Despiertos a nuestra responsabilidad
“El hijo que actúa con perspicacia está recogiendo durante el verano; el hijo que actúa vergonzosamente duerme profundamente durante la cosecha.”—Pro. 10:5.
1. ¿Qué propósito en la vida tiene todo cristiano?
¿HA PENSADO usted alguna vez seriamente acerca de su propósito en la vida con relación a Dios y acerca de su responsabilidad para con su Creador? Muchas personas se entregan a la rutina de ganarse la vida, criar su familia y planear para la vejez, jamás considerando lo que pudieran hacer en el servicio de Dios. Sin embargo, Jesús estuvo despierto para hacer la voluntad de Dios. No se contentó con solo establecerse y llevar una vida buena como carpintero y criar una familia, porque sabía que Dios requería más de él. Para sus seguidores él dijo que deberían amar a Dios con todo su corazón, mente, alma y fuerzas y a su prójimo como a sí mismos. Él no consideró pesado este requisito de servir a Dios de todo corazón, sino que lo llamó una carga liviana porque se haría impulsado por intenso amor que proviene de un conocimiento del Creador.
2. ¿Cómo ha fracasado la cristiandad en ayudar a muchos a alcanzar esta meta?
2 Muchas personas sinceras tienen el deseo de servir a Dios, pero se preguntan qué pueden hacer y cómo hacerlo. Recientemente un joven expresó el deseo de entrar en el ministerio. Cuando sus padres consideraron el asunto con su clérigo hallaron que el costo de la educación era mayor de lo que podían costear, de modo que el joven renunció a la idea de usar su vida para servir a Dios. En otra ocasión una mujer bien entrada en años habló con un testigo de Jehová diciendo que esperaba jubilarse en unos cuantos años para poder emplear algún tiempo en el servicio de Dios. Pero, ¿qué hay de todos los años cuando ella pudiera haber mostrado el amor que le tiene a Dios y a su prójimo, años que se han perdido porque la cristiandad enseña a la gente a ser oidora en vez de hacedora de la palabra? Jesús no asistió a una escuela de entrenamiento religioso durante muchos años antes de emprender el servicio de su Padre celestial, ni se requiere que lo hagan los que lo siguen hoy en día. No hay duda de que él fue un perspicaz estudiante de la Biblia, porque a la edad de doce años asombró a los hombres religiosos de mayor edad de Jerusalén, pero él no halló necesario seguir el curso de estudio tradicional de los escribas o fariseos a fin de servir a Jehová.
3. ¿En qué trabajo que Jesús comenzó podemos participar ahora?
3 ¿Qué hizo Cristo que podemos hacer hoy en el servicio de Dios? Según sus propias palabras en Lucas 4:18,19, él declaró buenas nuevas a los pobres, predicó una liberación a los cautivos y recobro de la vista a los ciegos. Mediante su obra activa de predicar mostró su amor a Dios y a su prójimo. ¿Deberíamos hacer menos? Si una persona ora la oración que Jesús enseñó a sus discípulos, ‘Venga tu reino. Hágase tu voluntad en la Tierra como se hace en el cielo,’ indica que espera ver que se haga la voluntad de Dios sobre la Tierra bajo el gobierno milenario de Cristo. Y puesto que usted ora por esto usted debería alegrarse de obrar según las palabras de Jesús a sus seguidores: “Estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la Tierra habitada con el propósito de dar un testimonio a todas las naciones.” Estas son buenas nuevas que podemos declarar a personas de todo país que padezcan de hambre espiritual. Por medio de nuestro ministerio del Reino podemos liberar a cautivos religiosos del yugo de la esclavitud bajo el cual han estado, y abrirles los ojos del entendimiento a la verdad. (Gál. 5:1; Efe. 1:18) Sí, usted también puede participar en la obra de predicar con los testigos de Jehová sea usted joven o anciano, hombre o mujer, rico o pobre y sin hacer caso de distinción racial. Jehová da el mismo trabajo a hombres de toda clase.
