Andando de toda alma en el camino de la vida
“‘Tienes que amar a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con todas tus fuerzas y con toda tu mente,’ y, ‘a tu prójimo como a ti mismo.’ . . . ‘Sigue haciendo esto y conseguirás la vida.’”—Luc. 10:27, 28.
1. ¿Qué dos modos de vivir contrastantes se ven en la Tierra hoy día?
POR medio de su Hijo Jesucristo, el Gran Dador de Vida, Jehová, ahora ofrece a la humanidad la “vida que lo es realmente.” Es una vida significativa, que trae paz y satisfacción. Pero hoy muchos optan por una clase diferente de vida. Su corazón y alma están regidos por el egoísmo, y derrochan fuerzas y mente al seguir tras los placeres efímeros de la sociedad tolerante “moderna.” Sin esperanza para el futuro, aceptan como su norma: “Comamos y bebamos, porque mañana hemos de morir.” (1 Cor. 15:32) A la inversa, hay otros que esperan vivir mañana, y eternamente. Son los que realmente aman a Dios y al prójimo. Son celosos ‘para trabajar en lo bueno, para ser ricos en obras excelentes, para ser liberales, listos para compartir, atesorando para sí mismos con seguridad un fundamento excelente para el futuro.’ ¿Y por qué? “Para que logren asirse firmemente de la vida que lo es realmente.”—1 Tim. 6:18, 19; Sal. 36:7, 9; Juan 17:3.
2. (a) ¿Qué requiere Dios de los que conseguirán la vida? (b) ¿Por qué podemos elogiar a muchos cuyas oportunidades de servicio del campo están limitadas?
2 Lo que Dios requiere de los que consigan la vida es servicio de toda alma. Esto significa dar de nosotros mismos como esclavos de Dios, y de Cristo. (Efe. 6:6; Col. 3:23, 24) El servicio a Dios incluye la obra vital de predicar y hacer discípulos. Muchos Testigos participan en esto mientras atienden a una familia u otras responsabilidades seglares bíblicas. (1 Tim. 5:8) A veces, éstos tienen que vencer grandes problemas, tales como tareas diarias muy exigentes, persecución o mala salud, a fin de dedicar solo unas cuantas horas al servicio del campo. Pero aun este servicio dedicado tiene gran valor a los ojos de Dios. Es como las “dos monedas pequeñas” que la viuda dio, de cuya acción Jesús habló tan favorablemente en Marcos 12:41-44. Aquellos cuyo servicio del campo está limitado debido a circunstancias como las que se mencionaron jamás deben desanimarse por no poder llegar a ser precursores y dedicar por lo menos 1.200 horas al año en predicar y enseñar la Palabra de Dios al público. La cosa importante es servir a Dios de toda alma, en la capacidad que sea.—Mar. 12:30.
3. ¿Cómo puede ser posible el entrar por la puerta a mayor actividad?
3 Sin embargo, para muchos siervos dedicados de Dios, jóvenes y viejos, “una puerta grande que conduce a la actividad” yace abierta de par en par. (1 Cor. 16:9) Es la puerta al servicio de precursor. Al mirar de modo práctico a los problemas que sirven de obstáculo, y al ejercer fe, es posible que muchos puedan remover hasta obstáculos semejantes a montañas del camino a fin de servir de precursores.—Mat. 17:20.
4. Teniendo presentes las palabras de Pablo, Juan y Jesús, ¿qué preguntas podemos hacernos ahora?
4 Hagámonos algunas preguntas: ¿Realmente reconocemos la urgencia y lo tarde de la hora? ¿‘Seguimos asegurándonos de lo que es acepto al Señor’? ¿Armoniza plenamente nuestra carrera presente con nuestra dedicación a Jehová? ¿Apreciamos que la preocupación indebida a causa de cosas materiales no nos será de ningún provecho en absoluto? “El mundo va pasando y también su deseo, pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre.”—Efe. 5:10; 1 Juan 2:17; Luc. 21:34-36.
“SIGAN HACIÉNDOLO MÁS PLENAMENTE”
5. ¿Qué deberíamos estar haciendo antes del bautismo, y después? Ilustre por experiencia local u otra.
