Escuche las palabras de Daniel para nuestro día
“Y él pasó a decir: ‘Anda, Daniel, porque las palabras quedan secretas y selladas hasta el tiempo del fin.’”—Dan. 12:9.
1. ¿Cuándo habían de hacerse comprensibles al entendimiento humano las palabras del profeta Daniel, y qué privilegio especial reconocemos que tenemos?
EL PROFETA Daniel predijo los tiempos trascendentales en los cuales vivimos ahora. Los escritos proféticos de Daniel, que abundan de significado profético para nuestro día, son fuente de fortaleza y estímulo para los cristianos hoy día. Se pueden emocionar al tener las maravillosas visiones y profecías de Daniel para este “tiempo del fin.” Sí, de ahí es donde se origina el término “tiempo del fin”... de los escritos de Daniel. Daniel estaba tan profundamente interesado en el cumplimiento de sus profecías que le preguntó al ángel de Dios en cuanto al asunto. El ángel le dijo que el cumplimiento era un secreto y que estaría sellado hasta el “tiempo del fin,” y es precisamente en ese tiempo que nosotros estamos ahora. ¡Cuán emocionado estaría Daniel si pudiera estar vivo hoy día mientras su libro de profecía se hace comprensible al entendimiento humano! ¡Ah, cómo le regocijaría y deleitaría el haber alcanzado este tiempo de la historia en que viene la culminación de sus palabras proféticas! Por lo tanto, debería causarnos gran deleite el examinar las palabras de Daniel para nuestro día, reconociendo el privilegio especial que tenemos de entender lo que Daniel mismo no podía discernir.—Dan. 12:4, 8, 9.
2, 3. ¿Cómo llegó a estar Daniel en Babilonia, y sobre qué base sabía que él y sus compañeros estarían allí por largo tiempo?
2 ¿Quién fue este profeta? Daniel escribió sus profecías principalmente en Babilonia. Fue llevado allá por el rey Nabucodonosor junto con otros que fueron seleccionados para recibir entrenamiento especial para servicio en la corte del rey. Con Daniel estuvieron Hananías, Misael y Azarías, pero Nabucodonosor les cambió los nombres a aquellos con los cuales estamos más familiarizados: Sadrac, Mesac y Abednego. Las edades de estos cuatro jóvenes de la tribu de Judá probablemente variaban de unos catorce a dieciocho años.—Dan. 1:1-7.
3 Eran esclavos en Babilonia, y Daniel sabía que estarían en el destierro por largo tiempo. Él estuvo allí antes de que Jerusalén fuera destruida en 607 a. de la E.C. Y después de ese acontecimiento, sabía que toda la tierra de Judá estaría desolada por setenta años. ¡Qué largo tiempo para estar alejados de su tierra natal!—Dan. 9:1, 2; Jer. 29:10.
VISIÓN DEL REINO DE DIOS ESTABLECIDO
4, 5. En el primer año de Belsasar, rey de Babilonia, ¿qué visiones tuvo Daniel, y cómo describió la apertura del Tribunal en el cielo?
4 Pasaron los años y pronto se acercó el día en que el brillo de la potencia mundial babilónica tenía que ser deslustrado para siempre. El último de su dinastía de reyes caldeos estaba en el trono del gobierno mundial. Era el primer año de Belsasar, el rey de Babilonia. (Dan. 7:1-8) El sueño y las visiones de la propia cabeza de Daniel sobre su cama en aquel año tuvieron que ver con el auge y la caída de potencias mundiales, simbolizadas por pavorosas bestias. Al apartar los ojos Daniel el profeta de la cuarta terrible bestia que salió del mar, se le dio una visión de una escena celestial que tiene mucho que ver con nuestro día:
5 “Seguí contemplando hasta que se colocaron tronos y el Anciano de Días se sentó. Su ropa era blanca justamente como la nieve, y el cabello de su cabeza era como lana limpia. Su trono era llamas de fuego . . . Había una corriente de fuego que fluía y salía de delante de él. Había mil millares que seguían ministrándole, y diez mil veces diez mil que seguían de pie directamente delante de él. El Tribunal tomó asiento, y hubo libros que se abrieron.”—Dan. 7:9, 10.
