Jehová, el Dios de revelación progresiva
1. ¿Cuál debe ser la relación del hombre con Jehová, y qué provee para esto Jehová?
JEHOVÁ creó al hombre para que dependiera de su Hacedor. Aunque el hombre poseía el gran don del libre albedrío, no iba a ser independiente de Jehová, sino que tenía que confiar en él para instrucción y guía adicionales. El hombre no podría gobernar ni ser gobernado con buen éxito sin la ayuda e información que provienen de Jehová. Es menester que tenga a Dios en su vida con el fin de que sea verdaderamente feliz y sea una bendición para otros. Puesto que el hombre fue creado de modo que dependiera de Jehová, esto quiso decir que el invisible Jehová se revelaría al hombre para mantenerlo informado continuamente concerniente a Sus propósitos y requisitos. Que Jehová sí se revela el profeta Amós lo aclaró cuando dijo: “Pues el Señor Jehová no hará nada a menos que haya revelado su asunto confidencial a sus siervos los profetas.” (Amós 3:7) Su siervo Daniel dijo al rey Nabucodonosor de modo semejante: “Sin embargo existe en los cielos un Dios que es un Revelador de secretos.”—Dan. 2:28.
2, 3. ¿Cuánto revela Jehová, al hombre concerniente a sus propósitos? ¿Por qué?
2 Esta revelación de los propósitos de Jehová viene a su propio tiempo debido. El no revela toda su voluntad inmediatamente, sino que la revela progresivamente a través de la corriente del tiempo, según la necesitan los individuos afectados. Como dice Proverbios 4:18: “Pero la senda de los justos es como la luz brillante que se está haciendo más y más clara hasta que el día queda firmemente establecido.”
3 Jehová hizo la mente del hombre. Puesto que él la diseñó, él sabe lo que es mejor para ella mucho mejor que el poseedor de la mente, el hombre. Por lo tanto, Jehová reconoce la capacidad y limitación del hombre para absorber cosas nuevas. El Salmo 103:14 nos informa: “Pues él mismo conoce bien cómo estamos formados, recordando que somos polvo.” Debido a tales limitaciones, incluyendo la carga añadida de la imperfección humana por la rebelión que ocurrió en el jardín de Edén, Jehová provee verdades espirituales a medida que el hombre puede absorberlas. ¿No estamos agradecidos por el progreso gradual de las estaciones para que nuestros cuerpos no reciban un impacto por los cambios súbitos de temperatura? Jehová ha gobernado sabiamente estas estaciones para beneficio del hombre. Ha hecho que pasen gradualmente para que el cuerpo del hombre pueda adaptarse al cambio. La mente del hombre también necesita alimentación y cambio graduales, ya que en cantidad escasa la mantendrán débil espiritualmente, pero en demasiada cantidad no se absorberán y pueden producir impacto. Es como el regar a una planta tierna. Muy poca agua no la sostiene, y la planta gradualmente se marchita y muere. Demasiada agua no puede ser absorbida por la planta, y hasta pudiera impedir su crecimiento.
4. ¿Qué dijo Jesús a sus discípulos, para confirmar esto?
4 Puesto que Jehová sabe que no podemos entender demasiadas cosas a la vez, no revela demasiado a la vez, sino que revela lo que se necesita. En los días de Jesús los discípulos aprendieron que Jehová no les daría lo que no podrían absorber en su etapa de madurez. Precisamente antes de su muerte Jesús dijo a sus discípulos: “Tengo muchas cosas que decirles todavía, pero ustedes no las pueden soportar ahora.” Los discípulos todavía no estaban preparados para las muchas verdades fuertes que iban a aprender más tarde. Cuando estuvieran preparados, entonces Jehová les revelaría estas verdades. Como Jesús prometió: “Sin embargo, cuando llegue aquél, el espíritu de la verdad, él los guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propio impulso, sino que hablará las cosas que oye, y les declarará las cosas que vienen.”—Juan 16:12, 13.
