-
Dos mandamientos de los cuales pende la LeyLa Atalaya 1960 | 15 de junio
-
-
(Mat. 6:32, 33) El amor más grande puede mostrarse hacia nuestro prójimo por medio de dirigir su atención al reino de Dios y su justicia. Los que están débiles y enfermizos desde el punto de vista espiritual, los que tienen hambre y sed de justicia, necesitan ser alimentados de las fortalecedoras verdades de la Palabra de Dios. Necesitan que alguien muestre interés amoroso en el bienestar espiritual de ellos. Jesús nos instruyó a hacer esto cuando dijo: “Vayan pues y hagan discípulos de gente de todas las naciones.”—Mat. 28:19.
Sí, el amor es tan fundamental al modo de vivir del cristiano como lo era a la obediencia de los israelitas a la Ley. No estamos bajo la Ley, pero estamos bajo la obligación de amar a Jehová nuestro Dios con todo nuestro corazón y mente y alma, y a nuestro prójimo como a nosotros mismos.
-
-
“Hágase tu voluntad en la tierra” (Parte 36 de la serie)La Atalaya 1960 | 15 de junio
-
-
“Hágase tu voluntad en la tierra” (Parte 36 de la serie)
El largo conflicto, de miles de años de duración, entre el rey del Norte y el rey del Sur, según se predijo en el capítulo once de la profecía de Daniel, había de terminar después que Miguel, el Príncipe celestial que defendía al pueblo de Daniel, se levantara autorizado con poder del Reino. Puesto que el príncipe Miguel es la misma persona que el actualmente glorificado Señor Jesucristo, el acto de levantarse Miguel en su Reino celestial aconteció al fin de los “tiempos señalados de las naciones” en 1914 d. de J.C. Después que terminó la primera guerra mundial en la tierra, la cual señaló el comienzo del reinado celestial de Cristo, él despertó al resto de tus fieles seguidores de su sueño de inactividad semejante a la muerte y los puso a iluminar a los pueblos de todos las naciones por medio de predicar las buenas nuevas del Reino establecido. Bajo la influencia iluminadora del espíritu santo de Dios, estos cristianos ahora despiertos corrieron de aquí para allá a través de las páginas de la Palabra de Dios y él los bendijo con un aumento en ensanche continuo del conocimiento espiritual. Por mandato de él mediante Miguel, éstos se levantaron y empezaron a difundir la luz de la verdad revelada de Dios, cosa que los hizo brillar como el sol con resplandor glorioso, para hacer volver a justicia a una grande muchedumbre de “otras ovejas.”
“TIEMPOS” Y “DÍAS” PROFÉTICOS
9. ¿Dónde estaba Daniel cuando tuvo esta visión, y qué pregunta oyó él que se hizo?
9 Cuando Daniel recibió la visión final en el tercer año del rey Ciro de Persia él estaba al lado del río mesopotámico, Tigris, antiguamente llamado Hiddekel. (Dan. 10:4) Después de la visión él recibió medidas de tiempo que son de gran interés a nosotros que estamos buscando la felicidad durante el “tiempo del fin” de este mundo. Dice él: “Entonces yo Daniel miré, y he aquí a otros dos que estaban en pie, el uno de esta parte a la ribera del río, y el otro de aquella parte a la ribera del río. Y dijo uno de ellos al varón que traía las vestiduras de lino blanco, que estaba en pie sobre las aguas del río: ¿Para cuándo será el fin de estas maravillas?” (Dan. 12:5, 6, Mod) El ángel que se pereció a un hombre vestido de lino y que estaba milagrosamente en pie sobre las aguas del río Tigris era el asociado de Miguel, el ángel que había traído la visión a Daniel en respuesta a su oración. Dos otros ángeles aparecieron, uno de ellos en la misma ribera del río donde estaba Daniel. Para beneficio de Daniel, pero más particularmente para el de nosotros hoy día, uno de éstos preguntó al ángel que había traído la visión a Daniel cuanto tiempo pasaría antes del “fin de estas maravillas,” es
-