5 A fin de llenar los requisitos para el bautismo, muchos han hecho cambios grandes en su vida. Se han limpiado de los modos de obrar mundanos. Se han arrepentido de su anterior modo de vivir, se han vuelto, haciendo una dedicación personal a Dios y así, sobre la base de fe en la sangre de sacrificio de Jesús, están buscando una buena conciencia con Dios. Ya no obran “la voluntad de las naciones.” (1 Ped. 4:3, 7) Pero ¿se detiene el progreso con esa dedicación y bautismo? No debería detenerse. En 1 Tesalonicenses 4:1, Pablo exhortó a los cristianos recién dedicados: “Finalmente, hermanos, les solicitamos y les exhortamos por el Señor Jesús, a que así como recibieron de nosotros la instrucción acerca de cómo deben andar y agradar a Dios, así como de hecho están andando, que sigan haciéndolo más plenamente.” Esto significa pensar y obrar positivamente a fin de ensanchar, si es posible, la participación de uno en la obra de Dios. Un superintendente cristiano escribe:
Hace cinco años, cuando mi esposa empezó a estudiar con los testigos de Jehová, me opuse a ella. ¡Cuán agradecido estoy ahora de que no cedió! En ese tiempo mi vida estaba llena con jugar golf, pescar, jugar por dinero en Mah-Jongg. Fumaba cuarenta cigarrillos al día. Pero luego la verdad se arraigó en mi corazón, también. Renuncié a todas estas cosas como vacías e inservibles. Al principio los anteriores asociados se mofaban de mí, pero más tarde cesaron su oposición y hasta me animaban en mi derrotero. Mi madre y mi hermana se opusieron contra mí enconadamente. Pero a fin de emprender el servicio de precursor, tomé un trabajo de tiempo parcial que solo pagaba una quinta parte de mi salario anterior. Completando esto con mis ahorros, pude atender adecuadamente a mi esposa precursora y a mi hijito. Llegué a aprender que Jehová ayuda maravillosamente y de diversas maneras. Ahora estoy conduciendo siete estudios bíblicos de casa, y, de éstos, dos personas ya están sirviendo como publicadores activos. Ahora mi madre alaba a nuestra familia por andar en el camino de la verdad, y oro que ella, también, pronto llegue a ser testigo de Jehová.
Este Testigo no se detuvo al dedicarse. ¡Qué gozo ha resultado!
6. Lo mismo que Pablo, ¿cómo podemos considerar una carrera en el sistema presente? Ilustre la aplicación práctica por experiencia local u otra.
6 Todos nosotros que hacemos una dedicación a Jehová debemos reflexionar: ¿Estamos realmente haciendo su voluntad cada día de nuestra vida? ¿O todavía estamos viviendo en gran parte para nosotros mismos, sin ningún pensamiento serio en cuanto a la voluntad de Dios? Aunque quizás requiera el sacrificar una carrera y ganancias materiales, el servicio de precursor trae bendiciones espirituales incomparables. El apóstol Pablo consideró que la ganancia mundana era “un montón de basura,” y por eso se extendió “hacia adelante a las cosas más allá.” (Fili. 3:7, 8, 13) Hoy todos los que se dedican a Jehová deben considerar seriamente si ellos, lo mismo que Pablo, pueden ensanchar su actividad.
Un oficial gubernamental había trabajado durante treinta y cuatro años en su puesto, diez de estos años en la administración. Su esposa y dos hijas aprendieron la verdad y se hicieron precursoras. Él también estudió y empezó una “contienda de tiro de cuerda.” Mientras estaba en Nueva York en un viaje de negocios, entró por un día en el Estadio Yanqui, donde se estaba celebrando la Asamblea Internacional de los Testigos de Jehová de 1969. Al ver la unidad, amor y paz entre las multitudes en esa asamblea quedó convencido de que la esperanza de un nuevo orden era más que un sueño. Más tarde ese mismo año, asistió a toda la asamblea en Hawai, junto con su esposa. La hospitalidad que los Testigos allí le mostraron en medio de hermosos alrededores le dio una idea de cómo podría ser el paraíso. Hizo ajustes para llenar los requisitos para poder bautizarse. Pero ¿realmente necesitaba efectuar algo de trabajo seglar? Realmente no. La Asamblea Internacional “Victoria Divina” en julio de 1973 lo convenció de que el servicio de precursor debería ser su vocación. Dos días después de la asamblea, renunció a su puesto, y un mes después se unió a su familia en la actividad de precursores regulares. Verdaderamente ha conseguido la bendición de Jehová... junto con un saludable cutis requemado por el sol.