RESPONSABILIDAD DEL MINISTERIO
4. ¿Cómo consideró Pablo el ministerio?
4 En realidad, tenemos la responsabilidad de participar en el ministerio. Así lo consideró el apóstol Pablo cuando dijo: “Ahora, si yo estoy declarando las buenas nuevas, eso no es motivo para que me jacte, porque necesidad me está impuesta. Realmente, ¡ay de mí si no declarara las buenas nuevas! Si hago esto voluntariamente, tengo galardón; pero si lo hago contrario a mi voluntad, de todos modos tengo confiada a mí una administración.” (1 Cor. 9:16,17) Quizás Pablo haya estado pensando en cómo Jesús aplicó las palabras de Isaías 61:1, 2 a él mismo y a su ministerio. Isaías dijo proféticamente: “El espíritu del Señor Jehová está sobre mí, por motivo de que Jehová me ha ungido para decir buenas nuevas a los mansos.” Ahora Pablo también había recibido el espíritu de Dios con el mismo propósito. Sabía que si iba a ser un cristiano verdadero tenía que seguir las pisadas de Jesús y hacer el mismo trabajo que Cristo hizo. O puede ser que haya estado pensando en las últimas instrucciones que Jesús dio a sus discípulos y en que dijo: “Vayan pues y hagan discípulos de gente de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del espíritu santo, enseñándoles que observen todas las cosas que yo les he mandado.” (Mat. 28:19, 20) No hay duda de que Pablo reconoció que tenía un trabajo que hacer, y esto debe ser especialmente cierto de los cristianos ahora en el tiempo del fin.
5. ¿Qué muestra que todos deben participar en el ministerio?
5 Pero algunos objetarán: ‘Después de todo, él fue uno de los apóstoles. Hoy nuestro sacerdote hace ese trabajo, ¡nosotros no!’ Olvidan que Pablo también construía tiendas de campaña. Fue un obrero como cualquier otro. Algunos de los discípulos fueron pescadores, uno fue recaudador de impuestos, uno doctor, pero eso no les impidió que participaran en el ministerio y predicaran por lo menos parte del tiempo. En realidad, todos los cristianos primitivos participaron activamente en el ministerio, según se ve del relato en Hechos 8:1-4. Era el tiempo cuando Esteban fue muerto a pedradas. “Gran persecución se levantó contra la congregación que estaba en Jerusalén; todos salvo los apóstoles fueron esparcidos por las regiones de Judea y Samaria.” Entonces, ¿qué hicieron estos cristianos y cristianas primitivos? “Sin embargo, los que habían sido esparcidos fueron por toda la tierra declarando las buenas nuevas de la palabra.” No dijeron que puesto que los apóstoles todavía estaban en Jerusalén no había nada que pudieran hacer sino aguardar hasta que alguien pudiera salir y les predicara. Más bien, cada miembro de la congregación estuvo despierto a la oportunidad maravillosa que se hallaba delante de el en él servicio de Dios y por eso hablaba acerca de lo que creía a toda persona con quien se encontraba. Así se esparció el cristianismo, porque cada creyente usaba el tiempo para hacer discípulos de personas de todas las naciones, enseñándoles y luego bautizándolas. Hoy día usted tal vez esté empleado como dependiente o carpintero o chofer de auto de alquiler, pero la pregunta es: ¿Es usted cristiano? Si lo es, usted tiene un trabajo que hacer para mostrar que es cristiano de hecho y no solo de nombre.
MOSTRANDO AMOR CRISTIANO
6. ¿Cuáles son algunos requisitos para el ministro despierto?
