Capítulo 9
Marcando las frentes para perdonar la vida
1. ¿Qué clama Jehová, mientras todavía está en el templo, a oídos de Ezequiel, como llamamiento?
JEHOVÁ y su profeta Ezequiel todavía estaban, en visión, en el templo contaminado de Jerusalén cuando sucedió lo que enseguida describe Ezequiel: “Y procedió a clamar en mis oídos con una voz fuerte, diciendo: ‘¡Que se acerquen los que dan su atención a la ciudad, cada uno con su arma en su mano para arruinar!’”—Ezequiel 9:1.
2. ¿A quiénes no aplicó la expresión “los que dan su atención a la ciudad,” y qué misión tenían estos últimos?
2 Aquí “los que dan su atención a la ciudad” no eran miembros del gobierno de la ciudad de Jerusalén. Por eso, entre aquellos a quienes Jehová llamó no estaba el rey Sedequías, que entonces gobernaba a Jerusalén y todo el reino de Judá en aquel año de 612 a. de la E.C. Ciertamente el rey Sedequías y sus príncipes no trataron de destruir a Jerusalén. De hecho, recurrieron a Faraón de Egipto para que viniera y ayudara a salvar la ciudad. Aquellos a quienes Jehová llamó eran los que ‘daban su atención a la ciudad,’ no para conservarla y gobernarla, sino para destruir a sus habitantes con aquellas armas “para arruinar.” No eran judíos. Entonces, ¿quiénes eran?
3. ¿A quiénes vio entrar Ezequiel y plantarse al lado del altar ahora, y cómo se distinguían?
3 Démosles un vistazo con Ezequiel, mientras sigue diciendo: “Y, ¡mire! había seis hombres que venían de la dirección de la puerta superior que mira al norte, cada uno con su arma para destrozar en su mano; y había entre ellos un hombre vestido de lino, con un tintero de secretario a sus caderas, y procedieron a entrar y plantarse al lado del altar de cobre.”—Ezequiel 9:2.
4. ¿Por qué era señal que anunciaba mal el que los siete hombres entraran en el templo desde el norte, y cómo se separaba a un hombre de los otros seis?
4 Como señal que anunciaba mal, entraron desde el norte, pues de esa dirección fue que los poderosos ejércitos de Babilonia vinieron contra Jerusalén tres años más tarde, en 609 a. de la E.C. Por la puerta interna septentrional del templo de Jehová pasaron a su patio interior y se plantaron al lado del altar de cobre en el centro de éste, pero no para ofrecer sacrificio a Jehová. Allí, en el lado norte del altar, pudieran ser vistos por los veinticinco hombres que estaban entre el altar y el pórtico del templo y que estaban inclinándose en adoración al Sol al este. (Ezequiel 8:16) Puesto que eran siete, eran un equipo completo para acción unida. Pero al hombre “vestido de lino” lo separaba de los otros seis su prenda de vestir. También fue separado de ellos al ser enviado adelante de ellos.
5. ¿Quiénes evidentemente eran aquellos “seis hombres,” y a quiénes representaban?
5 Los “seis hombres” de la visión evidentemente eran personas sobrenaturales, como ángeles materializados. No se dice que eran babilonios, aunque se utilizó a los babilonios para destruir a la Jerusalén literal. Puesto que cada uno de los “seis hombres” tenía en la mano un “arma para destrozar,” representan las fuerzas celestiales de ejecución de Jehová que están sujetas a su mando. Representan un ejército celestial, soldados, por decirlo así. Estos podrían, en realidad, usar a soldados babilonios como agentes terrestres.
EL MARCADOR DE FRENTES
6. ¿Qué clase de individuo es el hombre “vestido de lino,” y qué pregunta surge en cuanto a su papel?
6 El séptimo individuo, el hombre “vestido de lino,” era de rango superior (lo cual no quiere decir que fuera de naturaleza superior) en comparación con los “seis hombres” armados. Se observa que tiene un “tintero de secretario” en la cintura, evidentemente sostenido allí por su ceñidor. Pero no se dice que sea el “secretario del jefe del ejército” de modo que esté asociado con asuntos militares. (Jeremías 52:25) Podría ser un secretario gubernamental pacífico. (2 Samuel 8:17; 20:25; 1 Reyes 4:3) En la visión, ¿en qué clase de misión se envía a este hombre vestido de lino? Esto lo manifiesta la comisión que recibe de Jehová, que viaja en su carro celestial. Sobre esto Ezequiel dice:
7. ¿De dónde clama Jehová al hombre “vestido de lino,” y qué le dice al hombre que haga?
7 “Y respecto a la gloria del Dios de Israel, fue elevada de sobre los querubines sobre los cuales estaba hacia el umbral de la casa, y él empezó a clamar al hombre que estaba vestido con el lino, a cuyas caderas estaba el tintero de secretario. Y Jehová pasó a decirle: ‘Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y tienes que poner una marca en las frentes de los hombres que están suspirando y gimiendo por todas las cosas detestables que se están haciendo en medio de ella.’”—Ezequiel 9:3, 4.
8. ¿Qué era el “umbral de la casa” a encima del cual pasó la gloria de Jehová, y a qué clase de misión fue enviado el hombre “vestido de lino”?
