¿Son sus hijos discípulos de Cristo?
“Estas palabras que te estoy mandando . . . tienes que inculcarlas en tu hijo.”—Deu. 6:6, 7.
1, 2. (a) ¿Qué piensan algunos padres en cuanto a criar a los hijos? (b) ¿Qué razones hay para interesarse en entrenar mejor a los hijos?
¿Por qué siquiera tomar tiempo para ponderar esa pregunta de nuestro título? ¿Por qué no simplemente suministrar lo que exige la ley de César —alimento, ropa, abrigo, una educación seglar— y entonces dejar que el niño decida por sí mismo los asuntos religiosos o éticos cuando tenga suficiente edad para ello? Si usted siguiera ese proceder, no sería el único en hacerlo.
2 Pero hay buenas razones para hacer la pregunta. ¿Se ha visto usted privado de un sentido de seguridad debido al incremento en la violencia? ¿Lo ha entristecido el aumento en la falta de honradez? ¿Lo ha perturbado por lo menos hasta cierto grado el desarrollo rápido del abuso de las drogas y la inmoralidad? ¿Lo ha afectado el aumento que ha habido en los impuestos como resultado de esto? Si así es, entonces, en vista de que los jóvenes están envueltos en estos problemas, uno tiene buena razón para por lo menos preguntarse si no habría sido útil haber dado mejor entrenamiento a los hijos.
3. ¿Qué indica que a la mayoría de los hijos se les puede entrenar a ser lo que sus padres quieren que sean?
3 No se equivoque en cuanto a ello. A los hijos por lo general se les puede entrenar de modo que sean lo que sus padres quieren que sean. Investigadores del desarrollo de los niños han aprendido que la mayor parte de la personalidad del niño ha sido establecida antes de entrar éste en la escuela y que no es fácil alterar esos rasgos de la personalidad después de eso. El Creador del hombre, en su Palabra la Biblia, dice: “Entrena al muchacho conforme al camino para él; aun cuando se haga viejo no se desviará de él.” (Pro. 22:6) Principios fundamentales regidores de la conducta, inculcados durante la infancia, por lo general no se olvidan aunque uno se desviara temporalmente a hacer lo malo debido a la imperfección. Este pensamiento está incorporado en la ilustración que dio Jesús acerca del hijo pródigo que le pidió a su padre creyente su herencia y entonces “viajó al extranjero a un país lejano, y allí malgastó su hacienda viviendo una vida disoluta.” (Luc. 15:13) ¿Qué lo impulsó a volver? Entre otras cosas, se acordó de su padre. No solo las provisiones materiales que su padre siempre hacía, sino el amor de su padre a las cosas espirituales. Dijo: “Me levantaré y haré el viaje a mi padre,y le diré: ‘Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.’” (Luc. 15:18) Sí, el entrenamiento correcto durante la infancia es un factor de importancia en moldear la vida de un niño.
4. (a) ¿Por qué es necesario planear en el entrenamiento de los hijos? (b) ¿Cuál debe ser la meta?
4 Para que se tenga buen éxito, por supuesto, ese entrenamiento tiene que ser planeado. Los padres tienen que saber lo que quieren y lo que se requerirá para lograrlo. Es bueno tener presente un cuadro del resultado final que se desea y considerarlo juntos. (Pro. 21:5; 15:22) Aquí la meta debería ser producir un adulto que pudiera pensar por sí mismo, dedicado a la justicia, que conociera a Dios, que tuviera la voluntad y determinación de servir a Dios en imitación de Jesucristo, y que hallara placer en hacer cosas para otras personas. Pero cuando el entrenamiento se deja al azar, el resultado es como lo que se declara en Proverbios 29:15: “El muchacho que se deja a rienda suelta le estará causando vergüenza a su madre.” Esto se puede evitar cuando los padres usan su autoridad con interés amoroso en el bienestar duradero del niño.
LA VARA DE LA AUTORIDAD
5, 6. (a) ¿Qué es preciso que tengan presente los padres en cuanto a las medidas disciplinarias que tienen que tomar? (b) ¿Cómo pone Jehová el ejemplo en el ejercicio de la disciplina paternal?