6 No hay duda de que una persona que quiere hallarse en buena posición delante de Dios tiene que traer honra a Dios por medio de su conducta personal. Pablo dio énfasis a eso en Romanos 13:8-14. Él recalcó el amor a nuestro prójimo, mostrando que éste era el cumplimiento de la Ley, porque una persona no cometería adulterio, asesinato, robo, no codiciaría ni obraría el mal a su prójimo si le tuviese amor apropiado a su prójimo. El que hace tales cosas está dormido tocante a lo que Dios requiere de él. Pablo escribió: “Ya es la hora para que despierten del sueño, porque ahora nuestra salvación está más cerca que cuando llegamos a ser creyentes. La noche está bien avanzada; el día se ha acercado. Por lo tanto, despojémonos de las obras que pertenecen a las tinieblas y pongámonos las armas de la luz. Como de día andemos en buen comportamiento, no en diversiones tumultuosas y borracheras, no en ayuntamiento ilícito y conducta relajada, no en contienda y envidia. Antes bien pónganse al Señor Jesucristo, y no estén haciendo planes con anticipación para los deseos de la carne.” Si siempre nos portamos con amor y como si fuese en pleno día a la vista de todos los hombres, entonces jamás tendremos causa para pesar. La oscuridad espiritual que cubre al viejo mundo y sus tratos de dudosa moralidad y conducta relajada han estimulado una ola ascendente de delincuencia. El cristiano tiene que evitar tales cosas equipándose con las armas de la luz. Pablo se refirió a algunas de éstas: “Pero en cuanto a nosotros que pertenecemos al día, mantengamos nuestro juicio y llevemos puesta la coraza de fe y amor y como yelmo la esperanza de salvación; porque Dios nos asignó, no a la ira, sino a la adquisición de salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo.”—1 Tes. 5:8, 9.
7. ¿Cómo se puede fortalecer a una persona débil en fe?
7 Esta coraza de fe y la esperanza de salvación que tenemos se adquieren a través de un período de tiempo. Al principio nuestra fe y esperanza pueden ser débiles. Pero mediante estudio de la Biblia y mediante asociación con hermanos cristianos maduros son vigorizadas y reforzadas; llegamos a entender que Dios no tiene muchos caminos para la salvación, sino uno solo, por medio de Jesucristo, y que podemos ayudar a otros a comprender esto por medio de usar las armas espirituales de la luz. Nuestra responsabilidad para con Dios es mayor que solo el llevar una vida buena, vivir y dejar vivir, sin causar daño. Muchas personas que no tienen fe en Jehová Dios o Cristo Jesús ven la sabiduría de un elevado código de moral y ética, pero no están despiertas al servicio de Dios. Debemos estar interesados en lo que Dios requiere de nosotros, aprendiendo lo que él quiere que aprendamos, haciendo lo que él quiere que hagamos, y así cumpliendo con nuestra responsabilidad de servir a Aquel que nos ha dado la vida. Mientras más estudiamos la Biblia mayor aprecio llegamos a tener al hecho de que podemos hacer algo para servir a Jehová y así mostrar nuestro amor a él con devoción exclusiva.—Efe. 5:3-14.
8 ¿Por qué y cómo debe mostrarse amor al prójimo?
8 El mostrar amor a nuestro prójimo es parte de nuestro servicio a Dios. Es cosa natural con casi todos los hombres si ven que alguien está en peligro el querer advertirle del peligro o hacer lo que se pueda hacer para salvarlo. Esto es en realidad lo que hacemos cuando participamos en el ministerio del Reino. Puesto que reconocemos la señal de la presencia del Maestro en las penosas calamidades mundiales de años recientes y a medida que participamos en la predicación de las buenas nuevas en todo el mundo antes de que le sobrevenga el fin completo a este viejo sistema en el Armagedón, estamos ayudando a otros a escaparse por el camino que conduce a la seguridad. Teniendo un conocimiento de estas verdades y un amor a Dios, ¿todavía se abstiene usted de compartir su conocimiento con otros? La persona que comparte con anhelo la verdad y que es impelida por el espíritu de Dios a predicar activamente es una persona feliz, espiritualmente despierta. Vive las palabras de Pablo: “Siempre estén regocijándose. Oren incesantemente. En conexión con todo den gracias. Porque ésta es la voluntad de Dios en unión con Cristo Jesús respecto a ustedes. No apaguen el fuego del espíritu.”—1 Tes. 5:16-19.
