El bautizar sigue al hacer discípulos
1. ¿Qué es el bautismo, y cómo se efectuó en el caso de Jesús?
NO HUBO duda acerca de lo que Jesús quiso decir cuando mandó a sus seguidores a ‘bautizar’ discípulos. Juan el Bautista fue el primer hombre autorizado para efectuar el bautismo en agua. Algunos de los apóstoles fueron anteriormente sus discípulos y por eso habían sido bautizados por él. Juan bautizó a Jesús. ¿Hizo esto Juan rociando agua sobre Jesús? El relato muestra que Jesús fue bautizado en el río Jordán y que “después que fue bautizado Jesús salió inmediatamente del agua.” En la Biblia, bautismo e inmersión significan la misma cosa, pues la palabra griega baptisma, de la que obtenemos la palabra española “bautismo,” indica una zambullida, a saber, el sumergir y el emerger. De modo que lo que sucede en el bautismo es que una persona es “enterrada” temporalmente fuera de la vista y luego levantada del agua.—Mat. 3:13-16; Juan 1:33; vea también Romanos 6:3, 4.
2. ¿Por qué hizo inmersiones Juan el Bautista?
2 Juan el Bautista fue enviado para bautizar a miembros de la nación de Israel que estaban dedicados a Jehová Dios y obligados a guardar el pacto de la Ley pero que eran culpables de pecados contra el arreglo de Jehová y necesitaban arrepentirse. Al hacer que los israelitas se arrepintieran a fin de ser limpiados de pecados y al bautizarlos públicamente en símbolo de arrepentimiento, estaba preparando el camino para que el pueblo pactado de Dios viniera al Cristo.—Luc. 3:3, 4; Hech. 19:4.
3, 4. ¿Por qué fue el bautismo de Jesús diferente del de otros, y qué significó?
3 Esto no quiere decir que cuando Jesús vino a Juan para ser bautizado fue porque tenía que arrepentirse de pecados. Primera de Pedro 2:22 prueba que Jesús nunca cometió un pecado. Evidentemente Juan pensaba en el bautismo por arrepentimiento cuando presentó objeción a sumergir a Jesús en el Jordán, pero Jesús indicó que en su caso era algo diferente, diciendo: “Deja que sea, esta vez, porque de esa manera nos es apropiado llevar a cabo todo lo que es justo.”—Mat. 3:13-15.
4 ¿Qué, pues, significó el bautismo en el caso de Jesús? Escritos posteriores, en Hebreos, capítulo 10, se refieren a Jesús cuando vino “al mundo,” es decir, para emprender su ministerio y ofrecer su propio cuerpo ‘preparado’ en obediencia a la voluntad de Jehová, como diciendo en armonía con Salmo 40:6-8 (Versión de los Setenta): “Sacrificio y ofrenda no quisiste, sino que preparaste un cuerpo para mí. . . . ‘¡Mira! yo vengo (en el rollo del libro está escrito acerca de mí) para hacer tu voluntad, oh Dios.’” (Heb. 10:5, 6) Puesto que Jesús era miembro de una nación dedicada a Jehová Dios y en relación de pacto con Él, no estaba simbolizando una dedicación, sino que estaba haciendo una presentación de sí mismo para hacer la voluntad de Jehová. El hecho de que Jehová aceptó su presentación se evidenció por la unción con espíritu santo y la voz desde el cielo que dijo: “Tú eres mi Hijo, el amado; yo te he aprobado.”—Mar. 1:11.
5. ¿Qué clase de bautismo ejecutaron los seguidores de Jesús durante el ministerio terrestre de él?