5 El que tiene la autoridad tiene que rendir cuentas al debido tiempo al que le delega esa autoridad. Por lo tanto los padres tienen una importante responsabilidad al criar a sus hijos porque tienen que responderle a Dios por lo que se ha confiado a su cuidado. Como Salmo 127:3 les recuerda a los padres: “¡Miren! Los hijos son una herencia de parte de Jehová.” Por eso el apóstol Pablo aconseja: “Ustedes, padres, no estén irritando a sus hijos, sino sigan criándolos en la disciplina y regulación mental de Jehová.” (Efe. 6:4) El hacer esto incluye enseñar a sus hijos que, en armonía con la voluntad de Jehová, Jesús dejó un ‘dechado, para que sigamos sus pasos con sumo cuidado y atención.’—1 Ped. 2:21.
6 En Israel, una vara era un instrumento de castigo. En 2 Samuel 7:14 Jehová dijo acerca del sucesor del rey David: “Cuando él haga mal, entonces ciertamente lo censuraré con la vara de hombres y con los azotes de los hijos de Adán.” También, a los miembros del Israel espiritual, el apóstol Pablo escribe, en 1 Corintios 4:15-21: “Ciertamente no tienen muchos padres; porque en Cristo Jesús yo he venido a ser padre de ustedes por medio de las buenas nuevas. . . . ¿Qué quieren ustedes? ¿Iré a ustedes con vara, o con amor y apacibilidad de espíritu?” El libro de Proverbios dice: “No retengas del mero muchacho la disciplina. En caso de que le pegues con la vara, no morirá. Con la vara tú mismo debes pegarle, para que libres su mismísima alma del Seol mismo.” (Pro. 23:13, 14; 22:15) La manera en que se use esta vara paternal de castigo autorizado es asunto serio. Los padres tienen que responderle a Dios, quien da la autoridad para castigar, en cuanto a usar apropiadamente la “vara.” El no hacer eso pudiera ciertamente resultar en muerte para el niño, como lo declara el proverbio, así como en desaprobación divina para los padres. Jehová mismo pone el ejemplo al ejercer apropiadamente la autoridad paternal para disciplinar, como se señala en Hebreos 12:7, 9, 10: “Dios está tratando con ustedes como con hijos. Pues ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina? Además, teníamos padres que eran de nuestra carne que nos disciplinaban, y les mostrábamos respeto. ¿No hemos de sujetarnos mucho más al Padre de nuestra vida espiritual y vivir? Pues ellos por unos cuantos días nos disciplinaban según lo que les parecía bien, pero él lo hace para provecho nuestro para que participemos de su santidad.” Jehová disciplina a su pueblo, no porque esté irritado, sino “para provecho nuestro,” para que tengamos su aprobación y vivamos. Espera que los padres cristianos procedan de igual manera en cuanto a sus hijos, con la mira de que lleguen a ser discípulos verdaderos de su Hijo.
EL MUCHACHO HUÉRFANO DE PADRE
7, 8. (a) Describa el interés de Jehová en el huérfano de padre. (b) ¿Por qué era cosa trágica una casa sin padre?
7 La manera en que Jehová mandó a los israelitas que cuidaran a los muchachos huérfanos de padre impresiona en nosotros el bien que un padre piadoso puede efectuar dentro del círculo de la familia. Note el interés amoroso de Jehová en aquellos afligidos: “No debes pervertir el juicio del residente forastero ni del huérfano de padre, y no debes apoderarte de la ropa de una viuda como prenda. Y tienes que acordarte de que llegaste a ser esclavo en Egipto, y Jehová tu Dios procedió a redimirte de allí. Es por eso que te estoy mandando hacer esta cosa.” (Deu. 24:17, 18) No hay equivocación en cuanto a que Dios reconocía el vacío que existía en aquella casa afligida.
8 Una casa sin padre era trágica de muchas maneras. El padre era el que suministraba las cosas materiales necesarias. Podía protegerlos de los que pudieran hurtar, defraudar u oprimir de otras maneras. Suministraba al hijo guía y consejo, compañerismo y amor paternales. Por eso, al faltar el padre, la Ley suministraba recordatorios de que era necesario mostrar interés especial.—Éxo. 22:22-24.
9. (a) ¿Cómo era la actitud para con los ‘huérfanos de padre’ una indicación de la condición espiritual de la nación? (b) ¿Qué tiene que ver con el cristianismo el punto de vista que uno tenga de esos afligidos?