6. (a) ¿Quién es el Anciano de Días, y cuándo se cumple esta visión de la apertura del Tribunal en el cielo? (b) ¿Qué libros llegan a estar bajo el escrutinio del Juez celestial, y por qué?
6 ¡Qué maravillosa visión! El Tribunal está en sesión en el cielo, y la escena es durante nuestro tiempo, desde el año 1914 E.C. en adelante. Durante este tiempo se está efectuando el juicio de las naciones. Pronto Jehová Dios procederá a ejecutar los gobiernos nacionales e imperios representados por las feroces bestias descritas por Daniel. El Anciano de Días no podía ser otro sino Jehová Dios. Desde el otoño de 1914 E.C. los libros o registros hechos por las naciones durante los “siete tiempos” de régimen gentil han sido abiertos. Un registro bestial llega a estar bajo el escrutinio del gran Juez. Los “tiempos señalados de las naciones” han expirado. (Luc. 21:24) Las naciones no merecen que se les ceda por más tiempo la soberanía sobre la Tierra. Por lo tanto, ha llegado el tiempo para que el Heredero Permanente del rey David sea instalado como rey en este tiempo trascendental de la historia.
7. (a) ¿Por qué podemos maravillarnos de esta visión en que los ángeles están de pie delante del Anciano de Días? (b) ¿Qué estímulo hay para el pueblo de Dios, especialmente para los superintendentes y siervos ministeriales, en esta visión?
7 Imagínese a todos aquellos ángeles en el cielo de pie delante del Anciano de Días —cien millones de ellos— esperando oír sus justos decretos y regocijarse por ellos. Bien podemos maravillarnos de los 100.000.000 de ángeles que están de pie delante del Juez Supremo. Cuando se piensa en ello, una comitiva de un millón de ángeles sería estupenda. ¡Qué habilidad se debe necesitar para tratar con tantos, tantos millones! ¿Cómo puede él verlos a todos y tratar con tantos a la vez? La manera en que Jehová Dios se encarga de todos estos ángeles por sí mismo es casi incomprensible para nosotros. ¡Qué gran y maravilloso Organizador! Tratar con cien millones, y asignar a cada uno su trabajo. Esto debe dar fuerte estímulo a los que están en la organización visible de Jehová hoy. El Gran Organizador puede ayudar a su pueblo en la organización del trabajo del Reino, y, además, podemos confiar en que estos ángeles que ministran nos ayuden en tiempo de necesidad y nos auxilien para que se logre terminar la obra de predicación del Reino. Trabajemos con estos ángeles, nuestros hermanos celestiales, que están de pie en la presencia del Anciano de Días.—Pro. 16:3; Heb. 1:14.
8. ¿A quién ve Daniel que enseguida obtiene acceso al Anciano de Días, y qué se le da?
8 Pero ahora Daniel ve algo electrizante: “Seguí contemplando en las visiones de la noche, y, ¡pues vea! con las nubes de los cielos sucedía que venía alguien como un hijo del hombre; y al Anciano de Días obtuvo acceso, y lo presentaron cerca, aun delante, de Aquél. Y a él fueron dados gobernación y dignidad y reino, para que los pueblos, grupos nacionales y lenguajes todos le sirvieran aun a él. Su gobernación es una gobernación indefinidamente duradera que no pasará, y su reino uno que no será reducido a ruinas.”—Dan. 7:13, 14.
9. (a) ¿A quién se identifica como el “hijo del hombre,” y por qué es apropiado eso? (b) ¿Qué tiempo ha llegado, en armonía con lo que se predijo en los Salmos?
