-
Sirviendo con el “esclavo” fielLa Atalaya 1977 | 1 de marzo
-
-
puestas, “prendas . . . de vestir” que los identifiquen como personas que sirven a Dios con celo y “en verdadera justicia y lealtad.” Ese servicio celoso y leal nos mantendrá en el lugar de la seguridad espiritual ahora, y resultará en que se nos salve de la destrucción en Har-Magedón.—Rev. 16:14-16; Efe. 4:24.
-
-
“Ceñidos” para la obra futuraLa Atalaya 1977 | 1 de marzo
-
-
“Ceñidos” para la obra futura
“Estén firmes . . . teniendo los lomos ceñidos con la verdad.”—Efe. 6:14.
1. ¿Qué haría que los esclavos del Amo se sintieran felices?
FUE en Judea, probablemente durante el otoño de 32 E.C., donde Jesús dijo a sus discípulos: “¡Felices son aquellos esclavos a quienes el amo al llegar halle vigilando! Verdaderamente les digo: Él se ceñirá y los hará reclinarse a la mesa y vendrá a su lado y les servirá. Y si llega en la segunda vigilia, sí, o en la tercera, y los halla así, ¡felices son ellos!” (Luc. 12:37, 38) Aunque no se cumplieran expectativas que hubiesen tenido antes acerca de la llegada del Amo, ellos habrían de seguir vigilando hasta la tercera vigilia... la hora más oscura que precede al alba.—Compare con Mateo 25:13.
2. ¿Qué exige vigilancia por parte de los esclavos?
2 ¡Aunque este período de esperar la llegada de Jesús, el Hijo del hombre, se extendiera más allá de lo que al principio se esperara, el hecho del acercamiento de él a semejanza de ladrón es seguro! Nadie debería adormecerse y ponerse a pensar que se le retarda indefinidamente. ¡Esa hora tiene que sonar! Como Jesús mismo nos asegura: “Sepan esto: que si el amo de casa hubiese sabido a qué hora vendría el ladrón, hubiera seguido vigilando y no hubiera dejado que forzaran su casa. Ustedes también, manténganse listos, porque a una hora que menos piensen viene el Hijo del hombre.”—Luc. 12:39, 40.
3. ¿Qué se requiere además de mantenerse despiertos? (1 Ped. 1:13)
3 Sin embargo, los esclavos vigilantes de Jesús tienen que hacer más que simplemente mantenerse despiertos. Tal como el Amo ‘se ciñe’ para servirles, así él espera que ellos estén “ceñidos” para servicio. Les dice: “Estén ceñidos sus lomos y encendidas sus lámparas, y sean ustedes mismos como hombres que esperan a su amo.” (Luc. 12:35, 36) Nuestra diligencia al hacer estas cosas resultará en que se nos considere “felices” al llegar el Amo.
CEÑIDOS PARA EL SERVICIO DE DIOS
4. ¿Cómo podemos ‘ceñirnos’ para el servicio de Dios? (Sal. 18:31, 39)
4 ¿Qué significa el que el esclavo tenga ‘ceñidos los lomos’? En tiempos antiguos los guerreros solían ceñirse alrededor de la cintura o las caderas un cinturón de
-