¿Es usted realmente una persona espiritual?
“No pude hablarles a ustedes como hombres espirituales, sino como a carnales, como a pequeñuelos en Cristo.”—1 Cor. 3:1.
1, 2. ¿Por qué nos interesamos en estudiar cómo llegar a ser personas espirituales?
LA Santa Biblia habla muy favorablemente de los que se llaman personas “espirituales.” Por otra parte, no menciona con mérito a los que se describen como “carnales.” Es obvio, por lo tanto, que un individuo que teme a Dios quiere ser una persona espiritual, ¿verdad?—Rom. 8:5-8; Gál. 5:16-18.
2 Sin embargo, muchas personas que deberían ser espirituales a menudo son, en realidad, exactamente lo contrario. Por esta razón, el escritor bíblico del primer siglo Pablo, dirigiéndose a la congregación cristiana en Corinto, Grecia, dijo: “No pude hablarles a ustedes como a hombres espirituales, sino como a carnales, como a pequeñuelos en Cristo.” (1 Cor. 3:1) Por lo tanto, ¿no queremos realmente ser hombres y mujeres espirituales?
3. ¿Qué significa ser una persona “carnal”?
3 Para apreciar lo que significa ser una persona “espiritual,” es provechoso entender el término contrario, “carnal,” como lo usa el escritor Pablo. ¿Qué significa ser “carnal”? Significa ser dominado por la carne, es decir, tener un punto de vista terrenal, mundano. Ese modo de pensar es el de hombres imperfectos, caídos; esto es lo que ha saturado a todo este sistema. Los hombres carnales juzgan “según normas humanas.”—1 Cor. 9:8.
4. ¿Qué significa ser una persona “espiritual”?
4 Pero, sobre todo, ¿qué significa ser “hombres espirituales”? Significa pensar como Dios, cuyos pensamientos se elevan por encima de los del hombre. (Isa. 55:8, 9; Rom. 11:33) Obtienen esta habilidad para pensar los que escuchan a los voceros de Dios, en particular a Jesucristo, ‘el que ha explicado a Jehová.’ (Juan 1:18) En los apóstoles de Jesucristo tenemos un excelente ejemplo que demuestra cómo uno puede llegar a ser realmente espiritual. Brevemente reconstruyamos su desarrollo espiritual.
5, 6. (a) ¿Cómo llegaron a ser hombres espirituales los apóstoles? (b) ¿Qué les impartió a los apóstoles el entrenamiento de Jesús?
5 Para principiar, todos los que Dios dio a Jesús como apóstoles eran hombres humildes, trabajadores asiduos y devotos. Estas cualidades los hicieron receptivos a la enseñanza de Jesús. Después de ser seleccionados, algunos estuvieron en asistencia virtualmente constante con él durante un período de unos dos años. Vieron los milagros que hizo, oyeron sus discursos, se apoyaron en su fuerza, contemplaron su manera de tratar a los amigos y enemigos, y observaron su posición firme a favor de los principios correctos. Como Pedro habría de decir algunos años después: “Nosotros somos testigos de todas las cosas que hizo.” (Hech. 10:39; Mar. 3:14) Les enseñó, también, que deberían expresar voluntariamente su creencia a otros.
6 Este maravilloso entrenamiento fue lo que ayudó a los apóstoles a hacerse hombres espirituales. Les impartió “la mente de Cristo,” los sentimientos, temperamento y puntos de vista de Cristo, de modo que podían juzgar las cosas a la manera de él, la cual también es la manera de Jehová. Los hombres espirituales ven las cosas desde “el punto de vista de nuestro Dios.”—1 Cor. 2:16; 1 Ped. 4:6; Sant. 1:27.
USTED TAMBIÉN PUEDE SER UNA PERSONA ESPIRITUAL
7, 8. (a) Para ser una persona espiritual, ¿qué tenemos que desarrollar en nosotros mismos? (b) ¿Es solo la mente de uno lo que tiene que cambiar?
7 Para que uno sea una persona espiritual hoy día se requiere entrenamiento similar; uno tiene que desarrollar en sí mismo “la mente de Cristo.” Se obtiene ésta siendo ‘hechos nuevos en la fuerza que impulsa la mente de uno.’ (Efe. 4:23, 24) En la rutina diaria de la vida, la cosa “natural” para las personas que carecen de espiritualidad es ceder al modo de pensar carnal. La “fuerza” que impulsa su mente los insta en una dirección que se amolda a este viejo sistema de cosas. Sin embargo, la “fuerza” o inclinación dominante de la mente del cristiano tiene que ser rehecha para ser algo ‘nuevo,’ a fin de que uno piense en armonía con el modo de pensar de Dios, llegando a ser así una persona espiritual.
