Fracasan los planes humanos mientras triunfa el propósito de Dios
1. ¿En vista de qué proceder del hombre es necesario que Dios realice su propósito... pronto?
ES CONSOLADOR saber que, mientras que los planes o designios humanos para la humanidad están fracasando, el propósito de un Creador amoroso está triunfando. El fracaso de los planes humanos es causa de dificultad y preocupación para todos nosotros. Pero la fe en Dios nos fortalece, permitiéndonos esperar el disfrute de bien eterno debido al triunfo seguro de Su propósito. Él nunca tiene que aprender de cosas como errores cometidos en el pasado, porque él no comete ninguno. Los hombres deberían aprender de los errores humanos del pasado, pero tienen la debilidad de repetir los mismos errores. Como resultado viene el fracaso. Por eso ahora es necesario que el Dios infalible realice su propósito... ¡pronto!
2. ¿Cómo fracasaron los planes que se trazaron para nuestro siglo veinte, y qué preguntas surgieron como resultado de la introducción del guerrear atómico?
2 Los espléndidos planes que trazaron los proyectistas del siglo diecinueve para nuestro siglo veinte terminaron en fracaso. La I Guerra Mundial los punzó como si fueran una burbuja de jabón que brillara con los colores del arco iris. El plan de la Liga o Sociedad de Naciones no arregló los asuntos. Pronto quedó claro que los proyectistas mundiales no habían aprendido por experiencia en lo relativo al desplome de la Sociedad de Naciones. El futuro les presentó un nuevo desafío cuando se arrojaron dos bombas atómicas en el Extremo Oriente, y se inauguró así el guerrear atómico. Todos nos encarábamos ahora a algo que ciertamente era serio. ¿Qué proyecto protector suministrarían ahora los hombres que tenían la responsabilidad de planear para el mundo? ¿Algo cuyo buen éxito seguro estuviera garantizado por la experiencia? ¿Algo que expresara una sabiduría superior a la del hombre mortal?
3. ¿Qué clase de sociedad es las Naciones Unidas, y cómo ha afectado la situación mundial?
3 No, la nación que hizo estallar las bombas atómicas llevó la delantera en hacer arreglos con sus aliados bélicos para otra sociedad de naciones. Sencillamente otra liga política con traje y maquillaje facial nuevos, bajo un nombre nuevo, la organización de las Naciones Unidas. Tiene su Declaración de Derechos Humanos. Tiene su Corte Internacional de Justicia. Tiene su fuerza policíaca, que ha hecho cumplir la cesación de las hostilidades a lo largo del Canal de Suez. Tiene su Asamblea General y su Consejo de Seguridad como cuerpos que trazan planes para los 135 miembros que ahora componen a las Naciones Unidas. Se admite que ha servido de válvula de seguridad para una situación mundial explosiva, pero, con todo eso, la situación mundial sigue siendo explosiva. Las Naciones Unidas, aunque organizadas para la paz y seguridad mundial, no han impedido el desarrollo de la bomba nuclear y los proyectiles balísticos intercontinentales con misiles que contienen bombas nucleares de potencia devastadora.
4. ¿Hasta qué punto ha podido llevar la organización de las Naciones Unidas en cuanto a las condiciones calamitosas, y cómo se muestra que va decayendo la confianza en ella?
4 En las Naciones Unidas tenemos otro ejemplo de planear internacional en escala mundial, pero por mayor número de participantes que en toda época anterior. No obstante, ¿está resultando triunfante u ofreciendo esperanza de buen éxito ese planeamiento general mundial por hombres mortales? Las Naciones Unidas investigan y publican datos acerca de la mortífera contaminación del aire, el mar y la tierra. Además, acerca del esparcimiento de enfermedades letales y epidemias. Sí, acerca de hambres y sequías. Sin embargo, ve que no puede habérselas con la situación, que empeora. Está al tanto de la existencia de las Organizaciones de Tratado regionales de los bloques políticos comunista y anticomunista fuera de las Naciones Unidas, pero no puede interponerse en el funcionamiento de estos grupos internacionales. Por eso, la confianza del hombre en las Naciones Unidas se debilita, y los gobernantes políticos continúan dependiendo de sus alianzas regionales y de fuertes reservas de armamentos militares como los factores que mejor disuadirían de entrar en una Guerra Mundial Nuclear. ¡Las promesas de los políticos de colocar el cimiento para una “generación de paz” suenan huecas!
5. Puesto que la situación mundial no se mejora después de todo el planeamiento humano, ¿qué preguntas surgen?
5 La gente no está en peligro solo debido a complicaciones internacionales. La afligen problemas y dificultades, tumultos y anarquía en lo doméstico, y lo trabajoso de ganarse la subsistencia en su propio país. ¿Dónde está la dificultad? ¿A qué se debe que con todo el febril e intenso planear y el tomar medidas preventivas, la situación mundial no se mejora? ¿Dónde está la culpa? ¿Qué está en error en todo este planeamiento humano? ¿Qué ha sido dejado fuera de consideración? Las personas de corazón honrado quisieran saber esto.
EL CONSEJO QUE HA SIDO PASADO POR ALTO
6, 7. (a) En todo ese planeamiento nacional e internacional, ¿qué se ha pasado por alto? (b) Después de reuniones comenzadas con oración, ¿qué no han hecho los proyectistas?
6 En todos los casos de planeamiento nacional e internacional ya mencionados, notamos que se ha pasado por alto al Creador de los cielos y la tierra y el mar, que se ha hecho caso omiso de Su consejo.
7 Ah, sí, los proyectistas quizás afirmen que pertenecen a las varias sectas religiosas de la cristiandad o al judaísmo o al budismo o al mahometismo o al hinduismo o a algún otro grupo religioso. Quizás den comienzo con una oración hecha por algún clérigo a las reuniones políticas o sociales que celebran para deliberar en cuanto a los problemas. Sin embargo, ¿dejan ellos después de eso que los guíe el consejo que da el Creador del hombre? ¿Van ellos a Su Palabra escrita, donde se puede leer claramente Su consejo? Una vez hecho esto, ¿se dejan guiar ellos por ese consejo? Aquí pudiera surgir una controversia. No hay un consenso de todos los proyectistas en cuanto a lo que es la Palabra escrita del Creador, porque tienen diferentes libros sagrados que consideran santos, la base para sus creencias religiosas. Pero el verdadero Creador del cielo y la Tierra es Aquel que hizo al hombre y lo puso en la Tierra y le dijo al hombre lo que había de hacer aquí. Este Creador también predijo con exactitud nuestra actual angustia de naciones con perplejidad.