5 Los apóstoles sabían acerca de esto, y temprano en el ministerio de Jesús los discípulos participaron en ejecutar bautismos en agua bajo la dirección de Jesús. El bautismo que ellos ejecutaron fue de miembros de la nación israelita que habían pecado y fue en símbolo de arrepentimiento a la manera del bautismo de Juan. (Juan 3:25, 26; 4:1, 2) Sin embargo, el bautismo de Juan no habría de continuar indefinidamente, pues él dijo acerca de Cristo Jesús: “Aquél tiene que seguir aumentando, pero yo tengo que seguir menguando.” (Juan 3:30) Lo que habría de reemplazarlo era el bautismo cristiano que Jesús mencionó en Mateo 28:19. De modo que ¿cuándo sería eso? El bautismo de Juan solo era para los que estaban en relación de pacto de la Ley con Jehová, y ese pacto estuvo en vigencia o vigor solo hasta 33 E.C.
6. ¿Cuándo llegó a su fin el bautismo de Juan, y cómo se demostró esto en Éfeso?
6 El hecho de que el bautismo de Juan ya no era válido después de eso y no habría de practicarse a través de la llamada era cristiana se aclaró por medio de la experiencia de la congregación de Éfeso. Apolos les predicó pero solo conocía el bautismo de Juan. Cuando Pablo llegó a Éfeso descubrió a doce discípulos que fueron sumergidos con el bautismo de Juan, más bien que en el nombre del Padre y el Hijo y el espíritu santo. Por lo tanto no recibieron espíritu santo. Cuando Pablo explicó los asuntos se bautizaron en el nombre de Jesús, después de lo cual pudieron recibir espíritu santo al imponerles Pablo las manos.—Hech. 18:25; 19:1-7.
BAUTISMO CRISTIANO DE DISCÍPULOS
7. (a) ¿Cuál es la diferencia entre el bautismo de Juan y el bautismo cristiano desde el Pentecostés? (b) ¿Borra pecados el bautismo cristiano?
7 El bautismo en agua que Jesucristo bosquejó en Mateo 28:19 es diferente del bautismo de Juan; se hace en el nombre del Padre y del Hijo y del espíritu santo. Poco después que Jesús expresó esas palabras, a saber, en el Pentecostés, el apóstol Pedro, al hablarle a la muchedumbre reunida acerca de perdón y bautismo cristiano, dirigió atención especial a lo que ellos como judíos y prosélitos necesitaban especialmente, diciendo: “Arrepiéntanse, y bautícese cada uno de ustedes en el nombre de Jesucristo para perdón de sus pecados, y recibirán el don gratuito del espíritu santo.” Después de esa declaración explicó “con muchas otras palabras” y los exhortó: “Sálvense de esta generación perversa.” Así aprendieron los detalles acerca de los propósitos de Jehová y pudieron ver que no podrían conseguir salvación quedándose en el sistema de cosas judío. Para recibir espíritu santo tenían que aceptar la provisión de Jehová por medio de su Hijo. Pudieron determinar personalmente hacer la voluntad de Jehová. Como resultado, unos tres mil individuos fueron bautizados “en el nombre de Jesucristo” en aquel día. Esto no significa que el bautismo ejecutado allí borró sus pecados. No, fue la sangre derramada de Cristo Jesús en la que ejercieron fe la que los limpió de sus pecados.—Hech. 2:38-41; 3:19; 1 Juan 1:7.
8. (a) ¿Cómo llevó la obra de Felipe a bautizar discípulos? (b) ¿Cómo sabemos que Felipe no pasó por alto el hacer discípulos de sus hijos?
8 En el tiempo de gran persecución en Jerusalén cuando Felipe fue a Samaria a predicar, muchedumbres le prestaron atención. Llegaron a ser discípulos debido a lo que aprendieron, abandonando cualesquier conexiones con el espiritismo. Debido a que Felipe declaró las buenas nuevas del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, hombres y mujeres pudieron ver cuál era la voluntad de Jehová y resolver hacerla y fueron bautizados en agua. (Hech. 8:5-12) Felipe estuvo envuelto en hacer discípulos de otros también, pues pronto el ángel de Jehová lo dirigió a un eunuco etíope que estaba tratando de entender la profecía de Isaías. Felipe lo instruyó, contestando preguntas para que entendiera las buenas nuevas acerca de Jesús y pudiera hacerse discípulo de Cristo Jesús. Cuando llegaron a un cuerpo de agua suficientemente grande para inmersión, el eunuco fue bautizado. (Hech. 8:26-39) Sin duda Felipe también hizo discípulos de sus propios hijos; por consiguiente, sus cuatro hijas profetizaban.—Hech. 21:8, 9.