9 ¿Quién es éste a quien se trae al Tribunal Divino? Es “alguien como un hijo del hombre.” Pero, ¿no es ésta una escena celestial? Sí, pero el término “hijo del hombre” aquí señalaba hacia el tiempo en que este Hijo celestial de Dios llegaría a ser hombre sobre la Tierra y sería conocido como Jesucristo. Ahora está ensalzado a gloria celestial, pero todavía retiene el título “hijo del hombre,” que ganó por su fiel proceder en la Tierra. Aquí en esta visión Daniel ve al “Hijo del hombre,” el Señor Jesucristo. (Mat. 25:31) Ha llegado por fin el tiempo en que él se presenta delante del Anciano de Días y le pide las cosas que se le deben según el pacto para el reino sobre toda la Tierra. (Sal. 110:1-6) Toda la evidencia, visible y espiritual, prueba que Jesucristo ha recibido ‘las naciones como su herencia y los cabos de la tierra como su propia posesión,’ para cumplir la visión de Daniel. (Sal. 2:8) ¡Qué emocionante tiempo en el cual vivir, ahora que Jesucristo ha recibido el poder del Reino y rige como Rey!
PRUEBA POR EL PUNTO EN CUESTIÓN DE LA ADORACIÓN
10. ¿Qué punto en cuestión afrontan especialmente hoy los cristianos, y qué ejemplo tienen para ayudarlos a hacerle frente?
10 Habiéndose establecido el reino de Dios en los cielos, el punto en cuestión que afrontan todos los que dicen ser cristianos es crítico: ¿A quién darán adoración? ¿A Jehová el Altísimo que rige como Rey por medio de su Hijo, o a dioses e imágenes hechos por los hombres? (Rev. 11:15, 17; 13:11-18) Para ayudar a los cristianos a mantenerse firmes en su resolución de jamás ceder a la adoración de ídolos tenemos el ejemplo de la fidelidad de los tres compañeros de Daniel: Sadrac, Mesac y Abednego. Aunque todavía eran esclavos, fueron nombrados sobre la administración del distrito jurisdiccional de Babilonia. Dado que todos los siervos de Jehová tarde o temprano tendrán que enfrentarse a pruebas de fe, no extraña el que Satanás estuviera maniobrando a aquellos testigos fieles de Jehová hacia un conflicto directo con el rey respecto al punto en cuestión de la adoración.
11, 12. (a) ¿Qué imagen erigió el rey Nabucodonosor, y cuál pudo haber sido su propósito? (b) ¿Qué proclamación hizo el heraldo real?
11 El rey Nabucodonosor mandó hacer una imagen grande de oro. (Dan. 3:1-3) Medía de alto aproximadamente lo que mide un edificio de nueve pisos y medía 2,74 metros de grueso. Entonces comenzó a reunir a los prefectos y a los gobernadores, a los consejeros, a los tesoreros, a los jueces, a los magistrados policíacos y a todos los administradores de los distritos jurisdiccionales para que vinieran a la inauguración de la imagen. Pero, ¿por qué hizo el rey una imagen de oro tan costosa? Bueno, la historia registra que el rey Nabucodonosor era sumamente religioso, a tal grado que los anales de Babilonia dan más atención a sus hazañas relacionadas con la religión y la adoración de los dioses de Babilonia que a sus operaciones militares. Y aquí en la llanura de Dura este rey con inclinación religiosa sin duda quería unir al imperio mundial en adoración. En la Biblia no se le da nombre a esta imagen; sin embargo, pudo haber sido erigida en honor del dios favorito del rey... Marduk. Quizás para poner a todos en un estado de ánimo religioso, el rey hizo arreglos para que se tocara cierta clase de música. Al mandato del rey el heraldo real gritó fuertemente:
12 “A ustedes se les dice, oh pueblos, grupos nacionales y lenguajes, que al tiempo de oír el sonido del cuerno, el caramillo, la cítara, el arpa triangular, el instrumento de cuerdas, la gaita y toda suerte de instrumentos musicales, caigan y adoren la imagen de oro que Nabucodonosor el rey ha erigido. Y quienquiera que no caiga y adore, al mismo momento será arrojado en el ardiente horno de fuego.”—Dan. 3:4-6.
