Pacifismo y objeción por conciencia—¿hay diferencia?
1. ¿Cómo manifestamos valor de conciencia? ¿Por qué lo hacemos, y parecidos a quién?
EL TENER una buena conciencia para con Dios no hace que una persona sea canija o cobarde. Los testigos de Jehová manifiestan valor al seguir sus conciencias en estos tiempos marciales. Es sólo por causa de la conciencia de ellos que han hecho objeción personal y legalmente delante de las juntas de reclutamiento en lo que toca a su participación en los conflictos armados y en los programas de la defensa de las naciones mundiales. Al proceder de esta manera sus conciencias no están torcidas, sino que están instruídas en lo que es recto, porque están instruídas en las Escrituras, la Palabra de Dios. Junto con el apóstol Pablo ellos dicen: “Me estoy ejercitando continuamente para tener una conciencia de no haber cometido ofensa contra Dios y los hombres.” (Hech. 24:16, NM) Por eso sus conciencias están limpias, no importa cómo las critiquen las mentes militaristas de este viejo mundo.
2. ¿En qué sermón pretenden creer los oficiales? ¿Qué es lo que contiene?
2 Pues, entonces, si no son pacifistas, ¿qué razones bíblicas han dado por rehusar tomar parte alguna en guerra internacional? Repetidas veces el presidente Truman de los Estados Unidos de Norte América ha dicho que cree en el “sermón del monte” y que él quiere que todo el mundo sepa que los norteamericanos creen en el sermón del monte. Los testigos de Jehová esperan que el presidente y sus compañeros se refieran a todo el sermón. ¿Por qué? Porque éste incluye no solamente la tal llamada “Regla Aurea” sino también las palabras de Jesús: “Han oído que fué dicho, ‘Ojo por ojo y diente por diente.’ Sin embargo, yo les digo: No resistan a aquel que es inicuo; pero cualquiera que les dé un bofetón en la mejilla derecha, vuélvanle también la otra. Y si una persona desea ir a la corte con ustedes para posesionarse de su ropa interior, dejen que su ropa exterior también vaya a él; y si alguien bajo autoridad les engancha para ir una milla, vayan con él dos millas. Den a cualquiera que les pida, y no se aparten de cualquiera que desee pedirles prestado sin interés. Han oído que fué dicho: ‘Tienen que amar a su prójimo y odiar a su enemigo.’ Sin embargo, yo les digo: Sigan amando a sus enemigos y orando por aquellos que los persiguen; para que prueben ustedes que son hijos de su Padre que está en los cielos, siendo que él hace que su sol se levante sobre gente inicua y buena y hace que llueva sobre gente justa e injusta.”—Mat. 5:1, 2, 38-45, NM.
3. ¿Estaba enseñando Jesús pacifismo con eso? ¿Cómo debía ejecutarse la Ley de Retribución que él mencionó?
3 ¿Estaba enseñando Jesús pacifismo con eso? No; sino que él así manifestó que sus seguidores no deben ser propensos a dañar a persona alguna, ni siquiera bajo provocación, cuando solamente se trata de asuntos personales. No debían recurrir a la Ley de Talión o de Retribución, que fué entregada por Moisés, en Éxodo 21:23-25 y Levítico 24:19, 20. Pero aun donde debía darse ojo por ojo, diente por diente, vida por vida, este igual por igual no debía ser exigido personalmente por la persona dañada. Ésta debía dejar el ajuste de las cuentas a las autoridades legales, en vez de ejecutar la ley por su propia cuenta. Esa fué la ley dada por medio de Moisés. Pero Jesucristo es el Profeta que Jehová prometió levantar que sería mayor que Moisés, y por esto la ley de Jesús es superior y reemplaza a la ley mosaica. (Deu. 8:15-19; Hech. 3:20-23) Por esta razón tenemos que prestar atención a lo que él dice en el sermón del monte si es que somos fieles seguidores de él.