8 A medida que cambia el modo de pensar de uno, todo aspecto de la vida de uno también debe ser ‘hecho nuevo’; se tiene que desarrollar una “nueva personalidad.” Aunque uno haya sido testigo cristiano de Jehová por muchos años este desarrollo tiene que continuar y abarcar todo campo de la vida de uno. La manera en que un cristiano se comporta en el trabajo o en la escuela, su lenguaje y sus otros hábitos personales, todos deben revelar un modo de pensar espiritual, “la mente de Cristo.” Pero, ¿qué sucede cuando uno permite que el modo de pensar carnal afecte su vida?
9, 10. ¿Qué puede suceder, según se demostró en la congregación corintia, cuando individuos permiten que el modo de pensar carnal influya en ellos?
9 La Biblia suministra un ejemplo de esto que existía en la congregación de Corinto, Grecia, en el primer siglo. Estos corintios ya eran cristianos. (1 Cor. 1:2) Pero muchos permitieron que el mundo griego que los rodeaba influyera sobremanera en ellos. ¿Exactamente cómo llegaron a ser “carnales” aquellos hombres de la congregación?
10 Algunos de ellos que eran maestros orgullosos y apóstoles falsos introdujeron las normas del mundo en la congregación. Desorden, error y vileza ciertamente habrían de seguir, dando por resultado que muchos se hicieran como el mundo, carnales. Aquel antiguo mundo griego ciertamente no era como Cristo. Todo acerca de su cultura —su arte, ciencia, religión, juegos, filosofía— era terrenal, carnal, orientado hacia el hombre.
11, 12. Explique cómo el modo de pensar carnal afectó la vida de muchos miembros de la congregación corintia.
11 Por tratar tontamente de insinuar tales normas en la congregación, ¿cuáles fueron los resultados? Su punto de vista carnal se reflejaba por muchas cosas que hacían y creían. No podía ocultarse. Se dejaba ver en el modo en que consideraban a otros de la congregación, promoviendo a uno por encima de otro. Esto resultaba en divisiones, espíritu partidista y rivalidades subsecuentes. (1 Cor., caps. 1-4; compare con Santiago 3:13-18.) Se toleraba la fornicación. (1 Cor., cap. 5) Se llevaban los unos a los otros a los tribunales. (1 Cor. Cap. 6) Por dar importancia a sus propios derechos, se acercaron peligrosamente a hacer tropezar a otros en el asunto de la idolatría. (1 Cor. Caps. 8-10) Había falta de aprecio a la jefatura apropiada en la congregación así como falta de sobriedad respecto de la Cena del Señor. (1 Cor. Cap. 11) Pablo tuvo que decirles que aun los miembros que pudieran ‘parecer ser más débiles son necesarios’ para la congregación.—1 Cor. Cap. 12, vs. 22.
12 Aunque los escritores griegos seglares, de sabiduría mundana, carnales, daban importancia a las cualidades toscas, las llamadas “masculinas,” como el orgullo y el egotismo, Dios no lo hace. Los corintios necesitaban cultivar amor, amor piadoso. (1 Cor. Cap. 13) Aun el modo que tenían los corintios de ver la doctrina cristiana estaba fuertemente desfigurado por el pensar carnal. Algunos, lo mismo que los griegos de Atenas, encontraban difícil de aceptar la enseñanza de la resurrección. Estas ‘personas irrazonables’ necesitaban una mente espiritual. (1 Cor. 15:12-57; Hech. 17:32) ¿No ilustra esto que el tratar de mezclar el pensar mundano con las enseñanzas de Cristo produce resultados malos en todo sentido? Debemos reconocer esta verdad en nuestra propia vida personal. Pero, ¿cómo puede uno desarrollar “la mente de Cristo” y llegar a ser una persona realmente espiritual?
ESTUDIE PARA LLEGAR A SER HOMBRE ESPIRITUAL
13. ¿Por qué son esenciales el estudio y la meditación para que uno llegue a ser persona espiritual?
13 Es esencial un estudio con regularidad de la Palabra de Dios, y junto con estudio se requiere meditación. No piense equivocadamente en la meditación como un proceso pasivo. Se requiere esfuerzo positivo, deliberado. Debemos hacer que la lectura diaria de la Biblia misma sea parte de nuestra vida, puesto que por tal lectura aprendemos de la vida de Jesús y de otros hombres espirituales que tuvieron la aprobación de Dios. Pero hay que emplear tiempo considerando cómo aplica personalmente este material, cómo lo aparta a uno del mundo. De esta manera se introduce más del modo de pensar de Dios en nuestra mente, dejando que éste encamine o inste a nuestro propio proceso de pensar en la dirección apropiada. Después de leer una porción de la Escritura, uno puede preguntarse: “¿Cómo puedo usar esto para no volver a cometer los errores del pasado? ¿Cómo acrecienta mi aprecio de la bondad de Jehová y hace surgir dentro de mí un deseo de ser como él?”
