Parte 3
“El Verbo”—¿quién es? Según Juan
1. (a) ¿Quién era Juan, y quién afirmó él que Jesucristo era? (b) ¿Qué alegan los que enseñan la Trinidad en cuanto a lo que Juan 10:30 significa?
JUAN el hijo de Zebedeo de la ciudad de Betsaida había conocido personalmente al Verbo. Él nos dice que éste, la Palabra, había sido compañero de Dios en el cielo, pero que “llegó a ser carne” al nacer de una virgen judía en la ciudad de Belén, hace casi dos mil años. Juan lo identifica como Jesucristo el Hijo de Dios, y Juan llegó a ser uno de sus doce apóstoles. Hoy hay hombres que usan los escritos de Juan acerca de la Palabra para alegar que Jesucristo era más que el Hijo de Dios, que era Dios mismo y que llegó a ser un Hombre–Dios. Uno de los dichos de Jesús que los que enseñan la Trinidad usan para alegar que Jesús mismo afirmó que era Dios se halla en Juan 10:30, y dice: “Yo y el Padre [“mi Padre,” TA] somos uno.” (Mod) No obstante, en la discusión que siguió entre Jesús y los judíos él probó que él no había dicho de ninguna manera que él era Dios. Jesús explicó: “Dije: Soy Hijo de Dios.” (Juan 10:36 Mod) Pero si él no era Dios mismo, ¿cómo eran uno él y su Padre?
2, 3. ¿Qué le pidieron los judíos a Jesús que les dijera, y qué respondió Jesús, llevando a sus palabras de Juan 10:30?
2 Jesús acababa de dar una parábola o ilustración en que habló de sí como el Pastor Excelente y de sus seguidores como ovejas. Entonces los judíos lo rodearon y le dijeron: “¿Por cuánto tiempo vas a mantener en suspenso nuestra alma? Si eres el Cristo, dínoslo francamente.”
3 Jesús respondió que sus obras hablaban por él: “Se lo dijo y no obstante ustedes no creen. Las obras que estoy haciendo en el nombre de mi Padre, éstas dan testimonio acerca de mí. Pero ustedes no creen, porque ustedes no son de mis ovejas. Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y me siguen. Y yo les doy vida eterna, y ellas de ninguna manera serán destruidas jamás, y nadie las arrebatará de mi mano. Lo que mi Padre me ha dado es algo mayor que todas las otras cosas, y nadie puede arrebatarlas de la mano del Padre. Yo y el Padre somos uno.”—Juan 10:24-30.
4. ¿Por qué esta unidad no se refiere a una Trinidad como enseñan los clérigos?
4 ¿Cómo eran uno? ¿Uno en cuerpo, uno en identidad, uno en componer juntos un solo Dios, uno como miembros de una Trinidad o Dios tres-en-uno, el tercer miembro del cual fuera el Espíritu Santo? ¡No! Porque si pertenecieran a una Trinidad o Dios trino, entonces los dos no eran uno sino solo dos terceras partes, puesto que la Trinidad tiene tres Personas, a saber, “Dios Padre, Dios Hijo, y Dios Espíritu Santo.”
5. ¿Cómo eran ellos uno en la relación de Padre e Hijo, y cómo eran uno en testificar?
5 En vez de ser una Trinidad, Jesús y su Padre eran uno por estar de acuerdo mutuamente como Padre e Hijo. Nunca hubo desacuerdo alguno entre ellos. El testimonio que el Padre daba y el testimonio que el Hijo daba estaban de acuerdo. Jesús el Hijo les dijo a los judíos: “El Padre que me envió está conmigo. También en la misma Ley de ustedes está escrito: ‘El testimonio de dos hombres es verdadero.’ Yo soy uno que da testimonio acerca de mí mismo, y el Padre que me envió da testimonio acerca de mí.” (Juan 8:16-18) Jesús aquí habló acerca de sí mismo y de su Padre como de dos individuos diferentes y distintos. Así que por ellos se proveía suficiente testimonio para que los judíos creyeran, puesto que se exigía testimonio de por lo menos dos testigos. Aunque eran dos individuos diferentes, aun así el Padre y el Hijo eran uno en su testimonio, porque ambos testimonios concordaban.