9. ¿Qué impide el que algunos obtengan tesoros espirituales?
9 Acán es un ejemplo de un hombre que no mostró amor al prójimo sino que, en cambio, dio el lugar de primera importancia a sus propios intereses. Debido a que él obró de modo contrario a lo que sabía que Dios requería de él al robar “la plata y la prenda de vestir y la barra de oro” para uso personal, el favor de Jehová se apartó del ejército de Israel y sufrió derrota en batalla a manos de los hombres de Hai. (Jos. 7:1-24) Algunos siguen un proceder semejante hoy día, al tratar de atesorar las riquezas del mundo presente y haciéndose así esclavos del materialismo. Comienzan a planear con anticipación para los deseos de la carne en vez de aplicarse de corazón en la guerra espiritual y trabajar para mantener el favor de Jehová. Dedican más y más tiempo y energía al trabajo seglar para conseguir más grano en sus graneros y oro en sus cajas de seguridad en el banco. Como resultado no pueden participar con regularidad en el ministerio; faltan a las reuniones y no hallan tiempo para estudiar y llenar los requisitos por lo tanto como siervos en la congregación; y finalmente descubren que han sido derrotados en la guerra espiritual y quizás también hayan causado la pérdida de la vida para sus familias. Olvidan que los tesoros que ahorran un día serán arrojados a las calles. El tesoro verdadero, que pasan por alto, se halla al servir a Jehová y ayudar a la gente de buena voluntad a entender la verdad.
10. ¿Por qué deberíamos ser maestros?
10 Por eso Pablo dijo: “En verdad, aunque deberían ser maestros en vista del tiempo, necesitan ustedes de nuevo alguien que les enseñe desde el comienzo.” (Heb. 5:12) Esta es la obra docente a la que Jesús dio importancia para hacer discípulos de personas de todas las naciones. Si usted tiene la impresión de que Pablo le estuviera hablando a usted a causa de que usted conoce las verdades bíblicas pero no ha estado enseñando a alguna otra persona, entonces pruebe el comenzar un estudio de la Biblia con su propia familia o con sus amigos. Escoja una de las muchas ayudas provechosas de la Sociedad con la cual estudiar, tal como “Estas buenas nuevas del reino,” “Sea Dios Veraz” o De paraíso perdido a paraíso recobrado. Considere las preguntas sobre cada párrafo y lea y discuta los textos mencionados. Usted descubrirá que ésta es la mejor manera de aprender usted mismo, al tratar de explicar a otra persona y enseñarle. Usted tendrá que estudiar bien para estar preparado, pero usted puede hacerlo si está dispuesto. Acepte la responsabilidad de ayudar a los de buena voluntad que también tienen amor a la verdad. Recuerde que la cosecha es grande y que los trabajadores son pocos. Usted también puede ayudar, y de esta manera usted estará cumpliendo con su responsabilidad tanto a Dios como a su prójimo.—Mat. 9:37,38.
11. ¿Quiénes dejan resplandecer su luz?
11 Jesús recalcó la necesidad de mantenerse despierto a la adoración pura y dejar resplandecer la luz de la verdad, en la parábola de las vírgenes prudentes y las vírgenes insensatas. (Mat. 25:1-12) Él previó a la clase del esclavo fiel que estaría dejando resplandecer la luz de la verdad y que estaría alerta al tiempo de la venida del novio al templo para juicio en 1918. Sus lámparas estaban llenas del aceite de la felicidad que viene en el servicio de Jehová. En otra ocasión Jesús dijo que sus siervos serían la luz del mundo. Es esta luz de la verdad la que ahora ayuda a millares de personas de buena voluntad cada año a librarse de la oscuridad que cubre las enseñanzas de la religión falsa. Pero hablando de los caudillos religiosos de su día, Jesús se refirió a la condición de oscuridad total en que se hallaban ellos como ceguera, diciendo: “Guías ciegos es lo que son. Si, pues, un ciego guía a un ciego, ambos caerán en un hoyo.”—Mat. 15:14.
