¿Por qué los cambios en los gobiernos mundiales desde 1914?

 1. (a) ¿Qué les ha pasado a los gobiernos desde 1914? (b) ¿Qué han dicho observadores de la historia acerca del 1914?

HOY en día es un tiempo cuando las instituciones más firmemente establecidas están cayendo y están cambiando sus principios y estructuras radicalmente para evitar la caída completa. Note la decadencia del sistema colonial de gobierno y el desasosiego e inestabilidad creados por las mareas ascendentes del socialismo y el comunismo. Los perspicaces observadores de la historia y las condiciones mundiales notan que el punto decisivo en los asuntos de los hombres, especialmente en cuanto a gobierno, fue marcado por el año 1914. Expresionesa como “el punto decisivo de nuestro tiempo,” “una línea divisoria en la historia,” “de la ‘edad de oro’ a una época volcánica,” “El último año completamente ‘normal’ en la historia fue 1913,” “Desde 1914 el mundo ha estado tambaleando ebriamente hacia el desastre,” todas son citas de tales hombres en cuanto al año 1914.

 2. ¿Hay alguna manera de averiguar por qué están efectuándose estos cambios radicales? ¿Se podrá obtener algún consuelo al hallar la respuesta?

² Habría poco consuelo en estas palabras si no fuera por el hecho de que Jehová, el Dios de todo consuelo, nos ha dado una respuesta completa a las preguntas que surgen en cuanto a la causa de estos cambios, sea que haya un propósito tras ellos o no, y el resultado. No es por simple historia que él conservó el registro del reino de Judá con su lastimero fin. Es para que podamos obtener una respuesta correcta a estas mismísimas preguntas y tener una guía segura, confiable, en un tiempo cuando ninguna otra cosa es segura.

 3. (a) ¿De qué manera era el trono de David “el trono de Jehová”? (b) ¿Había de ser el trono de David en Jerusalén el asiento del gobierno mundial permanente?

³ Dios estaba tratando con Judá para representar cosas que tendrían lugar en una escala mucho más grandiosa. Estableció el trono de David en Jerusalén y éste se llamó “el trono de Jehová.” Pero solo era típico, porque ningún trono terrestre verdaderamente podría ser el del Gobernante soberano del universo, Dios mismo. Esto indicó que habría Uno mucho mayor que David que ocuparía permanentemente el trono de la dominación mundial. Esto se corrobora por David mismo, al hablar proféticamente del Reino que vendría.—Sal. 110:1, 2; Luc. 20:41-44; Hech. 2:32-36.

 4. (a) Si el trono de la línea de David en Jerusalén fue establecido por Jehová, ¿por qué lo derribaron? (b) ¿Qué efecto tuvo el derrocamiento de Jerusalén en los enemigos de Dios y en sus amigos? (c) ¿Cómo expresaron los judíos cautivos de Babilonia el sentir de los que deseaban el gobierno de Dios?

⁴ Jehová Dios tenía la soberanía mundial o la dominación mundial en sus manos. Mientras fueran fieles los reyes de Judá, ningún gobierno del mundo podía derrocarlos, pero llegó el tiempo cuando Jehová decretó el derrocamiento de Judá a causa de que ésta se hizo inicua como las naciones paganas y ya no reflejaba las cualidades justas de Su soberanía. Esto, por supuesto, acarreó oprobio al nombre de Dios y dio a las naciones una razón aparente para difamarlo. (Eze. 36:20) Los que realmente deseaban vivir bajo el justo gobierno soberano de Dios estuvieron quebrantados de corazón en virtud del cautiverio que Dios permitió que Babilonia ejerciera sobre Judá y el vituperio consecuente. Esta condición lastimera fue resumida sensiblemente por su salmista:

“Junto a los ríos de Babilonia—allí nos sentamos. También lloramos cuando nos acordamos de Sion. En los álamos en medio de ella colgamos nuestras arpas. Porque allí los que nos retenían cautivos nos pidieron la letra de una canción, y los que se mofaban de nosotros—para regocijarse: ‘Canten para nosotros una de las canciones de Sion.’ ¿Cómo podemos cantar la canción de Jehová sobre suelo extranjero? Si te olvidara, oh Jerusalén, sea olvidadiza mi diestra. Péguese mi lengua a mi paladar, si no fuera a recordarte, si no fuera a hacer que Jerusalén ascienda por encima de mi causa principal de regocijo. . . . Oh hija de Babilonia, que habrás de ser saqueada, feliz será el que te recompense con tu propio trato con que nos trataste. Feliz será el que arrebate y ciertamente haga añicos a tus hijos contra el risco.”—Sal. 137:1-9.