13. Explique cómo los tres hebreos dieron obediencia al Estado hasta donde pudieron.
13 Los tres hebreos, obedientes al mandato del rey de reunirse, se presentaron en la llanura de Dura. Pero, ¿qué harían los tres compañeros de Daniel? Cumplieron hasta donde pudieron al reunirse con los otros. . . ¡pero rehusaron inclinarse! Nabucodonosor había deseado tanto que hubiera una participación de 100 por ciento en este ejercicio, y ¡ahora estos tres hombres rehusaban participar!
14. (a) ¿Por qué afronta el pueblo de Jehová una situación semejante en nuestro día? (b) ¿Por qué se espera que el Diablo recurra a medidas drásticas en nuestro día, así como lo hizo con los tres hebreos?
14 Hoy los siervos fieles de Jehová afrontan una situación semejante. El capítulo trece de Revelación, después de haberse considerado en el capítulo anterior el establecimiento del reino celestial de Dios, habla en cuanto a la adoración de la “bestia salvaje” y la “imagen” de la bestia salvaje, y muestra que esta adoración idólatra será exigida por la fuerza en toda la tierra habitada, bajo un disfraz u otro. De modo que hoy el punto en cuestión es el mismo: ¿Será adoración de Jehová Dios, o de dioses falsos? Y hoy el propósito del Diablo es el mismo que antes: Está tratando de obligar a todos a costa de sus trabajos y su vida a participar en la idolatría. El Diablo utiliza medidas extremadas y drásticas, y se hace referencia a estos esfuerzos diabólicos en Revelación 12:17, donde se nos dice que el dragón simbólico sale para hacer guerra contra los seguidores verdaderos de Jesucristo.
15. Muestre que el punto en cuestión de la adoración es un punto en cuestión principal en tiempos modernos, y ¿qué estímulo tenemos para ser fieles a Dios?
15 Hace treinta años en la Alemania nazi los testigos de Jehová afrontaron este ardiente punto en cuestión de la adoración. A cualquiera que no aclamaba a Hitler levantando el brazo hacia la svástica se le enviaba a un campo de concentración, para sufrir trato brutal. Hoy, detrás de la Cortina de Hierro el Estado prohíbe la predicación de las buenas nuevas del reino establecido de Dios, sea que esto se haga verbalmente o en forma impresa. En el transcurso de los años millares de los testigos cristianos de Jehová han sido encarcelados debido a rehusar someterse a las demandas impías del estado comunista, de dejar de predicar las buenas nuevas. En muchos países se ha hecho prominente el punto en cuestión del nacionalismo, en el cual el Estado exige la adoración que solo pertenece a Dios. Algo que ayudará a los cristianos en estos tiempos críticos es el excelente ejemplo de los tres hebreos fieles que dieron devoción exclusiva a Jehová a pesar de las amenazas muy aterradoras.
16, 17. ¿Cómo reaccionó Nabucodonosor cuando oyó que los tres hebreos rehusaron adorar la imagen de oro?
16 Lo mismo que algunos gobernantes u oficiales hoy día que quieren que todos los ciudadanos se inclinen en adoración del Estado o de sus dioses religiosos, cuando Nabucodonosor oyó que Sadrac, Mesac y Abednego rehusaban inclinarse, estalló en ira y ordenó una investigación. De modo que los trajeron delante de él. ¿Puede usted imaginarse a usted mismo allí de pie delante del enfurecido rey de la Tercera Potencia Mundial cuando él preguntó: “¿Es realmente así, oh Sadrac, Mesac y Abednego, que no están sirviendo a mis propios dioses, y que a la imagen de oro que he erigido ustedes no están adorando?”? (Dan. 3:13, 14) Estos hombres eran excelentes siervos en todo lo demás. ¿Por qué deberían desmandarse ahora y rehusar hacer esta cosa tan pequeña? ‘Inclínense, eso es todo lo que pido de ustedes.’ Nabucodonosor estaba dispuesto a darles otra oportunidad:
17 “Ahora, si ustedes están listos de modo que cuando oigan el sonido del cuerno, el caramillo, la cítara, el arpa triangular, el instrumento de cuerdas, y la gaita y toda suerte de instrumentos musicales, caigan y adoren a la imagen que he hecho, bien. Pero si no adoran, en ese mismo momento serán arrojados en el ardiente horno de fuego. ¿Y quién es ese dios que pueda rescatarlos de mis manos?”—Dan. 3:15.