6, 7. (a) Según el profeta Ezequiel, ¿qué arreglos de pastoreo prometió Jehová levantar para su pueblo parecido a ovejas? (b) ¿Cómo eran uno con relación a estas ovejas Jesús y el Padre?
6 El Padre y el Hijo eran también uno en su cuido de las ovejas. Mucho tiempo antes Dios había prometido colocar un pastor fiel sobre su pueblo parecido a ovejas. En Ezequiel 34:23, 24 (Mod) Dios dijo: “Levantaré sobre ellas un solo Pastor, para que él las pastoree, es a saber, mi siervo David; él las apacentará, y será su Pastor. Y yo, Jehová, seré el Dios de ellas, y mi siervo David será el Príncipe en medio de ellas: yo Jehová lo he dicho.” Así que Jehová Dios levantó a su Hijo Jesucristo como descendiente del rey David para cumplir su profecía acerca de “un solo Pastor” como el rey David.
7 Jesús como Pastor dijo que él no dejaría que ningún enemigo lobuno le arrebatara de la mano las ovejas. Tampoco el Padre, quien entregó estas ovejas a su Hijo, dejaría que un enemigo las arrebatara de su propia mano. El Padre y el Hijo estaban de acuerdo en cuanto a esta protección y preservación de las ovejas. Tenían un propósito en común, el de evitar que estas ovejas fueran destruidas, y salvarlas para vida eterna. De modo que en este compartir intereses el Padre y el Hijo eran uno. Por eso Jesús dijo que él estaba haciendo sus obras “en el nombre de mi Padre.” En sus obras él actuaba como agente de su Padre, como representante de su Padre.
8. ¿Cómo eran uno en cuanto a la voluntad que habría de hacerse?
8 En prueba de que siempre estaban en unidad y nunca en desacuerdo, Jesús dijo: “He descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad de aquel que me envió. Esta es la voluntad del que me envió, que no pierda nada de todo lo que me ha dado, sino que lo resucite en el último día. Porque ésta es la voluntad de mi Padre, que todo el que ve al Hijo y ejerce fe en él tenga vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día.” (Juan 6:38-40) Él no le falló a esa voluntad de Dios, sino que justamente vivió haciéndola. Dijo: “Mi alimento es hacer la voluntad de aquel que me envió y terminar su obra.”—Juan 4:34.
9. ¿Cómo eran uno en cuanto a la iniciativa para acción?
9 Jesús nunca hizo nada independientemente de su Padre, sino que siempre se mantuvo en unidad con su Padre. Dijo: “No puedo hacer ni una sola cosa de mi propia iniciativa; así como oigo, juzgo; y el juicio que yo dicto es justo, porque yo no busco mi propia voluntad, sino la voluntad del que me envió.” (Juan 5:30) ¿No habla eso de perfecta unidad entre Padre e Hijo? Pero esa unidad no exigió que Jesús dijera: Yo soy Dios; Yo soy mi Padre.
10, 11. ¿Qué oración de Jesús a su Padre arroja luz sobre la clase de unidad que existe entre ellos?
10 La propia oración de Jesús a su Padre celestial a favor de las ovejas prueba que ésta es la clase de unidad que existe entre Jesucristo y Jehová Dios. En esta oración Jesús no habla de sí como Dios, sino que dice a su Padre:
11 “Y ésta es la vida eterna, que te conozcan a ti, solo Dios verdadero, y a Jesucristo a quien tú enviaste. He manifestado tu nombre a los hombres que me diste del mundo; tuyos eran, y a mí me los diste; y ellos han guardado tu palabra. Mas no ruego solamente por éstos, sino por aquellos también que han de creer en mí por medio de la palabra de ellos; para que todos ellos sean uno; así como tú, oh Padre, eres en mí, y yo en ti, para que ellos también sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste. Y la gloria que me has dado a mí, yo se la he dado a ellos: para que ellos sean uno, así como nosotros somos uno; yo en ellos, y tú en mí, para que ellos sean hechos perfectos en la unidad; para que conozca el mundo que tú me enviaste, y que los has amado a ellos, así como me has amado a mí. ¡Padre! yo quiero que aquellos también que me has dado, estén conmigo en donde yo estoy, para que vean mi gloria, que tú me has dado: porque me amaste antes de la fundación del mundo.”—Juan 17:3, 6, 20-24, Mod.
