones de muchos siglos.” (Isa. 61:4) ¡Qué maravilloso trabajo se está ejecutando por el resto ungido y la “grande muchedumbre” hoy día, y éste sólo es el comienzo del programa de reconstrucción, porque el trabajo edificador del Nuevo Mundo continuará por mil años!
26. ¿Quiénes toman parte hoy día en la obra del gran ‘reparador de la brecha y restaurador de los senderos,’ y cómo?
26 El Señor Jesús ha usado a sus fieles ungidos para sanar la gran brecha y, mediante muchos años de lucha y sufrimiento, restaurar la religión verdadera pura, la cual magnifica el santo nombre de su Padre. El camino ahora está libre y despejado para transitar en él, para todos los que se escapan de Babilonia la Grande. Por lo tanto, “serás llamado reparador de brechas, restaurador de senderos donde se pueda habitar.” El conocimiento de Jehová y de nuestro Señor Jesucristo es lo que produce la religión verdadera, y los alaba y magnifica, ocasionando obediencia completa, voluntaria y gozosa de hacer la voluntad de Dios con fe. Los que procedan así tendrán esperanza, y la esperanza de vida nos ceñirá estrechamente a Jehová y su Hijo. Por lo tanto tome parte en la religión verdadera y ayude a todos los demás a hacer lo mismo, para su bien eterno, y para la honra del nombre de Jehová.