7. (a) Según Pablo, ¿de qué cosas debemos huir, y tras qué cosas debemos seguir? (b) Ilustre cómo Jehová bendice el huir del materialismo.
7 Es peligroso el envolvernos en un modo de vivir materialista, fijando nuestro corazón en posesiones materiales y placeres, y dejando que tales búsquedas dominen nuestra vida. La Biblia no solo aconseja que nos libremos de las “cosas perjudiciales” materialistas que brotan del “amor al dinero,” sino que ‘huyamos de estas cosas.’ Esto significa obrar con urgencia, tal como al ‘huir’ de deseos incorrectos, ‘huir’ de la fornicación y ‘huir’ de la idolatría. Nos ayudará a huir del materialismo el que demos pasos positivos para apresurarnos en la dirección opuesta, a fin de ‘seguir tras la justicia, la devoción piadosa, la fe, el amor, la perseverancia, la apacibilidad de genio.’ Muchos han hecho esto por medio de emprender el servicio de precursor, lo cual los equipa maravillosamente para ‘pelear la excelente pelea de la fe’ y para “asirse firmemente” de la vida eterna. (1 Tim. 6:10-12, 17-19; 2 Tim. 2:22; 1 Cor. 6:18; 10:14) Una hermana joven escribe:
“Un obstáculo que tuve que vencer para emprender el servicio de precursor fue mi ambiente... riqueza y materialismo, acompañados de muchas tentaciones mundanas. Era como Mateo 13:22... la semilla sembrada entre muchos espinos, pero yo seguía pensando en lo excelente que sería mostrar la clase de fe firme que demostró Moisés. (Heb. 11:24-27)” De modo que esta hermana rechazó la vida social conectada con el internacionalmente famoso hotel de lujo de su familia. Cuando se hicieron planes para un matrimonio prestigioso, también rechazó éste. Junto con su madre y hermana más joven, cultivó el espíritu de precursor. Emprendió la actividad de precursora regular en territorio no asignado que lindaba con una asignación de precursores especiales. Ha participado con los otros precursores en el gozo de desarrollar esta zona, de modo que hoy tienen una nueva congregación que asciende a 39 publicadores de congregación, junto con siete precursores, y con una asistencia de 116 al Memorial en 1974. Dice ella: “El grupo en mi territorio continúa aumentando. Ahora tenemos veinte personas que asisten a nuestra reunión el martes por la noche, y tres nuevas hermanas se bautizaron en nuestra asamblea de circuito. Estoy tan agradecida por la bendición y el aumento que Jehová suministra. Mi salud, por la cual solía preocuparme, ha mejorado bastante, y sirvo gozosamente todos los días.”
Esta Testigo joven de veras escogió “la vida que lo es realmente.”
8. (a) ¿Qué carrera remuneradora aguarda a los jóvenes hoy día? (b) ¿Cómo han podido muchos de mayor edad, también, despertar nuevamente el gozo juvenil?
8 El amor a Jehová debería impelernos a usar nuestra fuerza y recursos en su servicio. ¡Qué brillantes oportunidades yacen ante nosotros mientras todavía somos jóvenes! “Acuérdate, ahora, de tu Magnífico Creador en los días de tu mocedad, antes que procedan a venir los días calamitosos, o hayan llegado los años en que dirás: ‘No tengo en ellos deleite.’” (Ecl. 12:1) Al encauzar su energía y habilidades juveniles para ayudar a otros a aprender la voluntad de Dios, los jóvenes hallarán la ocupación más satisfactoria y remuneradora que se efectúa en la Tierra hoy día. Muchos de mayor edad, también, a pesar de la energía que disminuye, hacen una contribución sumamente apreciable.
Una hermana precursora regular de ochenta y dos años recibe oposición de su familia. Pero ella se levanta a las tres de la mañana para hacer sus quehaceres en la granja, a fin de tener tiempo para el servicio del campo más tarde en el día. Dedica más de 120 horas a la actividad del campo como promedio mensual, y distribuye 140 revistas y conduce varios estudios bíblicos de casa.
9. (a) ¿Qué gran servicio pueden desempeñar los padres a favor de sus hijos? (b) ¿Cómo puede el propio ejemplo de los padres beneficiar a sus familias y a otros en la congregación?