9. ¿Cuáles son algunas cosas que Pedro dijo a Cornelio y a su casa antes que se bautizaran?
9 Pedro participó en hacer discípulos de Cornelio y miembros de su casa. Cornelio tenía fe en Jehová, haciéndole ruego continuamente, deseando servir a Dios. Por medio de un ángel Cornelio fue puesto en contacto con Pedro, y cuando Pedro llegó a la casa todos los presentes estaban congregados delante de Dios para oír todas las cosas que mandó Jehová. Mientras escuchaban el discurso instructivo de Pedro, que se registra en Hechos 10:34-43, recibieron espíritu santo y después de eso se bautizaron.
10. ¿Cómo hizo Pablo discípulos en Filipos, según se informa en Hechos, capítulo 16?
10 Pablo tuvo muchas oportunidades de hacer discípulos. En Filipos habló a un grupo de mujeres junto a un río. Entre ellas Lidia, una adoradora de Jehová, prestó atención a lo que Pablo enseñaba, después de lo cual ella y su casa se bautizaron. (Hech. 16:14, 15) Allí, por causa de la persecución, Pablo y Silas pudieron hablar la palabra de Jehová a un carcelero y su casa, quienes después de eso se bautizaron.—Hech. 16:27-34.
11. ¿Cuál era el método de Pablo de hacer discípulos en Corinto?
11 En Corinto, donde Pablo tuvo que hacer tiendas de campaña por una temporada, con regularidad usaba el sábado para pronunciar conferencias instructivas, primero en la sinagoga, estando intensamente ocupado en la palabra, testificando a judíos. Crispo, el presidente de la sinagoga, y muchos corintios creyeron y fueron bautizados. Pablo permaneció allí en total un año y seis meses para enseñarles a observar todos los mandamientos de Cristo Jesús y la palabra de Dios.—Hech. 18:1-11.
12. (a) ¿Qué muestran los ejemplos bíblicos que se hace antes del bautismo? (b) ¿Por qué no hay registro de bautismo de infantes, y por qué es impropio esa clase de bautismo entre los cristianos?
12 Todos estos ejemplos que se han dado de tiempos primitivos de hacer discípulos seguido del bautizar indican el orden de los acontecimientos que tuvieron lugar de acuerdo con el mandato de Jesús en Mateo 28:18-20. Se declaraban y se enseñaban las buenas nuevas acerca del Reino, el nombre de Jesucristo y la palabra de Dios. Individuos que recibían la instrucción mostraban fe en Jehová y Cristo Jesús, queriendo servir a Dios. Fue solo después de llegar a conocer la voluntad de Jehová y ver su relación con él que se bautizaban “en el nombre de Jesucristo.” (Hech. 10:48) Después del bautismo continuaban aprendiendo de los mandamientos de Jesucristo y los observaban. No hay registro de que se bautizara a infantes, y no lo hay con buena razón, porque ¿cómo podría efectuarse eso de acuerdo con el mandato de Jesús de hacer discípulos antes de efectuar el bautizar? Cada individuo tenía que hacerse responsable de su propio proceder y hacer lo que hacía con pleno conocimiento de lo que estaba envuelto.
13. (a) ¿Cómo está relacionado el bautismo con el obtener uno una buena conciencia? (b) ¿Cuál es la meta de los cristianos bautizados, según se indica en 1 Pedro 4:1-3?