12. ¿Está bien cualquier clase de fe, o qué se necesita para la salvación?
12 Aun así, muchas personas creen que no es importante el que sigan una creencia en particular u otra con tal que tengan fe en algo. Eso es como decir que cuando una persona está muriéndose de una enfermedad curable no importa qué remedio pruebe o qué doctor consulte, que lo importante es que haga algo. Aunque muera, arguyen que la cosa importante es que trató de hacer algo y tuvo fe en su doctor. Pero lo que importa es: ¿Sanó? Lo mismo es cierto con la religión. La cosa que importa no es el que usted tenga fe de alguna clase, sino, ¿Conseguirá usted la vida? Romanos 10:2 dice: “Porque les doy testimonio de que tienen un celo por Dios; pero no conforme a un conocimiento acertado.” Isaías habló fuertemente contra la adoración falsa, refiriéndose a los guías falsos como perros que duermen, “pastores mismos [que] no saben entender.” (Isa. 56:10, 11, Val, 1960) En este tiempo del fin todavía no dan la señal de alarma. Tratan de remediar los males del mundo orando por esfuerzos políticos como las Naciones Unidas en vez de decir a sus rebaños que el reino de Dios es la única esperanza. En vez de estar dormidos nosotros mismos, estemos alerta y sonemos la alarma. Usted puede hacer lo que Pablo dijo: “Porque si tú declaras públicamente aquella ‘palabra en tu boca’, que Jesús es el Señor, y si ejerces fe en tu corazón en que Dios lo levantó de entre los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se ejerce fe para justicia, pero con la boca se hace declaración pública para salvación . . . Porque ‘cualquiera que invoque el nombre de Jehová será salvo’.”—Rom. 10:9, 10, 13.
LA DEDICACIÓN TRAE RESPONSABILIDAD
13. ¿Qué debe significar la dedicación para el cristiano?
13 Si ejercemos fe en nuestro corazón, entonces seremos persuadidos a obrar para demostrar nuestra fe. Daremos el mismo paso que Jesús al dedicar nuestra vida a Jehová Dios y hacernos activos en el ministerio, haciendo declaración pública de la Palabra. Esta no debe ser una decisión emocional, sino una decisión basada en conocimiento acertado. Debe ser a causa de nuestro amor a Dios y de nuestro deseo de servir a nuestro Creador. Cuando dedicamos nuestra vida a Jehová Dios hacemos un voto de servirle toda la vida; así que la dedicación trae consigo responsabilidad tal como lo hace el conocimiento. Es cierto que no todos pueden responder al mismo grado al privilegio de servir a Dios. Algunos tienen responsabilidades de familia, otros no gozan de buena salud, la edad retarda a algunos, pero todos los que gozan del don de la vida pueden hacer algo. (Sal. 115:17, 18) Teniendo esto en mientes, Jesús dio la ilustración de los talentos. El amo dio sus bienes a sus siervos para que los cuidaran durante su ausencia: uno recibió cinco talentos, otro recibió dos y el tercer esclavo recibió un talento. Usaron prudentemente lo que se les confió, salvo el tercer esclavo, que enterró su talento para no perderlo. A causa de su negligencia se le quitó y se dio a uno de los que usó los suyos prudentemente.—Mat. 25:14-30.
14. ¿Cómo puede uno aumentar sus intereses del Reino?