4. En la corte ¿cómo no resistió Jesús a los inicuos? ¿Cómo hizo igual Pablo?
4 El que verdaderamente guarda el sermón del monte no resistirá a una persona inicua, aprovechando la ley de represalia para dar igual por igual, daño por daño, cuando simplemente es un asunto personal y cuando no está directamente implicado el cumplimiento de su comisión de servir a Dios. El Señor Jesús recibió un golpe en la mejilla en la Corte Suprema judía, pero él no volvió la otra mejilla., a no ser de una manera figurada. Él nada más le dijo al oficial que le dió el bofetón: “Si hablé mal, dé testimonio concerniente al mal; pero si bien, ¿por qué me pega?” (Juan 18:19-23, NM) Más tarde en la misma corte Pablo fué golpeado en la boca por decir: “Yo me he portado con una conciencia perfectamente limpia delante de Dios hasta este día.” Debido a esta violación de la ley Pablo dijo al sumo sacerdote que presidía: “Dios le golpeará a usted, pared blanqueada. ¿Se sienta usted para juzgarme de acuerdo con la Ley y al mismo tiempo, quebrantando la Ley, manda que yo sea golpeado?” Mediante un argumento hábil Pablo dividió a la corte contra sí misma, y así no fué afectado por el juicio de ésta sino que fué llevado delante de una corte romana.—Hech. 23:1-11, NM.
5. ¿Cómo, pues, llevamos a cabo lo que se citó del sermón de Jesús?
5 De modo que los cristianos no deben tomar la ley en sus propias manos, para devolver a otros un daño. Más bien olvídese usted del mal personal y manifieste la actitud mental de Cristo y siga con su servicio. Deje que el abusador inicuo se acuerde de su aguante más bien que de algún daño que haya recibido de usted en cambio, daño que probaría que usted es tan violento como él. Si el juicio final de una corte de última instancia dicta injustamente contra usted y concede más que los efectos personales que buscaba la persona que lo llevó a la corte, deje que tome, como si fuera, su ropa exterior y también su ropa interior. Es un caso personal, y no le obliga a usted a proceder contrario a la ley de Dios. De modo que usted puede demostrar que no fija su afecto en cosas materiales que son perecederas sino que tiene suficiente fuerza para aguantar daños personales como lo hizo su Guía Jesús. Si un oficial pacífico del gobierno en el desempeño de sus deberes llega a usted y le pide cierta ayuda que podría pedirse de cualquier otro ciudadano, tal como el de acompañarlo como guía por una milla, entonces sea usted generoso. Vaya con él dos millas si el público aprovechará algún bien debido al servicio gubernamental que él rinde. Mientras que lo acompañe, muéstrele cómo se porta un testigo de Jehová tanto en palabra como en obras. Muestre respeto por el gobierno ordenado, aunque es humano. Apoye los procedimientos legales del país y las leyes que no estén contra la justicia y la ley de Dios. Por obras de amor y por oración manifieste usted que está listo para ayudar aun a sus enemigos y perseguidores a encontrar el camino a la salvación. No permita que las obras injustas de ellos provoquen en usted el odio que desea que solamente el daño y la destrucción les sobrevengan a sus enemigos personales.
6, 7. ¿Para apoyar qué argumento se ha citado Éxodo 22:2, 3? ¿Cómo aplica?
6 Se ha hecho referencia a Éxodo 22:2, 3 para manifestar que hay casos donde los testigos de Jehová pueden demostrar que no son pacifistas mediante el matar. De acuerdo con la Versión Moderna estos versículos dicen: “Si un ladrón fuere hallado forzando una casa, y fuere herido de modo que muera, el que le hirió no será reo de homicidio. Mas si el sol hubiere salido sobre él, será reo de homicidio.” Pero la traducción de Móffatt (con la cual concuerda Una Traducción Americana [ambas en inglés]) dice aun más claro: “Si un ladrón se encuentra forzando una casa y es herido de manera que muera, el amo de casa no es culpable; pero si fué después de amanecer, el amo de casa es culpable.”
7 En la oscuridad de la noche sería imposible identificar al ladrón si éste lograra escaparse, y por esto podía herirse para detenerlo. Si el golpe fuera fatal y el ladrón muriera, entonces la persona que estaba protegiendo su propiedad no sería culpable. Pero si forzara entrada a la luz del día y fuera golpeado fatalmente, entonces el heridor sería culpable de matar al ladrón. Siendo de día él podía haber identificado al ladrón y entregado informes a la Ley y haber hecho que la Ley lo prendiera y que le obligara a hacer una restitución y pagar una multa además. Pero con matar al ladrón el protector de su propiedad había sobrepasado los límites. Ciertamente que toda la propiedad que un ladrón diurno podría robar después de forzar su entrada no sería igual al valor de su vida. Al hacer que diera restitución por lo que robó, la Ley no podría requerir la vida del ladrón. “¿Qué dará un hombre en cambio por su alma [o, vida]?” (Mat. 16:26, NM) Si el ladrón diurno lograra escapar, o si escaparan los agresores que invadieron, y la Ley nunca pudiera o no lograra traerlos a juicio, entonces, aunque hayamos sufrido la pérdida de bienes materiales no hemos traído sobre nosotros el delito de sangre. De manera que respeto para la Ley es bueno.
