Capítulo 8
Rescatado de las fauces de los leones
1, 2. a) ¿Cómo organizó Darío el medo su imperio ampliado? b) ¿Qué deberes y autoridad tenían los sátrapas?
¡BABILONIA había caído! En solo unas cuantas horas, su esplendor de un siglo como potencia mundial se había esfumado. Empezaba una nueva era, la de los medos y los persas. Darío el medo, que sucedió en el trono a Belsasar, se enfrentaba ahora al reto de organizar su imperio recién ampliado.
2 Una de las primeras medidas que Darío adoptó fue nombrar a 120 sátrapas. Según se cree, a veces se confiaba ese cargo a parientes escogidos del rey. En cualquier caso, cada sátrapa gobernaba un gran distrito o una subdivisión más pequeña del imperio (Daniel 6:1). Entre sus deberes figuraban la recaudación de impuestos y el envío del tributo a la corte real. Aunque periódicamente recibía la visita de inspección de un representante del rey, el sátrapa tenía una autoridad considerable. El significado de su título era “protector del reino”, y en su provincia se le consideraba un rey vasallo, casi con poder absoluto.
3, 4. ¿Por qué favoreció Darío a Daniel, y qué puesto le otorgó?
3 ¿Dónde encajaría Daniel en esa nueva administración? ¿Jubilaría Darío el medo a este anciano profeta judío de más de 90 años? Ni mucho menos. Daniel había predicho con exactitud la caída de Babilonia, y seguramente Darío comprendió que para ello se había requerido una sabiduría sobrenatural. Por otra parte, el profeta tenía décadas de experiencia en lo que respecta a tratar con las diversas comunidades cautivas en Babilonia, y Darío pretendía mantener unas relaciones pacíficas con sus súbditos recién conquistados. Por consiguiente, le interesaba tener cerca del trono a alguien de la sabiduría y experiencia de Daniel. ¿En qué puesto?
4 Si ya hubiera causado sorpresa que Darío hubiera nombrado sátrapa a un judío exiliado como Daniel, podemos imaginarnos la conmoción que debió de producirse cuando anunció su decisión de que este fuera uno de los tres altos funcionarios que supervisaran a los sátrapas. Y por si eso fuera poco, Daniel “fue distinguiéndose constantemente”, y demostró que era superior a los otros altos funcionarios. Verdaderamente, “un espíritu extraordinario” se hallaba en él, y Darío pensó incluso en nombrarlo primer ministro (Daniel 6:2, 3).
5. ¿Cuál fue probablemente la reacción de los otros altos funcionarios y los sátrapas ante el nombramiento de Daniel, y por qué?
5 Los otros altos funcionarios y los sátrapas debieron arder de indignación. La sola idea de que Daniel, que ni era medo ni persa ni miembro de la familia real, tuviera autoridad sobre ellos, seguramente les resultaba insoportable. ¿Cómo podía Darío otorgar tal prominencia a un extranjero y humillar así a sus compatriotas y hasta a su propia familia? Esa maniobra les debió parecer injusta. Además, los sátrapas probablemente veían en la integridad de Daniel un estorbo para sus negocios turbios y actos corruptos. Sin embargo, ni los altos funcionarios ni los sátrapas se atrevían a hablar de ello con Darío, pues lo cierto era que este lo tenía en gran estima.
6. ¿Cómo intentaron desacreditar a Daniel los altos funcionarios y los sátrapas, y por qué fue en vano?
6 Por lo tanto, aquellos políticos envidiosos se conjuraron para “hallar algún pretexto contra Daniel respecto al reino”. ¿Podría haber algo reprobable en la manera como atendía sus responsabilidades? ¿Se podía poner en entredicho su honradez? Los altos funcionarios y los sátrapas no pudieron hallar ningún tipo de negligencia o corrupción en la forma en que Daniel cumplía con sus deberes. “No hallaremos en este Daniel ningún pretexto en absoluto —razonaron—, excepto si lo tenemos que hallar contra él en la ley de su Dios.” Y así fue como aquellos hombres taimados tramaron un complot, pensando que así acabarían definitivamente con Daniel (Daniel 6:4, 5).
SE PONE EN MARCHA UN COMPLOT ASESINO
7. ¿Qué propuesta le hicieron al rey los altos funcionarios y los sátrapas, y cómo la presentaron?
7 Un séquito de altos funcionarios y sátrapas “entraron en tropel” ante Darío. La expresión aramea así traducida denota una conmoción estruendosa. Al parecer, aquellos hombres dieron a entender que tenían un asunto sumamente urgente que presentar al rey. Puede que pensaran que este se sentiría menos inclinado a cuestionar su propuesta si la exponían con convicción y como algo que exigía acción inmediata, de modo que le dijeron sin rodeos: “Todos los altos funcionarios del reino, los prefectos y los sátrapas, los altos oficiales reales y los gobernadores, han entrado en consejo juntos para establecer un estatuto real y dar vigor a un entredicho: que quienquiera que haga una petición a cualquier dios u hombre, por treinta días, excepto a ti, oh rey, sea arrojado en el foso de los leones”a (Daniel 6:6, 7).
8. a) ¿Por qué complacería la propuesta a Darío? b) ¿Cuál era la verdadera intención de los altos funcionarios y los sátrapas?