13 Estos candidatos para el bautismo se daban cuenta de que no estaban en una relación buena con Jehová a causa del pecado de Adán, cuyos efectos heredaron, y tenían que dar pasos que les permitieran tener una buena conciencia delante de Dios. Pedro describe cómo el bautismo obra para salvar a la gente... “(no el desechar la suciedad de la carne, sino la solicitud hecha a Dios para una buena conciencia,) mediante la resurrección de Jesucristo.” (1 Ped. 3:21) La meta es ser semejante a Cristo: “Ármense con la misma disposición mental; porque la persona que ha sufrido en la carne ha desistido de los pecados, con el fin de vivir el resto de su tiempo en la carne, ya no para los deseos de los hombres, sino para la voluntad de Dios. Porque basta el tiempo que ha pasado para que ustedes hayan obrado la voluntad de las naciones cuando procedían en hechos de conducta relajada, lujurias, excesos con vino, diversiones estrepitosas, partidas de beber e idolatrías ilegales.” (1 Ped. 4:1-3) Esto indica que los cristianos bautizados están dedicados a Jehová, que están haciendo la voluntad de Dios y no la voluntad de las naciones.
14. ¿Cómo ilustra un yugo la relación del discípulo con Cristo Jesús, y por qué nos es animador esto?
14 La actitud mental de Jesucristo era hacer la voluntad de Jehová, por eso los que son sus discípulos quieren tener la misma determinación fuerte, aunque haya sufrimiento relacionado con ello. De hecho deben estar siguiendo el mismo modelo que siguió Jesús si van a ser discípulos verdaderos, porque él dijo: “Tomen mi yugo sobre ustedes [Pónganse debajo de mi yugo conmigo (nota al pie de la página de la traducción en inglés)] y háganse mis discípulos, porque soy de genio apacible y humilde de corazón, y hallarán refrigerio para sus almas. Porque mi yugo es suave y mi carga ligera.” (Mat. 11:29, 30) Si el “yugo” al que se refirió Jesús fue el que Jehová colocó sobre él, esto significaría hacer la misma obra que Jesús, o, en realidad, trabajar junto con él, porque el yugo doble permitiría que dos personas se encargaran de la misma carga juntas. El que sirviera bajo el mismo yugo con Jesús encontraría ligera la carga y tendría una maravillosa ayuda para participar con buen éxito en la obra como siervo o esclavo de Jehová Dios.
15. (a) ¿Qué relación tienen con Jehová Dios los que esperan la salvación por haber aceptado la provisión del rescate? (b) En esa relación, ¿qué deben estar haciendo?
15 El hecho es que la salvación solo es posible en virtud del sacrificio de rescate de Cristo Jesús. Jesús pagó este precio a su Padre en el cielo. Todos los que entran al rebaño de Jehová en virtud de la fe en la sangre derramada de Cristo, la dedicación y el bautismo son como esclavos que son comprados con un precio en el mercado de esclavos. A los superintendentes cristianos, Pablo dijo: ‘Pastoreen la congregación de Dios, que él compró con la sangre del Hijo suyo.’ A los corintios, Pablo dijo: “Ustedes no se pertenecen a sí mismos, porque fueron comprados por precio. Sin falta, glorifiquen a Dios en el cuerpo de ustedes en conjunto.” (Hech. 20:28; 1 Cor. 6:19, 20) El que es esclavo obedece a su Dueño; por consiguiente Pablo dijo a la congregación romana: “Ninguno de nosotros, de hecho, vive con respecto de sí mismo únicamente, y ninguno muere con respecto de sí mismo únicamente; pues tanto si vivimos, vivimos para Jehová, como si morimos, morimos para Jehová. Por consiguiente, tanto si vivimos como si morimos, pertenecemos a Jehová.” (Rom. 14:7, 8) Y a los corintios: “Porque el amor que el Cristo tiene nos obliga, porque esto es lo que hemos juzgado, que un hombre murió por todos; así pues, todos habían muerto; y murió por todos para que los que viven, no vivan ya para sí mismos, sino para el que murió por ellos y fue levantado.”—2 Cor. 5:14, 15. (Vea también Lucas 17:7-10.)
16. ¿De qué manera indica bien el acto del bautismo el cambio de la posición de uno respecto a Dios?