12. (a) ¿Por qué no fue que fueran “uno en sustancia” lo que Jesús quiso decir? (b) ¿Qué muestra que Jesús no se clasificó como igual a Dios?
12 En esta oración a su Padre celestial, Jesús lo llamó el “solo Dios verdadero” y dijo: “Tú, oh Padre, eres en mí, y yo en ti,” y “nosotros somos uno.” ¿Quiso decir Jesús que él y su Padre eran un solo Dios, o dos Personas de un Dios trino, sin que se mencione siquiera el tercer miembro de ese Dios? ¿Quiso decir Jesús que él y su Padre eran, como dicen los trinitarios, “uno en sustancia”? ¿Cómo pudiera ser eso en vista de lo demás que Jesús, que entonces era de sustancia carnal, dijo en esta oración a Dios quien es espíritu? (Juan 4:24) Al llamar a su Padre “solo Dios verdadero” se cerró las puertas a sí mismo en cuanto a ser Dios o aun una parte o una Persona de Dios. De otro modo, el Padre no pudiera ser el “solo Dios verdadero.” La palabra “solo” quiere decir, según el diccionario, “único en su especie”; “que está sin otra cosa o que se mira separado de ella.” Según Jesús, su Padre era, no solo el “Dios verdadero,” sino también el que lo era “solo.” Según sus propias palabras, Jesús no se clasificó como igual a Dios.
13. ¿Quién fue el que dio a Jesús hombres sacados de este mundo?
13 Cuando Jesús dijo que su Padre el “solo Dios verdadero” le dio discípulos sacados de este mundo, Jesús no quiso decir que él como Dios se dio algo a sí mismo. Algunos de los apóstoles de Jesús que estaban escuchando su oración habían sido anteriormente discípulos de Juan el Bautista, pero Juan los pasó a Jesús como el Novio que tenía derecho a la clase de la Novia. Pero Jesús habló de todos sus discípulos, no como de un regalo que se hiciera él a sí mismo, sino como de un regalo que le hiciera el “solo Dios verdadero,” su Padre celestial. “Me los diste.”
14. (a) Si la Trinidad fuera realidad, ¿qué querría decir el que los discípulos llegaran a ser uno como Jesús y su Padre son uno? (b) ¿De qué manera, entonces, se hace uno a los discípulos?
14 Además, Jesús no habló de que meramente él y su Padre fueran uno sino que también habló de todos sus discípulos como siendo uno: “Para que todos ellos sean uno; así como tú, oh Padre, eres en mí, y yo en ti, para que ellos también sean uno en nosotros; . . . para que ellos sean uno, así como nosotros somos uno.” Al orar que sus discípulos “sean uno en nosotros” Jesús ciertamente no quiso decir que sus discípulos habían de ser incorporados en una Trinidad, de modo que la Trinidad fuera a aumentar su número de miembros o Personas de tres hasta ciento cuarenta y cuatro mil y tres, de modo que no fuera más un Dios tres-en-uno sino de entonces en adelante un Dios muchos-en-uno. ¡Eso es absurdo! Jesús dijo que, tal como él y su Padre eran uno, así se había de hacer uno a sus discípulos. ¿Cómo se hace uno a sus discípulos? No como un solo Dios; no como un solo individuo de muchas Personas. No, sino uno en creencia en el un solo Dios y en el nombre de aquel a quien Dios envió; uno en la clase de fruto que producen por el mismo espíritu; uno en la clase de obra; uno en armonía y acuerdo entre sí; uno en el mismo propósito y objetivo, que es la vindicación de Jehová como el “solo Dios verdadero” y la salvación de la familia humana por Jesucristo para la gloria de Dios.