8 ¡Ah!, al hombre vestido de lino se le envía a una misión pacífica, salvavidas. Al llegar a este punto la Presencia Divina se movió de sobre la plataforma sobrecogedora semejante a hielo que estaba por encima de las cuatro ruedas y de las cabezas de los cuatro querubines en la entrada septentrional del templo. ¿Hacia dónde? “Hacia el umbral de la casa.” (Ezequiel 8:3, 4; 9:3) Este no era el pórtico del templo, enfrente del cual estaban inclinándose los veinticinco adoradores del Sol. Apropiadamente sería el umbral del compartimiento recóndito del templo, el umbral del Santo de Santos en el cual estaba ubicada el Arca del Pacto. Sobre la cubierta de oro de aquella Arca revestida de oro estaban los dos querubines de oro, de frente el uno al otro con las alas levantadas. Entre los querubines, o encima de ellos, aparecía la milagrosa luz “Shekinah” como símbolo de la presencia de Dios en el Santísimo. (Números 7:89) De esta posición sobre el umbral interno del templo Jehová expidió sus órdenes al “hombre que estaba vestido con el lino.” Él habría de pasar por Jerusalén adelante de los “seis hombres.” Habría de usar su pluma y tinta para efectuar una obra de marcar.
LAS FRENTES DE QUIÉNES SE MARCAN, Y CÓMO
9. ¿Quiénes estaban en peligro, y de quiénes se proponía Jehová tener compasión?
9 Toda la gente en Jerusalén tenía la vida en peligro, porque Jehová estaba por ‘actuar con su furia’ al ejecutar su decisión judicial contra la ciudad. A pesar de su “furia” justificada, tendría compasión de algunos de sus habitantes. ¿De quiénes? De los que no simpatizaban con las cosas detestables que se estaban cometiendo en el templo de Jehová ni con la violencia con la cual los religiosos infieles estaban llenando la tierra. (Ezequiel 8:17, 18) Había “hombres que están suspirando y gimiendo por todas las cosas detestables que se están haciendo” en Jerusalén.
10. En cuanto a las personas a las cuales Jehová habría de mostrar compasión, ¿qué se requería que hiciera el hombre “vestido de lino” para llevar a cabo su misión para con ellas?
10 A todos éstos el hombre con el tintero en su cintura habría de marcarlos en sus frentes, donde pudiera ser vista públicamente la marca. Para que el hombre vestido de lino hiciera esto se requeriría que fuera de casa en casa, de hogar en hogar, a fin de localizar a los hombres que estuvieran afligidos por la manera en que se estaba ofendiendo a su Dios Jehová. A fin de que estos hombres que suspiraban y gemían se distinguieran de los que ofendían a Dios, tenían que ser marcados en sus frentes. Esto los marcaría como adoradores verdaderos de Jehová.
11. ¿Qué valor tenía para el portador la marca con tinta en la frente, según las órdenes de Jehová a los “seis hombres”?
11 ¿Qué valor tendría esa marca con tinta en las frentes de aquellos adoradores puros del único Dios vivo y verdadero? Esto lo hacen evidente las órdenes oficiales que enseguida dio Jehová a los “seis hombres” que estaban armados con armas para destrozar. El profeta Ezequiel nos dice lo que oyó: “Y a estos otros él dijo a mis oídos: ‘Pasen por la ciudad detrás de él y hieran. No se sienta apenado su ojo, y no sientan ninguna compasión. A anciano, joven y virgen y niñito y mujeres deben matar... hasta arruinamiento. Pero no se acerquen a ningún hombre sobre el cual esté la marca, y desde mi santuario deben comenzar.’”—Ezequiel 9:5, 6.
12. En vista de los instrumentos de ejecución de los “seis hombres,” ¿por qué era apropiada la marca en la frente, y quiénes se hacían responsables de la muerte de los niños menores no marcados?
12 Según estas instrucciones divinas los “seis hombres” no darían muerte a los israelitas cuyas frentes estuvieran marcadas. Puesto que el instrumento utilizado para matar a los israelitas no marcados era un “arma para destrozar,” probablemente se usaba para destrozar los cráneos de los que merecieran ser ejecutados. ¡Cuán adecuado era, entonces, que fueran marcadas las frentes de los adoradores de Jehová, en vista de que los “seis hombres” herirían en la cabeza! El ver una marca en la frente haría que se abstuvieran de destrozar esa cabeza. La edad o el sexo no era razón para que se le perdonara la vida al que fuera ofensor contra Jehová, como no lo eran tampoco la soltería ni el matrimonio. Los hijos menores de los padres no marcados no les serían marcados en la frente. Por consiguiente los padres serían los únicos responsables de la muerte de sus hijitos, pues los Diez Mandamientos expresaban claramente que el “castigo por el error de padres” sería traído sobre los “hijos, sobre la tercera generación y sobre la cuarta generación.” El que los padres no educaran a sus hijos en la adoración pura de Jehová haría responsables a aquellos padres delincuentes por el resultado de la ejecución de la ley justa de Dios contra sus hijos menores.—Éxodo 20:5.
DÓNDE COMIENZA EL DESTROZO DE CABEZAS
13. ¿Por qué se sentían seguros los israelitas idólatras dentro del santuario nominal de Jehová, pero qué órdenes dio Jehová a los “seis hombres” en cuanto a contaminar la casa?
13 Puesto que Jehová dijo: “Desde mi santuario deben comenzar,” los “seis hombres” armados no tuvieron que retraerse de pensar en dar muerte por destrozo a personas que estuvieran dentro de Su templo. Es posible que todos los israelitas idólatras se hayan sentido seguros dentro del templo, porque pensaban que los cuerpos de los que fueran muertos violentamente contaminaban el santuario de Jehová pero que su adoración falsa con ídolos no contaminaba su santuario. Sin embargo, Jehová se había mudado muy lejos de su santuario nominal, y en evidencia de eso quería que fuera contaminado por los cuerpos violentamente muertos de los que estaban contaminando el santuario con sus idolatrías. Por consiguiente Ezequiel nos dice lo siguiente acerca de los “seis hombres” con sus armas de destrozar: “Así que comenzaron con los ancianos que estaban delante de la casa. Y además les dijo: ‘Contaminen la casa y llenen los patios con los que son muertos violentamente. ¡Salgan!’ Y salieron e hirieron en la ciudad.”—Ezequiel 9:6, 7.