8. No obstante, ¿qué hay en cuanto al proteger y defender ellos los diferentes intereses del Reino?
8 Lo que se dice acerca de volver la otra mejilla y someterse a los funcionarios públicos en asuntos particulares o personales no significa que los testigos de Jehová no defienden sus intereses del Reino, su predicación, sus reuniones, sus personas y sus hermanos y hermanas y su propiedad en contra de ataque. Ellos defienden estas cosas cuando son atacados y obligados a proteger dichos intereses, y esto lo hacen bíblicamente. Ellos no se arman ni llevan armas carnales en anticipación o en preparación para alguna dificultad o para hacer frente a amenazas. Ellos tratan de desviar los golpes y ataques sólo en defensa. No pegan en retribución. No pegan en ofensa sino que pegan sólo en defensa. Ellos no usan armas de guerra para defenderse a sí mismos ni a los intereses del Reino. (2 Cor. 10:4) Aunque ellos no retroceden cuando son atacados en sus hogares o en sus lugares de reunión, ellos sí retrocederán en la propiedad pública o ajena y ‘sacudirán el polvo de sus pies’, y así ‘no darán lo que es santo a los perros’ y ‘no echarán sus perlas ante los cerdos’. (Mat. 10:14; 7:6) De modo que ellos retroceden cuando es posible hacerlo para evitar un pleito o dificultades. Ellos tienen el derecho de invocar y de hecho invocan a los oficiales de la ley para que vengan a su defensa contra cualquier ataque o violencia de turbas.
CÓMO PAGAN LO QUE ES DEBIDO LOS QUE ESTÁN BAJO VOTO
9. ¿De qué provisiones legales para el aplazamiento se aprovechan correctamente los testigos en los EE. UU.?
9 A las juntas, agencias y funcionarios del gobierno se les dice que la obediencia a las instrucciones dadas en el sermón del monte no tiene nada que ver con rendir los testigos de Jehová todo a César, y que por eso dichos ministros de Dios están obligados a rendir obediencia indisputable a los oficiales que no siguen la ley de Dios. Pero las instrucciones del sermón citadas arriba no son nada más que parte de la razón impelente que tienen los testigos de Jehová al hacer objeción por causa de la conciencia contra el someterse al servicio militar y por qué se aprovechan de las provisiones que permiten exenciones. En los Estados Unidos de Norte América el Acta de Servicio Selectivo de 1948, la cual gobierna las decisiones de las juntas de reclutamiento y de los funcionarios públicos, hace provisión para el aplazamiento de los que hacen objeción por causa de la conciencia y también para la exención de los que están bajo votos a Dios. La sección 6 (j) hace provisión para el aplazamiento de “cualquier persona” cuyo “entrenamiento y creencia. . . con relación a un Ser Supremo implicando obligaciones superiores a las que resultan de alguna relación humana” impiden que dicha persona se desvíe de aquellas OBLIGACIONES SUPERIORES que ésta debe al Ser Supremo.
10. ¿Cómo están bajo un voto? Por eso ¿qué obligaciones tienen que cumplir?