9 La expresión “huérfano de padre” hasta se incluyó cuando Dios estuvo describiendo el grado de fidelidad de la entera nación de Israel. Cuando la nación llegara a estar espiritualmente empobrecida y comenzara a pervertir la justicia, el huérfano de padre sería el primero en sentir los malos efectos de aquello. Por lo tanto Jehová hizo que el profeta Jeremías escribiera: “Si positivamente hacen buenos sus caminos y sus tratos, si positivamente llevan a cabo la justicia entre un hombre y su compañero, si a ningún residente forastero, a ningún huérfano de padre y a ninguna viuda oprimen, y sangre inocente no derraman en este lugar, y tras otros dioses no andan para su propia calamidad, yo, en cambio, ciertamente haré que sigan residiendo en este lugar, en la tierra que di a sus antepasados, desde tiempo indefinido aun hasta tiempo indefinido.” (Jer. 7:5-7) El punto de vista de Dios sobre este asunto no ha cambiado. Una manera de identificar a los cristianos verdaderos hoy es notar que se interesan en los afligidos y los atienden. En Santiago 1:27 se dice: “La forma de adoración que es limpia e incontaminada desde el punto de vista de nuestro Dios y Padre es ésta: cuidar de los huérfanos y de las viudas en su tribulación, y mantenerse sin mancha del mundo.”
10. (a) ¿Cómo pudiera tener hoy un muchacho su padre y no obstante, en cierto sentido, ser huérfano de padre? (b) ¿Qué papel desempeñan los padres, entonces, en que sus hijos lleguen a ser discípulos de Cristo?
10 ¿Es posible que hoy un muchacho tenga padre y no obstante, en cierto sentido, sea huérfano de padre? Esto, por desgracia, podría ser cierto. Si a un muchacho se le hace necesario ir solo a las reuniones cristianas, aunque su padre realmente pudiera estar con él, entonces el muchacho es huérfano de padre por lo menos en esa ocasión. Si, para recibir el entrenamiento que pueda recibir en el ministerio del campo cristiano, el muchacho tiene que recurrir a otra persona, entonces es huérfano de padre en ese campo de su vida. Lo mismo es cierto de otras maneras. ¡Pero qué excelente es cuando el padre cristiano asume sus responsabilidades: llevando la delantera en el estudio bíblico de familia, suministrando esparcimiento, haciéndose disponible para ser consultado al surgir problemas, y personalmente dando entrenamiento en atender responsabilidades en la casa a fin de colocar un buen fundamento para que se asuman responsabilidades más tarde en la vida! Se necesita instrucción práctica en la completa esfera del modo de vivir cristiano. Los hijos no llegan a ser automáticamente discípulos de Cristo solo porque sus padres profesan serlo. Necesitan ayuda personal. El padre que es ayudador en toda etapa de la vida de un hijo es realmente una bendición.
SU RUTINA DIARIA
11, 12. ¿Qué dice Deuteronomio 6:6, 7 en cuanto a adoración, y cómo puede afectar la aplicación de ese consejo a los miembros de nuestras familias?
11 En la cristiandad, los que todavía asisten a las iglesias por lo general escuchan un breve sermón los domingos, y los niños tienen una breve sesión semanal en la escuela dominical. Se espera atender con esto las necesidades religiosas de la familia. ¿Qué comparación hay entre esto y lo que Jehová bosquejó para el círculo de la familia? Deuteronomio 6:6, 7 dice: “Y estas palabras que te estoy mandando hoy tienen que resultar estar sobre tu corazón; y tienes que inculcarlas en tu hijo y hablar de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes por el camino y cuando te acuestes y cuando te levantes.” De esto es obvio que la adoración de Jehová había de ser un modo de vivir y que la consideración de sus propósitos había de efectuarse en ocasiones apropiadas a través de la rutina diaria de uno.