LA MARCHA DE POTENCIAS MUNDIALES

 5. (a) ¿Por qué podía el salmista ya citado decir que Babilonia había de ser saqueada? (b) ¿Cómo representó Dios la marcha de las potencias mundiales? (c) ¿Caería la Babilonia antigua a manos del reino de Dios? (d) ¿Cuál resultaría ser la única potencia mundial duradera, y cómo se le representó en Daniel 2:44, 45?

⁵ Estos judíos sabían por las profecías de Isaías y Jeremías que Babilonia sería derrocada. (Isa. 47:1-3; Jer. 51:1-4) Las profecías de Daniel darían detalles adicionales. Daniel fue uno de los cautivos judíos jóvenes llevados al destierro con el rey Joaquim en 617 a. de la E.C. A Daniel y tres de sus compañeros, después de tres años de entrenamiento especial, se les halló eminentemente capacitados para servir como consejeros cuando fueron llevados ante el rey Nabucodonosor. (Dan. 1:1-21) Esto fue en el año duodécimo de la gobernación de rey de Nabucodonosor, o en 614 a. de la E.C. En el segundo año después de la destrucción de Jerusalén por Nabucodonosor en 607 a. de la E.C., lo cual sería el vigésimo año de su gobernación de rey sobre Babilonia pero el segundo año de ejercer dominación mundial, tuvo un sueño que fue una profecía de Dios. (Dan. 2:1) En el sueño vio a una enorme imagen con una cabeza de oro, el pecho y los brazos de plata, el vientre y los muslos de cobre y las piernas de hierro, con los pies de hierro y barro. Daniel, interpretando el sueño, explicó que esta cabeza de oro representaba a Nabucodonosor (lo cual incluiría a su dinastía) en la posición de dominación mundial, pero también dijo: “Después de ti se levantará otro reino inferior a ti.” (Dan. 2:37-39) Era claro que caería Babilonia, pero no por el reino de Dios, el cual se predijo que golpearía a la imagen en sus pies y haría pedazos a la imagen. La caída de Babilonia vendría a manos de una potencia mundial representada por el pecho y los brazos de la imagen, para suceder a Babilonia como potencia mundial. Todas estas potencias mundiales, que serían cuatro después de Babilonia, no serían permanentes, sino que serían seguidas por una que sería permanente, el reino establecido por el Dios del cielo.b Daniel dijo:

“Y en los días de aquellos reyes el Dios del cielo establecerá un reino que nunca será reducido a ruinas. Y el reino mismo no será pasado a ningún otro pueblo. Aplastará y pondrá fin a todos estos reinos, y él mismo subsistirá hasta tiempos indefinidos; por cuanto contemplaste que de la montaña fue cortada una piedra no por manos, y que ésta aplastó al hierro, el cobre, el barro moldeado, la plata y el oro. El mismo magnífico Dios ha dado a conocer al rey lo que habrá de suceder después de esto. Y el sueño es confiable, y la interpretación de él es digna de confianza.”—Dan. 2:44, 45.

 6. ¿Qué segundo sueño significativo tuvo Nabucodonosor, y cuál se declaró que era la intención o propósito del sueño?

⁶ ¿Hay alguna información que nos haya dado el Dios soberano que gobierna estos tiempos y acontecimientos de modo que podamos saber el tiempo señalado para que acontezca todo este cambio que sacude al mundo? Sí, gracias al Dios de consuelo, ciertamente tenemos una revelación clara y definida que produce el mayor consuelo a los estudiantes de la Biblia. El mismo profeta Daniel registra otro sueño de Nabucodonosor en que vio un árbol inmenso que a un ángel del cielo se le mandó que derribara. Entonces su tocón fue asegurado con flejes de hierro y cobre y tuvo que permanecer así entre la hierba del campo hasta que pasaran sobre él “siete tiempos.” “Cámbiese su corazón del de la humanidad, y désele el corazón de una bestia, y pasen sobre él siete tiempos.” ¿Con qué propósito? “Con el propósito de que la gente que vive conozca que el Altísimo es Gobernante en el reino de la humanidad y que al que quiere, lo da.”—Dan. 4:1-18.