10 Una persona no puede llegar a ser testigo cristiano de Jehová a menos que haga un voto mediante el cual se dedica cabalmente a Dios por medio de Jesucristo asumiendo de esta manera obligaciones superiores. Reconoce a Dios como el Ser Supremo y Fuente de la vida y el Proveedor del camino a la vida eterna. (Sal. 3:8; 36:9) Se acerca a Dios por medio de Jesucristo. Reconoce a Jesús como el Hijo de Dios que entregó su vida humana por él, de esta manera proveyendo el precio de compra para él. Ningún estado político, ningún “César” o emperador o dictador, puede hacer estas cosas para el pecador moribundo. De modo que él no atribuye la deuda de su vida a algún sistema político, sino que atribuye su vida a Dios y trata de rendírsela a él por medio de Cristo. Reconoce que estos textos aplican a él: “No sois dueños de vosotros mismos; porque fuisteis comprados a gran precio; glorificad pues a Dios con vuestro cuerpo y con vuestro espíritu que son de Dios.” “Habéis sido comprados a gran precio; no seáis vosotros siervos de los hombres.” (1 Cor. 6:19, 20; 7:23) De manera que rinden su vida y su obediencia implícita y sus obligaciones superiores a Dios como cosas que pertenecen a él; y entregan su vida al servicio de Dios y no al de algún hombre.
11. ¿Por qué de acuerdo con Mateo 22:21 no se alistó Jesús en el ejército de César? ¿Qué se hace cuando hay desacuerdo entre lo que pertenece a Dios y lo que demanda César?
11 Pero Jesús le dijo a los judíos, que estaban en pacto con Dios y bajo voto a él: “Pagad, pues, a César lo que es de César; y a Dios lo que es de Dios.” (Mat. 22:21) ¿Qué, pues, debemos de pagarle a César? Ciertamente no nuestra vida, porque nunca le debimos ésta a César y no pertenece a él. De hecho, la poca vida que César mismo posee se la debe a Dios, y no a sí mismo como si fuera un dios inmortal. Por esa razón la historia auténtica manifiesta que los cristianos del primer siglo no expusieron su vida a los peligros de la guerra carnal por medio de unirse a los ejércitos imperiales de César, sino que aguantaron la pena que les impuso César por rehusar ingresar en sus ejércitos. Al proceder de tal manera los cristianos primitivos tuvieron a Jesús como su ejemplo, Guía e Instructor. Jesús vivió bajo el reinado de César, porque la Roma imperial había conquistado a Palestina mediante agresiones militares. Después de fijar la ley para sus seguidores, “Devuelvan. . . las cosas de César a César” (NM), Jesús mismo no se alistó en los ejércitos de César. Él sabía que Dios y César no son amigos. Por esa razón César mediante su gobernador Pilato dió muerte al Hijo de Dios y después de eso persiguió violentamente a los seguidores de Jesús. El sermón del monte pronunciado por Jesús dice que no podemos servir a dos amos, especialmente cuando los dos amos son enemigos uno del otro. Los testigos de Jehová han “hecho votos solemnes de dedicar su vida al servicio de Dios” y son gobernados por una “creencia . . . con relación a un Ser Supremo implicando obligaciones superiores a las que resultan de alguna relación humana”, incluso cualquier relación terrestre con César. De modo que cuando surge algún conflicto entre Dios y César, ellos se someten a estas obligaciones superiores, así como dijo Pedro el apóstol a la corte de Ley: “Tenemos que obedecer a Dios cómo gobernante más bien que a los hombres. . . . y nosotros somos testigos.”—Hech. 5:29-32, NM.
12. ¿Qué cosa no se discutía allí? Entonces ¿cómo aplica Mateo 22:21?
12 Además, cuando Jesús le dijo a sus interrogadores, “Devuelvan las cosas de César a César,” el asunto bajo discusión no era el enganche militar de César ni el alistamiento voluntario en su ejército. De manera que la respuesta de Jesús no se aplicaba a eso. Lo que le preguntaron fué esto, “¿Es lícito pagarle tributo a César o no?” y por eso Jesús les dijo que le mostraran una “moneda de tributo” y le mostraron un denario que tenía la imagen e inscripción de César. De modo que Jesús declaró que era lícito de acuerdo con la ley de Dios por Moisés pagar contribuciones a César aunque César había extendido su imperio mediante la fuerza de armas carnales y había quitado la independencia y libertad del pueblo escogido de Jehová. Hasta un hombre con objeciones concienzudas contra el servir en los ejércitos de agresión y de subyugación de César debía pagarle contribuciones como conquistador. Aunque César aplicara una grande parte de éstas a su programa militar, aun así lo que él hacía con el dinero que había colectado mediante las contribuciones no era la responsabilidad del que hacía objeción debido a su conciencia. Debido a que César había asumido el mando del país y estaba manejando el gobierno, toda la gente subyugada estaba recibiendo algunos beneficios materiales, y por éstos ellos debían devolverle a César la contribución como algo que se le debía. Por consecuencia el que hace objeción debido a su conciencia y que está en pacto con Dios para ser Su testigo, como estaban los judíos, no está autorizado para participar en cualquier subversión o para promover un pacifismo que resultara en desobediencia civil à la Mahatma Gandhi.