14. ¿Por qué el estar en el terreno del templo ya no era como un amuleto de protección contra el ser muerto, y en quiénes comenzaron los “seis hombres” su obra de ejecución, prosiguiendo con quiénes después de eso?
14 En consecuencia, el que una persona estuviera dentro del terreno del santuario del templo de Jehová no era como tener una “medalla de San Cristóbal” o amuleto alrededor de su cuello para protegerse de ser muerto por los ejecutores de Jehová. Ya aquel templo contaminado no era ningún santuario de refugio para religiosos hipócritas. Por eso, ¿qué hay de los setenta “de edad madura de la casa de Israel, con Jaazanía el hijo de Safán,” que estaban quemando incienso a entalladuras idolátricas que estaban en las paredes interiores de la casa que estaba delante del santuario? (Ezequiel 8:7-11) Fue con éstos que los “seis hombres” empezaron su obra de ejecución. Luego estaban las mujeres “sentadas . . . llorando por el dios Tamuz.” A éstas también se les hicieron saltar los sesos, matándolas con las armas de destrozar. A los “veinticinco hombres” que estaban entre el pórtico y el altar y que estaban adorando al Sol no se les llama “ancianos” o “de edad madura,” pero también fueron muertos por los “seis hombres.” (Ezequiel 8:14-16) Así la casa y los patios del templo fueron contaminados con los que fueron muertos violentamente. ¡Esto hizo que solo permaneciera vivo allí Ezequiel!
15. ¿Qué pregunta pudo haber hecho surgir en la mente de Ezequiel la escena del degüello en el terreno del templo, y qué clamó y dijo él?
15 Puede que la escena sangrienta dentro del templo haya hecho surgir esta pregunta en la mente de Ezequiel: Si en un lugar tan sagrado como el templo a nadie se le perdona la vida, ¿cómo habrá oportunidad de que se le perdone la vida a quien esté afuera en la ciudad seglar de Jerusalén? Ezequiel nos dice cómo le afectó la impresión que aquello le produjo, diciendo: “Y aconteció que, mientras herían y se me dejó permanecer, procedí a caer sobre mi rostro y gritar y decir: ‘¡Ay, oh Señor Soberano Jehová! ¿Estás arruinando a todos los que quedan de Israel mientras derramas tu furia sobre Jerusalén?’”—Ezequiel 9:8.
16. ¿Por qué fue acerca de los “que quedan de Israel” que Ezequiel preguntó mientras Jehová derramaba su furia sobre Jerusalén?
16 ¿Habría de ser exterminada toda la nación de Israel en aquel tiempo? A lo más solo había un resto o “los que quedan de Israel,” en vista de que los asirios habían conquistado el reino de diez tribus de Israel al norte y habían deportado a todos los sobrevivientes a partes lejanas del Imperio Asirio. Más tarde, los babilonios habían venido y habían sitiado a Jerusalén y se habían llevado al rey Joaquín y su casa y a miles de otros judíos, incluso a Ezequiel, al destierro en Babilonia. Recordando que las promesas de Jehová para provecho de toda la humanidad estaban enlazadas con la nación de Israel. Ezequiel se asustó tanto que cayó postrado y clamó.
17. ¿Qué dijo Jehová en respuesta a Ezequiel?
17 Ezequiel nos informa lo que Jehová dijo en respuesta: “De modo que él me dijo: ‘El error de la casa de Israel y Judá es muy, muy grande, y el país está lleno de derramamiento de sangre y la ciudad está llena de perversidad; porque han dicho: “Jehová ha dejado la tierra, y Jehová no está viendo.” Y en cuanto a mí también, mi ojo no se sentirá apenado, ni mostraré compasión. Ciertamente traeré sobre su propia cabeza su camino.’”—Ezequiel 9:9, 10.
18. ¿Qué diremos en cuanto a si Jehová estaba justificado al traer ahora sus fuerzas de ejecución contra la casa de Israel y Judá, y eso sin pena ni compasión?
18 Cuando consideramos sin sentimentalismo las cosas malas que Jehová manifiesta aquí, ¿no estaba justificado al traer sus fuerzas de ejecución contra la ofensora “casa de Israel y Judá”? Por mucho tiempo había mostrado que los estaba considerando con ojo apenado y estaba sintiendo compasión por ellos al enviar repetidamente a sus profetas fieles para darles advertencia, pero ellos se habían abstenido de escuchar y habían perseguido y matado a sus voceros obedientes. Por eso, ¿por qué debería sentirse apenado su ojo ahora y mostrar compasión ahora él? Al fin había llegado el tiempo para que Él dejara caer el castigo de “su camino” donde pertenecía, sobre sus propias cabezas responsables.
19. ¿Cómo se desarrolló la historia en armonía con la visión que se le dio a Ezequiel, y cómo también confirman las Lamentaciones que escribió Jeremías que no se hizo distinción en el degüello?