14. Explique Proverbios 28:14.
14 De esta manera vemos cómo imitar a Dios y no al mundo carnal. A medida que perseveramos en el camino cristiano llegamos a apreciar el valor sobresaliente del modo de pensar de Dios, y el estudio de su Palabra llega a tener aun más significado para nosotros. Nos hacemos más vivamente conscientes de la necesidad de servirle cuidadosamente. Como dice Proverbios 28:14: “Feliz es el hombre que está sintiendo pavor constantemente, pero el que está endureciendo su corazón caerá en la calamidad.” Desarrollamos un temor de Dios que es saludable y así un miedo concienzudo de las cosas mundanas que Dios odia. Llegando a comprender nuestras propias incapacidades, confiamos más en Jehová. El estudio con reflexión nos mantiene alerta a problemas y cambios venideros de modo que cuando llegan no sorprenden. Esta clase de estudio inclina nuestra mente hacia lo que es espiritual y resulta en que seamos ‘felices.’
15. Si hemos de ser personas espirituales, ¿qué tendencia tenemos que evitar en el asunto de estudio?
15 Sin embargo, el estudio diligente tiene que concentrarse en lo que es genuinamente espiritual. Algunas personas que profesan ser cristianas se enorgullecen del aprendizaje humano y ávidamente acuden a él. Es posible que la mundanalidad se introduzca furtivamente en la enseñanza cristiana de éstos; lo hizo en Corinto. Jesús dijo a los que trataban de poner una interpretación humana a sus palabras: “El espíritu es lo que es dador de vida; la carne no sirve para nada.” No se puede confiar para vida en la suma total de la experiencia y sabiduría humanas, en sus escritos, filosofías y enseñanzas. ‘No sirven para nada’ como medio para adquirir vida eterna. (Juan 6:63) Por eso, ¿por qué emplear horas sondeando tales escritos, que, a lo más, no le suministran a uno puntos de vista piadosos, sino humanos, carnales y lo amoldan a uno como el mundo? El apóstol Pablo le dijo a Timoteo: “Toda Escritura es inspirada de Dios . . . Solemnemente te encargo . . . predica la palabra.”—2 Tim. 3:16-4:2; compare con 1 Corintios 2:1-5, 13.
LA ORACIÓN AYUDA A HACERLO HOMBRE ESPIRITUAL
16. ¿Por qué le es tan importante la oración al que quiere ser espiritual?
16 La oración también es una ayuda inestimable para traer nuestros pensamientos hacia los de Dios. A la persona humilde, cuando habla a Jehová en oración, se le recuerda lo alejada que está de la perfección de Dios y lo necesario que le es arrancar su modo de pensar del mundo y elevarlo a semejanza del de Jehová. Por lo tanto, “oren incesantemente,” es buen consejo. (1 Tes. 5:17) Es decir, además de orar con regularidad en ocasiones que habitualmente se apartan para ello en la congregación o en su familia, desarrolle una inclinación hacia la oración, una disposición a través de cada día y cada noche de buscar constantemente la dirección de Jehová. (Compare con Salmo 119:62.) ¿Sabe usted que aquello por lo que ora —o deja de orar— puede mostrar si usted tiene un estado de ánimo carnal? Que así sucede se puede ilustrar.
17. ¿Cómo y por qué pueden ser afectadas las oraciones de un esposo si desatiende o maltrata a su esposa?
17 El apóstol casado Pedro dice que un hombre ha de ‘asignar a su esposa honra como a un vaso más débil,’ tratándola de acuerdo con “conocimiento.” ¿Por qué? A fin de que sus oraciones no sean estorbadas. (1 Ped. 3:7) El cristiano que a sabiendas no muestra consideración a su esposa ni le suministra la guía necesaria, no puede, con una conciencia limpia, hablar libremente a Dios. Más bien, se siente condenado, desaprobado, sabiendo que no está obedeciendo el mandato de Dios. Titubea ante hablarle abiertamente a Dios, y en vista de su conducta no cristiana no puede esperar que Dios lo apruebe ni lo fortalezca en el derrotero egoísta tras el cual sigue. Esto podría ser espiritualmente desastroso. Podría significar el no recibir espíritu santo, que es vital para mantener fidelidad. Entonces, debido a su condición debilitada, podría cometer un mal serio, que requiriera acción de la congregación. Sí, su vida personal, al no ser guiada por el modo de pensar de Dios, sino por el modo de pensar del mundo, ha afectado su oración a Jehová y su posición en la congregación cristiana. El estar consciente de esta estrecha interacción entre su vida privada y su relación con Dios en la oración mueve al cristiano apreciativo hacia el modo de pensar y actuar piadosos a todo tiempo.—Luc. 11:9-13; compare con Santiago 1:5-8; 1 Juan 4:17.