13, 14. ¿Debido a qué otra razón grande aparte del sermón de Jesús no se envuelven en las controversias del mundo? ¿Cómo mantienen su adoración limpia?
13 Porque están dedicados enteramente a Dios debido a los votos que han hecho a él por medio de Cristo, los testigos de Jehová de acuerdo con la Palabra de Dios no forman parte de este mundo que está gobernado por los sistemas políticos. Por esta razón bíblica importante ellos les dicen a los funcionarios del gobierno que rehusan concienzudamente servir en cualquier establecimiento militar o en cualquier arreglo civil que substituye por servicio militar. Jesús le dijo a Pilato, el representante de César: “Mi reino no es parte de este mundo. Si mi reino fuera parte de este mundo, mis servidores hubieran peleado para que no fuera entregado a los judíos. Empero, siendo como es, mi reino no es de esta fuente.” Entonces Jesús le dijo a Pilato por qué no había participado en algún esfuerzo militar para librar a los judíos del dominio de César, diciendo: “Con este propósito he nacido y con este propósito he venido yo al mundo, para dar testimonio a la verdad.” Él vino para ser el testigo de Jehová y para sacar a sus seguidores de este mundo, y hacerlos testigos de Jehová igual que él. De modo que dijo a sus apóstoles: “Porque ustedes no son parte del mundo, sino que yo los he escogido del mundo, por esta causa el mundo los odia.” Y cuando oró a Dios por ellos él dijo: “Ellos no son parte del mundo así como yo no soy parte del mundo.” (Juan 18:36, 37; 15:19; 17:14, 16, NM) Concerniente a los testigos de Jehová que el mundo odió y maltrató Hebreos 11:38 (NM) dice: “El mundo no fué digno de ellos.” Pues, porque no son parte de este mundo, se les prohibe entremeterse y tomar parte en sus asuntos y en sus controversias. Los israelitas espirituales están tan separados de las naciones y sus ejércitos como lo estaban los israelitas naturales.
14 Si es que su adoración ha de ser “limpia e incontaminada desde el punto de vista de nuestro Dios y Padre”, entonces cada uno tiene que tratar de “mantenerse sin mancha del mundo”. (Sant. 1:27, NM) Ellos les dicen a los oficiales que son absolutamente neutrales para con las disputas políticas y las controversias y contiendas internacionales de este mundo. Ellos no toman parte activa o violenta a favor de cualquier lado, sino que pagan sus votos a Dios y siempre abogan por Su reino y camino de salvación.
15. ¿Por qué no pelean por territorios ni resisten cambios políticos?
15 Como los sacerdotes y levitas de Israel que estaban dedicados especialmente al servicio de Jehová en su templo, ellos no tienen ninguna herencia en este mundo. De modo que ellos no pelean por territorios; y si sufren alguna pérdida de propiedad debido a la persecución por parte de su gobierno nativo o debido a una invasión por agresores armados, ellos confían en que Dios les proveerá con las cosas necesarias para la vida. Así como escribió Pablo a sus contestes cuando estaba en prisión: “Ustedes no sólo expresaron compasión por aquellos en prisión sino que con gozo aguantaron el despojo de sus posesiones, sabiendo que ustedes mismos tienen una posesión mejor y duradera.” (Heb. 10:34, NM) Más bien que ser muertos en un esfuerzo violento para proteger las propiedades materiales de este mundo, ellos prefirieron vivir en una condición despojada para que pudieran seguir testificando por el reino de Dios y así ‘predicar la palabra’ y ‘ocuparse en eso urgentemente en tiempo favorable, y en tiempo dificultoso’. No importa qué cambios políticos o gubernamentales sucedan sobre ellos, ellos en su posición neutral están obligados a someterse a tales cambios y seguir adelante con la obra de Dios de la mejor manera posible bajo esas condiciones alteradas. Ellos saben que el reino de Dios, por el cual oran según se les enseña en el sermón del monte, y el cual predican, se hará cargo completamente de toda la tierra después del Armagedón.—2 Tim. 4:2, NM.