12 ¡Qué bueno es que los primeros pensamientos de uno al despertar sean de Jehová y de su Hijo! ¿Hay cosas mejores acerca de las cuales hablar al empezar las actividades del día que de las cosas que Dios hace? La adoración de Jehová no puede estar separada de la rutina diaria de la vida. Cuando el habla y la conducta de los padres reflejan la convicción de que esto es así, los hijos apreciarán cada vez más el hecho de que Dios ve cada cosa que hacen y que se interesa en cómo la hacen, que es importante ser imitadores del Hijo de Dios en todo lo que hagan. Dios y su Hijo están entonces en los pensamientos del niño a todo tiempo, no solo cuando se apartan ocasiones especiales para adorar. Estarán buscando la bendición de Jehová sobre toda tarea que desempeñen y procurarán obtener la dirección que él da por medio de las Santas Escrituras. Cuando un niño recibe esta clase de entrenamiento, es muy probable que sea cierto que “aun cuando se haga viejo no se desviará de él.”—Pro. 22:6.
13. ¿Por qué es importante mantener a Dios en nuestros pensamientos a todo tiempo?
13 ¡Pero qué fácil se les hace a muchas personas emprender su rutina diaria y excluir a Dios de sus pensamientos! Sin embargo, el permitirse a sí mismo hacer esto podría con el tiempo hacer que uno llegara a ser como aquellos de quienes Jesús dijo: “Así como en aquellos días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, los hombres casándose y las mujeres dándose en matrimonio, hasta el día en que Noé entró en el arca; y no hicieron caso hasta que vino el diluvio y los barrió a todos, así será la presencia del Hijo del hombre.” (Mat. 24:37-39) Pero el apóstol Pablo sabiamente estimuló a tener presente a Dios durante todo el día prescindiendo de lo que estuviéramos haciendo. Dijo: “Por esto, sea que estén comiendo, o bebiendo, o haciendo cualquier otra cosa, hagan todas las cosas para la gloria de Dios.” (1 Cor. 10:31) Dio la misma clase de exhortación a los colosenses: “Cualquier cosa que estén haciendo, trabajen en ello de toda alma como para Jehová, y no para los hombres.” (Col. 3:23) Eso es lo que hace un discípulo de Cristo. ¿Está usted enseñando a sus hijos a hacer eso?
14. Dé un ejemplo de cómo Dios puede ser incluido en la consideración de asuntos a medida que el padre y el hijo trabajan juntos en alguna rutina diaria.
14 ¿Trabajan usted y su hijo de vez en cuando juntos en el auto de la familia? ¿Qué relación tiene esta parte de la rutina diaria con la Biblia? Bueno, el auto tuvo que ser diseñado técnicamente y fabricado en armonía con leyes que estableció el Creador, y uno tiene que continuar reconociendo esas leyes naturales para mantenerlo funcionando con eficacia. El ponerlo a punto y hacerle ajustes periódicamente, el lubricarlo y cambiarle el aceite, todo se necesita debido a las leyes de Dios. ¿Le recuerda usted a su hijo estas cosas a medida que él trabaja? Otro asunto: ¿Tiene el César gubernamental ciertas leyes de seguridad que gobiernen el funcionamiento de los automóviles en su estado? ¿Tienen que cumplir con ciertas normas las llantas, luces y frenos para que se eviten accidentes y se protejan vidas? ¿Cuál es la importancia de amoldarse a estos requisitos? En Romanos 13:1 se nos dice: “Toda alma esté en sujeción a las autoridades superiores, porque no hay autoridad a no ser por Dios; las autoridades que existen están colocadas por Dios en sus posiciones relativas.” ¿Está usted impresionando estos pensamientos en su hijo a medida que él y usted trabajan juntos?
15. Dé un ejemplo de cómo Dios puede ser incluido en la consideración de asuntos a medida que la madre y la hija trabajan juntas en algún proyecto constructivo.
15 ¿Trabajan la madre y la hija juntas en la confección de un vestido? ¿Qué relación tiene esto con las Escrituras? Bueno, ¿de qué estilo será? ¿Estará en armonía con 1 Timoteo 2:9, 10, que dice: “Deseo que las mujeres se adornen en vestido bien arreglado, con modestia y buen juicio”? ¿Qué adornos llevará, y con qué accesorios se lo pondrá su hija? El resto de ese mismo texto dice que las mujeres que reverencian a Dios deben adornarse, “no con estilos de cabellos trenzados y oro, o perlas, o traje muy costoso, sino . . . por medio de obras buenas.” Posiblemente si uno no siempre se pone la prenda de vestir más cara, uno aprenderá economía razonable y ‘tendrá algo que distribuir a alguien que tenga necesidad.’ (Efe. 4:28) Hay muchos principios bíblicos que su hija puede aprender a medida que trabajan juntas en efectuar el trabajo diario en el hogar, ‘haciendo todas las cosas para la gloria de Dios.’