9 ¿Es usted un padre o una madre con hijos jóvenes? Los padres pueden hacer a sus hijos un gran servicio amoldando su modo de pensar para que esté en armonía con los principios bíblicos y recomendándoles de todo corazón una carrera como precursores. Así los jóvenes tienen una meta verdadera en la vida, junto con fe firme. (Heb. 11:6) Si los padres mismos pueden hacer lugar para el servicio de precursor, entonces toda la familia se beneficia por la devoción diaria a los asuntos teocráticos, y todos pueden ser ayudados así a crecer juntos espiritualmente en el vínculo del amor cristiano verdadero. (Col. 3:14-21) Este ejemplo puede tener un efecto saludable, también, sobre el punto de vista de otras familias en la congregación.—Fili. 3:17; 1 Tes. 1:2-7.
Un testigo de Jehová renunció a su trabajo de superintendente en una fábrica de autos, a fin de que él y su esposa pudieran servir juntos como precursores y criar a sus hijitos con la misma meta. Después de tres años sus fondos se les acabaron, pero, en armonía con Mateo 6:33, buscaron la manera de permanecer en el servicio de precursor. Jehová contestó sus oraciones, y el esposo, ahora un superintendente cristiano, pudo obtener trabajo de tiempo parcial adecuado junto con otros hermanos. Dice que durante sus años en la actividad de precursor ha aprendido a no considerar las cosas desde un punto de vista simplemente humano. Considera a Hebreos 12:1, 2 como la fórmula para el servicio de precursor con buen éxito. Ahora un hijo sirve en Betel en el Japón, y la hija es una precursora regular. En julio de 1970, cuando este hermano emprendió el servicio de precursor, la congregación local llegaba a un total de solo sesenta publicadores pero en marzo de 1974 informaron sesenta y tres precursores, y en el mismo mes cincuenta y un nuevos de esta congregación se bautizaron en una asamblea de circuito. En total, ahora tienen 225 publicadores. Esta familia ha traído a más de treinta nuevos, incluso otras seis familias completas, a asociación con la congregación cristiana.
Cuando el espíritu de precursor de las familias está difundido en una congregación, verdaderamente trae una maravillosa bendición de Jehová.—Pro. 28:20.
10, 11. (a) ¿Cómo son bendecidos a menudo los creyentes en las familias divididas? (b) Utilizando ejemplos locales u otros, muestre cómo el servicio de precursor trae bendiciones y protección.
10 En las familias divididas, también, las mentes jóvenes pueden ser amoldadas por el padre o la madre creyente. ¡Cuán a menudo sucede que los hijos optan por seguir el modelo de vida de ese padre o madre! Sin duda, esto se debe a menudo al hecho de que el niño ve y aprecia directamente “la justicia que proviene de Dios sobre la base de la fe.” (Fili. 3:9) Por palabra y por ejemplo, los padres devotos pueden animar a sus hijos a prepararse para hacer del servicio de Jehová el trabajo de su vida, así como Eunice animó a su hijo Timoteo.—2 Tim. 1:5; 3:15; Pro. 4:1-9.
Un Testigo joven fue animado por su madre —ella misma precursora— a participar en el servicio de precursor temporero con frecuencia durante sus tres años en la secundaria. Él suplicó muchas veces a su padre incrédulo permiso para emprender el servicio de precursor regular al graduarse, pero su padre requirió que él pasara a la universidad. Su maestro le reconvino por su celosa actividad de predicación durante las vacaciones cuando pudo haber estado preparándose para el examen de ingreso a la universidad. Pero inesperadamente, el examen contenía muchas preguntas de conocimiento general acerca de la Biblia. De modo que pudo pasar adelante de muchos de los otros estudiantes. Al planear un horario universitario no muy pesado, ahora pudo matricularse como precursor regular. Entre los muchos estudios bíblicos de casa que ha conducido, cuatro se celebraban por las noches con esposos interesados de hermanas en la congregación. Dos de estos esposos se bautizaron en la Asamblea Internacional “Victoria Divina.”
11 El servir mes tras mes, año tras año, en el servicio de precursor significa una vida ocupada. Pero este profundo envolvimiento en la actividad del Reino puede ser una maravillosa protección hoy día.—Efe. 5:15-17.
HACIENDO LUGAR PARA EL SERVICIO DE PRECURSOR
12. ¿Cómo pueden cooperar las familias para que un miembro o más sirvan de precursores?