5. ¿Cómo se demostró la bondad amorosa de Jehová en conexión con el conocimiento del reino del cielo?
5 El hecho de que los discípulos tenían mucho que aprender lo pone de manifiesto la pregunta que hicieron a Jesús después de su resurrección. Le preguntaron: “Señor, ¿estás restaurando el reino a Israel en este tiempo?” (Hech. 1:6) No fue sino hasta más tarde que comprendieron plenamente que el reino en que participarían no iba a ser un reino carnal. El Reino iba a ser un arreglo celestial. Podemos comprender la bondad amorosa de Jehová al dar estas verdades a los discípulos gradualmente, puesto que la creencia de que vendría un rey literal para quitar el yugo romano y establecer un reino terrestre era una esperanza arraigada profundamente de los judíos en aquel tiempo. Si esta verdad de que el Reino estaría en el cielo y no sobre la Tierra se hubiera revelado cuando Jesús llamó por primera vez a sus discípulos, quizás no hubieran tenido la madurez para entender, comprender y continuar siguiéndolo. Las verdades fuertes dadas demasiado aprisa quizás sean indigestibles para el neófito. El principiante, como un bebé, necesita leche, no carne fuerte. Pablo dijo más tarde: “Los alimenté con leche, no con algo de comer, porque todavía no estaban bastante fuertes.”—1 Cor. 3:2.
EXPERIENCIA DE PEDRO
6, 7. (a) Describa lo que Pedro vio cuando le sobrevino un arrobamiento. (b) ¿Qué sabía ya acerca de las cosas que vio?
6 Un ejemplo de cómo Jehová revela las verdades progresivamente y acondiciona la mente de su pueblo para ellas fue la preparación de la mente de Pedro para el trabajo que iba a hacer más tarde. En el capítulo diez de Hechos hallamos el interesante relato del arrobamiento en que cayó Pedro. Los versículos 10 al 16 relatan la experiencia: “Pero le dio mucha hambre y quiso comer. Mientras se lo preparaban, le sobrevino un arrobamiento y contempló el cielo abierto y cierta clase de receptáculo que descendía como una gran sábana de lino que era bajada por sus cuatro extremos sobre la tierra; y había en éste toda suerte de cuadrúpedos y criaturas de la tierra que se arrastran y aves del cielo. Y le vino una voz: ‘¡Levántate, Pedro, degüella y come!’”
7 Podemos imaginarnos cómo se sintió Pedro, puesto que la ley mosaica prohibía a los judíos el comer algunas de esas cosas. Sin duda él recordaba los principios formulados en la Ley, como los de Levítico 11:41-43: “Y toda criatura enjambradora que enjambra sobre la tierra es cosa asquerosa. No debe comerse. En cuanto a cualquier criatura que anda sobre el vientre y cualquier criatura que anda sobre cuatro patas o sobre cualquier número grande de patas de todas las criaturas enjambradoras que enjambran sobre la tierra, no deben comerlas, porque son cosa asquerosa. No hagan asquerosas sus almas con cualquier criatura enjambradora que enjambra, y no deben hacerse inmundos por medio de ellas y realmente llegar a ser inmundos por medio de ellas.”
8. (a) ¿Cuál fue la reacción de Pedro? (b) ¿Cómo se le corrigió?
8 ¿Qué habría de hacer Pedro? Aquí había algo nuevo que no podía entender completamente. Asombrado, contestó: “De ninguna manera, Señor, porque jamás he comido cosa alguna contaminada e inmunda.” Al llegar aquí el espíritu proveyó la respuesta: “Y le habló de nuevo la voz, por segunda vez: ‘Deja tú de llamar contaminadas las cosas que Dios ha limpiado.’ Esto ocurrió una tercera vez, y en seguida el receptáculo fue tomado arriba al cielo.” Sí, aquí había algo nuevo para Pedro. Dios puede mandar que tales cosas ya no se llamen inmundas si ésa es su voluntad.