BENEFICIO DE DECIDIRSE DE ANTEMANO
18. ¿Por qué no necesitaron los tres hebreos tiempo para decidir cómo proceder, y qué dijeron en respuesta al rey?
18 Estos hombres no necesitaron ni un momento para decidir. Ya habían tomado su decisión. Sabían desde su juventud a quién querían servir. Sin vacilación Sadrac, Mesac y Abednego respondieron: “Oh Nabucodonosor, respecto a esto no estamos bajo necesidad de devolverte palabra. Si ha de ser, nuestro Dios a quien servimos puede rescatarnos. Del horno ardiente de fuego y de tu mano, oh rey, nos rescatará. Pero si no, séate sabido, oh rey, que no es a tus dioses que estamos sirviendo, y a la imagen de oro que has erigido ciertamente no la adoraremos.”—Dan. 3:16-18.
19. (a) ¿Qué deben hacer hoy los cristianos que desean pasar con buen éxito las pruebas de integridad? (b) ¿Qué proceder nos está disponible a menudo hoy que no estuvo disponible para los tres hebreos? (c) ¿Qué ejemplo de fidelidad como la de los tres hebreos tenemos en el día moderno?
19 Lo que a estos hombres se les ordenó hacer era obviamente adorar. En nuestro día el punto en cuestión no se ve tan claro, no está tan claramente definido, pero todavía está allí de alguna manera. Para pasar las pruebas fielmente en nuestro día los cristianos verdaderos igualmente deben resolver su proceder de antemano. ¿Cuál es la posición de ellos en cuanto a imágenes del Estado y canciones que alaban a las naciones? Los tres fieles hebreos tuvieron que presentarse delante de la imagen de Nabucodonosor, pero hoy frecuentemente los cristianos dedicados pueden dar pasos para evitar situaciones difíciles. Sin embargo, cuando éstas no se pueden evitar y los siervos de Dios se ven obligados a escoger entre la idolatría y la fidelidad a Jehová, los cristianos verdaderos tienen que ser tan intransigentes como lo fueron Sadrac, Mesac y Abednego, sin importar lo aterradora que sea la amenaza si rehúsan transigir e inclinarse a otros dioses. En un país africano, hace unos cuantos años, un grupo grande de cristianos estaba reunido pacíficamente en una asamblea cuando entraron soldados armados y los hicieron marchar a una empalizada del gobierno, para golpearlos, insultarlos y torturarlos hasta que concordaran en saludar un emblema del Estado. ¡Parecía que era o saludar o morir! Los que permanecieron firmes, confiando en Jehová, recibieron abundantes bendiciones de él. Fueron librados de sus atormentadores, tal como sucedió con los testigos fieles de Jehová del día de Daniel.—Éxo. 20:4, 5; 1 Cor. 10:14.
20. ¿Qué sucedió después que los tres hebreos fueron echados al llameante horno ardiente?
20 Después que aquellos hebreos habían sido arrojados vivos en el horno ardiente, Nabucodonosor vio algo que lo asustó mucho. En realidad, Daniel dice que Nabucodonosor se levantó súbitamente y dijo a sus oficiales reales: “¿No fue a tres hombres físicamente capacitados que arrojamos atados en medio del fuego? . . . ¡Miren! Contemplo cuatro hombres físicamente capacitados paseándose libres en medio del fuego, y no sufren daño, y la apariencia del cuarto se asemeja a un hijo de los dioses.” (Dan. 3:24, 25) Entonces se acercó cuanto pudo a la puerta del llameante horno ardiente y gritó: “¡Sadrac, Mesac y Abednego, siervos del Dios Altísimo, salgan y vengan acá!”—Dan. 3:26.