12 El apóstol Pablo dio un ejemplo espléndido al proveer para sus compañeros, así como para sí mismo, a fin de que todos pudieran continuar adelantando los intereses espirituales a grado cabal. Pudo decir: “No he codiciado la plata, ni el oro, ni la vestidura de nadie. Ustedes mismos saben que estas manos han atendido a las necesidades mías y a las de los que andan conmigo.” (Hech. 20:33, 34) El mismo principio se puede aplicar a las familias cristianas. Se puede hacer un proyecto de familia el que uno o más miembros de la familia, o que hasta toda la familia, emprenda el servicio de precursor. Aun así, es aconsejable que cada uno que esté en el servicio de precursor use sus propias manos para hacer alguna contribución para su propio sostén. Todos los miembros de la familia, sea que realmente estén en el servicio de precursor o no, deben interesarse en adelantar la actividad de precursor y estar anuentes a hacer sacrificios con ese fin.—2 Cor. 8:13-15.
13. ¿Qué compensa los sacrificios que se hagan a fin de ingresar en las filas de los precursores? Ilustre.
13 A fin de emprender el servicio de precursor, quizás un esposo tenga que renunciar a un trabajo bien remunerado, o puede que la familia tenga que renunciar a algunos lujos materiales. Pero las bendiciones espirituales y el gozo de este servicio de tiempo cabal exceden por mucho el valor de lo otro.—Mar. 10:29, 30; Rom. 14:17.
Un doctor joven, que ahora es superintendente en la congregación cristiana, escribe: “Tenía que trabajar desde temprano por la mañana hasta tarde por la noche, incluso los domingos y días de fiesta, en el Hospital de la Universidad. Sin embargo, encontré trabajo de doctor de tiempo parcial en otra ciudad, que hizo posible que empezara en el servicio de precursor. Mi esposa había sido criada en una familia acaudalada, pero para llegar a ser precursora gozosamente abandonó su modo de vivir próspero. Siguió usando la ropa que tenía antes de emprender el servicio de precursor, y estaba satisfecha con comidas sencillas. Entendía bien que al servir a Jehová la mejor ropa y el arte culinario consumidor de tiempo no son necesarios. Su salud, anteriormente delicada, mejoró, y ha podido disfrutar de su servicio como precursora, llevando a cuatro personas a la dedicación, que han llegado a ser sus compañeras verdaderas. Yo mismo he podido ayudar al dueño de una peluquería hasta la dedicación, y cinco personas de esa peluquería han llegado a ser publicadores activos ahora, alternándose para salir al servicio del campo. Alaban a Jehová en un arreglo de familia. Apreciando estas maravillosas bendiciones de Jehová, oramos de todo corazón que nos mantenga en el servicio de precursor.”
14. (a) Cuando surgen problemas económicos, ¿cómo pueden resolverse? (b) Ilustre la veracidad de Filipenses 4:13.
14 ¿Cómo pueden enfrentarse los precursores a los problemas económicos que surgen a menudo? El factor principal es fe, buscando primero el Reino. (Mat. 6:33) Donde hay fe, hay una manera. Quizás un precursor tenga que negarse ciertas cosas, pero tales sacrificios son agradables a Dios.—Luc. 9:23-25; 18:29, 30.
Un ex-superintendente de circuito, que continúa en el servicio de precursor con su esposa mientras también atienden a su nene, informa: “La llegada de nuestro niño fue un desafío para nosotros que exigió que confiáramos en Jehová al emprender de todo corazón el desempeño de esta responsabilidad. En armonía con Lucas 14:28, 29, hicimos un presupuesto de cuáles serían los gastos para vivir los tres de nosotros. Conseguí un trabajo de hacer entregas de periódicos temprano por la mañana, ya que esto no consumía demasiada energía. Nuestro niño nació solo dos semanas antes de la Asamblea Internacional ‘Victoria Divina,’ pero aunque se había aconsejado descanso de tres semanas, hicimos preparativos cuidadosos para el viaje de 2.090 kilómetros de ida y vuelta. Así pudimos asistir, y el nene regresó a casa gordo y bien. Al predicar de puerta en puerta, nos alternamos de modo que cada uno pasa una hora y media con el nene. Debido a que el nene está con nosotros en el servicio todo el día, duerme profundamente por la noche, y no tenemos problemas como otros que tienen que levantarse durante la noche para atender a un nene que llora. Todos dormimos bien. Viendo nuestro ejemplo, otras amas de casa en la congregación han hecho arreglos ahora para emprender el servicio de precursor. Entre los dos de nosotros, estamos conduciendo ahora quince estudios bíblicos de casa, y en septiembre pudimos ayudar a dos amas de casa y a un esposo a empezar en el servicio del campo. Se espera que otros cinco de nuestros estudios que están asistiendo a las reuniones empiecen pronto en la actividad del campo. Hemos llegado a apreciar en nuestro corazón que el cristiano que se enfrenta a un desafío puede efectuar mucho en la fuerza de Jehová.—Fili. 4:13.