9-11. (a) ¿A qué nuevo dilema se enfrentó Pedro? (b) ¿Por qué estaba mejor preparado para absorber este requisito nuevo?
9 El aprender Pedro este nuevo pensamiento iba a servirle para uso inmediato, porque en ese mismísimo instante recibió visitantes. Estos eran hombres que habían sido despachados por Cornelio, el oficial del ejército romano. El espíritu le dijo a Pedro: “Levántate, pues, baja y vete con ellos, no dudando nada, porque yo los he despachado.” (Hech. 10:20) Los hombres refirieron la petición que Cornelio hacía de que Pedro entrara en la casa de este oficial del ejército gentil. Quería oír las cosas que Pedro habría de decir.
10 Otra vez podemos imaginarnos la perplejidad de Pedro en cuanto a entrar en la casa de un gentil. ¿No había expresado horror al pedírsele que comiera cosas inmundas? ¡Ahora se le estaba pidiendo que entrara en la casa de una persona considerada inmunda! Sin embargo, Pedro estaba mejor preparado ahora. La petición de entrar en el hogar del gentil no hizo tanto impacto como lo hubiera hecho si la mente de Pedro no hubiese sido preparada por la visión que Jehová le dio mientras estaba en arrobamiento. Más tarde Pedro reconoció que esta visión lo había preparado para la verdad más importante que vendría después. El confesó a Cornelio y a su casa: “Bien saben ustedes cuán ilícito le es a un judío unirse o acercarse a un hombre de otra raza; y no obstante Dios me ha mostrado que no debo llamar contaminado o inmundo a ningún hombre. Por lo tanto vine, verdaderamente sin oponerme, cuando se me mandó llamar.”—Hech. 10:28, 29.
11 Pedro había aprendido y aceptado una verdad nueva. Jehová suministró información nueva y entendimiento nuevo sobre un asunto aceptado previamente por siglos. Pedro entendió que, mientras estaba aprendiendo algo nuevo en conexión con lo que pudiera llamarse limpio entre los animales y las cosas que se arrastran, realmente estaba siendo preparado para una verdad mucho más importante concerniente a pueblos a quienes previamente se consideraba inmundos pero a quienes Jehová ahora pronunciaba limpios. Sí, Pedro estaba preparado para usar la segunda llave y revelar los secretos concernientes al arreglo del reino de Jehová a estos hombres de las naciones. ¡Cuán oportunamente estaba preparando Jehová la mente de Pedro para que pudiera absorber estas nuevas verdades!
PROGRESIVO DESDE EL PRINCIPIO
12. ¿Por qué no basta el ‘libro de creación divina’ para entender los propósitos de Dios?
12 Desde el tiempo de Adán Jehová ha revelado progresivamente a la familia humana sus verdades, especialmente la del Reino. A cierto grado ha usado el ‘libro de la creación divina’ para hacerlo. Como declara Romanos 1:20: “Porque sus cualidades invisibles se ven claramente desde la creación del mundo en adelante, porque se perciben por medio de las cosas hechas, hasta su poder sempiterno y Divinidad.” Sin embargo, Jehová no juzgó que era suficiente este medio de revelarse. Como podemos observar en lugares donde los hombres están rodeados de maravillas naturales, como en las selvas del África y de la América del Sur o en las regiones montañosas de Asia, todavía predomina la adoración de dioses falsos.
13. Para entender los propósitos de Jehová, ¿qué es mucho más importante?
13 Por eso, aunque el ‘libro de la creación divina’ es una ayuda para entender a Jehová, mucho más importantes son las revelaciones sobrenaturales que vienen de Jehová por medio de su “Hijo unigénito,” el Logos, y por medio de los ángeles, todo a través de su espíritu santo. Es de esta manera que Jehová revela progresivamente la verdad. Los que reciben estas verdades, hombres fieles a los requisitos de Jehová, luego las distribuyen a otros de la humanidad. Algunos de estos agentes humanos han tenido el privilegio de registrar sus expresiones inspiradas en la Biblia. Pero sea que estén registradas o no, estas comunicaciones de Jehová se han recibido sobrenaturalmente en forma de visiones, sueños, inspiración de palabra por palabra, o por la regulación de los pensamientos de alguien. Algunos de aquellos con quienes Jehová se comunicó para aumentar la información sobre sus propósitos fueron Adán (Gén. 2:16), Enoc (Gén. 5:24; Jud. 14, 15), Noé (Gén. 6:9, 13), Abrahán (Gén. 12:1-3), Moisés (Éxo. 31:18; 34:28), y los diversos profetas (Amós 3:7).