8. ¿Cuál es el libro que no consideran ni siguen los proyectistas mundanos, y quién hizo ese libro?
8 El Hacedor del hombre es también el Creador de esta Palabra escrita, su Libro inspirado. Ese Libro es la Santa Biblia, escrita por la mano de hombres fieles que recibieron inspiración del Creador para escribir. Las sociedades bíblicas han esparcido este Libro inspirado por toda la Tierra, en centenares de idiomas. Por eso no es un Libro desconocido e inasequible. En su misma oración de apertura dice: “En el principio creó Dios los cielos y la tierra.” El primer capítulo de la Santa Biblia también describe la creación de la humanidad, macho y hembra. (Génesis 1:26-31) Este es el Libro que no es consultado ni seguido por los proyectistas mundanos que trazan los planes o designios para la sociedad humana.
9. ¿Qué declaración bíblica antigua acerca de los planes humanos queda todavía irrebatible, como lo ilustran qué potencias mundiales?
9 La sabia observación que se hizo hace aproximadamente tres mil años y que está registrada en la Santa Biblia permanece irrebatible aun hoy. Está registrada en Proverbios 19:21, y, según la manera en que la Versión Moderna traduce este proverbio del lenguaje hebreo, dice: “Muchos designios se hallan en el corazón del hombre; mas el propósito de Jehová es el que se cumplirá.” La Versión Nácar-Colunga, dice: “Muchos proyectos hay en la mente del hombre, pero es el consejo de Yavé el que permanece.” El nombre Yavé aquí es la pronunciación del nombre divino que algunos prefieren a la pronunciación Jehová. Los planes, proyectos y designios humanos se han hecho muchos durante los pasados siglos y milenios, pero ¿han logrado permanecer y producir ganancias y controles duraderos? ¿Dónde están hoy los famosos imperios políticos que antaño ejercieron control amplio, particularmente las siete potencias mundiales de la historia y la profecía bíblicas? ¿Dónde está la antigua Potencia Mundial Egipcia, así como la Asiria, la Babilonia, la Medo-Persa, la Griega, la Romana, la de Gran Bretaña y los Estados Unidos? ¿Dónde está el incomparable Imperio Británico que en otro tiempo abrazó la cuarta parte de la superficie de la Tierra y la cuarta parte de su población? La gloria de éstos se ha desvanecido.
10, 11. (a) ¿Qué indica que el propósito de Jehová en cuanto a su reino avanza hacia un triunfo brillante? (b) ¿Qué muestra que el incremento de la cristiandad no ha sido por predicar el reino de Dios?
10 Pero, ¿qué hay en cuanto al “consejo de Yavé” o “propósito de Jehová”? Todavía permanece, sin cambio. Continúa siendo corriente y avanzando hacia un triunfo brillante. El reino de Dios sigue siendo predicado mundialmente, una proclamación que sobrepasa todo cuanto se ha conocido hasta ahora en la historia religiosa.
11 Por la expresión “el reino de Dios” no queremos decir la organización religiosa de la cristiandad. Por primera vez en la historia el número de miembros religiosos de la cristiandad ha pasado de la marca de los mil millones, pues el último cálculo aproximado que se ha publicado de la cantidad de sus miembros es de 1.024.106.500. (Vea The World Almanac, 1974, página 342.) Pero este incremento no se ha logrado por medio de predicar el reino de Dios. Fueron las iglesias de la cristiandad las que declararon a la Sociedad de Naciones “la expresión política del Reino de Dios en la Tierra.” Por eso, mientras continuó aquella organización política para la paz y seguridad mundial, las iglesias predicaron la Sociedad de Naciones. El plan o proyecto de la cristiandad también ha sido “poner a Dios en el gobierno.” Por esa razón sus clérigos se hacen aficionados de la política, y los clérigos instan a los miembros de sus iglesias a envolverse completamente en la política, hasta aspirando a los más encumbrados puestos políticos del país.
12. ¿Qué muestran las palabras y proceder de Jesús y sus discípulos en cuanto a los esfuerzos de la cristiandad por “poner a Dios en el gobierno”?
12 Sin embargo, ¿quiere Jehová Dios que lo pongan en el gobierno político de este mundo? Si ya no está allí, ¿por qué tiene que ser puesto en estos gobiernos políticos humanos? Su Hijo, el Señor Jesucristo, cuando un político romano le hizo la pregunta: “¿Eres tú el rey de los judíos?” respondió: “Mi reino no es parte de este mundo. Si mi reino fuera parte de este mundo, mis servidores habrían peleado para que yo no fuera entregado a los judíos. Pero, como es el caso, mi reino no es de esta fuente.” Respecto a sus verdaderos discípulos, este Jesús dijo: “Ellos no son parte del mundo, así como yo no soy parte del mundo.” (Juan 18:33-36; 17:14) Ni Jesús ni sus verdaderos discípulos del primer siglo E.C. hicieron intento alguno por “poner a Dios en el gobierno.” Los muchos designios o proyectos de la cristiandad para poner al Dios de la Biblia dentro de los gobiernos políticos de este mundo prueban que ella no está predicando el verdadero reino de Dios y que los miembros de sus iglesias no son verdaderos discípulos e imitadores del propio Hijo de Dios, Jesucristo. La cristiandad no es la expresión terrestre visible del reino de Dios.
13. ¿Cómo se ve que el plan de la cristiandad para convertir al mundo a sus iglesias al parecer ha fracasado, a pesar de reavivamientos y cruzadas?