21. ¿De qué manera resultó la fidelidad de los tres hebreos en un gran testimonio para todos los observadores?
21 Cuando salieron todos podían ver que el fuego no había tenido poder sobre sus cuerpos y que ni un cabello de su cabeza se había chamuscado, y hasta su ropa... pues, ¡ni siquiera olía a fuego! Su fidelidad bajo prueba resultó ser un gran testimonio para todos los observadores en aquel tiempo y aun para el rey que, obviamente sacudido por esta experiencia, se sintió impulsado a decir: “Bendito sea el Dios de Sadrac, Mesac y Abednego, quien envió a su ángel y rescató a sus siervos que confiaron en él y que cambiaron la palabra misma del rey y entregaron sus cuerpos, porque no quisieron servir y no quisieron adorar a ningún dios en absoluto excepto a su propio Dios. . . . no existe otro dios que pueda librar como éste.”—Dan. 3:28, 29.
22. (a) Muestre que el punto en cuestión fundamental hoy es el mismo que en el día de Daniel. (b) Puesto que les sobrevienen Pruebas a casi todos los siervos de Dios, ¿cuál es el derrotero prudente?
22 Igual que estos hombres, los testigos de Jehová hoy día no pueden transigir. En algunos países tienen que predicar las buenas nuevas del Reino clandestinamente. En otros se reúnen secretamente para fortalecerse para la obra que hay que hacer. Aunque son cristianos observadores de la ley, cuando se ven frente a frente a un punto en cuestión que envuelve integridad Jehová, no pueden ceder al capricho o los dictados de gobernantes nacionalistas. Hoy el pueblo de Jehová se enfrenta al mismísimo punto en cuestión que en el tiempo de Daniel: ‘¿A quién adora usted?’ Tarde o temprano estas pruebas les vendrán a la mayoría de los siervos de Dios, y se puede esperar que los que resueltamente hayan tomado su decisión de antemano resultan fieles. Mejor es tomar esa decisión ahora que postergarla hasta que uno se enfrente a alguna prueba. ¡Cuán oportuno el registro de estos hombres fieles de la antigüedad! ¡Cuán estimulador para los siervos fieles de Dios hoy día ver el resultado que Jehová Dios dio a los que rehusaron adorar a otros dioses!
SUEÑO PROFÉTICO DEL ÁRBOL
23. ¿Qué sueño tuvo Nabucodonosor más de ocho años antes de morir, y qué dijo Daniel que era la interpretación?
23 Cierta noche más de ocho años antes de que Nabucodonosor muriera tuvo un sueño que lo asustó. Cuando todos los sacerdotes practicantes de magia de Babilonia trataron de dar la interpretación y no pudieron, se llamó a Daniel a la presencia imperial, y el poderoso gobernante mundial le dijo: “Infórmame las visiones de mi sueño que he contemplado y su interpretación.” (Dan. 4:9) El sueño era de un inmenso árbol que un ángel del cielo ordenó que fuera cortado. Su tocón fue cercado con una atadura de hierro y cobre y tuvo que quedarse así entre la yerba del campo hasta que pasaran “siete tiempos” sobre él. El ángel del sueño había dicho: “Sea cambiado su corazón del de la humanidad, y que se le dé el corazón de una bestia, y pasen siete tiempos sobre él.” Pero, ¿qué significaba este sueño? ¿Asustaría su interpretación al rey Nabucodonosor tanto como el sueño mismo? Escuche las palabras de Daniel: “El árbol que contemplaste, . . . eres tú, oh rey.”—Dan. 4:10-22.
24, 25. (a) ¿Qué había de sucederle a Nabucodonosor, y por qué? (b) ¿En qué ocasión se cumplió en él el sueño del árbol, y cómo?