14, 15. (a) ¿Qué nuevos arreglos entraron en vigor para distribuir las verdades en el primer siglo? (b) ¿Cuáles eran algunas de estas verdades nuevas?
14 Con la llegada del Mesías en 29 E.C., muchas verdades nuevas se le revelaron a la humanidad, especialmente en cuanto al Reino. Ahora Jehová estaba hablando al hombre por medio de su Hijo sobre la Tierra, el Rey Nombrado. “Dios, que hace mucho habló en muchas ocasiones y de diversas maneras a nuestros antepasados por medio de los profetas, al fin de estos días nos ha hablado a nosotros por medio de un Hijo, a quien nombró heredero de todas las cosas, y por quien hizo los sistemas de cosas.” (Heb. 1:1, 2) En el Pentecostés se derramó el espíritu santo sobre la nueva congregación cristiana. Ahora ésta era la agencia que se usaba en la Tierra para distribuir las verdades progresivas de los propósitos de Jehová a la familia humana. Pablo mostró que así era cuando escribió: “Ahora bien, hablamos sabiduría entre los que son maduros, pero no la sabiduría de este sistema de cosas, ni la de los gobernantes de este sistema de cosas, que han de quedar reducidos a la nada. Mas hablamos la sabiduría de Dios en un secreto sagrado, la sabiduría escondida, que Dios predeterminó antes de los sistemas de cosas para nuestra gloria. Esta sabiduría ni uno de los gobernantes de este sistema de cosas la llegó a conocer, porque si la hubieran conocido, ellos no habrían fijado en el madero al glorioso Señor. Pero así como está escrito: ‘Ojo no ha visto, ni oído ha escuchado, ni se han concebido en el corazón del hombre las cosas que Dios ha preparado para los que lo aman.’ Pues es a nosotros que Dios las ha revelado por medio de su espíritu, porque el espíritu escudriña todas las cosas, aun las cosas profundas de Dios.”—1 Cor. 2:6-10.
15 Muchas fueron las verdades nuevas que Jehová reveló a la congregación cristiana del primer siglo. Por ejemplo, en el Pentecostés Pedro explicó el cumplimiento de Joel 2:28, 29. (Hech. 2:14-21) Más tarde, reveló que la salvación era posible solo por medio del nombre de Jesús. (Hech. 3:13–4:12) Solo unos cuantos días después de eso Pedro y Juan transmitieron a los hermanos la revelación de que los cristianos tenían que obedecer a Dios más bien que al hombre y recibirían espíritu santo si obraban así. (Hech. 5:29-32) Algún tiempo después de eso Esteban reveló, bajo inspiración, que vio a Jesús de pie a la diestra de Dios como prueba de que Jesús verdaderamente había regresado al cielo.—Hech. 7:56.
16, 17. ¿De qué manera se determinó la verdad nueva relativa a la circuncisión?