JEHOVÁ CONTROLA LA SOBERANÍA MUNDIAL

 7. (a) ¿A quién simbolizó el árbol? (b) ¿Cómo sabemos que el árbol como representado en el rey de Babilonia simbolizaba la soberanía o dominación mundial? (c) ¿Cómo se habría de cumplir en Nabucodonosor el sueño?

⁷ ¿A quién simbolizó el árbol? ¡A Nabucodonosor! Como dijo Daniel: “Es a ti, oh rey, porque tú te has hecho grande y has llegado a ser fuerte, y tu magnificencia se ha hecho grande y ha llegado hasta los cielos, y tu gobernación hasta la extremidad de la tierra.” Al tiempo del sueño, Nabucodonosor tenía dominación mundial y había servido como instrumento o “copa” de juicio de Jehová. Por consiguiente el árbol que representó a este rey de la Tercera Potencia Mundial simbolizó la soberanía o dominación mundial. En apoyo de esta explicación, Daniel 4:26 dice: “A causa de que dijeron que se dejara el rizoma del árbol, tu reino estará seguro para ti.” Él había de ser quitado de su trono y llevado al campo para comer hierba como los toros. Pero, como el tocón de aquel árbol, su reino le había de ser retenido hasta que él hubiera pasado “siete tiempos” en el campo herbáceo como un toro. Entonces recobraría el sentido de nuevo y se vería obligado a confesar que el Dios Altísimo gobierna como el supremo y que da el reino de la humanidad a quien quiere dárselo.

 8. (a) Un año después, ¿cómo hizo la actitud del rey hacia Babilonia que comenzara el cumplimiento del sueño? (b) ¿Cómo afectó al rey ahora una locura como la que caracteriza a la licantropía, y por cuánto tiempo? (c) Cuando se le restauró el entendimiento, ¿qué dijo él acerca del Dios Altísimo?

⁸ Realmente esta predicción le sobrevino al rey Nabucodonosor un año después. En un tiempo cuando Nabucodonosor estaba haciendo alarde de sus logros en Babilonia una voz desde el cielo anunció que ahora se cumpliría en él el sueño del árbol. Se apoderó de él una locura tal como la que caracteriza a la enfermedad de licantropía. En vez de querer sentarse en su trono, salió al campo a comer hierba. Su trono no fue tomado por un usurpador, sino que fue retenido para él por el poder de Dios hasta su retorno después de “siete tiempos” o siete años literales. Cuando fue restaurado a su trono, reconoció a Dios como el Soberano Universal y dijo: “Su gobernación es una gobernación hasta tiempo indefinido y su reino es por generación tras generación. Y a todos los habitantes de la tierra se les está considerando como meramente nada, y él está haciendo según su propia voluntad entre el ejército de los cielos y los habitantes de la tierra. Y no existe nadie que pueda detenerle la mano ni que pueda decirle: ‘¿Qué has estado haciendo?’” Además declaró: “Él puede humillar a los que andan en orgullo.”—Dan. 4:19-37.

 9. (a) ¿Fue el retorno de Nabucodonosor al puesto de rey el establecimiento del reino de Dios? Explique. (b) ¿Qué obras de edificación logró? ¿Incluyó esto apoyo a la religión de Babilonia?

⁹ Este retorno a la gobernación de rey no fue el establecimiento del reino de Dios, porque Nabucodonosor jamás había sido adorador del Dios verdadero, sino que adoraba a los dioses ídolos babilónicos, como se mostró por su esfuerzo de obligar a los tres compañeros fieles de Daniel, a Sadrac, Mesac y Abednego, a adorar un gran ídolo de oro que erigió en la llanura de Dura. Por sostener la soberanía de Jehová y rehusar inclinarse ante el ídolo, los arrojó a un horno sobrecalentado, pero luego supo que Jehová era superior, porque Él protegió a estos tres intransigentes adoradores del Dios verdadero. (Daniel, capítulo 3) Nabucodonosor nunca edificó un templo a Jehová Dios aun después de su restauración de los siete años de locura, pero sí edificó cincuenta y cuatro templos en Babilonia a todos los dioses falsos, los cuales dioses simplemente simbolizaban los atributos de Bel y de su hijo Marduk o Merodac. También edificó grandes obras públicas. Hizo a Babilonia la ciudad maravilla del mundo antiguo y, para satisfacer los nostálgicos deseos vehementes de su reina meda, edificó los famosos Jardines Colgantes de Babilonia que fueron clasificados como una de las siete maravillas del mundo antiguo.