MINISTROS DEL EVANGELIO Y EMBAJADORES EXENTOS
16. ¿De qué los exime Dios ahora? Por eso ¿qué deben hacer los oficiales?
16 Los sacerdotes y los levitas fueron exentos de la conscripción para servicio militar en Israel. (Núm. 1:45-54; 2:32, 33) Siendo que los testigos de Jehová están consagrados a Dios como seguidores de Jesucristo, ellos igualmente deben ser exentos de los deberes militares con armas carnales. Dios los exime, y no requiere que peleen como pelearon Josué, Gedeón, Sansón, Jefté, Barac y David en tiempos antiguos. Jehová Dios ha hecho a estos testigos cristianos sus ministros del evangelio del Reino. En los Estados Unidos de Norte América el Acta de Servicio Selectivo de 1948 exime de obligaciones militares a los ministros del evangelio ordenados y regulares. Pero los oficiales responsables por la aplicación del Acta permiten la exención únicamente a aquellos que son ministros de tiempo cabal, y no a todos los demás. Pero la vocación de cada uno de los testigos de Jehová es el ministerio y es un ministro del evangelio, sea que esté en posición para rendir tiempo cabal o únicamente tiempo parcial. No solamente los siervos de tiempo cabal entre ellos, sino que cada uno de los testigos de Jehová está bajo un voto de consagración, que implica “obligaciones superiores a las que resultan de alguna relación humana”. La Palabra de Dios por eso nombra a cada uno de ellos ministro de Dios y predicador del evangelio del Reino; y los oficiales de la ley del país, aunque tienen derecho legal para hacerlo, no tienen ningún derecho bíblico para hacer distinciones parciales y limitar la exención militar únicamente a algunos, entre tanto que excluyen a otros. Al hacer esto ellos tendrán que tomar la responsabilidad delante de Dios por hacer ‘agravio bajo forma de ley’.
17. ¿Por qué, de acuerdo con la profecía de Jesús acerca de la consumación de este sistema de cosas, no pueden ellos abandonar su neutralidad?
17 Debido a que son ministros y predicadores, ellos no han abandonado su neutralidad que se debe a su objeción concienzuda para prestar apoyo militar a un lado u otro de algún conflicto mundial. Jesús predijo su neutralidad y su actividad predicadora para este tiempo militante. Cuando él profetizó, “Nación se levantará contra nación y reino contra reino,” él no dijo que sus seguidores verdaderos tomarían parte en dichos levantamientos armados. En lugar de eso, predijo que ellos serían tratados duramente y que serían “aborrecidos por todas las naciones”, no solamente por las naciones enemigas, sino por todas ellas. Luego dándoles a los testigos de Jehová una comisión para este día así como también profetizando qué clase de trabajo harían ellos, él dijo: “Estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada con el propósito de dar un testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin consumado.” (Mat. 24:14, NM) Por eso, ahora cada testigo de Jehová que está bajo voto a Jehová Dios mediante Cristo tiene que obedecer ese mandato profético y cumplir su comisión de ministro ordenado de las buenas nuevas del Reino. No se exime a ningún ministro consagrado. Los que llevan la delantera entre ellos tienen que poner el ejemplo, y los otros tienen que imitarlos. (1 Ped. 5:1-3) Estos ministros delanteros no participan en guerra carnal, sino que predican. Las filas de los testigos de Jehová, siendo también ministros de Dios, copian su ejemplo fiel y predican pacíficamente.
18, 19. Siendo embajadores de Dios ¿cómo tienen ellos objeción concienzuda?
18 A estos testigos cristianos el apóstol Pablo escribió: “Él entregó el mensaje de la reconciliación a nosotros. Somos por lo tanto embajadores substituyendo por Cristo, como si Dios estuviera haciendo súplica mediante nosotros. Como substitutos por Cristo rogamos: ‘Reconcíliense con Dios.’” (2 Cor. 5:19, 20, NM) Como “embajadores substituyendo por Cristo” los testigos de Jehová rehusan por causa de la conciencia servir en los establecimientos militares de las naciones o en otros que estén relacionados.