15. (a) Con esto como base, ¿por qué no son uno en el sentido de una Trinidad Jesús y su Padre? (b) ¿Cómo son uno en el Padre y el Hijo todos los discípulos?
15 También son un grupo de familia, puesto que todos estos discípulos son engendrados por Dios para llegar a ser hijos espirituales de Dios y así llegar a ser los hermanos de Jesucristo. Puesto que la manera en que todos estos discípulos son uno es la manera en que el Padre celestial y su Hijo Jesucristo son uno, entonces el Padre y el Hijo no son los dos un solo Dios de más de una Persona. El Padre celestial queda como “solo Dios verdadero,” y Jesucristo a quien él envió queda el Hijo del “solo Dios verdadero.” Todos los 144,000 discípulos de Jesucristo engendrados por espíritu son uno en el Padre y en el Hijo al estar en unión con ellos, en una especial relación armoniosa de familia.
“YO SOY”
16, 17. (a) ¿Qué otro texto bíblico que implica a Abrahán sacan a relucir los trinitarios para su afirmación? (b) ¿Qué dice sobre esa expresión la edición de la Biblia de Drioux, y también qué dice la edición de Knox?
16 Hay otro texto de los escritos de Juan que los trinitarios sacan a relucir al afirmar que los escritos de Juan enseñan que Jesucristo es Dios. Ese texto se halla en la discusión de Jesús con los judíos que se da en Juan 8:56-58 (Val): “Abraham vuestro padre se gozó por ver mí día; y lo vió, y se gozó. Dijéronle entonces los Judíos: Aun no tienes cincuenta años, ¿y has visto á Abraham? Díjoles Jesús: De cierto, de cierto os digo: Antes que Abraham fuese, yo soy.”
17 Sobre esta expresión, el comentario de la edición de la Santa Biblia del Abbé Drioux es: “Antes que Abraham fuese, yo soy, en realidad Dios eterno, antes de que Abraham naciera.”a En una nota al pie de la página en su traducción de la Biblia el monseñor Renaldo A. Knox dice: “Versículo 58. ‘Yo soy’; aquí nuestro Señor parece reclamar explícitamente un título Divino, compare Éxodo 3:14.”b Por lo tanto vamos a Éxodo 3:14 (TA) y leemos: “Respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Hé aquí, añadió, lo que dirás a los hijos de Israel: EL QUE ES me ha enviado a vosotros.” Pero la Versión Valera dice: “Y respondió Dios á Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás á los hijos de Israel: YO SOY me ha enviado á vosotros.”
18. (a) ¿Cómo se usó en Éxodo 3:14 la expresión “YO SOY”? (b) ¿Qué traducciones modernas de Juan 8:58 no muestran que Jesús estuviera alegando ser Jehová Dios?
18 La expresión “YO SOY” se usa allí como un título o nombre, y en el hebreo esta expresión es la sola palabra Ehyeh (אהיה). Allí Jehová Dios estaba hablando a Moisés y enviándolo a los hijos de Israel. Entonces, ¿estaba Jesús en Juan 8:58 alegando ser Jehová Dios? No según muchos traductores modernos de la Biblia, como lo probarán las siguientes citas: Nácar—Colunga: “Antes que Abraham naciese, era yo.” Moffatt: “He existido antes de que Abrahán naciera.” Schonfield y Una Traducción Americana: “Existí antes de que Abrahán naciera.” Stage (alemán): “Antes de que Abrahán llegara a ser, yo era.”c Pfaefflin (alemán): “Antes de que hubiera un Abrahán, ¡ya yo estaba allí!”d Jorge M. Lamsa, traduciendo de la Peshitta siríaca, dice: “Antes de que Abrahán naciera, yo era.” El Dr. Jaime Murdock, también traduciendo de la Versión Peshitto siríaca, dice: “Antes de que Abrahán existiera, yo era.” La Biblia Sagrada brasileña publicada por el Centro de la Biblia Católica de São Paulo dice: “Antes de que Abrahán existiera, yo existía.”-Segunda edición, de 1960, Bíblia Sagrada, Editora “AVE MARIA” Ltda.e
19. (a) ¿En qué idioma dijo Jesús eso a los judíos? (b) ¿Cómo prueba la versión en hebreo de esas palabras por traductores modernos que Jesús no estaba pretendiendo ser el gran “YO SOY”?