13 Por siglos el plan de la cristiandad ha sido convertir al mundo de la humanidad, o por fuerza o por persuasión, y hacerlos miembros de sus iglesias. Aparentemente la idea tras esto era hacer que fueran al cielo y salvarlos de ir a un lugar de tormento consciente eterno como almas separadas de su cuerpo. El pensamiento de la cristiandad era, también, que de esta manera vendría el reino de Dios y Su voluntad se haría en la Tierra como en el cielo. (Mateo 6:9, 10) Pero al parecer el plan no bíblico de la cristiandad para la conversión del mundo ha fracasado, puesto que la cantidad de los no cristianos sigue siendo más del doble del número de miembros de la cristiandad y puesto que aumentan las fuerzas antirreligiosas, especialmente el comunismo, y un número cada vez mayor de miembros de la cristiandad se hacen hipócritas religiosos o inactivos. Sus reavivamientos y cruzadas religiosas resultan ser de efecto muy transitorio.
ES IMPOSIBLE QUE FRACASE EL PROPÓSITO DIVINO
14. Los planes humanos han estado basados en ¿qué? o inspirados por ¿qué? ¿con qué perspectiva como resultado para la humanidad?
14 Si la supervivencia y salvación de la raza humana dependiera de los proyectos de los hombres, todo estaría perdido para la humanidad. Sus variados planes o se basan en la sabiduría humana o son inspirados por espíritus demoníacos malévolos. Hombres que confían en sí mismos quisieran quitar toda importancia a esta insinuación, pero lo que se profetizó hace mil novecientos años es más cierto hoy de lo que a ellos les gustaría creer, que en “períodos de tiempo posteriores algunos se apartarán de la fe, prestando atención a expresiones inspiradas que extravían y a enseñanzas de demonios.” (1 Timoteo 4:1) Debido a que los hombres han apostatado o han desertado de la fe que se describe en la Palabra escrita de Dios, han pasado por alto el propósito claramente expresado de Dios. Son como la primera pareja humana en el Jardín de Edén. “Esto solo he hallado,” dijo el sabio Salomón, “que el Dios verdadero hizo a la humanidad recta, pero ellos mismos han buscado muchos planes.” (Eclesiastés 7:29) Debido a que sus planes han fracasado, uno tras otro, se han visto obligados a dar nueva forma a sus planes o proyectos, o rehacerlos.
15, 16. El que las naciones mundanas continúen en una organización de Naciones Unidas es de la naturaleza de ¿qué, contra Jehová? ¿y qué advertencia bíblica hay contra ello?
15 Lo que proyectan los hombres de sabiduría mundana está condenado al fracaso. Ellos no solo pasan por alto el propósito de Dios, sino que planean y luchan en contra de él. Hasta en este asunto de combinarse en una organización de Naciones Unidas, los líderes políticos y militares van en oposición al propósito de Dios. Es realmente una conspiración contra Él. Hace más de dos mil quinientos años, al predecir una combinación de naciones mundanas contra el pueblo favorecido de Dios, el profeta Isaías dijo por inspiración a los pueblos enemigos: “¡Cíñanse, y sean hechos añicos! ¡Cíñanse, y sean hechos añicos! ¡Planeen un proyecto, y será desbaratado! ¡Hablen cualquier palabra, y no subsistirá, porque Dios está con nosotros!” (Isaías 8:9, 10) La unificación moderna de los pueblos en una organización de Naciones Unidas para la paz y seguridad mundial no triunfará del propósito de Dios para la humanidad. Tiene que fracasar, tal como dijo un hombre de la antigüedad que analizó tres mil años de la historia humana:
16 “Un hombre inicuo se ha armado de un rostro descarado, pero el recto es el que establecerá firmemente sus caminos. No hay sabiduría, ni ningún discernimiento, ni ningún consejo en oposición a Jehová. El caballo es algo preparado para el día de la batalla, pero la salvación le pertenece a Jehová.”—Proverbios 21:29-31.
17. ¿Qué factores divisivos dominan al número aumentado de naciones, y por qué no puede venir por medio de ellas la unificación de la humanidad?
17 Una organización de Naciones Unidas con su Consejo de Seguridad y su Conferencia de Desarme no es la vía de Dios para la unificación de toda la humanidad en una Tierra sin guerras y segura. Desde la II Guerra Mundial de 1939-1945 E.C. la humanidad ha sido dividida en más grupos nacionales que en cualquier tiempo antes, y cada uno de estos grupos afirma tener soberanía nacional. La división de la raza humana se hace mayor debido a diferencias de lenguaje, variedad de costumbres, oposición entre objetivos e ideologías políticas, y prejuicios raciales y religiosos. Los factores dominantes son la autodeterminación y la propia conservación. El gobierno mundial por el hombre es imposible, y la unificación de toda la humanidad no vendrá de esta manera. El mundo de la humanidad no puede unirse por los esfuerzos de ellos mismos, porque no están unidos al único Dios vivo y verdadero, Jehová. El Hijo de Dios, Jesucristo, dijo que el gobernante de este mundo es Satanás el Diablo, el gobernante de los demonios. En armonía con eso, el apóstol cristiano Pablo dijo que este gobernante del mundo es también “el dios de este sistema de cosas,” que ciega la mente de los que no están en unidad con Jehová Dios.—Juan 12:31; 14:30; 16:11; 2 Corintios 4:4.
18, 19. (a) ¿Dónde tiene que restaurarse el orden y la unidad y por qué? (b) Con este fin, ¿qué se ha propuesto Dios realizar “al límite cabal de los tiempos señalados”?
18 La falta de unidad por parte de la humanidad con Dios no es nada menos que un reflejo visible de la desunión que existe en la región celestial invisible por parte de Satanás y sus demonios para con Jehová Dios. De modo que es necesario que haya una restauración del orden y la unidad tanto en los cielos espirituales como en la Tierra. El propósito indefectible de Dios toma en consideración esta necesidad universal y suministra lo necesario para ella. El escritor inspirado de la carta a la congregación de la antigua Éfeso, en Asia Menor, escribe acerca de esto, en estas palabras a ellos:
19 “[Dios] nos dio a conocer el secreto sagrado de su voluntad. Es según su beneplácito que él se propuso en sí mismo para una administración al límite cabal de los tiempos señalados, a saber, de reunir todas las cosas de nuevo [o, de reunir para sí mismo (bajo una sola cabeza) las cosas todas] en el Cristo, las cosas que están en los cielos y las cosas que están sobre la tierra. Sí, en él, en unión con quien nosotros también fuimos asignados como herederos, por cuanto fuimos predeterminados según el propósito de aquel que opera todas las cosas conforme a la manera que su voluntad aconseja.”—Efesios 1:9-11, NM; Rotherham, Diaglott.