15. (a) ¿Qué seguridad da Jesús en el Sermón del Monte? (b) ¿Qué preparativos deben hacerse para el servicio de precursor?
15 Hay que tener fe firme e iniciativa al hacer ajustes para emprender el servicio de precursor y permanecer en él. Jehová puede proveer maravillosamente. ¿No demuestran las palabras de Jesús en Mateo 6:24-34 que esto es así? Todos los que desean ensanchar su servicio a Dios deben considerar cuidadosamente este pasaje y el texto relacionado de Lucas 12:22-31. Esto no significa que uno se lanza al trabajo de precursor sin hacer preparativos adecuados. Tampoco significa que uno aparta solo suficientes fondos para llegar a cierta fecha a mediados de los años setenta. Más bien, significa que uno ajusta sus asuntos para permanecer en el servicio de tiempo cabal, año tras año, mientras al mismo tiempo atiende apropiadamente a la familia y otras responsabilidades. Primero, ‘calcule los gastos,’ y luego dé pasos prácticos para alcanzar la meta del servicio de precursor.—Luc. 14:28; 17:5, 6.
16. (a) ¿Cómo pueden sustentar los precursores el celo y el gozo? (b) Ilustre cómo el ajustarse a los problemas puede traer la bendición del Gran Pastor.
16 Para tener buen éxito en el servicio de precursor, es importante que uno mantenga su espiritualidad. La asistencia con regularidad a las reuniones y la participación celosa en ellas, la lectura diaria de la Biblia y la consideración del texto del Anuario de los testigos de Jehová, un horario para estudio personal diligente... estas cosas pueden ayudar a un precursor a mantener su celo y gozo, y equiparlo para vencer problemas insólitos e inesperados. (Sal. 1:1-3) Después de diez años de servicio sumamente productivo como precursora, una hermana escribe:
Puesto que el trabajo de mi esposo en la TV requiere que se mude a una parte diferente del país cada dos años, he servido en nueve congregaciones, cinco de ellas desde que empecé a servir como precursora regular. Rápidamente abandono estudios que no progresan, y trato de fortalecer a los que realmente reconocen a Jehová. En cada lugar, nuestro maravilloso Dios ha mostrado su mano, ya que he ayudado a un promedio de cinco personas a aprender la verdad. La primera reunión a la que asistí en una ciudad fue en una pequeña habitación con otras cinco personas. Cuando salí de allí dos años después, sesenta y dos estaban asistiendo a esta reunión. En la siguiente ciudad pude ayudar a ocho personas a hacerse alabadores de Jehová, y vi a los asistentes a las reuniones aumentar de veinticinco a unos cien. En la siguiente ciudad, empezamos con solo dos precursores regulares, pero vi a otros diez publicadores llegar a ser precursores. Después de asistir a todas las sesiones de la Asamblea de Distrito “Libertad de los Hijos de Dios” que se celebró en 1966, di a luz la mañana siguiente a mi tercer hijo. Pero pude informar 1.294 horas de servicio ese año. En vez de ser regida por el nene, ajusté mi vida con el nene a un paso apropiado, y pude continuar en la obra como precursora. Las personas con quienes he estudiado, también, han ajustado su vida después del bautismo para emprender el servicio de precursor temporero, y luego el servicio de precursor regular. Ellas, como yo misma, han aprendido a nunca desatender la lectura diaria de la Biblia, el estudio y la oración, de modo que gozo y fuerza más que comunes continúan siendo renovados. En todas las situaciones, Jehová, nuestro Gran Pastor, está muy cerca.—Isa. 40:11, 31.
17. ¿Cómo pueden los ancianos ayudar a los precursores y a otros a ser diligentes en el servicio de Dios?