19 La historia realmente se desarrolló en armonía con esta visión que se le dio a Ezequiel. La ciudad de Jerusalén y su templo fueron destruidos y la tierra del reino de Judá quedó desolada cinco años más tarde, o en 607 a. de la E.C. Entre los que fueron muertos durante el sitio de Jerusalén y después estuvieron “anciano, joven y virgen y niñito y mujeres.” A los soldados babilonios no les importaba quién era muerto violentamente. No mostraban piedad alguna. En cuanto a cómo las condiciones mortíferas en la “ciudad que abundaba de gente” afectaron a todos prescindiendo de edad podemos leerlo nosotros mismos en el Libro de Lamentaciones escrito por el profeta-sacerdote Jeremías, que sobrevivió la destrucción de Jerusalén solo bajo protección divina. Sus lamentaciones, a pesar de su hermosa poesía, nos pintan las condiciones y sucesos desgarradores que acosaron a la ciudad condenada a destrucción, pues hasta hubo madres que hirvieron a sus propios hijos y se los comieron para calmar los dolores del hambre que les roía las entrañas.—Lamentaciones 1:1, 4, 6, 15, 18; 2:10, 20, 21; 4:10, 4, 16; 5:11-14.
20, 21. Según el registro histórico, ¿cuál fue el resultado de este mandato dado a los ejecutores: “Desde mi santuario deben comenzar”?
20 Tampoco se respetó alto rango ni posición sagrada. El mandato de Jehová a los ejecutores fue: “Desde mi santuario deben comenzar.” (Ezequiel 9:6) Así mismo, los oficiales principales del templo de Jehová estaban destinados a muerte violenta por no haber mantenido Su santuario libre de adoración de ídolos. El registro triste de 2 Reyes 25:18-21 testifica de que ellos y otros hombres eminentes responsables no escaparon de la ejecución, con las siguientes palabras:
21 “Además, el jefe de la guardia de corps tomó a Seraya el sacerdote principal y a Sofonías el segundo sacerdote y a tres guardas de la puerta [del templo]; y de la ciudad tomó a un oficial de la corte que tenía los hombres de guerra al mando de él, y a cinco hombres de los que tenían acceso al rey que fueron hallados en la ciudad; y al secretario del jefe del ejército, el que reunía con fines militares a la gente de la tierra, y a sesenta hombres de la gente de la tierra que fueron hallados en la ciudad; y luego los tomó Nabuzaradán el jefe de la guardia de corps y los condujo al rey de Babilonia en Ribla. Y el rey de Babilonia procedió a derribarlos y darles muerte en Ribla en la tierra de Hamat. Así Judá se fue al destierro de sobre su terreno.”
22. Entre los sobrevivientes de la destrucción de Jerusalén, ¿quiénes fueron los que realmente tuvieron la promesa y protección divina, y qué clase de obra es el marcar las frentes, según lo muestran los hechos acerca de éstos?
22 En aquel entonces ningún habitante de Jerusalén llevó una marca literal en su frente que notificara a los ejecutores que Jehová usó que habría de ser perdonado de recibir muerte violenta. No hay registro alguno en la Biblia que muestre que algún siervo comisionado de Jehová haya pasado por en medio de Jerusalén y usado pluma y tinta para marcar las “frentes de los hombres que están suspirando y gimiendo por todas las cosas detestables que se están haciendo en medio de ella.” (Ezequiel 9:4) El profeta-sacerdote Jeremías no lo hizo; el profeta Ezequiel mismo no lo hizo, pues él mismo estuvo desterrado en Babilonia durante todo el reinado de Sedequías, el último rey de Jerusalén. Según la promesa y protección divina ciertos individuos sí escaparon de ser ejecutados, como Baruc el secretario de Jeremías, y Ebed-melec el etíope y los recabitas. (Jeremías 45:1-5; 39:15-18; 35:1-19) Pero estos sobrevivientes no llevaron ninguna marca en sus frentes literales. Evidentemente, pues, el marcar frentes como Ezequiel lo contempló en visión de antemano es una obra simbólica.
23. ¿Qué clase de figura es este hombre vestido de lino con el tintero de secretario, y dónde tiene lugar en realidad el cumplimiento de su obra salvavidas?
23 También, el hombre “vestido de lino, con un tintero de secretario a sus caderas,” es una figura profética, y se cumple aquí en este siglo veinte en relación con la Jerusalén infiel antitípica, a saber, la cristiandad. Y asombroso como parezca, una obra que corresponde estrechamente a la del hombre vestido de lino con el tintero de secretario en su cintura comenzó y todavía progresa por toda la cristiandad durante este “tiempo del fin.” ¿Quién, pues, cumple el cuadro de este hombre que participa en esta obra salvavidas a través de la Jerusalén antitípica? Que ahora hablen por sí mismos los hechos históricos y lo identifiquen.
EL MODERNO MARCADOR DE FRENTES
24. ¿Qué libro publicó la Sociedad Watch Tower en 1931, y según éste a quién representó este hombre que llevaba el tintero?
24 No hace mucho tiempo, en el año 1931, se publicó un libro acerca de la Biblia intitulado “Vindication” (Vindicación).a Este libro, que tuvo una extensa distribución por toda la cristiandad, fue publicado por la Sociedad Watch Tower Bible and Tract. Fue un comentario de los primeros veinticuatro capítulos de la profecía de Ezequiel. Aclaró que la profecía del hombre “vestido de lino” no se había cumplido en ningún hombre individual que hubiera estado en contacto con la cristiandad, digamos, por ejemplo, en Charles Taze Russell, el primer presidente de la Sociedad Watch Tower Bible and Tract, que murió el 31 de octubre de 1916, terminando así su obra terrestre como cristiano, en medio de la I Guerra Mundial. Acerca de esto, Vindication (tomo I), en las páginas 99, 100 [página 92 en la edición en español], bajo el subtítulo “El varón con el tintero,” dijo lo siguiente:
Aparte del Señor Jesucristo, Dios nunca ha encargado a ningún otro individuo en la Tierra una tarea exclusiva. Desde el mismo principio de su ministerio Cristo Jesús tuvo una organización visible, y sus apóstoles, procediendo colectivamente bajo su dirección, formaron la parte visible de ella. Entre los fieles apóstoles hubo unidad de acción; . . . Por lo tanto, ‘el varón con el tintero de escribano a su lado’ claramente representó a la clase del “siervo” ungido del Señor en la Tierra, la cual forma parte de la organización de Dios.