19 Debemos recordar, también, que cuando Jesús habló a aquellos judíos, les habló en el hebreo de su día, no en griego. Por lo tanto la manera en que Jesús dijo lo de Juan 8:58 a los judíos nos la presentan así en sus traducciones modernas ciertos eruditos del hebreo que tradujeron el griego al hebreo de la Biblia: el Dr. Franz Delitzsch: “Antes de que Abrahán fuera, yo he sido.”f Isaac Salkinson y David Ginsburg: “Yo he sido cuando no había habido todavía un Abrahán.”g En estas dos traducciones hebreas los traductores usan para la expresión “Yo he sido” dos palabras hebreas, un pronombre y un verbo, a saber, aní hayithi; no usan la una sola palabra hebrea: Ehyeh. Por lo tanto ellos no piensan que en Juan 8:58 Jesús estaba tratando de imitar a Jehová Dios y darnos la impresión de que él mismo era Jehová, el YO SOY.
20. (a) ¿Qué se puede decir acerca de la aparición de la expresión griega Egó eimí en el capítulo 8 de Juan? (b) ¿Por qué no vierten muchas traducciones de la Biblia esta expresión de Juan 8:58 de la misma manera que lo hacen en esos otros versículos?
20 ¿En qué idioma escribió Juan su narración de la vida de Jesucristo? En el idioma griego, no en hebreo; y en el texto griego la expresión controversial es Egó eimí. Por sí misma, sin materia introductoria alguna antes de ella, Egó eimí significa “Yo soy.” Ahora bien, esta expresión Egó eimí aparece también en Juan 8:24, 28; y en esos versículos la Versión Autorizada o del Rey Jaime y la Versión Douay y otras vierten la expresión al inglés “Yo soy él,” poniendo el pronombre él en bastardillas para indicar que el pronombre él está añadido o insertado. (VA; AN; Yg) Pero aquí, en Juan 8:58, esas versiones no hacen que esta expresión diga “Yo soy él,” sino solo “Yo soy.” Evidentemente quieren darnos la idea de que Jesús no estaba simplemente refiriéndose a su existencia sino también dándose un título que pertenece a Jehová Dios,h en imitación de Éxodo 3:14.
21. (a) ¿Usa la traducción griega de los Setenta de Éxodo 3:14 “Egó eimí” para el nombre de Dios? (b) Por lo tanto, ¿qué no pueden interpretar los trinitarios que signifique Juan 8:58?
21 Al escribir Juan 8:58, el apóstol no estaba citando de la Versión de los Setenta griega, una traducción de las Escrituras Hebreas hecha por judíos que hablaban griego, en Alejandría, Egipto, antes del nacimiento de Cristo. Que todo el que pueda leer griego compare Juan 8:58 en griego y Éxodo 3:14 en la Versión de los Setenta griega, y descubrirá que la lectura de la Versión de los Setenta en Éxodo 3:14 no usa la expresión Egó eimí para el nombre de Dios, cuando Dios le dice a Moisés: “YO SOY me ha enviado a vosotros.” La Versión de los Setenta griega usa la expresión ho Ōn, que significa “El Ser,” o, “El que es.” Este hecho se nos presenta claramente en la traducción de Bagster de la Versión de los Setenta griega, en Éxodo 3:14, que dice: “Y Dios habló a Moisés, diciendo: Yo soy EL SER [ho Ōn]; y él dijo: Así dirás a los hijos de Israel, EL SER [ho Ōn] me ha enviado a ustedes.” Según la traducción de la Versión de los Setenta griega por Carlos Thomson, Éxodo 3:14 dice: “Dios le habló a Moisés diciendo, Yo soy El Yo Soy [ho Ōn]. Además dijo: Así dirás a los hijos de Israel: El Yo Soy [ho Ōn] me ha enviado a ustedes.”i Así esta comparación de dos textos griegos, el de la Versión de los Setenta y el de Juan 8:58, quita toda base para que los trinitarios aleguen que Jesús, en Juan 8:58, estaba tratando de ajustarse a sí mismo Éxodo 3:14, como si él fuera Jehová Dios.