16. (a) ¿Qué clase de lenguaje deben usar tanto los padres como los hijos, y por qué? (b) Aunque no podemos estar leyendo la Biblia y la literatura bíblica siempre, ¿qué podemos hacer?
16 ¿Qué clase de lenguaje usa usted en la asociación diaria con sus hijos? Los discípulos de Jesús saben que el uso apropiado de la lengua es importante. (Mat. 12:36) La Biblia da esta exhortación: “No proceda de la boca de ustedes ningún dicho corrompido, sino todo dicho que sea bueno para la edificación según haya necesidad, para que imparta lo que sea favorable a los oyentes.” (Efe. 4:29; Tito 2:6-8) Prescindiendo del tema, las ideas que se expresen deben estar en armonía con las pautas inspiradas que registró el apóstol Pablo, cuando dijo: “Cuantas cosas sean verdaderas, cuantas sean de seria consideración, cuantas sean justas, cuantas sean castas, cuantas sean amables, cuantas sean de buena reputación, cualquier virtud que haya y cualquier cosa que haya digna de alabanza, continúen considerando estas cosas.” (Fili. 4:8) Es verdad que no podemos estar leyendo la Biblia o literatura bíblica todo el día. Pero, imitando a Cristo, siempre podemos estar pensando, hablando y trabajando en armonía con las Santas Escrituras. Reflejando este punto de vista, el Salmo 119:97 dice: “¡Cómo amo tu ley, sí! Todo el día es ella mi interés intenso.”
PERÍODOS ESPECIALES APARTADOS
17. ¿Por qué es un factor importante en el entrenamiento de los hijos el estudio de familia celebrado con regularidad?
17 Además de enseñar y entrenar a sus hijos durante la rutina diaria normal, para verdadero buen éxito es necesario apartar períodos especiales para el estudio de familia con regularidad. La regularidad en esto es tan importante como lo es la regularidad en el comer y el beber. Con razón nos referimos naturalmente a la verdad bíblica como alimento espiritual, teniendo presente la fuerza que suministra, el gozo de participar de él y la necesidad continua de él.—Mat. 4:4; 5:3.
18. ¿Quién debe decidir lo que estudiará la familia, y por qué?
18 El material que ha de estudiarse debe ser seleccionado por el cabeza de la familia. Tal como él decide lo que tendrá la familia en cuanto a cosas, materiales, así tiene la responsabilidad de decidir lo que estudiará la familia. Está en la mejor posición para saber lo que la familia necesita. Además, puede averiguar lo que los demás piensan que será provechoso y entonces tomar en cuenta esto. De vez en cuando cada familia tendrá necesidades particulares. Artículos sobre el abusar de las drogas, la conducta con personas de sexo diferente, la honradez, las asociaciones, la bondad, etcétera, pudieran ser apropiados, dependiendo de las condiciones que se desarrollen.
19. Por lo general, ¿qué estará estudiando la familia?
19 Por lo general, la familia descubrirá que sacará mucho provecho de seguir el curso de estudio que ha sido arreglado para la congregación, preparándose para participar en las reuniones. A menos que haya una necesidad especial en la familia, ¿por qué no concentrar su atención en el material de estudio acerca del cual todos los demás de la congregación están pensando y hablando? ¡Qué efecto unificante tendrá y qué excelente contribución puede hacer cada uno a la consideración de estos asuntos en la reunión si las familias se preparan en casa en armonía con el programa de la congregación! Por supuesto, los que tienen la bendición de tener más tiempo para estudiar pueden efectuar más investigación.
20. Si el prepararse para las reuniones les parece cosa insulsa y falta de interés a algunos, ¿cuál pudiera ser el problema, y cuál pudiera ser el remedio?
20 Quizás el prepararse para las reuniones no les parezca interesante a algunos niños. Eso se debe al punto de vista de ellos. Es probable que la meta que tengan esos niños sea el simplemente preparar un comentario sobre las preguntas del estudio. Aunque eso pudiera ser una meta aceptable para comenzar, la verdadera meta debe ser entender el tema bíblico y luego ayudar a otros a entenderlo por los comentarios que se hagan. Teniéndose este objetivo, pronto el estudio llega a ser un deleite para el que es amador de la verdad.—Sal. 1:1, 2.