EL REINO NUNCA FUE RESTAURADO A JUDÁ

10. (a) ¿Cómo había ejercido Jehová su soberanía de manera representativa antes del 607 a. de la E.C.? (b) ¿Qué transferencia de dominación mundial ocurrió en el 607 a. de la E. C. ? (c) Cuando Jerusalén fue restaurada en 537 a. de la E.C., ¿ejerció Dios su soberanía de nuevo por medio de Judá? Explique. (d) ¿Cómo mostraron los levitas recogidos de nuevo, 152 años después de la destrucción de Jerusalén, que la soberanía todavía estaba en manos de gobiernos gentiles?

¹⁰ Desde que el pacto del reino se había hecho con David y su línea de descendencia, uno que gobernaba por derecho de Jehová se sentaba en el trono en Jerusalén, y por lo tanto las potencias mundiales gentiles tenían al reino de Judá como obstáculo en su camino hacia la completa dominación mundial. Pero cuando Judá fue derribada y fue al destierro en 607 a. de la E.C., entonces la dominación mundial simbolizada típicamente en el reino de Judá pasó a las manos de gobernantes gentiles, comenzando con Nabucodonosor. Sin embargo, en el caso de Judá el reino no fue restaurado al fin de siete años, tampoco fue restaurado al tiempo de su liberación y retorno de Babilonia años después, en 537 a. de la E.C., porque aun esto se hizo bajo la autoridad de otra potencia gentil, Persia, sucesora de Babilonia como potencia mundial y representada en la imagen del sueño de Nabucodonosor, en Daniel, capítulo 2, por el pecho y los brazos de la imagen, viniendo después de la cabeza de oro. Los judíos mismos reconocieron esto más tarde, 152 años después que los babilonios habían destruido a Jerusalén, es decir, en 455 a. de la E.C. Los levitas dijeron, en oración pública a Jehová Dios ante la gente congregada en el templo reedificado:

“Finalmente los entregaste en la mano de los pueblos de las tierras. Y en tu abundante misericordia no hiciste una exterminación de ellos ni los dejaste; porque eres un Dios benévolo y misericordioso. . . . ¡Mira! Hoy somos esclavos; y en cuanto a la tierra que diste a nuestros antepasados para comer su fruto y sus cosas buenas, ¡mira! somos esclavos en ella, y su producto está abundando para los reyes que has puesto sobre nosotros a causa de nuestros pecados, y sobre nuestros cuerpos están gobernando y sobre nuestros animales domésticos, según su gusto, y nos hallamos en gran angustia.”—Neh. 9: 4, 5, 30-37.

11. (a) ¿Cómo mostró Jesús que los “tiempos señalados de las naciones” todavía corrían en su día? (b) ¿Cómo podía decirse que Jerusalén estaba siendo “pisoteada” cuando en aquel tiempo estaba en pie?

¹¹ El largo período de dominación mundial gentil se llama los “tiempos señalados de las naciones” en las Escrituras. Jesús dijo, más de quinientos años después de la liberación de los judíos de Babilonia y la restauración a Jerusalén: “Jerusalén será pisoteada por las naciones, hasta que se cumplan los tiempos señalados de las naciones.” (Luc. 21:24) Aunque en ese tiempo Jerusalén todavía estaba en pie, no obstante la gobernación de rey en las manos de un rey de la familia de David no fue restaurada. Los judíos estaban bajo la mano opresiva de la Sexta Potencia Mundial, el Imperio Romano, y más tarde su nación había de ser destruida, en 70 E.C., por esta potencia mundial. De modo que ciertamente el derecho del reino, representado por Jerusalén, estaba siendo pisoteado y la nación estaba en manos de los gobernantes gentiles.

12. (a) ¿Por qué sabemos que hay un cumplimiento mayor de los “siete tiempos”? (b) ¿Qué pasaría al fin de los “siete tiempos”?

¹² Nabucodonosor, un pagano, y nunca un adorador de Jehová Dios, no era en sí mismo importante, y aunque se le restauró su reino después de siete años de locura, no fue para su provecho el que se desempeñara este drama. También, Judá solo era un reino típico y su gobernación de rey nunca fue restaurada. Por eso, entonces, hay un gran cumplimiento mayor. Esto significaría que los “siete tiempos” tendrían un significado más grande, extendido, al fin de los cuales “tiempos” sería establecido el reino de Dios en manos de Shiloh. ¿Cuál es la duración de un “tiempo simbólico” y de los “siete tiempos”?