14 Hoy cada cristiano dedicado tiene ciertos intereses del Reino que puede cuidar. Aunque los talentos o bienes del Reino del Amo han sido confiados al resto espiritual, todos los siervos de Dios tienen la oportunidad de usar prudentemente el conocimiento y las perspectivas de servicio que reciben. ¿Qué hace usted con sus talentos? ¿Los está usted enterrando, o los está usted usando y recibiendo así el gozo que proviene con la bendición de Jehová? Jesús resumió esto al mostrar que los verdaderamente felices son los alertos, los activos, los que se mantienen despiertos a sus responsabilidades. “Porque a todo el que tiene, más se le dará y tendrá abundancia; pero en cuanto al que no tiene, aun lo que tiene se le quitará.” (Mat. 25:29) Por eso usemos, aumentemos y atesoremos nuestros privilegios de servicio del Reino.
15. ¿Qué ilustración muestra la necesidad de estar despiertos?
15 Puesto que nuestro ministerio del Reino es un depósito de Dios, tenemos que estar alerta para salvaguardarlo. Si su patrón le diera a usted una grande suma de dinero para que se la llevara al banco, ciertamente no se le ocurriría a usted dormir en una banca del parque en camino del banco. Usted estaría alerta, en guardia, para asegurarse de que nada pasara de lo cual se le considerara responsable. Así es como deberíamos considerar el depósito de nuestro ministerio cristiano. Envuelve la pérdida, no de solo una suma de dinero, sino de la vida. Jesús dio una ilustración sobre la necesidad de estar alerta, en Apocalipsis 16:15, cuando dijo: “¡Mira! Yo vengo como ladrón. Feliz es aquel que permanece despierto y guarda sus prendas de vestir exteriores, para que no ande desnudo y la gente mire sus partes vergonzosas.” Era costumbre en los días de Israel el que los sacerdotes y los levitas vigilaran en el templo por la noche para guardar contra robo o intrusos. A cualesquiera que sorprendieran dormidos cuando el oficial del Terraplén del Templo efectuaba la ronda para ver que todo estuviera bien los desnudaban y golpeaban. Esos sacerdotes y levitas representaron a la clase sacerdotal, los 144,000, de los cuales un resto sirve como vigilante para el templo espiritual hoy en día. De modo que es bueno que den acogida a la amonestación, no solo los del resto sino también los que sirven de compañeros con ellos en el ministerio, de que no se les vaya a hallar descuidando el deber o durmiendo en el trabajo para que no los desnude del privilegio de servicio de que disfrutan como testigos de Jehová el inspector del templo, Cristo Jesús.
16. ¿Qué experiencia tuvieron los discípulos?
16 No diga usted que jamás le sucedería eso a usted. Algo semejante les sucedió aun a los discípulos, no una vez, ¡sino tres veces! Fue en la noche antes de la muerte de Jesús cuando él fue a orar en el lugar llamado Getsemaní. Al continuar orando él los discípulos se durmieron. Entonces Jesús dijo a Pedro: “¿No pudieron ustedes siquiera velar una hora conmigo? Manténganse vigilantes y orando, para que no entren en tentación. El espíritu, por supuesto, está dispuesto, pero la carne es débil.” Jesús no estaba excusando a los discípulos, pero sabía que estaban cansados. Sin duda si hubiesen entendido cabalmente los acontecimientos que estaban por suceder, el relato no mostraría que la segunda vez él “los halló durmiendo, porque tenían los ojos cargados.” Pero aun la tercera vez cuando regresó de orar Jesús tuvo que decirles: “¡En una ocasión como ésta ustedes están durmiendo y descansando! ¡Miren! se ha acercado la hora en que el Hijo del hombre será traicionado en manos de pecadores.” (Mat. 26:40-45) Pedro debe haber aprendido bien su lección, porque más tarde dio consejo semejante de mantenerse despierto, diciendo: “No pierdan su juicio, sean vigilantes. Su adversario, el Diablo, anda en derredor como león rugiente, tratando de devorar a alguien.”—1 Ped. 5:8.
17. ¿Cómo nos puede ayudar esta experiencia?