21. ¿Qué otras cosas pueden hacer los padres para que el estudio de la familia sea alegre e interesante?
21 Hay otras cosas que los padres pueden hacer para que el estudio de la familia sea alegre e interesante. El permitir que el ambiente sea amigable y libre de tensión ayudará. Nadie aprende bien cuando está tenso o temeroso. La mente de los jóvenes no será tan receptiva como pudiera serlo si los padres son severos y exigentes. Aunque tiene que haber suficiente firmeza para mantener el orden y demostrar la seriedad de la ocasión, hay bastante oportunidad para la clase de calor afectuoso e interés amoroso entre unos y otros que junta a la familia.
22, 23. (a) ¿Por qué no hay necesidad de que los padres se sientan inferiores a sus hijos solo debido a la diferencia de educación seglar? (b) ¿Qué se puede ayudar a apreciar a los hijos, para provecho de ellos?
22 Es verdad que en algunos casos los padres no tienen la educación seglar que están recibiendo ahora sus hijos menores. Algunos padres han venido de otro país, y cuando sus hijos van a la escuela dominan el nuevo lenguaje, pero los padres no. En los círculos de familia mundanos los hijos que se encuentran en estas circunstancias a menudo adoptan una actitud de superioridad para con los padres. Pero, ¿cómo puede vencerse este obstáculo en el círculo de familia cristiano a medida que los padres procuran asumir su responsabilidad dada por Dios para con los hijos, “criándolos en la disciplina y regulación mental de Jehová”?—Efe. 6:4.
23 Los padres nunca tienen que sentirse inferiores a su prole solo porque se presenten algunas de estas condiciones ya mencionadas. Su posición de autoridad en la casa ha sido dada por Dios. Además, sus años de experiencia y antecedentes en la vida los hacen mejor adecuados para sostener materialmente a la familia, para administrar la casa, y para llevar la delantera en el estudio de la familia y la adoración. En una situación paralela bien pudiera haber hermanos jóvenes de dieciocho o diecinueve años o en sus tempranos veinte en la congregación que puedan pronunciar discursos estudiantiles más pulidos que algunos de los hermanos de mayor edad, pero esto no los capacita para ser ancianos. Hay mucho más que eso envuelto en ser anciano. Lo mismo es cierto de los hijos en comparación con sus padres dentro del círculo de la familia. Prescindiendo de la educación y antecedentes de los padres, estos deben programar el tiempo para el estudio familiar, y entonces dejar que cada uno contribuya lo que pueda, para provecho de los demás. A los hijos, si tienen mayor habilidad en ciertos sentidos, se les puede ayudar a comprender que no es simplemente la inteligencia lo que vale con Jehová, sino humildad y profundidad de devoción. Jesús dijo: “El que se ensalce será humillado, y el que se humille será ensalzado.” (Mat. 23:12) El espíritu de Jehová compensará cualquier carencia que pudiera sentir un padre o madre. Con confianza siga el arreglo bíblico para el estudio familiar, prescindiendo de las diferentes habilidades mentales de varios miembros de la familia.
24. ¿De qué manera sabrán los padres si sus hijos realmente son discípulos de Cristo?
24 ¿Son sus hijos discípulos de Cristo? Bueno, si no solo se han presentado para el bautismo cristiano, sino también hacen una práctica de basar sus decisiones en lo que Jesús dijo e hizo, si no muestran amor a los caminos injustos del mundo, sino que mantienen la vista en la meta de siempre servir los intereses del Reino, si se someten voluntariamente a la autoridad de usted disfrutan de considerar los caminos de Jehová, si llenan el corazón de usted de amor afectuoso porque usted ve estas cosas en ellos, usted no tendrá que conjeturar. Sabrá que de veras son discípulos de Cristo.
[Ilustración de la página 405]
Los principios bíblicos que aplican a la ropa se pueden enseñar a medida que una madre y su hija hacen juntas un vestido
[Ilustración de la página 406]
La regularidad al enseñar a sus hijos es tan importante como la regularidad en el comer y el beber