16 Por lo tanto, cuando una persona es bautizada es como si fuera enterrada bajo el agua, terminando su proceder pasado, y es levantada como persona dedicada a hacer la voluntad de su Dueño.
¿QUIÉN PUEDE SER DISCÍPULO?
17. ¿Qué recalcó Jesús en Lucas 14:25-33?
17 A veces muchedumbres eran atraídas a Jesús, de modo que él les dio a saber lo que está envuelto en hacerse discípulo: “Si alguien viene a mí y no odia a su padre y madre y esposa e hijos y hermanos y hermanas, sí, y hasta su propia alma, no puede ser mi discípulo. El que no lleva su madero de tormento y viene en pos de mí no puede ser mi discípulo. Por ejemplo, ¿quién de ustedes que quiere edificar una torre no se sienta primero y calcula los gastos, a ver si tiene lo suficiente para completarla? De otro modo, pudiera poner el fundamento pero no poder terminarla, y todos los que miraran pudieran comenzar a ridiculizarlo, diciendo: ‘Este hombre comenzó a edificar pero no pudo terminar.’ . . . Por consiguiente, puedes estar seguro, ninguno de ustedes que no le diga adiós a todo lo suyo puede ser mi discípulo.” (Luc. 14:25-33) ¿Qué les estaba recalcando Jesús? Que si alguien desea ser discípulo de Cristo tiene que querer y poder poner en primer lugar ese discipulado, adelante de todas las otras cosas de valor en la vida, y estar dispuesto a aguantar cualquier sufrimiento o pruebas que acompañen a ese privilegio. Desde el principio uno debe poder aceptar todo lo que lo acompaña y calcular que uno puede terminar el derrotero del discipulado, lo mismo que un hombre que quiere edificar una torre termina su construcción.
18. (a) Por lo tanto, ¿por qué es práctico que la enseñanza preceda al bautismo? (b) ¿Por qué hay que romper toda conexión con la religión falsa?
18 Es por eso que la obra docente se lleva a cabo antes del bautismo. El esclavo de Jehová en perspectiva tiene que aprender y llegar a entender todo lo que está envuelto y tiene que estar dispuesto a pasar por todos los cambios necesarios y deshacerse de todas las cosas que desagradan a su nuevo Dueño. Solo si puede darse de toda alma en dedicación debe la persona dar el paso de ser bautizada. En Filipenses 3:4-8 el apóstol Pablo describió su posición aventajada en la religión de los judíos, la cual abandonó al emprender el discipulado cristiano, y luego agregó: “Por motivo de él he sufrido la pérdida de todas las cosas y las considero como un montón de basura, a fin de ganar a Cristo.” (Vea también Hechos 22:3; Gálatas 1:14.) Hay que romper toda conexión con la religión falsa.—2 Cor. 6:17, 18; Rev. 18:4.
19. ¿Cuáles son algunas prácticas malas de las cuales las Escrituras muestran que uno tiene que estar limpio antes del bautismo?
19 El aprendiz tiene que discernir la necesidad de arrepentirse y apartarse de toda práctica mala. “Amortigüen, por lo tanto, los miembros de su cuerpo que están sobre la tierra en lo que toca a fornicación, inmundicia, apetito sexual, deseo perjudicial y codicia, que es idolatría. Por causa de esas cosas la ira de Dios viene. En esas mismísimas cosas ustedes, también, anduvieron en un tiempo cuando vivían en ellas. Mas ahora realmente deséchenlas todas de ustedes, ira, cólera, maldad, habla injuriosa y habla obscena de su boca. No estén mintiéndose los unos a los otros. Desnúdense de la vieja personalidad con sus prácticas, y vístanse de la nueva personalidad, que por medio de conocimiento exacto va haciéndose nueva según la imagen de Aquel que la creó.” (Col. 3:5-10) Muchas personas que están aprendiendo acerca de los requisitos de Dios no se daban cuenta de que todas esas cosas eran malas a la vista de Dios, pero cuando obtienen conocimiento de ello y tienen la correcta condición de corazón inmediatamente cesan de la práctica mala y se aprovechan de la provisión de Cristo Jesús por medio de su sacrificio para limpiarse. (1 Cor. 6:9-11; Gál. 1:4) Esta acción tiene que preceder al bautismo.