25. ¿Dónde, a quiénes y cuándo se presentó este libro, y cuatro días después de adoptarse qué Resolución identificadora?
25 Fue en la tarde del 30 de julio de 1931 que se presentó el libro mencionado, después de presentarse una conferencia sobre “El varón con el tintero de escribano” a los muchos miles de personas que asistieron a la asamblea internacional de los Estudiantes Internacionales de la Biblia con sesiones en Columbus, Ohio, EE. UU. Precisamente en la tarde del domingo anterior, el 26 de julio, esta reunión internacional había adoptado unánimemente la Resolución por la cual abrazaron el nombre bíblico de “Testigos de Jehová.”—Isaías 43:1, 10-12, Mod.
26. Los que adoptaron aquella Resolución se identificaron así como ¿qué, y ante qué expectativa se alborozaron entonces, y de quién estaban recibiendo una comisión de trabajo?
26 Así estos seguidores dedicados y ungidos de Jesús se reconocieron como testigos cristianos de Jehová, mientras que el profeta Ezequiel fue testigo precristiano de Jehová. Estaban muy agradecidos de que su Dios, Jehová, definitivamente les hubiera revelado la obra que habrían de hacer como se indicó en la visión que se le dio a Ezequiel en cuanto al hombre “vestido de lino, con un tintero de secretario a sus caderas.” Estaban en sumo grado alborozados ante la expectativa de participar en marcar las frentes de aquellos cuyas vidas habrían de ser perdonadas el día en que Jehová haya de ejecutar su decisión judicial contra la Jerusalén infiel antitípica, a saber, la cristiandad. Al proceder así ellos, como clase ungida, estaban cumpliendo el papel del hombre con el tintero contemplado en visión. De hecho, este hombre con el tintero contemplado en visión tuvo su correspondencia moderna en esta clase unida de siervos ungidos, dedicados y bautizados de Jehová. Era como si Jehová, desde encima de su organización celestial semejante a carro, le estuviera diciendo de allí en adelante a este moderno ‘hombre con el tintero’ las palabras de mando: “Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén [representación típica de la cristiandad], y tienes que poner una marca en las frentes de los hombres que están suspirando y gimiendo por todas las cosas detestables que se están haciendo en medio de ella.”—Ezequiel 9:4.
LOS QUE ESTÁN SIENDO MARCADOS EN SUS FRENTES
27. ¿Quiénes, pues, son representados por los hombres que suspiran y gimen por todas las cosas detestables que se hacen en Jerusalén, y qué esperanza tienen?
27 ¿Quiénes son los hombres que suspiraban y gemían por todas las cosas religiosas detestables que se estaban haciendo dentro de la cristiandad y que ella misma hacía? No eran miembros de la clase del Ezequiel moderno, una clase de cristianos dedicados, ungidos con el espíritu de Dios. (Isaías 61:1-3) No formaban parte de la clase del ‘hombre con el tintero,’ que es la misma clase dedicada, bautizada y ungida de los siervos ungidos de Jehová. De modo que no esperaban morir y tener una resurrección espiritual que los pusiera en la región celestial como hijos espirituales de Dios y como coherederos con Jesucristo en su reino celestial. Eran personas que estaban asociadas con la cristiandad pero que sentían una reverencia sincera por las cosas de Dios y a quienes angustiaban todas las enseñanzas y acciones anticristianas de la cristiandad, todo lo cual causaba oprobio al santo nombre de Dios. En cuanto a su esperanza de vida eterna, estaban satisfechas con vivir en una Tierra limpiada, restaurada a una condición paradisíaca y bajo el reino celestial de Dios. Deseaban tener al Hijo de Dios, Jesucristo, sobre ellas como su “Pastor Excelente” y seguir en sus pasos como discípulos suyos.
28. En su parábola del Pastor Excelente, ¿cómo se refirió Jesús a personas de esa clase, y por qué necesitan ahora que las frentes les sean marcadas simbólicamente?
28 En la parábola de Jesús sobre el Pastor Excelente él indicó que tendría tal rebaño de personas semejantes a ovejas en la Tierra. Las llamó sus “otras ovejas,” pues, después de hablar acerca del “redil” que contenía a los que serán coherederos con él en el reino celestial, pasó a decir: “Y tengo otras ovejas, que no son de este redil; a ésas también tengo que traer, y escucharán mi voz, y llegarán a ser un solo rebaño, un solo pastor.” (Juan 10:16) La clase del ‘hombre con el tintero’ también llama a éstos las “otras ovejas.” Estas “otras ovejas” que viven en este “tiempo del fin” para la cristiandad son quienes necesitan que se les marquen las frentes a fin de que se les perdone la vida cuando los “seis hombres” ejecutores de Jehová pasen por toda la cristiandad para destruir a todos los que no estén marcados.—Ezequiel 9:5, 6.
LA “MARCA”
29. Según el propósito antiguo con que se marcaba a las personas, ¿por qué sería apropiada tal marca para estas “otras ovejas” simbólicas de hoy día?