16 Clarificación adicional sobre la posición de los gentiles iba a recibirse aun después de la revelación de Jehová a Pedro acerca del llamamiento a los gentiles para entrar en la congregación cristiana. En 49 E.C., en una asamblea en Jerusalén, se consideró el asunto de la circuncisión para los conversos gentiles. La decisión sobre este punto en cuestión fue dirigida por Jehová y se enlazó a verdades reveladas previamente. Aquí podemos ver el procedimiento que paso a paso Jehová empleó para vigorizar el entendimiento de los discípulos en cuanto a cómo tratar con los conversos gentiles. En aquella ocasión Pedro contó lo que había sucedido años antes (36 E.C.) cuando llevó la verdad al gentil Cornelio. Pedro dijo: “Hermanos, bien saben ustedes que desde los primeros días Dios hizo la selección de entre ustedes de que por mi boca oyesen las gentes de las naciones la palabra de las buenas nuevas y creyesen; y Dios, que conoce el corazón, dio testimonio dándoles el espíritu santo, así como nos lo dio a nosotros también. Y no hizo ninguna distinción entre nosotros y ellos, sino que purificó sus corazones por fe.” (Hech. 15:7-9) Luego Santiago, que presidía, concluyó la decisión de la asamblea diciendo: “Hermanos, óiganme. Simeón ha contado cabalmente cómo Dios por primera vez dirigió su atención a las naciones para tomar de entre ellas un pueblo para su nombre. Y con esto convienen las palabras de los Profetas, así como está escrito.”—Hech. 15:13-15.
17 No solo se trataba de que los apóstoles y hombres de mayor edad decidieran por un voto lo que debía hacerse. Era el examinar ellos cómo Jehová había estado tratando con ellos y también el examinar ellos el testimonio de las Escrituras. Por eso, por el llamamiento de la experiencia de Pedro cuando presenció que el espíritu de Jehová había sido derramado sobre Cornelio y su casa aun antes de que éstos se bautizaran, y por el llamamiento de las experiencias de Bernabé y Pablo entre los gentiles y también de las Escrituras, era patente que Jehová les estaba revelando la verdad nueva de que los gentiles no tenían que ser circuncidados. Se convino con esa decisión y se transmitió a las congregaciones.
18. ¿Qué más escribió Pablo tocante a los gentiles?
18 Luego en 56-61 E.C. el apóstol Pablo escribió adicionalmente sobre el asunto de que los gentiles no estaban sujetos a la ley de Moisés. Con las Escrituras él mostró que Dios había clavado el pacto de la ley al madero de tormento de Jesús. (Rom. 6:14; 15:7-13; Col. 2:13, 14) Tales revelaciones ayudaron a los que habían sido anteriormente de la religión judía a comprender que Jehová les estaba diciendo que ahora a los gentiles también se les podía llamar para llegar a ser miembros de la novia de Cristo sin que tuvieran que someterse a los arreglos judíos previos. En 60-61 E.C. Pablo escribió a los efesios y dijo: “En otras generaciones este secreto no fue dado a conocer a los hijos de los hombres como ahora ha sido revelado a sus santos apóstoles y profetas por espíritu, a saber, que gentes de las naciones hubiesen de ser coherederos y miembros de un mismo cuerpo y participantes con nosotros de la promesa en unión con Cristo Jesús mediante las buenas nuevas.” (Efe. 3:5, 6) Gradualmente, entonces, a través de los años, se transformó la actitud de los antiguos judíos para con estos creyentes gentiles. ¡Qué impacto hubiera producido todo eso si se hubiera sabido el primer día que Jesús comenzó su ministerio!
19. ¿Cómo fue usado Juan en la revelación progresiva de Jehová?
19 Más tarde, en 96 E.C., el apóstol Juan fue usado de manera maravillosa para informar a los cristianos primitivos en cuanto a la revelación de cosas que tendrían lugar en breve. Escribiendo bajo inspiración, reveló tal información nueva en cuanto al número que formaba la clase del Reino, el número de potencias mundiales que todavía vendrían, la duración del tiempo en que Satanás estaría abismado, y otras verdades sobresalientes. Progresivamente Jehová reveló asombrosas verdades nuevas a las personas de cualidades de oveja. Sucedió tal como Jesús había dicho antes: “Te alabo públicamente, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas de los sabios e intelectuales y las has revelado a los pequeñuelos.”—Mat. 11:25.