DURACIÓN DE LOS TIEMPOS SEÑALADOS DE LAS NACIONES

13. (a) ¿Cuánto dura un “tiempo” simbólico o profético de la Biblia? (b) ¿Cómo se corrobora esto en el libro de Revelación?

¹³ El año de los calendarios judío y babilónico variaba en duración de tan pocos como 354 días hasta tantos como 385 días. Pero en el “tiempo” o año simbólico o profético de la Biblia, el número de días se determina en 360. Siete de tales años serían 7 X 360 = 2,520 días. Esto se corrobora por la declaración de Revelación 12:6, 14, donde se habla de “un tiempo y tiempos y la mitad de un tiempo” o tres tiempos y medio, como 1,260 días. Si dividimos 1,260 por tres y medio (3.5), el resultado es trescientos sesenta (360) días para un “tiempo” o año.

14. ¿Qué regla aplicamos para hallar la duración de los “siete tiempos” en cumplimiento, y dónde hallamos apoyo para esto?

¹⁴ En cuanto a la mayor duración de tiempo que representan estos 2,520 días, encontramos la regla de “un día por un año” en una profecía de Ezequiel, quien profetizó contemporáneamente con Daniel y quien también conectó el asunto de “flejes” con su profecía. En otra profecía por Daniel con respecto a la primera venida del Mesías, a saber, la profecía de las “setenta semanas,” se entiende por los doctos bíblicos que aplica la misma regla.—Eze. 4:6; Dan. 9:24, 25. Vea también Números 14:34, que trata de un período de castigo o disfavor.

15. (a) ¿Cuánto duran los “siete tiempos” en la realidad? (b) ¿Cómo sabemos que los años del cumplimiento no son años de 360 días, sino que se han de contar como años solares?

¹⁵ Por lo tanto, los 2,520 días de los “siete tiempos” serían 2,520 años en el cumplimiento. Estos años, en su cumplimiento, no serían de simplemente 360 días cada uno, sino años civiles completos como los contamos. Porque tenemos que recordar que la variación del calendario judío era con el fin de ajustar el año lunar para que armonizara con el año solar. Pudiera llamarse un año “solilunar” o “lunar limitado.” Días, o meses, se insertaban a intervalos para compensar por la diferencia de aproximadamente once días entre el año lunar y el año solar. De este modo las estaciones siempre caían en su lugar apropiado en el calendario.c De manera que su calendario estaría casi exactamente en armonía con el calendario gregoriano que se usa corrientemente. Por lo tanto los 2,520 años deben contarse como años solares.

16. (a) ¿Desde qué acontecimiento empezaron a contar los 2,520 años (b) ¿Por qué se puede decir que los Tiempos de los Gentiles o los “tiempos señalados de las naciones” empezaron entonces?

¹⁶ Estos 2,520 años comenzaron a contarse en 607 a. de la E.C., cuando Dios soltó la dominación mundial representada por su reino típico sobre la Tierra. Eso fue cuando Jehová usó a Nabucodonosor para destruir a Jerusalén y su templo, para ahuyentar al rey Sedequías del “trono de Jehová” y para llevárselo al destierro, después de lo cual el temor a los caldeos hizo que la gente humilde que quedó atrás huyera a Egipto, dejando desolado el territorio de Judá, sin ningún gobernador allí, no dejando posibilidad alguna de intervención de parte de Judá. Así Nabucodonosor “derribó” al “árbol” que representaba dominación mundial, que ahora fue transferida a Babilonia. Así se efectuó desolación en el séptimo mes lunar del año 607 a. de la E.C. Fue por primera vez entonces que Jerusalén, como representativa del reino de Dios, comenzó a ser pisoteada, y así comenzaron los Tiempos de los Gentiles, “los tiempos señalados de las naciones.” Ahora la dominación gentil, sin intervención de parte del reino de Dios, gobernó sobre la Tierra. Además, las potencias mundiales gentiles obraron bestialmente, como Nabucodonosor durante sus “siete tiempos” de locura.

17. (a) ¿Cuándo terminarían los “siete tiempos”? (b) ¿Qué marcó a esta fecha?

¹⁷ Contando desde el séptimo mes lunar (tishri) de 607 a. de la E.C., los 2,520 años terminarían a mediados del mes tishri (o cerca del 1 de octubre) de 1914 E.C. Ese es un año inolvidable, porque en 1914 estalló la I Guerra Mundial y el sistema de cosas gentil nunca ha sido el mismo desde entonces.