20. ¿Qué significa ‘no ser parte del mundo’?
20 También hay que terminar el envolvimiento en los asuntos políticos del mundo, pues Jesús en oración a Dios dijo de sus discípulos: “Yo les he dado tu palabra, pero el mundo los ha odiado, porque ellos no son parte del mundo, así como yo no soy parte del mundo.” (Juan 17:14) Y cuando estuvo ante Pilato, Jesús dijo: “Mi reino no es parte de este mundo. Si mi reino fuera parte de este mundo, mis servidores habrían peleado para que yo no fuera entregado a los judíos. Pero, como es el caso, mi reino no es de esta fuente.”—Juan 18:36; vea también Isaías 2:4.
21. (a) ¿Debemos esperar que el emprender el servicio de Dios agrade a toda la gente que conocemos? (b) En Mateo, capítulo 10, ¿cómo mostró Jesús que la oposición puede provenir dentro de la familia inmediata, pero qué se debe hacer acerca de ello?
21 Uno tiene que esperar que su nueva adoración o sus maneras de vivir cambiadas no agraden a anteriores asociados, pues Pedro dijo: “Porque ustedes no continúan corriendo con ellos en este derrotero al mismo bajo sumidero de disolución, están perplejos y siguen hablando injuriosamente de ustedes.” (1 Ped. 4:4) Pero el proceder victorioso de Jesús nos consuela en relación con esto: “Sí, consideren con sumo cuidado y atención al que ha aguantado tal habla contraria de pecadores en contra de sus propios intereses, para que no vayan a cansarse y a desfallecer en sus almas.” (Heb. 12:3) Es posible que la oposición provenga dentro de la familia misma. (Mat. 10:35, 36) Esto está en armonía con lo que Jesús dijo sobre calcular el costo del discipulado.
22. ¿Por qué no debemos sorprendernos cuando venga algo de persecución, y cómo debemos considerarla?
22 El que está aprendiendo tiene que saber también que de seguro vienen persecuciones. Jesús explicó: “Si ustedes fueran parte del mundo, el mundo le tendría afecto a lo que es suyo. Ahora bien, porque ustedes no son parte del mundo, sino que yo los he escogido del mundo, a causa de esto el mundo los odia. Tengan presente la palabra que les dije: El esclavo no es mayor que su amo. Si ellos me han perseguido a mí, a ustedes también los perseguirán; si ellos han observado mi palabra, también observarán la de ustedes. Mas todas estas cosas las harán contra ustedes por causa de mi nombre, porque ellos no conocen al que me envió.” (Juan 15:19-21; 16:1) Los apóstoles entendieron las cuestiones y, cuando fueron perseguidos, se regocijaron “porque se les había considerado dignos de sufrir deshonra a favor de su nombre.” (Hech. 5:41) El saber acerca de estas cosas ayuda al cristiano en perspectiva a contar el costo del discipulado para ‘ver si tiene lo suficiente para completarlo.’ Tiene que preguntarse si está preparado para seguir tras el derrotero de Jesús y sus apóstoles fieles en el servicio de Dios, no solo efectuando el trabajo de hacer discípulos, sino también sosteniendo la justicia aunque el mundo ejerza alguna presión sobre él.
23. ¿Qué seguridad hay de ayuda para los que emprenden el servicio de Dios?