22, 23. (a) ¿Cómo se usa y aplica la expresión ho ōn en otros lugares en los escritos de Juan? (b) ¿Qué, entonces, era lo que solo decía Jesús en Juan 8:58?
22 Oh, sí, la expresión griega ho Ōn si aparece en los escritos del apóstol Juan. Aparece en el texto griego de Juan 1:18; 3:13, 31; 6:46; 8:47; 12:17; 18:37, pero no como título o nombre. Así que en cuatro de esos versículos no aplica a Jesús, sino a otras personas. No obstante, en el Apocalipsis o Revelación el apóstol Juan sí usa la expresión ho Ōn como título o designación cinco veces, a saber, en Apocalipsis 1:4, 8; 4:8; 11:17; 16:5. Pero en los cinco casos la expresión ho Ōn se aplica a Jehová Dios el Todopoderoso, y no al Cordero de Dios, la Palabra de Dios.
23 Por ejemplo, Apocalipsis 1:4, 8 (Val) dice: “Juan á las siete iglesias que están en Asia: Gracia sea con vosotros, y paz del que es [ho ōn] y que era y que ha de venir, y de los siete Espíritus que están delante de su trono.” “Yo soy el Alpha y la Omega, principio y fin, dice el Señor, que es [ho ōn] y que era y que ha de venir, el Todopoderoso.” Apocalipsis 4:8 aplica ho ōn al Señor Dios Todopoderoso en su trono celestial, y Apocalipsis 5:6, 7 muestra que el Cordero de Dios viene a él después. Apocalipsis 11:17 aplica ho ōn al Señor Dios Todopoderoso cuando él toma el poder para gobernar como Rey. Apocalipsis 16:5 aplica ho ōn al Señor Dios cuando él actúa como Juez. Por lo tanto Juan 8:58 le falla al clero como prueba de que haya un “Dios trino,” pues en ese versículo, como bien lo traducen el Dr. Jaime Moffatt, Una Traducción Americana, y otros, Jesús solo estaba diciendo que él había tenido una existencia prehumana en el cielo con su Padre y que su existencia prehumana empezó antes de que naciera Abrahán.
PARECIDO, PERO SUBORDINADO
24. ¿Qué arguyen los trinitarios con Juan 14:9, pero qué quiso decir Jesús cuando dijo: “El que me ha visto, ha visto al Padre”?
24 Pero, objeta un trinitario, ¿no se están olvidando de lo que Jesús le dijo al apóstol Felipe? ¿Qué fue eso? Esto: “¿Tanto tiempo ha que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto, ha visto al Padre.” (Juan 14:9, Val) Ah, sí, pero eso es muy diferente a que Jesús dijera: ‘Yo soy el Padre.’ Jesús acababa de decirle a Felipe y los otros apóstoles fieles que él se iba a Dios su Padre; y por lo tanto, ¿cómo podía Jesús decir al mismo instante que Felipe, cuando miraba a Jesús, estaba mirando al Padre? Jesús no pudo haber querido decir eso, porque él separó a Dios su Padre de sí, como cuando dijo: “Creéis en Dios, creed también en mí.” (Juan 14:1, Val) ¿Por qué la expresión “también en mí,” si Jesús fuera Dios mismo? Felipe le preguntó a Jesús: “Señor, muéstranos el Padre,” y Jesús contestó que eso era lo que había estado haciendo todo el tiempo, a saber, mostrándoles el Padre. Él había estado explicando quién era su Padre celestial. Había estado mostrándoles cómo era su Padre celestial. Imitaba a su Padre. Era como él, tanto que cuando uno veía a Jesús era como ver a su Padre.