20, 21. (a) En toda nación la gente levanta queja contra ¿qué? (b) ¿Qué mostró Salomón que era la razón válida para la resistencia terca al control por parte de la gente?
20 Así pues, fue el propósito de Dios administrar los asuntos o seguir un derrotero que llevara a la unificación en las cosas celestiales y en las cosas terrestres. Era según el beneplácito de Dios que hubiera una administración, un manejo, un mayordomear, por medio de un procedimiento especial por parte de Dios. Así, el término “administración” no significa el reino mesiánico de Su Hijo Jesucristo. Hoy la gente de toda nación levanta gran queja debido a los gobiernos que tienen sobre sí, y la manera en que éstos administran o manejan las cosas. Tiene que haber una razón válida para la resistencia terca al control y para la rebeldía de la gente. El proverbio antiguo señala a la razón, diciendo: “Cuando los justos llegan a ser muchos, el pueblo se regocija; pero cuando alguien inicuo gobierna, el pueblo suspira.” (Proverbios 29:2) El sabio rey Salomón de Jerusalén observó administración opresiva por hombres en su propio día y dijo:
21 “Yo mismo me volví para poder ver todos los actos de opresión que se están haciendo bajo el sol, y, ¡mira! las lágrimas de los que estaban siendo oprimidos, pero no tenían consolador; y de parte de sus opresores había poder, de modo que no tenían consolador. Y felicité a los muertos que ya habían muerto más bien que a los vivos que vivían todavía.”—Eclesiastés 4:1, 2. También Ec 5:8; 7:7.
22. Después de miles de años de opresión por la administración humana, ¿cuál es la situación en cuanto a consuelo y liberación para la humanidad?
22 A veces la opresión impulsa a la gente a obrar como locos. (Eclesiastés 7:7) Después de miles de años de opresión, y ante las condiciones mundiales de hoy día, resulta cierto que la gente oprimida no tiene consolador que proceda de ninguna parte de la administración mundana actual de los asuntos humanos. No hay salvación para ellos, ninguna liberación para ellos, que proceda de fuentes humanas.
23. Según el propósito de Dios, ¿cómo vendrá la unificación de toda la gente, y qué significará esto para ella?
23 El Dios omnisapiente previó desde hace mucho tiempo la necesidad de una mejor administración o manejo de asuntos, y, según su beneplácito, se propuso instituir tal administración. Bajo ese administrar de asuntos por él vendrá la unificación de toda la gente. Eso significará paz, armonía y seguridad por todas partes de la Tierra.
24. ¿Quién es el agente de unificación por medio del cual Dios administrará las cosas, y qué propósito preciso tiene esta administración?
24 Veamos cómo el Dios Todopoderoso procedió a administrar los asuntos. Consideremos al agente de unificación por medio del cual Dios administra las cosas. Ese es el Mesías de Dios, su Ungido, el Cristo. Por eso, el escritor bíblico inspirado señala a ése cuando dice que la administración que será puesta en operación “al límite cabal de los tiempos señalados” tiene un propósito preciso, “a saber, . . . reunir todas las cosas de nuevo en el Cristo, las cosas que están en los cielos y las cosas que están sobre la tierra. Sí, en él, en unión con quien nosotros también fuimos asignados como herederos.” (Efesios 1:9-11) Hay muchísimo prejuicio y animosidad para con este Jesucristo tanto en el sector religioso como en el no religioso de la humanidad; y sin embargo, ¿qué clase de administración hemos de esperar de Dios por medio de él?
25, 26. (a) ¿Qué dijo proféticamente el Salmo 72 acerca de cómo trataría el Mesías con los pobres? (b) ¿Qué registro se da en Hechos 10:37-39 acerca de la obra de suministrar alivio que hizo el Mesías Jesús?
25 Con relación al Mesías, que es mayor que el rey Salomón cuya gobernación terminó en opresión para el pueblo de Israel, Salmo 72:12-14 dice proféticamente: “Librará al pobre que clama por auxilio, también al afligido y a cualquiera que no tiene ayudador. Le tendrá lástima al de condición humilde y al pobre, y las almas de los pobres salvará. De la opresión y de la violencia les redimirá el alma, y la sangre de ellos será preciosa a sus ojos.” Tenemos toda razón para creer que el Mesías Jesús cumplirá esta profecía en el futuro cercano. Solo tenemos que remontarnos mil novecientos años en el pasado a cuando él estuvo en la Tierra como hombre perfecto y preguntar: ¿Qué opresión y violencia practicó él alguna vez para con la gente? El relato inspirado de las Escrituras da a Jesucristo un registro limpio, que lo acredita, más bien, con suministrarle alivio a la gente. Cierto judío que estuvo casi constantemente con él durante Su carrera pública y que lo observó cuidadosamente, dijo a un auditorio de no judíos:
26 “Ustedes conocen el tema acerca del cual se habló por toda Judea, comenzando desde Galilea después del bautismo que Juan predicó, a saber, Jesús que era de Nazaret, cómo Dios lo ungió con espíritu santo y poder, y fue por la tierra haciendo bien y sanando a todos los oprimidos por el Diablo; porque Dios estaba con él. Y nosotros somos testigos de todas las cosas que hizo tanto en el país de los judíos como en Jerusalén; pero ellos también le quitaron la vida colgándolo en un madero.”—Hechos 10:37-39.
27, 28. (a) ¿Cómo llegó Jesús a tener doble derecho al reino del rey David sobre Israel? (b) En concordancia con eso, ¿qué dijo Isaías 9:6, 7 acerca del gobierno principesco del Mesías?