29 Entonces, ¿qué es la “marca” simbólica que se escribe en sus frentes? En tiempos antiguos, los tiempos de Ezequiel, se acostumbraba que los adoradores de cierto Dios o diosa se identificaran como tales poniéndose la marca o nombre de la deidad en la parte superior de su rostro. Así mismo, los esclavos llevaban marcado en la frente, si es que no también en su mano, el nombre de su dueño para indicar públicamente a quién pertenecían. Sería igualmente apropiado hoy día que estas “otras ovejas” simbólicas fuesen marcadas de tal manera que mostraran públicamente a quién adoraban como Dios y a quién pertenecían como esclavos espirituales. ¿Es la “marca,” entonces, el tener uno en la cabeza conocimiento bíblico, y es la obra de marcar el poner conocimiento bíblico en la mente de la gente?
30. ¿Por qué el simplemente tener conocimiento bíblico no podría ser la “marca” simbólica, como se ilustra en el caso de los oficiales del templo a quienes Nabucodonosor mató en Ribla después de haber sido destruida Jerusalén?
30 No exactamente, aunque eso puede ser una parte importante del asunto. No es lo que un religioso tiene en la cabeza lo que vale, sino lo que él resulta ser. ¿Qué hay de ‘Seraya el sacerdote principal y Sofonías el segundo sacerdote y los tres guardas de la puerta,’ a todos los cuales el rey de Babilonia mató en Ribla después de la destrucción de Jerusalén y su templo? (Jeremías 52:24-27) Todos estos oficiales del templo tenían en su cabeza el conocimiento requerido de la Palabra escrita de Jehová, pero ¿qué eran personalmente? A pesar de todo este conocimiento intelectual, permitieron que los judíos apóstatas llevaran a cabo todas aquellas cosas detestables de idolatría en el templo dedicado al único Dios vivo y verdadero, Jehová. No habían estado “suspirando y gimiendo por todas las cosas detestables” que se hacían en Jerusalén. De la misma manera, nada del conocimiento que tiene el clero religioso de la cristiandad en la cabeza por su educación en seminarios religiosos los salvará cuando los “seis hombres” de Jehová pasen por la cristiandad con sus armas de destrozar. Por lo tanto, queda manifiesto que simple conocimiento bíblico no podría ser la “marca.”
31. ¿Qué es en realidad la “marca” simbólica, y qué mandato divino acerca de desasociarse han obedecido?
31 En realidad, la marca simbólica es la evidencia, como si estuviera exhibida en la frente descubierta de una persona, de que sea persona es discípulo dedicado y bautizado de Jesucristo y tiene una personalidad semejante a la de Cristo que lo distingue de todos los cristianos hipócritas. No es el simplemente ‘tener una forma de devoción piadosa’ exteriormente, sino que es el resultar veraz interior y exteriormente a “su poder,” el tener fe verdadera acompañada de obras en prueba de ello. (2 Timoteo 3:5; Santiago 2:18-26) Esta “marca” visible o discernible aclara a las fuerzas de ejecución de Jehová que los marcados no simpatizan con todas las cosas religiosas detestables que se están diciendo y haciendo en medio de la cristiandad, cosas que son falsas al nombre de Cristo que ella lleva. De hecho, han estado “suspirando y gimiendo” por todas esas cosas que deshonran a Dios, y en señal de protesta por ello han salido de la cristiandad y han renunciado a toda calidad de miembro en ella. Llegan a comprender que ella es parte integrante de Babilonia la Grande, el imperio mundial de religión falsa, razón por la cual tienen que obedecer el mandato divino: “Sálganse de ella, pueblo mío.”—Revelación 18:4; Isaías 52:11.
32, 33. Por lo tanto, ¿qué realmente es esta obra de marcar frentes, y cómo se indicó esta obra por el mandato de Jesús después de su resurrección de entre los muertos?
32 Necesariamente, pues, la obra de marcar frentes, como la efectúa el resto ungido de herederos del reino celestial de Jehová, tiene que efectuar más que simplemente impartir conocimiento bíblico a la gente poniendo la Biblia y la literatura bíblica en sus manos para que la lean y saquen lo que mentalmente puedan sacar al leerla. Incluye el ayudar a estas personas a entender lo que leen y entonces a amoldar su vida a lo que leen en la Palabra de Dios. Significa enseñar o instruir a esas personas y edificar en ellas una personalidad verdaderamente cristiana, una personalidad edificada en Jesucristo como el Fundamento y que se adhiera a todas las reglas y principios bíblicos para conducta como la de Cristo. Las instrucciones de Jesús a sus apóstoles y discípulos después de su resurrección de entre los muertos fueron:
33 “Por lo tanto vayan y hagan discípulos de gente de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del espíritu santo, enseñándoles a observar todas las cosas que yo les he mandado. Y, ¡miren! estoy con ustedes todos los días hasta la conclusión del sistema de cosas.”—Mateo 28:16-20.
34. ¿Desde cuándo hemos estado viviendo en la “conclusión del sistema de cosas,” y por eso qué es todavía adecuado que hagan aquéllos aunque solo parezca disponible para ellos una expectativa terrestre?
34 Está disponible toda la prueba que se necesita para establecer que hemos estado viviendo en la “conclusión del sistema de cosas” desde el fin de los “tiempos señalados de las naciones [gentiles]” a principios del otoño de 1914 E.C. (Lucas 21:24) Hoy muchas personas piensan que la única cosa razonable que pueden hacer es llegar a ser una de las “otras ovejas” del Pastor Excelente Jesucristo. Con ese fin, ¿qué tienen que hacer? Esto: obedecerlo como el Pastor Excelente y hacerse discípulos de él. Las ovejas, sean del “rebaño pequeño” real o del “otro” redil, tienen que seguir al único Pastor, que murió entregando su alma humana para todas ellas. Esto significa que en la actual “conclusión del sistema de cosas” aquellos a quienes Dios asigna a ser de las “otras ovejas” tienen que hacerse discípulos de él y bautizarse en agua y se les tienen que enseñar todas las cosas que él mandó que observaran sus discípulos. (Lucas 12:32; Juan 10:14-16) Puesto que él es su Modelo y se bautizó en agua, así ellos también tienen que bautizarse en símbolo de que vienen a Dios a hacer Su voluntad.—Hebreos 10:5-10; 1 Pedro 2:21.