18. (a) ¿Qué se representó por el hecho de que el tocón del árbol se dejara en la tierra? (b) ¿Qué representaron los flejes de cobre y hierro alrededor del tocón? (c) ¿Qué representó el que se quitaran los flejes?

¹⁸ En el sueño del árbol, el tocón había sido dejado en la tierra, mostrando que Jehová no había abandonado su pacto del reino con la familia de David y no había soltado para siempre su dominación universal. Fuertes flejes de cobre y hierro se colocaron alrededor del tocón, representando la fuerza restrictiva de Jehová, su autorrestricción en no tomar posesión de la dominación universal y poner a su rey en el trono durante los “siete tiempos” en los que permitiría gobernar a las naciones gentiles. En 1914 llegó el tiempo para que fueran quitados estos flejes y el tiempo para que el simbólico tocón de árbol retoñara por medio de ejercer Jehová su soberanía al emprender la dominación universal y establecer su reino teocrático.—Rev. 11:15-18; Luc. 21:24.

ENTRONIZACIÓN DE SHILOH SACUDE A LAS NACIONES

19. (a) Cuando Nabucodonosor regresó a su trono después de su locura, ¿constituyó esto el que Jehová tomara la dominación universal de nuevo? (b) ¿Cuál fue la diferencia en 1914? (c) ¿Quién es Shiloh y cómo ha reconocido él la soberanía de Jehová? (d) ¿Han reconocido esto las potencias gentiles?

¹⁹ Al tiempo del retorno de Nabucodonosor a su trono Dios no emprendió la dominación universal otra vez, sino solo obtuvo una confesión de Nabucodonosor tocante a que Jehová es el Altísimo y que ejerce el derecho en el reino de la humanidad. Pero en 1914 el gobierno establecido no fue cosa temporal, representativa o típica, sino que fue el verdadero Reino en manos de Shiloh, a quien le pertenece. Él es descendiente real de David que tiene el derecho legal a la gobernación de rey, según el pacto de Jehová con el rey David para un reino eterno. Desde 1914, Shiloh, como Nabucodonosor, ha reconocido públicamente que Jehová es el “Rey de los cielos.” Sin embargo, sobre la Tierra han continuado las potencias gentiles en su derrotero bestial, a un paso más destructor que nunca.—Gén. 49:10; Eze. 21:27.

20. (a) Cuando Cristo ascendió al cielo, ¿por qué no tomó entonces su reino de dominación mundial? (b) ¿Cuál ha sido el resultado de que él haya empezado a gobernar en medio de sus enemigos, y qué deben hacer ahora todas las personas? (c) ¿Qué logrará la venida de la ‘piedra cortada de la montaña, no por manos’? (d) ¿Qué, entonces, es el significado de las malas condiciones mundiales de la actualidad?

²⁰ Jehová había invitado a este Shiloh, Jesucristo, cuando fue resucitado hace 1,900 años, a sentarse a su diestra en el cielo hasta su tiempo para hacer a todos los enemigos de Shiloh un banquillo para sus pies. Habiendo sido entronizado en 1914, emprendiendo la dominación mundial, ahora él gobierna en medio de sus enemigos. (Sal. 110:1, 2) Los enemigos, empeñados en mantener su propia gobernación política y tratando de asirse ilegalmente de la dominación mundial, no desistirán sin pelear. Pero reciben una terrible sacudida. Cristo está haciendo que por todo el mundo se declare el mensaje de que Jehová Dios otra vez ha tomado posesión de su dominación soberana y que el reino está establecido. Exhorta a todos a reconocer este reino, porque ya ha sido cortado de la montaña, “no por manos,” y está avanzando hacia la gran imagen de los gobiernos mundiales para destruirlos y desolarlos en la guerra del Armagedón. Esto suprimirá completamente cualquier posibilidad de intervención de dominio gentil. El ejercicio de la soberanía de Dios mediante su reino quitará toda la bestialidad de los gobiernos mundiales opresivos y significará para la humanidad cordura interminable en el gobierno y las bendiciones de vida y paz eternas. Es un consuelo para los que aman la justicia el tener revelación tan clara del significado de los desenvolvimientos mundiales y ver que las presentes condiciones mundiales inestables significan que Dios está ejerciendo su soberanía por medio del reino establecido bajo Cristo y que la dominación política por hombres imperfectos está de salida. En cuanto a las profecías que nos dan seguridad adicional del control completo por Dios de la dominación mundial en sus propios tiempos decretados, sírvase ver los siguientes varios números de esta revista.

[Notas]