27 Tenemos que recordar que este Jesús a quien Dios ungió para que fuera el Rey Mesiánico sobre toda la humanidad fue descendiente natural del rey David de Jerusalén, por medio de un nacimiento milagroso en la familia real de David. Como tal, era el heredero natural del reino de David sobre Israel. El hombre que adoptó a Jesús como su hijo primogénito era también descendiente del rey David por medio de Salomón, y por lo tanto tenía derecho legal al reino de David. Este padre adoptivo, José el carpintero de Nazaret, otorgó ese derecho legal a Jesús al adoptarlo como su hijo primogénito. (Lucas 2:1-24; 3:23-38; Mateo 1:1 a 2:23 inclusive) Así este Jesús, que nació en Belén, “la ciudad de David,” tuvo doble derecho a la herencia del reino de David sobre Israel. Pues bien, en cuanto a este Descendiente de David sobre cuyo hombro se ha de colocar el gobierno principesco, Isaías el profeta inspirado dijo:
28 “De la abundancia del gobierno principesco y de la paz no habrá fin, sobre el trono de David y sobre su reino a fin de establecerlo firmemente y sustentarlo por medio del derecho y por medio de la justicia, desde ahora en adelante y hasta tiempo indefinido. El mismísimo celo de Jehová de los ejércitos hará esto.”—Isaías 9:6, 7.
29. Así el gobierno principesco del Mesías será de ¿qué clase, y por qué no vendrá por el voto democrático del pueblo?
29 Aquí tenemos una promesa del Dios Altísimo en el sentido de que el reino davídico de su Mesías no solo será un reino legítimo, sino también establecido y mantenido en derecho y justicia. Este gobierno de salvación para la gente será establecido por Dios mismo, no por el voto democrático del pueblo, porque, como dice el profeta Isaías, “el mismísimo celo de Jehová de los ejércitos hará esto.”
30, 31. (a) ¿Cómo suministró Dios una garantía del gobierno prometido del Cristo? (b) ¿Cómo dio testimonio Pedro de este hecho en Hechos 10:40-43?
30 Jehová logrará aquello por lo cual es celoso. Ha inspirado muchas otras profecías bíblicas acerca del gobierno perfecto que el Mesías Jesús dará a toda la humanidad. Nos ha suministrado una garantía de este gobierno prometido al haber resucitado a Jesucristo de entre los muertos al tercer día en vindicación de la inocencia de ése. Como pasó a decir el apóstol Pedro, después de haber dicho que Jesús fue colgado injustamente de un madero:
31 “Dios levantó a Este al tercer día y le concedió manifestarse, no a todo el pueblo, sino a testigos nombrados de antemano por Dios, a nosotros, que comimos y bebimos con él después que se levantó de entre los muertos. También, nos ordenó que predicásemos al pueblo y que diésemos testimonio cabal de que éste es El decretado por Dios para ser juez de vivos y de muertos. De él dan testimonio todos los profetas, que todo el que pone fe en él consigue perdón de pecados por medio de su nombre.”—Hechos 10:40-43.
CUERPO CONFIABLE DE ASOCIADOS EN LA ADMINISTRACIÓN DE LOS ASUNTOS HUMANOS
32. De modo que ahora Dios podía proceder a ¿qué obra de juntar, y con quién como su Agente para reunificar las cosas?
32 Para que este resucitado Jesucristo pudiera servir de Agente de Dios en reunificar las cosas, Dios lo ensalzó al trono divino en los cielos. (Hechos 2:33-36; 1 Pedro 3:22) Así Dios podía proceder a “reunir todas las cosas de nuevo en el Cristo,” no solo las cosas que están sobre la Tierra, sino también las “cosas que están en los cielos.” Jesucristo es de este modo un Mesías celestial, sobrehumano, con mayores poderes para hacer el bien a favor de la gente que cuando estuvo aquí abajo en la Tierra como hombre perfecto. Toda la humanidad será unificada bajo él como el Cabeza nombrado por Dios el Gran Administrador.
33. ¿Qué se propuso Dios que el Cristo tuviera asociado con él para atender los asuntos humanos, y por eso, qué se forma primero en la Tierra?
33 No obstante, Dios se propuso que su Hijo Jesucristo tuviera un cuerpo de asociados con él para atender los asuntos humanos. Estos asociados que gobernarán sobre la humanidad serían tomados de entre la humanidad. Mientras todavía estuvieran en la Tierra se les formaría en una congregación que tendría un lazo de unión con él. El apóstol Pablo, al escribir a la congregación que estaba en Éfeso, siguió diciendo: “Es según la operación de la potencia de su fuerza [la de Dios], con la cual ha operado en el caso de Cristo cuando lo levantó de entre los muertos y lo sentó a su diestra en los lugares celestiales, muy por encima de todo gobierno y autoridad y poder y señorío y de todo nombre que se nombra, no solo en este sistema de cosas, sino también en el que ha de venir. Él también sujetó todas las cosas debajo de sus pies, y lo hizo cabeza sobre todas las cosas en cuanto a la congregación, la cual es su cuerpo.”—Efesios 1:19-23.
34. ¿De qué fuentes habían de ser tomados los miembros del “cuerpo,” y cómo fue removida la barrera de en medio?
34 Pues bien, ¿qué hay acerca de los miembros de esta congregación, el “cuerpo” de Jesucristo? Bueno, fue el propósito generoso de Dios que ésta se compusiera no solo de individuos que habían sido judíos circuncisos, sino también de individuos que habían sido no judíos, o gentiles. Por 1.545 años (desde 1513 a. de la E.C. hasta 33 E.C.) éstos habían estado en desunión. La barrera, “el muro de en medio que como una cerca los separaba,” era el pacto de la Ley que había mediado el profeta Moisés en el año 1513 a. de la E.C. En el año 33 E.C. Dios usó a Jesucristo como el medio por el cual remover esta barrera mediante la muerte de Jesús en el madero de tormento. Como sigue diciendo el apóstol: “Por medio de su carne [colgada en el madero de tormento] abolió la enemistad, la Ley de mandamientos que consistía en decretos, para crear de los dos pueblos en unión consigo mismo un solo hombre nuevo y hacer la paz; y para reconciliar plenamente con Dios a ambos pueblos en un solo cuerpo por medio del madero de tormento, porque había matado la enemistad por medio de sí mismo.”—Efesios 2:14-16.