17 Aunque a los discípulos no se les desnudó de sus privilegios de servicio en esa ocasión, después deben haber lamentado profundamente el no haber estado alerta con Jesús durante sus últimas horas. Esto nos sirve de buena amonestación a nosotros para que estemos doblemente alerta en este tiempo del fin para que no se nos reprenda de modo semejante o aun para que no perdamos nuestros privilegios de servicio. De modo que no vaya a hallarse dormido en casa cuando los hermanos se reúnen en el Salón del Reino para oración o estudio. Quizás alguien tenga que darle consejo a usted así como Jesús dio consejo a sus discípulos. (Sal. 13:3) En lugar de eso, salvaguardemos el maravilloso depósito que Jehová ha confiado a nuestro cargo por medio de continuar estudiando y reuniéndonos y participando en el servicio al cual se nos ha asignado.—1 Tes. 5:21, 22.
RESPONSABILIDADES DE FAMILIA Y DE CONGREGACIÓN
18. ¿Qué pueden hacer los padres para ayudar a sus hijos espiritualmente?
18 Una parte de la responsabilidad de cada padre cristiano es cuidar bien los intereses espirituales de su familia. Todos los padres amorosos reconocen que tienen una responsabilidad profunda para con sus hijos. Día y noche están alerta a sus necesidades. Los cuidan pacientemente a través de sus primeros años, los alimentan, los visten, los enseñan y los ayudan a crecer a la madurez hasta que ellos pueden mirar por sí mismos. Además de proveer las cosas materiales necesarias para la vida, los padres sabios también consideran extensamente los intereses espirituales de sus hijos para ayudarlos a aprender acerca de su Creador y del privilegio de servirle. (Efe. 6:4) Si los padres toman la delantera en esto leyendo la Biblia a los hijos, estudiando con ellos, llevándolos a las reuniones y llevándolos consigo en el servicio del Reino, entonces los niños se deleitan en seguir. (Pro. 22:6) Este entrenamiento bíblico es tan importante para el bienestar espiritual del niño que los padres jamás deben pasar a otro la responsabilidad de instruir a los jóvenes. Así como un siervo en la congregación de la sociedad del nuevo mundo tiene una responsabilidad para con la congregación de conducirla y ayudarla espiritualmente, así los padres la tienen con sus familias. Los padres son los superintendentes o siervos de la unidad de familia. El padre sabio tomará la delantera en la instrucción religiosa de su familia. ¿Está usted despierto a esta responsabilidad?
19. ¿Cómo pueden los padres enseñar a sus hijos, y por qué es esto tan importante?
19 El enseñar a los hijos los propósitos de Jehová Dios no debe postergarse hasta el día de descanso semanal, sino que debe ser una responsabilidad de la mañana, del mediodía y de la noche cada día de la semana. El consejo bíblico sobre esto se registra en Deuteronomio 6:5-7: “Y debes amar a Jehová tu Dios con todo tu corazón y toda tu alma y toda tu fuerza vital. Y estas palabras que te estoy mandando hoy deben resultar estar en tu corazón, y debes inculcarlas en tu hijo y hablar de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes por el camino y cuando te acuestes y cuando te levantes.” Si los mandamientos de Dios están en el corazón de usted, entonces podrá enseñárselos a sus hijos. Pero no puede enseñarles algo que usted mismo no sabe, ni decirles que hagan algo que usted no quiere hacer y esperar conseguir buenos resultados. Recuerde que Noé tomó la delantera en el trabajo de construir el arca. Se puso a trabajar y sus hijos le ayudaron. Usted puede hacer lo mismo para su familia cuidando de que consigan un buen conocimiento básico sólido de la verdad mediante instrucción personal, por medio de tomar usted la delantera en el servicio y estimularlos a que entren en el ministerio de precursores. Recuerde que su familia tendrá que estar lista para la inspección final del Principal Inspector del Templo; por eso siga la instrucción de Jesús y ‘manténgase vigilante’ por medio de mantener alerta a su familia en cuanto a la verdad y progresando en el servicio.