23 Cuando un aprendedor hace una dedicación y se bautiza, puede confiar en que Jehová y Cristo Jesús le ayudarán a tener buen éxito en probar su fidelidad. La Palabra de Dios nos asegura Su cuidado amoroso: “Pero, después que ustedes hayan sufrido por un poco de tiempo, el Dios de toda bondad inmerecida, que los llamó a su gloria eterna en unión con Cristo, terminará él mismo el entrenamiento de ustedes, él los hará firmes, él los hará fuertes.” (1 Ped. 5:10) La oración es esencial, como enfatizó Pablo: “Persistan en la oración.” También dijo: “Ocúpense en orar por nosotros, para que la palabra de Jehová siga moviéndose rápidamente y siendo glorificada así como lo es de hecho con ustedes; y para que seamos librados de hombres dañinos e inicuos, porque la fe no es posesión de todos. Pero el Señor es fiel, y él los hará firmes y los guardará del inicuo.”—Rom. 12:12; 2 Tes. 3:1-3.
24. ¿Qué conocimiento debe tener un aprendiz antes del bautismo?
24 El aprender no cesa con el bautismo, lo cual significa que no es necesario que el discípulo sepa todo antes que pueda hacer una dedicación y ser sumergido en agua. Los apóstoles aprendieron mucho más después de llegar a ser seguidores de Jesucristo, y él prometió: “El espíritu santo, que el Padre enviará en mi nombre, ése les enseñará todas las cosas y les hará recordar todas las cosas que les dije.” (Juan 14:26; vea también Proverbios 4:18.) Por lo tanto lo de importancia es que el discípulo tenga suficiente conocimiento para entender lo que es la voluntad de Dios, ejercer fe, mostrar arrepentimiento de su derrotero pasado, determinar en su corazón el hacerse seguidor dedicado de Cristo Jesús, y luego ser sumergido en agua. Después de eso Dios requiere que sirva con la misma actitud que tuvo Jesús en todo, y Jesús dijo: “No se efectúe mi voluntad, sino la tuya.”—Luc. 22:42.
25. (a) ¿Cómo sabemos que Jehová quiere que nos acerquemos a él y nos dediquemos a él? (b) ¿Qué preguntas básicas puede considerar la persona que piensa en bautizarse? (c) Si uno desea ser bautizado, ¿qué debe hacer?
25 Después de considerar lo que se ha publicado en las páginas precedentes, si usted es una persona que ha estado aprendiendo y desea observar los mandamientos de Jesucristo, ¿qué debe hacer? Pedro le recuerda que el camino le es accesible a usted; Jehová quiere que usted se ponga en armonía con él: “Jehová . . . es paciente para con ustedes porque no desea que ninguno sea destruido, sino desea que todos alcancen el arrepentimiento.” (2 Ped. 3:9; vea también 2 Corintios 5:18-6:2; Revelación 22:17.) Después que el etíope había aprendido de Felipe, preguntó: “¿Qué impide que yo sea bautizado?” (Hech. 8:36) Si usted opina lo mismo acerca de servir a Jehová Dios y tomar el yugo de Cristo sobre usted, sugerimos que considere las siguientes dos preguntas, que se hacen a los candidatos para el bautismo:
(1) ¿Se ha arrepentido usted de sus pecados y se ha vuelto de ellos, reconociéndose delante de Jehová Dios como pecador condenado que necesita salvación, y le ha expresado usted reconocimiento de que esta salvación procede de él, el Padre, por medio de su Hijo Jesucristo?
(2) Sobre la base de esta fe en Dios y en su provisión para la salvación, ¿se ha dedicado usted sin reservas a Dios para hacer la voluntad de él de aquí en adelante conforme se la revele él a usted por medio de Jesucristo y por medio de la Biblia bajo el poder esclarecedor del espíritu santo?
Si usted halla que puede contestar “SÍ” a estas preguntas, entonces sería apropiado que hablara al superintendente presidente en la congregación de testigos de Jehová con la que está asociado, con miras a bautizarse. Después del bautismo usted también puede estar a la expectativa de participar en la obra mundial de hacer discípulos con la bendición de Cristo Jesús, que prometió estar con sus seguidores “hasta la conclusión del sistema de cosas.”—Mat. 28:18-20.
[Ilustración de la página 564]
En obediencia al mandato de Jesús, sus apóstoles bautizaban a los que se hacían discípulos