19 Los embajadores están exentos del servicio militar en la nación a la cual son enviados por su gobierno, especialmente si es una nación hostil. Acuérdense, en los tiempos bíblicos se enviaban embajadores, no a naciones amigables, sino a naciones que estaban en guerra o que amenazaban con guerra. Los embajadores de Dios que substituyen por Cristo no se envían a naciones amigables, sino a naciones hostiles. Todas las naciones de este mundo de Satanás son hostiles para con Dios. El mensaje que se les da a estos embajadores para que entreguen es, “Reconcíliense con Dios.” Esto pone de manifiesto que las naciones no son amigables. ¿Cómo, pues, podrían estos embajadores servir bíblicamente en las fuerzas militares de tales naciones o consentir bíblicamente a hacerlo cuando lo requiera la ley nacional? El abandonar las filas de Sus ministros y así dejar de predicar significaría pelear contra Dios, quien ha enviado a sus embajadores para pedirles a las naciones que se reconcilien con Dios, no para que peleen contra él. Los testigos de Jehová son embajadores de Dios enviados a TODAS las naciones, con el mismo mensaje para todas ellas. Por consiguiente ellos no se han alistado en las fuerzas combatientes de ninguna de las naciones. Ellos mantienen una neutralidad estricta hacia dichas naciones en sus combates mortales. Ellos se mantienen leales al gobierno divino, el cual los envía como sus embajadores, aunque esta neutralidad y esta predicación del Reino hace que ellos sean “aborrecidos por todas las naciones”. Ellos no han peleado a favor de los sistemas no reconciliados que Dios destruirá en el Armagedón. ¡He ahí su objeción por causa de su conciencia!
20. ¿Cuáles términos aplicados a ellos en su conflicto manifiestan que no son pacifistas?
20 Concerniente a estos embajadores el apóstol dice en esta misma carta: “Aunque andamos en la carne, no hacemos la guerra de acuerdo con lo que somos en la carne. Porque las armas de nuestra guerra no son carnales, sino poderosas por parte de Dios para trastornar cosas fuertemente atrincheradas. Porque estamos trastornando razonamientos y toda cosa encumbrada que se ha levantado contra el conocimiento de Dios, y estamos trayendo todo pensamiento en cautiverio para hacerlo obediente al Cristo.” (2 Cor. 10:3-5, NM) Para esta guerra espiritual se les da esta orden: “Pónganse la armadura completa provista por Dios”; y hay que tornar dicha armadura espiritual “para que puedan mantenerse firmes contra las maquinaciones del Diablo; porque tenemos un pleito. no contra sangre y carne, sino contra los gobiernos [espirituales], contra las autoridades, contra los gobernantes mundiales de esta oscuridad, contra las inicuas huestes espirituales en los lugares celestiales.” Satanás el Diablo es el “gobernante de este mundo” y el “dios de este sistema de cosas”. (Efe. 6:11-13 y Juan 12:31 y 2 Cor. 4:4, NM) El solo hecho de aplicar tales términos militares de manera espiritual a los embajadores de Dios sirve para manifestar que no son pacifistas.
21. ¿En qué guerra y en qué ejército están ellos? Entonces ¿por qué se mantienen neutrales?
21 Su guerra no es contra sangre y carne. Sus verdaderos enemigos no pueden ser tocados con armas carnales, y por esto ellos toman la armadura espiritual de Dios. Ellos dedican sus cualidades y energías combatientes a la guerra espiritual para librar a personas del cautiverio a las huestes espirituales inicuas que dominan a este mundo. Ellos están en el ejército espiritual de Dios bajo Jesucristo. Desertarlo y unirse a este mundo en sus pleitos sería deslealtad para con Dios y Cristo. Merecería ser castigado con destrucción sin esperanza de vida alguna en el justo nuevo mundo. Ellos tienen que cumplir su acuerdo con Dios y pagar su voto a él, porque los que son “desleales a los pactos” son por la ley de Dios “merecedores de la muerte”. (Rom. 1:31, 32, NM) De modo que los testigos de Jehová se mantienen neutrales en cuanto a los conflictos mundiales y obedecen estas órdenes estrictas de lo alto: “Como un soldado de Cristo Jesús de la clase correcta toma tu parte en el sufrimiento del mal. Ningún hombre que sirve como soldado se envuelve en los negocios comerciales de la vida, a fin de que pueda alcanzar la aprobación de aquel que lo alistó como soldado.” (2 Tim. 2:3, 4, NM) Debido al puesto neutral que toman en cuanto a los conflictos mundiales y debido a su aguante leal en la guerra espiritual estos soldados alistados por Cristo reciben su aprobación.