35. (a) ¿Cuándo se introdujo a los gentiles incircuncisos en la congregación o “cuerpo”? (b) ¿Cuántos miembros tendría el cuerpo?
35 Tres años y medio después de haber sido removida la barrera legal, Dios empezó a traer gentiles, no judíos, a la congregación o “cuerpo” de Jesucristo. Dios hizo esto enviando al apóstol Pedro a predicar el mensaje del reino del Mesías de Dios a gentiles incircuncisos que mostraban interés. Cuando éstos aceptaron el mensaje del Reino, Dios los ungió con espíritu santo y ellos se bautizaron como cristianos. (Hechos 10:1-48) Después de eso, y especialmente después de la destrucción de Jerusalén por los romanos en el año 70 E.C., muchos gentiles fueron bautizados para formar parte de la congregación o “cuerpo” de Jesucristo; así fueron unidos a él como “cabeza” espiritual de ellos. Tal como el cuerpo humano tenía un número preciso de miembros para estar completo, así este “cuerpo” que constaba de la congregación de Cristo tenía un número preciso y limitado de miembros. El último libro de la Santa Biblia dice claramente que el número de miembros del “cuerpo” está limitado a 12 x 12.000, ó 144.000.—Revelación 7:4-8; 14:1-3.
VAN TRIUNFANDO LOS AGENTES DE DIOS PARA UNIR TODAS LAS COSAS
36, 37. (a) ¿Por qué hay necesidad de una obra de unificación dentro de la congregación o “cuerpo” del Cristo? (b) Con ese propósito, ¿qué ha otorgado Dios por medio de Cristo a la congregación?
36 Los 144.000 individuos que formarán el cuerpo cooperativo bajo el que es “cabeza,” Jesucristo, son tomados “de toda tribu y lengua y pueblo y nación” de la humanidad. (Revelación 5:9, 10) Por eso, puesto que los miembros del “cuerpo” o la congregación en la Tierra se sacan de fuentes tan extensamente diferentes, debería haber gran necesidad de que se hiciera una obra de unificación entre ellos, para que todos se apeguen a la una sola “cabeza,” el glorificado Jesucristo. Para efectuar esta obra de unificación Dios suministró “dones en la forma de hombres.” (Salmo 68:18) El apóstol Pablo señala al glorificado Jesucristo como aquel a quien Dios usó para otorgar estos “dones” humanos a la congregación en la Tierra con el propósito de efectuar la unificación, diciendo:
37 “El mismísimo [a saber, Jesucristo] que descendió también es el que ascendió muy por encima de todos los cielos, para dar plenitud a todas las cosas. Y dio algunos [dones] como apóstoles, algunos como profetas, algunos como evangelizadores, algunos como pastores y maestros, teniendo en mira el reajuste de los santos, para obra ministerial, para la edificación del cuerpo del Cristo, hasta que todos logremos alcanzar la unidad en la fe y en el conocimiento exacto del Hijo de Dios, . . . hablando la verdad, por el amor crezcamos en todas las cosas en aquel que es la cabeza, Cristo.”—Efesios 4:8-15.
38, 39. (a) ¿Por qué no podía ser la cristiandad ese “cuerpo del Cristo”? (b) Por el fruto que ha dado, ¿qué le sucederá a ella?
38 La cristiandad alega que es este “cuerpo del Cristo.” Pero, ¿cómo pudiera ser eso jamás? Porque después de más de dieciséis siglos de funcionamiento ella ha fracasado vergonzosamente en cuanto a lograr esa unidad cristiana. Está dividida de mil maneras, por sectas religiosas, todas enseñando doctrinas diferentes en conflicto. No es un solo “cuerpo” religioso, no es una sola iglesia. Sus sectas religiosas separadas no son las ramas separadas o individuales de la “vid” del Cristo. (Juan 15:1-8) Esto es cierto a pesar del Concilio Mundial de Iglesias de la cristiandad. La religión de la cristiandad ha resultado ser una de las fuerzas más divisivas de la experiencia humana. Debido a esto el registro de ella ha sido un registro sangriento, con el hedor de la sangre humana.
39 Este no es el fruto del cristianismo verdadero. Jesucristo dijo: “Un árbol bueno no puede dar fruto inservible, tampoco puede un árbol podrido producir fruto excelente. Todo árbol que no produce fruto excelente llega a ser cortado y echado al fuego. Realmente, pues, por sus frutos reconocerán a aquellos hombres.” (Mateo 7:18-20) Como un árbol podrido, la cristiandad necesariamente será cortada pronto y destruida como si fuera consumida por el fuego. No le irá mejor que a los otros miembros de la religiosa Babilonia la Grande, el imperio mundial de la religión falsa.—Revelación 17:1 a 18:8 inclusive.
40. ¿Qué tenemos que decir en cuanto a si debido a la condición de la cristiandad, el propósito de Dios de tener una congregación unificada ha fracasado?
40 Entonces ¿qué? ¿Ha fracasado el propósito de Dios de tener una congregación unificada que esté recogida como una sola cosa bajo el Cabeza Jesucristo? ¡No! Los planes no bíblicos de la cristiandad para el futuro están fracasando, pero no sucede así con el propósito de Dios. Él no depende de que la cristiandad le suministre los miembros del reino celestial, que Dios usará para administrar los asuntos terrestres para la unidad del género humano. A todos los que desean ser el pueblo de Dios Él les dice que salgan de la cristiandad y de todo el resto de Babilonia la Grande. (Revelación 18:4) La cristiandad no es la vía a los privilegios del reino mesiánico de Dios. Las cosas que ella practica la excluyen de toda parte en la obra de reunificación que ese gobierno celestial efectúa. El apóstol Pablo pasa a decir lo siguiente a los miembros de la verdadera congregación cristiana: “Ustedes saben esto, reconociéndolo ustedes mismos, que ningún fornicador, ni inmundo, ni avariento—que significa ser idólatra— tiene herencia alguna en el reino del Cristo y de Dios.”—Efesios 5:5.
41. A pesar de oposición por Babilonia la Grande, ¿qué tiene Dios en unidad ahora en la Tierra, y el juntarlos es juntar qué clase de cosas?