25, 26. (a) En vista de Juan 1:18, ¿por qué no pudo Jesús haber querido decir que los apóstoles estaban mirando al Padre? (b) ¿Qué les dijo Jesús a los judíos en Juan 5:37 que prueba que Jesús no es Dios?
25 Al decir: “El que me ha visto, ha visto al Padre,” Jesús no podía haber querido decir que los apóstoles estaban viendo a Dios, Aquel a quien Jesús se dirigía o de quien hablaba llamándolo Padre. Muchos años después que Jesús dijo esas palabras, el apóstol Juan escribió: “Y aquel Verbo fué hecho carne, y habitó entre nosotros (y vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia y de verdad. . . . la gracia y la verdad por Jesucristo fué hecha. A Dios nadie le vió jamás: el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le declaró.” (Juan 1:14, 17, 18, Val) Al declarar así a Dios su Padre, al explicarlo, al darlo a conocer, al ser y actuar como él, Jesús producía el efecto de que los apóstoles, al ver a Jesús, veían también a Dios su Padre.
26 Por lo tanto Jesús dijo a los judíos: “Y el que me envió, el Padre, él ha dado testimonio de mí. Ni nunca habéis oído su voz, ni habéis visto su parecer.” (Juan 5:37, Val) Pero aquellos judíos si vieron el parecer de Jesús y oyeron su voz. También, Jesús les dijo que si ellos le hubieran creído al profeta Moisés le hubiesen creído también a él; y Jesús sabia por los escritos de Moisés que Dios le había dicho a Moisés arriba en la montaña: “No podrás ver mi rostro: porque no me verá hombre, y vivirá.” (Éxo. 33:20, Val) Pero aquellos judíos sí vieron a Jesús y vivieron, lo que probó que Jesús no era Dios. Por consiguiente Juan 14:9 tampoco prueba que Jesús sea Dios.
27. ¿Cómo se comparó Jesús a sí mismo con un discípulo, y por lo tanto en qué posición se puso para con Dios?
27 De modo que otra vez notamos que Jesús nunca habló de sí como Dios ni se llamó Dios. Siempre se puso inferior a Dios más bien que en igualdad con Dios. Se puso en la posición de discípulo de Dios, cuando Jesús dijo: “Nada hago de mí mismo; mas como el Padre me enseñó, esto hablo.” (Juan 8:28, Val) Dios era el Maestro de Jesús, y Jesús como discípulo no estaba sobre su Maestro, Dios, ni era igual a él. Jesús así se clasificó junto con los demás hijos de la organización de Dios, Sion, concerniente a la cual Jesús dijo: “Escrito está en los profetas: Y serán todos enseñados de Dios. Así que, todo aquel que oyó del Padre, y aprendió, viene á mí.” (Juan 6:45, Val; Isa. 54:13) Como discípulo de su Padre, Jesús aprendía cosas de él continuamente.
28. Por lo tanto, como persona que estaba aprendiendo, ¿qué dijo Jesús que él hacía con respecto a su Padre?
28 Indicando esto, Juan 8:25-27 (Val) dice: “Jesús les dijo: . . . el que me envió, es verdadero: y yo, lo que he oído de él, esto hablo en el mundo. Mas no entendieron que él les hablaba del Padre.” Después Jesús dijo a aquellos judíos: “Ahora procuráis matarme, hombre [griego: ánthropos] que os he hablado la verdad, la cual he oído de Dios [ho Theós].” A sus apóstoles fieles dijo: “Os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os he hecho notorias.”—Juan 8:40; 15:15, Val.
29. Por lo tanto, ¿qué acción dijo Jesús que su Padre tomaba para con él, y qué prueba esto en cuanto a Jesús en comparación con Dios?