EL ESTABLECIMIENTO DEL REINO
20. Concerniente a la verdad revelada, ¿qué había de esperarse con el establecimiento del Reino?
20 Profecías bíblicas como las del capítulo 24 de Mateo; el capítulo 13 de Marcos; el capítulo 21 de Lucas y otras definidamente indican el hecho de que el reino de Dios por Cristo ha sido establecido en los cielos desde 1914. Puesto que Jehová reveló muchas verdades en generaciones previas para ayudar a entender el propósito que tenía con este reino, ¿hemos de esperar menos revelación de verdades estando ese reino establecido plenamente y estando su Hijo–Rey Jesucristo instalado en el poder? ¡Ciertamente que no! El establecimiento del Reino fue la señal para un aumento tremendo de verdad revelada que habría de distribuirse al pueblo de Jehová en la Tierra. Con la entronización del Rey vino la expedición de una corriente continua de instrucciones para los súbditos obedientes de ese reino con el fin de aclarar su entendimiento sobre doctrina y procedimiento. Se aseguró un constante abastecimiento de verdades reveladas progresivamente. Esto se ilustra en Revelación 5:1 a 8:1.
21. ¿Qué había profetizado Isaías acerca de esto?
21 Siglos antes Isaías había predicho esta corriente de verdad: “Y muchos pueblos ciertamente irán y dirán: ‘Vengan, y subamos a la montaña de Jehová, a la casa del Dios de Jacob; y él nos instruirá acerca de sus caminos, y nosotros andaremos en sus senderos.’ Porque de Sion saldrá la ley, y la palabra de Jehová de Jerusalén. Y él ciertamente hará juicio entre las naciones y enderezará los asuntos respecto a muchos pueblos. . . . Oh hombres de la casa de Jacob, vengan y caminemos en la luz de Jehová.”—Isa. 2:3-5.
22. ¿Por medio de qué agencia terrestre distribuye Jehová la verdad revelada en estos últimos días?
22 Así como Jehová reveló sus verdades por medio de la congregación cristiana del primer siglo, hoy en día lo hace por medio de la congregación cristiana del día presente. Por medio de esta agencia está haciendo que se lleve a cabo el profetizar en una escala intensificada y sin paralelo. Toda esta actividad no es accidente. Jehová es el que está detrás de todo ello. La abundancia de alimento espiritual y los asombrosos detalles de los propósitos de Jehová que han sido revelados a los testigos ungidos de Jehová son evidencia clara de que ellos son los que Jesús mencionó cuando predijo una clase del “esclavo fiel y discreto” que sería usada para distribuir las revelaciones progresivas de Dios en estos últimos días. De esta clase Jesús dijo: “En verdad les digo: Lo nombrará sobre todo lo suyo.”—Mat. 24:47.
23. ¿Qué evidencia tenemos de que esto es así?
23 ¡Hoy en día el espíritu santo de Jehová está obrando poderosamente! ¡Cuán agradecidos debemos estar por la provisión que Dios ha hecho de esta clase del esclavo, el resto espiritual moderno, a medida que distribuye fielmente las verdades reveladas de Jehová! Con estas ricas verdades para alumbrar el camino, los cristianos no andan a tientas en este mundo oscuro, semejante a selva, como lo hacen las masas de la gente de la cristiandad y el paganismo por igual. Al contrario, a los testigos fieles de Jehová se les ha dado progresivamente un entendimiento de los propósitos de Jehová, los cuales son más claros ahora que nunca antes en la historia. Su organización, siguiendo el modelo de la congregación cristiana del primer siglo, es bendecida por Jehová. Él ha hecho prosperar su obra de predicar “estas buenas nuevas del reino” en 194 tierras diferentes hasta la fecha. Cada año reúnen en la organización a decenas de millares de ministros nuevos, claramente un producto del espíritu de Jehová operando por medio de su Hijo-Rey invisible y sus representantes angelicales, luego por medio de su clase del esclavo fiel en la Tierra hoy en día.—Mat. 24:14.
[Ilustración de la página 649]
“Deja tú de llamar contaminadas las cosas que Dios ha limpiado.”