-
Preguntas de los lectoresLa Atalaya 1974 | 15 de febrero
-
-
rasgos ceremoniales de la Ley principalmente porque se les mandaba hacerlo y debido a los estrictos castigos impuestos por la desobediencia. Puesto que no tenían el entendimiento pleno de estas cosas, su aprecio de corazón forzosamente era limitado. Así se puede ver que la ley de Dios no estaba inscrita en la mente y corazón de cada israelita.
Sin embargo, todos los que son introducidos en el nuevo pacto tienen que hacer una promesa o dedicación para servir a Jehová como discípulos del Señor Jesucristo. Esto requiere un reconocimiento público de Jesucristo como Señor resucitado y fe en Dios, Aquel que levantó a Jesús de entre los muertos.—Rom. 10:8-10.
Sin conocer los requisitos de Dios para la salvación y tener un aprecio de corazón por ellos, una persona sencillamente no podría ejercer fe con su corazón ni hacer una declaración o reconocimiento público con la mira de llegar a ser un discípulo bautizado de Jesús. A las personas que fueron introducidas en el nuevo pacto como cristianos engendrados por espíritu primero se les enseñaron los requisitos de Dios para salvación. Luego, después que Jehová Dios les abrió el corazón para que recibieran la “palabra” o mensaje divino de manera apreciativa, fueron movidos a hacer una dedicación o promesa de vivir en armonía con la ley de Dios como discípulos del Señor Jesucristo. Después de simbolizar esta dedicación mediante bautismo en agua, fueron introducidos en el nuevo pacto. Puesto que Jehová Dios hizo posible que ellos conocieran y entendieran su ley, así como que tuvieran verdadero aprecio de corazón por ella, él de veras puso sus “leyes en su mente” y las escribió “en su corazón,” no en tablillas de piedra.
-
-
¡Huya ahora!La Atalaya 1974 | 15 de febrero
-
-
¡Huya ahora!
¡“Sálganse de ella, pueblo mío”! Esta advertencia es una de las más fuertes que se hallan en la Biblia. Está registrada en el libro de Revelación y se dirige a todos los que alegan ser creyentes en Dios. Pero, ¿salirse de qué? Y, ¿huir adónde? Y ¿por qué?
La respuesta a la última pregunta es: ¡Porque su vida depende de ello! Las respuestas a las otras dos preguntas, y muchas más, se hallan en el libro de 286 páginas “¡Babilonia la grande ha caído!” ¡El reino de Dios domina! Pida su ejemplar ahora y vea lo que significan para esta generación las profecías relacionadas con Babilonia la Grande. Solo 50c.
Sírvanse enviarme “¡Babilonia la grande ha caído!” ¡El reino de Dios domina! por el cual adjunto 50c de dólar. Envíenme también como regalo el folleto Salvando a la raza humana... a la manera del Reino.
-