17 Los ancianos en la congregación tienen un gran privilegio al estimular al servicio de precursor. A menudo pueden dar sugerencias prácticas y ayuda, para que los precursores puedan permanecer en ese campo de actividad. También, pueden abogar con entusiasmo por el servicio de precursor ante otros.—Compare con Hebreos 6:11, 12.
¿ES PRÁCTICO EL SERVICIO DE PRECURSOR PARA USTED?
18, 19. (a) ¿Qué preguntas pueden ser apropiadas en este punto? (b) ¿Hay razón para que uno se desanime si no puede ser precursor?
18 Solo usted puede contestar esa pregunta. ¿Cómo ha considerado usted el servicio de precursor hasta ahora? ¿Como algo para otros? ¿Se ha retenido usted porque prefiere el trabajo seglar en vez de la predicación diaria de las buenas nuevas? O ¿han requerido realmente sus circunstancias lo que usted está haciendo? ¿Ha parecido adecuado el servicio “de muestra”? ¿Qué le impele a hacer su corazón ahora? Después de considerar todas las cosas, ¿puede usted decir SÍ a la pregunta: ¿Es el servicio de precursor práctico para usted? Si es así, grande de veras será su bendición.—Mal. 3:10.
19 Pero ¿qué hay del gran número de nuestros lectores que no pueden emprender el servicio de precursor regular? ¿Deberían desanimarse cuando ven que otros se dedican a este campo de actividad? ¡De ninguna manera! Todo el pueblo de Jehová sin excepción puede y deje participar de toda alma en el servicio de Jehová. A veces quizás puedan ajustar sus asuntos para pasar dos semanas, o un mes o más, en el servicio de precursor temporero, y esto también traerá una gran bendición. Otros pueden darse a predicar y enseñar de toda alma como publicadores de congregación.
20. (a) Aunque las oportunidades de servicio estén limitadas, ¿qué seguridad tenemos siempre? (b) Ilustre cómo Jehová bendice el esfuerzo de toda alma.
20 “Jehová conoce a los que le pertenecen,” y a todos éstos él bendice, prescindiendo de lo limitado que sea su servicio del campo verdadero. (2 Tim. 2:19; Pro. 10:22) Hasta puede bendecir a aquellos que, debido a enfermedad, vejez, persecuciones u otras razones, no pueden participar en el servicio del campo organizado con otros publicadores. Jehová conoce su corazón.—Compare con 1 Samuel 16:7.
Una muchacha de secundaria aprendió la verdad y empezó en el servicio de casa en casa. Pero su padre se opuso violentamente y le prohibió participar en cualquier actividad con los testigos de Jehová. ¿Qué podía hacer ella? Testificaba a sus condiscípulos en la escuela, e inició muchos estudios bíblicos en su propia clase y en otras clases. ¿El resultado feliz? Tres de aquellos con quienes estudió anteriormente ahora son muy activos en la verdad... una hermana como precursora especial, un hermano como precursor regular y siervo ministerial, y otro hermano como precursor regular y superintendente. Ahora, muchos años después, esta hermana fiel ha podido librarse de la oposición, y ella misma está participando en el servicio de precursor temporero.
Jehová bendice el servicio de toda alma.
21, 22. (a) ¿Cómo varía entre los individuos el servir “de toda alma”? (b) ¿Por qué debemos orar: “Danos más fe”?
21 Cuando Pablo animó a los creyentes: ‘Como esclavos de Cristo, hagan la voluntad de Dios de toda alma,’ no estaba pidiendo que los cristianos hicieran lo imposible. Su arma es USTED. Es según lo que usted es, sus habilidades y oportunidades, que usted puede dedicarse a hacer la voluntad de Dios. Los individuos difieren, y esto se reconoce en algunas de las parábolas de Jesús, donde se muestra que se encarga más al cuidado de unos que de otros, y que éstos, aunque aprobados, producen menos fruto.—Efe. 6:6; Mat. 13:23; 25:19-23; Luc. 19:15-19.
22 Que los resultados que obtenga sean de acuerdo con su oportunidad y fe. Al andar de toda alma ahora en el camino que lleva a la vida eterna, tenga usted la satisfacción y gozo de participar al grado más pleno en esta obra que jamás habrá de repetirse... todo para la alabanza de Jehová. Al considerar cómo usted puede hacer esto, tenga la misma actitud piadosa que tuvieron los apóstoles de nuestro Señor, cuando le dijeron: “Danos más fe.”—Luc. 17:5, 6.