29 Como uno que oía, como uno que recibía enseñanza, Jesús repetidamente habló de sí mismo como siendo enviado por su Padre celestial. Por ejemplo, Juan 12:44, 45, 49, 50 (Val) dice: “Jesús clamó y dijo: El que cree en mí, no cree en mí, sino en el que me envió; y el que me ve, ve al que me envió. Porque yo no he hablado de mí mismo: mas el Padre que me envió, él me dió mandamiento de lo que he de decir, y de lo que he de hablar. Y sé que su mandamiento es vida eterna: así que, lo que yo hablo, como el Padre me lo ha dicho, así hablo.” El mismo hecho de que se le envió prueba que no era igual a Dios sino que era menos que Dios su Padre.
30. ¿Cómo mostró Jesús, por la propia regla que declaró, si era o no tan grande como su Padre?
30 Esto resulta de la propia regla de Jesús que declaró a sus apóstoles: “El siervo no es mayor que su señor, ni el enviado mayor que aquel que le envió.” (Juan 13:16, Mod) Como Dios era mayor que Jesús al enviarlo, así Jesús era mayor que sus discípulos al enviarlos. Jesús hizo esta comparación cuando les dijo: “Paz á vosotros; como me envió el Padre, así también yo os envío.” (Juan 20:21, Val) De modo que el Mayor envía al que es menos.
31. Por lo tanto, ¿qué era alimento para él, aunque físicamente tuviera hambre?
31 Jesús, por haber sido enviado en un mandado, no vino a hacer su propia voluntad o a complacerse a sí mismo según la carne. Vino para hacer la voluntad del Mayor que lo envió. Hizo la voluntad de Dios aunque tuvo hambre físicamente, diciendo: “Mi comida es que haga la voluntad del que me envió, y que acabe su obra.”—Juan 4:34, Val.
32. ¿Desde dónde fue enviado Jesús, y por lo tanto dónde era inferior a Dios?
32 No fue por primera vez cuando estuvo en carne sobre la Tierra que Jesús fue enviado, sino que fue enviado desde el cielo. En prueba de esto dijo: “He descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, mas la voluntad del que me envió. Y ésta es la voluntad del que me envió, del Padre: Que todo lo que me diere, no pierda de ello.” (Juan 6:38, 39, Val) De manera que aun en el cielo Jesús era menos que su Padre. Durante el tiempo que tuviera para ello Jesús se mantuvo constantemente en el trabajo de su Padre, su Enviador. Dijo: “Conviéneme obrar las obras del que me envió, entre tanto que el día dura: la noche viene, cuando nadie puede obrar.” (Juan 9:4, Val) Todo esto añade prueba al hecho de que Jesús no era Dios cuya voluntad tenía que hacerse, sino que era inferior a Dios, y estaba haciendo la voluntad de Dios.
[Notas]
a El comentario en latín dice: “Antequam Abraham fieret, Ego sum, quippe Deus aeternus, antequam Abraham nasceretur.”-Página 180, tomo 7, de La Sainte Bible, por M. L’Abbé Drioux. (francés)-Edición de 1884.
b Citado de la página 203 de El Nuevo Testamento de Nuestro Señor y Salvador Jesucristo-Una Nueva Traducción, por R. A. Knox, edición de 1945.
c “Ehe Abraham geworden ist, war ich.”
d “Ehe es einen Abraham gab, war ich schon da!” Vea notas † y * en la página 138, párrafo 4, en La Atalaya del 1 de marzo de 1963.
e “Antes que Abraão existisse, eu existía.”
f בטרם היות אברהם אני הייתי—Delitzsch. Edición de 1937.
g אני הייתי עוד עד לא־היה אברהם—Salkinson-Ginsburg. Edición de 1941.
h Vea Juan 8:24, 28, 58, VA; AN; NR; Ro; Yg; Dy y Confraternidad.
i Citado de La Biblia de los Setenta la Más Antigua Versión del Antiguo Testamento según la traducción de Carlos Thomson, revisada por C. A. Muses; publicada por The Falcon’s Wing Press, edición de 1954.