24 Imagínese cómo esto debe haber aumentado el interés de Nabucodonosor mientras él escuchaba atentamente a la explicación que Daniel dio después. Daniel reveló que Nabucodonosor había de ser echado de su trono al campo a comer yerba como los toros. Pero, a semejanza de aquel tocón del árbol con dos ataduras, su reino se le tendría en reserva hasta que él pasara “siete tiempos” en aquel estado de degradación. Solo entonces recobraría el juicio y se vería obligado a confesar que el Dios Altísimo rige supremamente y da el reino de la humanidad a quien Él quiere darlo. Un año más tarde el sueño se cumplió en Nabucodonosor mientras caminaba por su palacio real observando la magnífica ciudad y una de las “siete maravillas del mundo antiguo,” los jardines colgantes de Babilonia. ¡Cuán exaltado se sentía al ver toda aquella gloria! Jactanciosamente dijo: “¿No es ésta Babilonia la Grande, la cual yo mismo he construido para la casa real con la fortaleza de mi poder y para la dignidad de mi majestad?”—Dan. 4:29, 30.
25 ¡Apenas había hablado Nabucodonosor estas palabras cuando una voz desde el cielo anunció que ahora el sueño del árbol iba a cumplirse en él! En ese mismo momento se apoderó de él la locura y salió al campo a comer yerba como un toro y se quedó allí por siete años. Al fin de ese período le volvió el entendimiento, y ahora dio alabanza al Dios Altísimo más bien que apropiársela. Ese sueño y su cumplimiento directo sobre Nabucodonosor fueron cosas proféticas, que alcanzan hasta el siglo veinte mismo.
26. (a) Con la destrucción de Jerusalén en 607 a. de la E.C., ¿qué transferencia de dominación tuvo lugar? (b) ¿Qué representaron el árbol y el tocón con ataduras?
26 Cuando Nabucodonosor destruyó el reino típico de Dios, el reino de Israel, hubo una transferencia de dominación a la potencia mundial victoriosa gentil. Ahora los gobiernos gentiles habían de regir la Tierra sin interferencia del reino de Jehová Dios aun de manera típica, hasta que “siete tiempos” hubieran pasado. El árbol, que representó la dominación mundial por el reino de Dios, fue cercado con ataduras y su tocón fue dejado en el suelo. Esto simbolizó que Aquel que originalmente tenía la dominación mundial no la dejaría para siempre. El poner ataduras alrededor del tocón daba seguridad de que el árbol no estaba muerto y de que su rizoma habría de brotar otra vez.
27. (a) ¿Qué simbolizó la conducta demente de Nabucodonosor? (b) ¿Cuánto tiempo muestran las Escrituras que durarían los siete tiempos proféticos, llegando hasta qué período de tiempo?
27 Proféticamente, durante los “siete tiempos” de régimen gentil, el reino de Dios permanecería en condición baja, como aquel tocón de árbol. La conducta demente y bestial de Nabucodonosor durante el período en que siete tiempos literales pasaron sobre él representó que los gobernantes gentiles se comportarían de manera bestial durante el tiempo de su dominación mundial. Las Escrituras demuestran que los “siete tiempos” de régimen gentil fueron un período de 2.520 años, que se extendió desde 607 a. de la E.C. hasta 1914 E.C., ¡sí, hasta nuestro siglo veinte!
28. ¿Qué tuvo lugar al fin de los siete tiempos simbólicos, y por qué permite Jehová que las naciones continúen aún por un corto tiempo?
28 En 1914 Dios quitó las ataduras que había alrededor del árbol simbólico, y ha levantado al Señor Jesucristo y lo ha investido con la dominación mundial. ¡Ahora rige el reino de Dios! Es solo por la gran paciencia de Jehová que permanecen las potencias gentiles, porque él podría haber borrado las naciones en los años que vinieron inmediatamente tras el restablecimiento de su reino. Reconózcanlo o no, las naciones gentiles rigen hoy solo por la tolerancia de Dios. Jehová permite que continúen por unos cuantos años más para que las personas de cualidades de oveja de todas las naciones salgan de este sistema de cosas antes de que termine en el Armagedón.