35. ¿En virtud de qué revelación en The Watchtower en 1934 pudo comenzar, de hecho, la obra de marcar frentes, y por qué hasta ese tiempo no se había hecho un esfuerzo organizado por recoger a las “otras ovejas”?
35 Con consistencia, pues, en 1934, o tres años después de la presentación del libro Vindication (tomo I), la revista The Watchtower publicó en su número del 15 de agosto de 1934 el artículo intitulado “Su bondad.” En éste manifestó claramente, en las páginas 249, 250, que hasta el grupo de las “otras ovejas” de la actualidad tiene que estar constituido de personas que se hayan dedicado a Dios por medio de Cristo y que hayan simbolizado esa dedicación incondicional siendo sumergidas en agua, como Jesús. Esto, lo más temprano, señala el punto en que comenzó la obra el resto ungido de marcar las frentes de aquellos a quienes Dios optaría por perdonarles la vida durante la “tribulación grande” que le vendrá a la Jerusalén infiel antitípica, la cristiandad. ¿Por qué? Porque antes de eso la obra para con éstos constaba simplemente de impartirles conocimiento bíblico. (Mateo 24:15-22; Marcos 13:14-20) Pero aun en ese tiempo las “otras ovejas” de la actualidad no habían sido identificadas como los mismos individuos que constituyen la “gran compañía” o “gran multitud” o “grande muchedumbre” predicha en Revelación 7:9-17. Por consiguiente hasta ese tiempo no se había hecho ningún esfuerzo organizado por recoger a las “otras ovejas.”
36. En el año 1935, ¿qué fue lo que definitivamente dejó marcado que la obra del hombre del tintero al fin había comenzado, y por eso quiénes se presentaron para entrar en una relación de dedicación para con Dios por medio de Cristo?
36 Sin embargo, en la siguiente primavera hubo un suceso que definitivamente dejó marcado que la obra del moderno hombre “vestido de lino, con un tintero de secretario a sus caderas,” había comenzado al fin. ¿Dónde fue esto? En una asamblea general de los testigos de Jehová en Washington, D.C. Allí centenares de personas que no se sentían con derecho a una herencia celestial con Cristo se presentaron para bautizarse en agua en símbolo de que habían decidido entrar en relación de dedicación para con Jehová por medio de Cristo. ¿Qué las movió poderosamente a hacer esto en un bautismo en masa? Esto: En la tarde del viernes 31 de mayo de 1935 el entonces presidente de la Sociedad Watch Tower Bible and Tract pronunció ante los concurrentes a la asamblea un discurso sobre “La gran multitud,” y en éste explicó Revelación 7:9-17 (AV). Mostró que los que componían esa “gran multitud” no serían una clase espiritual con una esperanza celestial bajo los 144.000 coherederos de Jesucristo. (Revelación 7:1-8) En vez de eso, serían una clase terrestre, con la esperanza de un Paraíso terrestre, a saber, las “otras ovejas” del Pastor Excelente Jesucristo. El día siguiente aconteció el bautismo.
37. ¿Qué sucedió al día siguiente en la asamblea de Washington que mostró que no había necesidad alguna de que se titubeara más en cuanto a hacer y simbolizar una dedicación completa a Dios por medio de Cristo?
37 Ahora, ciertamente, no había necesidad de que nadie titubeara en cuanto a dedicarse completamente a Jehová por medio del Pastor Excelente Jesucristo y someterse a bautismo en agua como símbolo de esa dedicación incondicional. No fue sorprendente, pues, el que al día siguiente, el sábado 1 de junio de 1935, hubiera el bautismo de 840 personas en esta asamblea en Washington (D.C.). (Vea The Golden Age del 17 de julio de 1935, página 655, columna 2.)
38. ¿Como qué se bautizaron todos aquellos 840 candidatos, y desde entonces en qué suceso en las diversas asambleas de los testigos de Jehová ha habido participación grande?
38 Se bautizaron por sumersión total del cuerpo en agua como discípulos dedicados del Cordero de Dios, Jesucristo, en obediencia a Mateo 28:19, 20. Esto fue prescindiendo de que Jehová más tarde les revelara que los había asignado a ser del “rebaño pequeño” de coherederos de Cristo o los había asignado a ser “otras ovejas” que constituyen la “gran compañía” o “gran multitud” o “grande muchedumbre” de la actualidad. En Revelación 7:16, 17 se describe hermosamente el pastoreo que recibe del Cordero esta “grande muchedumbre” de las “otras ovejas.” Desde entonces hasta ahora ha habido servicios bautismales con una participación notablemente grande de personas recién dedicadas en las asambleas de circuito, de distrito, nacionales e internacionales de los testigos de Jehová.
39. Desde la II Guerra Mundial, ¿cuántos han sido bautizados así, y en qué obra están participando éstos ahora y bajo la supervisión de quiénes?