20. ¿Cuáles son algunas de las responsabilidades de un siervo cristiano?
20 El jefe de familia que muestra que reconoce la responsabilidad que tiene para con su familia por medio de tomar la delantera y ejercer la debida jefatura cristiana muestra que está listo para privilegios de servicio como siervo en la congregación cristiana. En tal caso, no solo está envuelto el bienestar de una familia pequeña, sino los intereses de una congregación. De modo que los siervos en particular tienen una responsabilidad de mantenerse despiertos espiritualmente. Su nombramiento mediante espíritu santo los hace responsables a Jehová. A los siervos no se les deja sin ayuda al guiar el rebaño y protegerlo. Tienen la Palabra de Jehová para dirigir el manejo teocrático de las cosas y su organización para aconsejarlos y ayudarlos. (Isa. 50:4) A los siervos se les debe hallar sin tacha y sin dar razón para que los reprochen las personas de afuera. Como los reyes de Israel que leían de la ley de Dios diariamente, así los que han sido nombrados superintendentes o siervos entre el pueblo de Dios hoy en día realmente deben conocer la Biblia. Deben compartir la verdad sin reserva con otros, dejando que resplandezca la luz para que todos vean, cual estrella que difunde luz. Igual que el buen pastor que está alerta a buscar ovejas descarriadas, un siervo observa no solo a los que están presentes en las reuniones sino también a los que faltan a las reuniones para que se les pueda visitar y ayudar. Un buen siervo sabe que el rebaño es herencia de Dios y lo trata como un depósito que ha recibido de Jehová.—1 Tes. 5:14, 15.
21. ¿Qué acontecimientos nos ponen sobre aviso, y qué consejo se da?
21 A medida que la nube espiritual que envuelve la Tierra se hace más y más oscura, ahora es el tiempo para salir a la luz de que disfruta la sociedad del nuevo mundo. Esta luz de la verdad se ha estado haciendo más y más brillante desde la entronización celestial de Cristo en 1914. Jehová Dios y Cristo Jesús, “los reyes procedentes del levantamiento del sol,” se están preparando para congregar a las naciones a la gran batalla del Armagedón. No habrá posición neutral en esa batalla, ningún lugar donde esconderse. Toda la evidencia bíblica de la señal de los tiempos que Jesús detalló es exactamente como una alarma divina que suena fuerte y claramente para nuestra amonestación y protección. (Joel 3:12-17) La actualidad no es tiempo de cansarse debido a los años de buenas obras ni de aflojar el paso debido a las cargas de la vida. Recuerde, en cambio, la amonestación de Jesús, registrada en Lucas 21:34, 35: “Presten atención a ustedes mismos para que sus corazones nunca lleguen a estar cargados debido a comer con demasía y por beber excesivamente o por las ansiedades de la vida, y repentinamente esté sobre ustedes al instante ese día como un lazo. Porque vendrá sobre todos los que moran sobre la haz de toda la Tierra.”
22. ¿Qué pueden esperar las personas espiritualmente despiertas?
22 No permita que ninguna cosa le impida a usted entrar por la puerta abierta al servicio de Jehová Dios. Muestre usted a Jehová que reconoce la urgencia de los tiempos, que usted le tiene amor a él y a la verdad que usted ha aprendido. Compártala con su prójimo trabajando de toda alma en el ministerio del Reino. Este es un trabajo que terminará; por eso disfrute de él ahora. (Jer. 31:34) Manténgase espiritualmente despierto para evitar el ser destruido con las naciones en el Armagedón. Hállese entre los individuos felices, despierto a los tiempos, alerto a las oportunidades de servir con su familia y con la congregación como parte de la organización de Jehová. Entonces usted también conseguirá la aprobación de Jehová y vida en el nuevo mundo después que Cristo haga su inspección del Armagedón. Este es el futuro feliz para los hombres de fe.