EL PAPEL DE LA CONGREGACIÓN EN HACERLO A USTED PERSONA ESPIRITUAL
18, 19. (a) ¿Cómo pueden los ancianos de la congregación ayudarnos a desarrollar “la mente de Cristo”? (b) ¿Qué ventaja tiene el hombre espiritual sobre el carnal?
18 Para ser una persona espiritual, y, por consiguiente, para estar en contraste con el mundo, uno también necesita asociación regular con la congregación moderna de los testigos de Jehová. Los ancianos espirituales, nombrados por la organización teocrática de Dios, pueden ayudarle a uno personalmente. (Efe. 4:11-16) Si hay algún síntoma en su vida que indique un modo de pensar incorrecto, con el tiempo “saldrá a la superficie,” porque todo mal tiene un modo de manifestarse con el tiempo a los observadores. (Gál. 6:7; 1 Tim. 5:24, 25) Los ancianos en las congregaciones de los testigos de Jehová son hombres con discernimiento y, con “la mente de Cristo,” a menudo ven señales tempranas que les advierten del modo de pensar carnal en otros. Se les encarga que estén “mirando cuidadosamente” para que nadie que “no aprecie cosas sagradas [“con inclinación a lo mundano,” New English Bible]” afecte adversamente a la congregación. (Heb. 12:15-17) Por una razón u otra —asociaciones incorrectas, trabajo seglar o antecedentes— quizás usted mismo no vea claramente las cosas; quizás su modo de pensar sea algo carnal.
19 El apóstol Pablo dijo: “El hombre físico no recibe las cosas del espíritu de Dios, porque para él son necedad; y no las puede llegar a conocer, porque se examinan espiritualmente. Sin embargo, el hombre espiritual examina de hecho todas las cosas, mas él mismo no es examinado por ningún hombre.” (1 Cor. 2:14, 15) La persona que insiste en considerar las cosas desde una perspectiva carnal no puede ver lo malo de su posición ante Dios. Pero el hombre espiritual, armonizado al modo de pensar de Cristo, no solo entiende el propósito revelado de Dios por medio de Su espíritu, sino que también ve el proceder erróneo del hombre carnal. Por eso, entonces, nos será útil aceptar la ayuda de los ancianos en la congregación cristiana para evitar tendencias carnales.
20. ¿Son los ancianos los únicos que nos ayudan a llegar a ser espirituales? Explique.
20 Pero hay muchas maneras en que recibimos ayuda de todos los testigos de Jehová, no solo de los ancianos, para llegar a ser hombres y mujeres espirituales. Al mezclarnos con ellos, vemos que las buenas cualidades acerca de las que leemos en la Biblia, y que apartan a los cristianos del mundo, forman parte de la personalidad del pueblo de Dios hoy día. Además, muchos en la congregación tienen sus propias características o habilidades sobresalientes. Uno es hospitalario, otro es conocedor, y todavía otro es muy comprensivo. Por otra parte, hay aquellos que al principio parecen ser bastante “sencillos.” Pero al llegar a conocerlos, y enterarnos de la lucha que han tenido para mantener su fe, ¿no nos sentimos atraídos estrechamente a ellos? Quizás hasta descubramos que estas personas “sencillas” ya han vencido los mismísimos problemas que nosotros todavía confrontamos. Esta asociación estrecha de seguro cultivará en nosotros cualidades como calor de amistad, apacibilidad y humildad. Estas buenas cualidades se desarrollan más a medida que uno participa con la congregación en enseñar todavía a otras personas “estas buenas nuevas del reino” en el ministerio del campo.—Mat. 24:14.
21. (a) ¿Qué peligro, que indica un estado de ánimo carnal, hay que evitar? (b) Enumere las cualidades de la personalidad cristiana verdadera.