41 A pesar de toda la oposición de la cristiandad y otros miembros de Babilonia la Grande, sí, a pesar de Satanás el Diablo y sus demonios con quienes el verdadero pueblo de Dios tiene una lucha, Dios tiene ahora en la Tierra su resto, los últimos que están en vías de tener parte en la administración de los asuntos humanos por Dios mediante Jesucristo, el Cabeza de ellos. A pesar de que vienen de varias razas y naciones, son una congregación unida; todos ellos se apegan unidamente a la una sola Cabeza celestial invisible, Jesucristo. Así, en el caso de ellos, Dios ha ‘reunido de nuevo en el Cristo’ las “cosas que están en los cielos,” puesto que aun ahora Dios los ha ‘sentado juntos en los lugares celestiales en unión con Cristo Jesús’ y son también herederos del Reino celestial.—Efesios 1:10; 2:6.
42. ¿Qué mandato profético de Cristo está cumpliendo el resto, y quiénes están asociándose ahora con el resto?
42 Desde el fin de los Tiempos de los Gentiles en el año 1914 han estado cumpliendo unidamente el mandato profético de Jesús: “Estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones; [después de lo cual] vendrá el fin.” (Mateo 24:14) En asociación con este resto del cuerpo o congregación de Cristo hay centenares de miles de adoradores dedicados de Jehová Dios que han obedecido Su mandato de salir de Babilonia la Grande. (Revelación 7:9-17) A todos juntos se les conoce mundialmente como testigos cristianos de Jehová.
“ADMINISTRACIÓN AL LÍMITE CABAL DE LOS TIEMPOS SEÑALADOS”
43, 44. (a) Se ha acercado el tiempo para que entre en acción ¿qué? contra ¿qué? (b) Según Gálatas 4:4, ¿cuándo mandó Dios a la Tierra al que había de ser su Siervo Principal en la administración?
43 Según todo lo que indican las condiciones del mundo y conforme al cumplimiento de las profecías bíblicas, el predicho “fin” de este sistema de cosas debe estar cerca. Ya por sesenta años los miembros en perspectiva del reino mesiánico, junto con una “grande muchedumbre” de auxiliares leales, han estado predicando “estas buenas nuevas del reino.” Dios no hará que esta predicación de su reino mesiánico establecido siga indefinidamente. El tiene su tiempo marcado para que este reino celestial entre en acción destructiva contra este sistema de cosas condenado a destrucción. El nuevo gobierno que Dios se propuso para administrar los asuntos de toda la humanidad tiene que tomar el control de las cosas pronto. Hace casi dos mil años Dios envió a la Tierra a probar que era merecedor al que ha sido nombrado para ser su Siervo Principal en la administración. Nació en el mundo como el heredero legítimo del rey David. Sobre esto leemos lo siguiente:
44 “Cuando llegó el límite cabal del tiempo, Dios envió a su Hijo, que vino a ser procedente de una mujer y que vino a estar bajo ley, para que librara por compra a aquellos [judíos] bajo ley, para que nosotros, a nuestra vez, recibiésemos la adopción de hijos. Ahora bien, porque ustedes son hijos, Dios ha enviado el espíritu de su Hijo a nuestros corazones y éste clama: ‘¡Abba, Padre!’”—Gálatas 4:4-6.
45. ¿En qué tiempo comenzó la obra del juntar en su primera etapa, y por qué?
45 Cuando Jesucristo el Hijo de Dios fue glorificado en el cielo y fundó la congregación cristiana en Jerusalén en el día del Pentecostés de 33 E.C., la “administración al límite cabal de los tiempos señalados” comenzó a operar en su primera etapa, la etapa más esencial. La congregación de los que habían de ser asociados en la obra de unificación con Jesucristo en los cielos tenía que ser juntada y unificada bajo su Cabeza, el Siervo Principal de Dios. De esta manera “las cosas que están en los cielos,” las cosas destinadas a los cielos, serían ‘reunidas de nuevo en el Cristo,’ de modo que el “cuerpo” que Dios usa en su administración estuviera completo.—Efesios 1:9-11.
46, 47. (a) ¿Cuándo llegó el tiempo debido para el segundo rasgo de la “administración” de Dios, a saber, el reunir en Cristo “las cosas que están sobre la tierra”? (b) Desde entonces en adelante la segunda etapa de la obra del juntar entró en operación bajo la “administración” de ¿quién?
46 Sin embargo, según el propósito de Dios, tenía que venir el tiempo debido para el segundo rasgo de su “administración,” a saber, ‘reunir de nuevo en el Cristo’ “las cosas que están sobre la tierra.” Este tiempo llegó cuando se cumplieron los Tiempos de los Gentiles en el otoño del año 1914 E.C. Allí llegó el tiempo para que la gobernación del reino mesiánico que anteriormente ejercía el rey David allá en el Oriente Medio fuera restablecida, no en la Jerusalén terrestre, sino en los cielos.
47 En el cielo, a la diestra de Dios, era donde ahora estaba ubicado el Heredero permanente del rey David, a saber, el Señor Jesucristo. Entonces fue que Jehová instaló a este Heredero celestial del rey David en el trono, con poder real no solo sobre el territorio del Israel antiguo, sino sobre toda la Tierra, sobre toda la humanidad para la cual Jesucristo había muerto como sacrificio humano perfecto. De ese modo el Reino del Mesías entró en operación. En ese tiempo, de manera culminante, se había llegado al “límite cabal de los tiempos señalados” cuando la “administración” que Dios conducía ‘había de reunir de nuevo en el Cristo’ las alejadas “cosas que están sobre la tierra.” Esta sería la segunda etapa de la obra de juntar o unir según el propósito de Dios.