39 Así, desde el fin de la II Guerra Mundial en 1945 más de un millón de personas, poco después de haberse dedicado, han sido bautizadas en todo el mundo como discípulos de Jesucristo el Pastor Excelente. Tan solo durante el año de servicio de 1972 de los testigos de Jehová, 163.123 personas fueron bautizadas así en símbolo de su dedicación a Jehová prescindiendo de dónde opte él por colocarlos dentro de su organización teocrática. Esta creciente “grande muchedumbre” de discípulos bautizados de Cristo está ayudando ahora al moderno ‘hombre con el tintero,’ el resto pequeño de los 144.000 coherederos de Jesucristo todavía en la Tierra. Bajo la supervisión de este resto ungido están participando en la obra de marcar las frentes de los que están “suspirando y gimiendo por todas las cosas detestables” que tienen lugar en medio de la cristiandad. Hasta en países fuera de la cristiandad se efectúa el marcar.
40. ¿Hasta dónde se extiende la actividad de los testigos de Jehová en la actualidad, y quiénes además de los de la cristiandad están siendo marcados ahora en sus frentes simbólicamente?
40 Realmente, en 208 países y grupos de islas alrededor del globo terráqueo los testigos de Jehová están activos. Muchos profesantes de religiones no cristianas están oyendo y prestando atención a las buenas nuevas del reino de Dios y están abandonando esas religiones no cristianas en respuesta a la llamada de Jehová para que los que desean ser pueblo suyo se salgan de Babilonia la Grande, el imperio mundial de religión falsa. Al aceptar las enseñanzas de Cristo y por medio de dedicación y bautismo en agua éstos también están llenando los requisitos para ser marcados en la frente como discípulos verdaderos de Jesucristo.
41. ¿Cuándo, y por qué, necesitarán esas personas de fuera de la cristiandad esa marca simbólica en sus frentes?
41 Necesitarán esta marca simbólica entonces cuando Babilonia la Grande, de la cual la cristiandad ha sido la parte dominante, sea destruida en la venidera “tribulación grande,” de modo que las fuerzas ejecutoras de Jehová les perdonen la vida. (Revelación 17:1 a 19:2) Razonablemente, si los religiosos hipócritas dentro de la cristiandad que no están marcados en la frente como cristianos verdaderos no han de ser perdonados, la vida de ninguna persona no marcada de fuera de la cristiandad será perdonada, pues no son más discípulos verdaderos de Cristo de lo que lo son los hipócritas religiosos de la cristiandad.
SE INFORMA SOBRE EL LOGRO DE LA OBRA
42. ¿Qué indica si la obra de marcar dentro y fuera de la cristiandad se efectuará completamente o no, y de qué habría sido considerado responsable el hombre del tintero si no hubiera llevado a cabo su comisión?
42 En la visión dada al profeta Ezequiel se hizo hasta su fin la obra salvadora de vidas de marcar frentes en la Jerusalén condenada a destrucción. Con igual certeza, pues, aunque la obra de marcar se ha estado efectuando ya por más de treinta y siete años, se terminará por toda la Tierra, dentro y fuera de la cristiandad. La certeza de esto se puede ver de antemano por lo que el profeta Ezequiel dice en cuanto a si el hombre a quien se le encargó la obra de marcar llevó a cabo su comisión o no: “Y, ¡mire! el hombre vestido con el lino, a cuyas caderas estaba el tintero, traía palabra de vuelta, diciendo: ‘He hecho tal como me has mandado.’” (Ezequiel 9:11) Si el hombre no hubiera llevado a cabo su comisión habría sido considerado responsable del degüello de los hombres que ‘suspiraban y gemían’ cuyas frentes no hubiera marcado. Habría sido como Ezequiel, a quien se habría considerado responsable de la sangre de los israelitas ejecutados si no les hubiera dado la advertencia de parte de Jehová como atalaya.—Ezequiel 3:17-21.
43. ¿Qué están determinados a seguir efectuando los del resto ungido de los siervos de Jehová, y con ese fin qué continúan haciendo?
43 Hoy el resto ungido de los siervos de Jehová está determinado a ser tan fiel como lo fue el hombre vestido de lino en la visión. Con ese fin en mira, a pesar de oposición y persecución continúan yendo de casa en casa, presentando las buenas nuevas del reino de Dios, para ponerse en comunicación con todas las personas que están “suspirando y gimiendo por todas las cosas detestables” que se están haciendo dentro y fuera de la cristiandad y que son detestables a Jehová el único Dios vivo y verdadero. Jesucristo profetizó: “Estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.” (Mateo 24:14) Cuando de hecho venga ese “fin” y se termine la obra de marcar, el resto ungido desea poder traer palabra de vuelta a Quien lo comisionó, Jehová, y decir: “He hecho tal como me has mandado.”
44. ¿Qué están deseosas de hacer ahora las “otras ovejas,” y por qué tienen que mantener la “marca” en sus frentes, y cómo?
44 Las “otras ovejas” que están cooperando con ellos en la obra de marcar frentes no están menos deseosas de resultar fieles junto con el resto ungido, el moderno hombre “vestido de lino, con un tintero de secretario a sus caderas.” Para que los “seis hombres” a quienes Jehová encarga la ejecución les perdonen la vida a estas “otras ovejas,” en la venidera “tribulación grande,” ellas tienen que mantener esta “marca” simbólica en sus frentes, para que los “seis hombres” jamás se acerquen a ellas para usar en sus cabezas sus armas de destrozar. Pueden retener esta “marca” salvavidas en sus frentes participando leal y obedientemente en la obra de marcar con el resto ungido que está vestido con el lino simbólico de la justicia de Dios. Esto asegurará que la “grande muchedumbre” de estas “otras ovejas” marcadas ‘salgan de la grande tribulación’ y entren en servicio adicional a Jehová en Su nuevo sistema de cosas bajo el Cordero Jesucristo.—Revelación 7:17.
[Nota]
a Edición agotada totalmente.