21 Por supuesto, a medida que uno trabaja para desarrollar una nueva personalidad tiene que estar seguro de que las características que adquiere verdaderamente son espirituales. Por ejemplo, la persona que piensa que es “espiritual” porque lleva una expresión piadosa en su cara, o hace sacrificios extremados para parecer “justo” delante de otros, realmente es farisaica. (Mat. 6:5-8) Pablo muestra en Colosenses 2:16-23 que los que se deleitan en “una forma autoimpuesta de adoración y humildad ficticia, [o] un tratamiento severo del cuerpo,” realmente tienen una “disposición de ánimo carnal.” Lo que motiva su modo de pensar no es verdadera humildad de corazón, sino un deseo orgulloso de prominencia. Después de decir eso el apóstol Pablo detalla la verdadera personalidad cristiana, en Colosenses 3:5-15:
“Amortigüen, por lo tanto, los miembros de su cuerpo que están sobre la tierra en lo que toca a fornicación, inmundicia, apetito sexual, deseo perjudicial y codicia, que es idolatría. Por causa de esas cosas la ira de Dios viene. En esas mismísimas cosas ustedes, también, anduvieron en un tiempo cuando vivían en ellas. Mas ahora realmente deséchenlas todas de ustedes, ira, cólera, maldad, habla injuriosa y habla obscena de su boca. No estén mintiéndose los unos a los otros. Desnúdense de la vieja personalidad con sus prácticas, y vístanse de la nueva personalidad, que va haciéndose nueva en conocimiento exacto según la imagen de Aquel que la creó . . . De consiguiente, como escogidos de Dios, santos y amados, vístanse de los tiernos cariños de compasión, bondad, humildad de mente, apacibilidad y gran paciencia. Continúen soportándose los unos a los otros y perdonándose sin reserva los unos a los otros si alguno tiene causa de queja contra otro. Como Jehová los perdonó sin reserva a ustedes, así también háganlo ustedes. Pero, además de todas estas cosas, vístanse de amor, porque es un vínculo perfecto de unión. También, que la paz del Cristo gobierne en sus corazones, porque, de hecho, ustedes fueron llamados a ella en un solo cuerpo. Y muéstrense agradecidos.”
22, 23. ¿Cómo muestra la vida de Pedro que el ser un hombre espiritual no requiere que uno sea perfecto?
22 El ser una persona realmente espiritual requiere esfuerzo. No se dé por vencido al trabajar en desarrollar “la mente de Cristo.” Recuerde que el simple hecho de que una persona sea hombre espiritual no significa que en todo respecto se encuentra sin error y que todos sus problemas e inclinaciones carnales se evaporan. Unos cuantos acontecimientos en la vida de Pedro muestran esto. En una ocasión Pedro contestó correctamente la pregunta de Jesús: “¿Quién dicen que soy?” Su punto de vista espiritual recibió encomio, pues Jesús dijo: “Carne y sangre no te lo reveló, sino mi Padre que está en los cielos.” No obstante, note que después de eso cuando Pedro trató de mostrarle a Jesús una bondad equivocada, se le dijo: “Tú no piensas los pensamientos de Dios, sino los de los hombres.” ¡Todavía había modo de pensar carnal que abordar!—Mat. 16:15-23.
23 Menos de un año después, para su pesar, Pedro, sucumbiendo al temor del hombre, negó tres veces a Jesús. Se arrepintió. Pero ¿simplemente desapareció esta tendencia a titubear bajo presión de la muchedumbre? No. Años después Pedro tuvo que ser corregido de nuevo, esta vez por Pablo, por la misma debilidad. (Luc. 22:34, 54-62; Gál. 2:11-14) Parece que Pedro, un apóstol, un hombre espiritual, tuvo que trabajar toda su vida tratando de corregir esa debilidad. Pablo, también, nos dice que tuvo que disciplinarse para mantener apropiadas sus acciones. (1 Cor. 9:24-27) De modo que, hoy, un hombre espiritual puede tener sus puntos débiles, pero al estudiar solícitamente la Palabra de Dios y aplicarla en su vida y confiar en el espíritu reforzador de Dios puede recibir ayuda para vencerlos.
24. ¿Qué otro asunto en cuanto a ser persona espiritual queda todavía para que lo consideremos?
24 Pero todavía hay un asunto principal que considerar en lo que toca a demostrar uno que realmente es persona espiritual. ¿Cuál es ése? La buena disposición para aceptar toda la oposición que el mundo carnal dirija contra los seguidores de los pasos de Cristo Jesús. Pues, el mundo le tiene aversión a los que manifiestan “la mente de Cristo.” Pero usted puede, si desea, aguantar su odio con gran gozo y satisfacción. Aprenda cómo en el siguiente artículo.