48. En vista de los fracasos en gran escala en cuanto a unificación desde 1914, ¿qué tiene que irse enteramente?
48 En 1914 estalló la I Guerra Mundial, dividiendo al mundo en dos campos opuestos en lo económico y lo político. La Sociedad de Naciones de la posguerra no logró unificar a la humanidad. Ahora las Naciones Unidas continúan fracasando en cuanto a unificar a la humanidad. Fue la cristiandad, la más poderosa organización religiosa de la Tierra, la que no impidió dos guerras mundiales, y, hasta ahora, no ha unificado a la humanidad en verdadera paz y seguridad. No solo tendrán que irse estas organizaciones políticas y religiosas, sino todo el sistema de cosas hecho por el hombre. Se irá completamente en la venidera “grande tribulación” como la cual la humanidad nunca antes ha experimentado una.—Mateo 24:21, 22.
49. ¿Qué único medio hay para la salvación de la raza humana, y qué clase de perspectivas se le presentan ahora a la humanidad?
49 El único medio de salvación para nosotros los hombres es el reino mesiánico celestial, que Dios se propuso desde que nuestros primeros padres, Adán y Eva, pecaron en el Jardín de Edén y se desunieron de Dios su Creador. (Génesis 3:15; Romanos 16:20) ¡Ahora que se ha llegado al “límite cabal de los tiempos señalados” en sentido completo, nos hallamos en un día que tiene las más excelentes perspectivas para el futuro!
UNIFICACIÓN FINAL BAJO LA ADMINISTRACIÓN DE DIOS
50. ¿Quiénes en la Tierra hoy aclaman el Reino, y cómo están mostrando de qué lado están ahora en cuanto a gobernación?
50 Pronto se habrá completado el número pleno de miembros del Reino celestial, los 144.000 herederos del Reino bajo su Cabeza, Jesucristo. El propósito no cambiado de Dios en cuanto a este reino mesiánico triunfará, con gloria, honra y vindicación para Él. Ya una muchedumbre de personas de todas partes de la Tierra discierne que Dios ha puesto al Reino en poder celestial, y lo aclaman gozosamente y con devoción leal. Esta muchedumbre ya es grande, pero sigue aumentando a medida que “estas buenas nuevas del reino” continúan predicándose en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones. (Mateo 24:14) Para probar de qué lado están ahora, de todo corazón se unen al resto todavía sobreviviente de herederos del Reino en esta predicación y en dar este testimonio mundial.
51. Por eso, ¿por qué se puede decir que la obra de reunir bajo Cristo las cosas que están sobre la Tierra ha comenzado?
51 El último libro de la Biblia presenta la visión de esta “grande muchedumbre” dando su primera atención al trono celestial de Jehová Dios y a su Siervo Principal a quien él usa en su administración y clamando agradecidamente: “La salvación se la debemos a nuestro Dios, que está sentado en el trono, y al Cordero.” (Revelación 7:9, 10) Aunque esta “grande muchedumbre” se compone de gente de todas las naciones, tribus, pueblos y lenguas, estas personas buscan ser unificadas bajo el Siervo Principal de Dios, Jesucristo. Están en unidad con el resto de herederos del Reino y están en unidad entre sí. Unidamente adoran a Dios en su templo espiritual y le rinden servicio sagrado día y noche. Por eso se puede decir que, ya, en esta “grande muchedumbre” unificada, la obra de ‘reunir todas las cosas que están sobre la tierra’ en el Cristo ha comenzado, de acuerdo con la “administración” de Dios. ¡Cómo refuerza esto nuestra confianza como muestra de cosas que pronto vendrán!—Revelación 7:14-17.
52. Esta “grande muchedumbre” será sobreviviente de ¿qué?, ¿y por qué no podrán interponerse Satanás y sus demonios en la restauración del Paraíso por ellos?
52 El último libro de la Biblia también da seguridad de que esta “grande muchedumbre” de adoradores del único Dios vivo y verdadero saldrá de la “grande tribulación” como sobrevivientes de esta calamidad mundial con la cual el entero sistema de cosas terrestre de hechura humana terminará como un fracaso completo. La emocionante tarea de transformar toda la Tierra en un jardín paradisíaco se extenderá ante ellos. Satanás el Diablo y sus espíritus demoníacos no podrán interponerse en esta pacífica obra de hermoseamiento, porque estarán atados y aislados en un abismo desde el cual no pueden interponerse en lo que acontece aquí en la Tierra. Protectoramente estará sobre la “grande muchedumbre” en la Tierra el reino mesiánico celestial con autoridad para regular los asuntos de la Tierra por mil años.—Revelación 20:1-6.
53. (a) Para reunir de nuevo todas las “cosas que están sobre la tierra” a unidad bajo Cristo, ¿qué se exigirá? (b) ¿Cómo se tratará con los que ofrezcan resistencia a la unificación?
53 Así el nuevo orden de Dios en la Tierra comenzará con una sociedad humana unificada. Pero la obra de unificación del reino mesiánico celestial no habrá terminado entonces. Durante todo el milenio de su reinado sobre la Tierra tiene que acontecer la milagrosa resurrección de los muertos humanos por los cuales Jesucristo murió como sacrificio de rescate. (1 Timoteo 2:5, 6; Juan 1:29, 36) Todos estos miles de millones de humanos resucitados tendrán que ser juntados en una unidad bajo Jesucristo, el Siervo Principal en la “administración” de Dios. El propósito final de esto es hacer que al fin estén unificados con el Soberano Universal, Jehová Dios. Esto exigirá que a todos los obedientes de la humanidad se les eleve a perfección humana como la que tuvieron Adán y Eva al ser creados en el Jardín de Edén. Todos los desobedientes resistidores de esta unificación, sí, y además Satanás y sus demonios, serán destruidos para siempre, de modo que nunca jamás serán perturbadores de la paz.—Revelación 20:7-15; Hechos 24:15.
54. ¿Qué nos consuela hoy, y el triunfo de qué esperamos, con bendiciones en reserva?
54 ¡Toda honra vaya al Administrador Supremo, Jehová Dios! Él no solo se fija un propósito, sino que también lo cumple fielmente. Entonces, ¡cobremos ánimo todos! Aunque vemos que todos los planes humanos para la administración de la Tierra fracasan desastrosamente hoy, nos consuela el bendito conocimiento del propósito sumamente excelente de Dios. Con confianza esperamos ver y experimentar el triunfo del propósito de Dios. ¡Para siempre esperamos disfrutar de las bendiciones sin fin que vendrán de ello!