UNA HERMANDAD GLOBAL
22, 23. ¿Debido a que son qué clase de asociación no pueden participar en las contiendas internacionales? ¿Bajo qué instrucciones están ellos?
22 Puesto que los embajadores de Dios son enviados a todas las naciones con un solo mensaje de reconciliación, entonces todos los que se reconcilian con él llegan a formar una asociación global de hermanos. Es precisamente de esa manera que los testigos de Jehová son una congregación internacional de hermanos cristianos. La Palabra de Dios prohibe que ellos se dividan debido a intereses egoístas y que se pongan a pelear los unos con los otros; les manda que se mantengan unidos y que preserven la paz entre ellos mismos. Para darle énfasis, se hizo esta pregunta: “¿Existe Cristo dividido?. . . Porque mientras hay celos y contiendas entre ustedes, ¿no son carnales y no están andando como hacen los hombres?” (1 Cor. 1:13; 3:3, NM) Por esta razón no han abandonado su neutralidad para con este mundo para ingresar en los ejércitos de este mundo dividido que está bajo su enemigo Satanás el Diablo. El hacer esto hubiera significado lanzarse contra sus hermanos espirituales, los hijos de Dios, así como en la guerra se lanza protestante contra protestante, católico contra católico, judío contra judío. Esto hubiera resultado en guerra fratricida por la cual ellos hubieran sido enteramente responsables delante de su Padre celestial. En vez de tomar o de tratar de tomar la vida de sus hermanos, los hijos de Dios, a ellos se les manda que entreguen su vida por sus hermanos, imitando a Jesucristo y no a Caín que degolló a su hermano Abel. De modo que el apóstol Juan escribe:
23 “No se maravillen, hermanos, porque el mundo los aborrece. Sabemos que hemos pasado de la muerte a la vida, porque amamos a los hermanos. El que no ama permanece en la muerte. Todo aquel que aborrece a su hermano es un homicida, y ustedes saben que ningún homicida tiene vida eterna permaneciendo en él. Mediante esto hemos venido a conocer el amor, porque aquél entregó su alma [o, vida] por nosotros; y nosotros estamos obligados a entregar nuestras almas [o, vidas] por nuestros hermanos.”—1 Juan 3:11-16, NM, margen.
24. En vez de quebrantar corazones y herir, ¿qué tienen que hacer ahora?
24 El espíritu de Jehová Dios está sobre sus testigos y ellos tienen que “anunciar buenas nuevas a los mansos” y tienen que “vendar a los quebrantados de corazón”, más bien que quebrantar corazones mediante combates carnales. Ahora cuando el río de la verdad salvadora de vidas está corriendo desde el trono del reino establecido de Dios, sus testigos tienen que ser como los árboles cuyas hojas son “para la sanidad de las naciones” y “para medicina”, más bien que para herir a las naciones. (Isa. 61:1; Luc. 4:18; Apo. 22:2; Eze. 47:12) Este es el “camino sobrepujante” de amor, el amar a Dios con todo lo que posee la persona y el amar a su prójimo como a sí mismo.—1 Cor. 12:31-13:7, NM.
25. ¿En qué sentido, entonces, se prueban consistentes los testigos?
25 Todo lo antedicho es solamente una declaración parcial del caso de los testigos de Jehová, la cual han presentado ante juntas, funcionarios y cortes que tienen la responsabilidad bajo la ley del país de determinar si se les concederán los derechos que se dan a los que hacen objeción por causa de la conciencia y a ministros. Pero se ha dicho suficiente para probar a dichas juntas y funcionarios y a todos los demás que los testigos de Jehová son consistentes en lo que sostienen. No son pacifistas, sino ministros y hacen objeción por causa de su conciencia basándose en las Escrituras. Debido a que toman este puesto las juntas han podido darse cuenta de que los testigos de Jehová se mantienen neutrales para con este mundo y que permanecen como los ministros de Dios y predicadores ordenados de las buenas nuevas de su reino bajo Cristo, teniendo objeción bíblica y concienzuda a su propia participación en la guerra mundana en cualquier forma.