8 Los escritos históricos confirman que por lo general se consideraba divinos a los reyes mesopotámicos y se les adoraba, así que seguramente la propuesta halagó a Darío. Puede que, además, le viera un lado práctico. Recordemos que para los habitantes de Babilonia, Darío era un extranjero y un recién llegado. La nueva ley lo afianzaría en el trono e impulsaría a las multitudes residentes en Babilonia a confesar su lealtad y apoyo al nuevo régimen. Sin embargo, a los altos funcionarios y los sátrapas no les preocupaba en absoluto el bien del rey cuando propusieron el decreto. Su verdadera intención era la de tender una trampa a Daniel, pues sabían que este tenía la costumbre de orar a Dios tres veces al día ante las ventanas abiertas de su cámara del techo.
9. ¿Por qué no representaría ningún problema para la mayoría de los no judíos la nueva ley?
9 ¿Representaría algún problema para todos los grupos religiosos de Babilonia esta limitación en cuanto a orar? No necesariamente, sobre todo en vista de que la prohibición solo duraría un mes. Además, serían pocos los no judíos que pensaran que dirigir temporalmente su adoración a un ser humano fuera contrario a su fe. Cierto biblista señala: “La adoración al rey no exigía nada a lo que la nación más idólatra de todas no estuviera acostumbrada, de modo que cuando se pidió a los babilonios que rindieran al conquistador Darío el medo el homenaje propio de un dios, accedieron a ello sin ningún reparo. Los judíos fueron los únicos que no pudieron admitir una orden así”.
10. ¿Cómo consideraban los medos y los persas las leyes que su rey promulgaba?
10 En cualquier caso, quienes comparecieron ante Darío lo instaron a “establecer el estatuto y firmar el escrito, para que no se cambie, conforme a la ley de los medos y los persas, que no se anula” (Daniel 6:8). En el antiguo Oriente la voluntad del rey solía considerarse incuestionable, lo cual perpetuaba el concepto de su infalibilidad. Aunque una ley pudiera provocar la muerte de personas inocentes, se había de mantener en vigor.
11. ¿Cómo afectaría a Daniel el edicto de Darío?
11 Sin pensar en Daniel, Darío firmó el decreto (Daniel 6:9). Al hacerlo, no se dio cuenta de que sellaba la sentencia de muerte de su servidor más preciado, pues el edicto afectaría sin remedio a Daniel.
DARÍO SE VE OBLIGADO A EJECUTAR LA SENTENCIA
12. a) ¿Qué hizo Daniel en cuanto supo de la nueva ley? b) ¿Quiénes estaban vigilando a Daniel, y por qué?
12 Daniel no tardó en saber de la ley que limitaba las oraciones. Enseguida entró en su casa y se dirigió a la cámara del techo, cuyas ventanas se hallaban abiertas hacia Jerusalén.b Una vez allí, se puso a orar a Dios “como había estado haciendo regularmente antes de esto”. Puede que pensara que estaba solo, pero los conspiradores lo vigilaban. De súbito, “entraron atropelladamente”, con la misma excitación con que se habían dirigido a Darío, y lo vieron con sus propios ojos: Daniel estaba “haciendo petición e implorando favor delante de su Dios” (Daniel 6:10, 11). Los altos funcionarios y los sátrapas ya disponían de cuanto necesitaban para acusarlo ante el rey.
13. ¿Qué informe llevaron al rey los enemigos de Daniel?
13 Con astucia, los enemigos de Daniel preguntaron a Darío: “¿No hay un entredicho que has firmado en el sentido de que cualquier hombre que haga petición de cualquier dios u hombre por treinta días excepto de ti, oh rey, sea arrojado en el foso de los leones?”. Darío respondió: “El asunto está bien establecido según la ley de los medos y los persas, que no se anula”. Entonces los conspiradores fueron directos a la cuestión. “Daniel, quien es de los desterrados de Judá, no les ha prestado atención ni a ti, oh rey, ni al entredicho que firmaste, sino que tres veces al día hace su petición.” (Daniel 6:12, 13.)
14. ¿Por qué, al parecer, indicaron los altos funcionarios y los sátrapas que Daniel era uno “de los desterrados de Judá”?
14 Es significativo que los altos funcionarios y los sátrapas indicaran que Daniel era uno “de los desterrados de Judá”. Al parecer, deseaban recalcar que aquel a quien Darío había elevado a un puesto de tanta prominencia no era a fin de cuentas más que un esclavo judío, por lo que, en su opinión, de ningún modo estaba por encima de la ley, sin importar cuánto lo estimara el rey.
15. a) ¿Cómo reaccionó Darío ante la noticia que le llevaron los altos funcionarios y los sátrapas? b) ¿Qué otra muestra del desprecio que sentían por Daniel dieron los altos funcionarios y los sátrapas?
15 Es posible que los altos funcionarios y los sátrapas creyeran que el rey los recompensaría por su sagaz investigación. Si así fue, les aguardaba una sorpresa, pues cuando le llevaron la noticia se perturbó mucho. En vez de enfurecerse con Daniel o arrojarlo inmediatamente al foso de los leones, Darío pasó el día entero procurando hallar la manera de salvarlo. Pero todo fue en vano. No transcurrió mucho tiempo antes de que los conspiradores regresaran y, con el descaro que los caracterizaba, exigieran la ejecución de Daniel (Daniel 6:14, 15).
16. a) ¿Por qué respetaba Darío al Dios de Daniel? b) ¿Qué esperanza en cuanto a Daniel le quedaba a Darío?
16 Darío comprendió que no tenía alternativa. No podía ni anular la ley ni perdonar la “transgresión” de Daniel. “Tu Dios a quien sirves con constancia, él mismo te rescatará”, fue cuanto pudo decirle. Al parecer, Darío respetaba al Dios de Daniel. Fue Jehová quien facultó a este último para que predijera la caída de Babilonia. Dios también le dio “un espíritu extraordinario” que lo distinguía de los otros altos funcionarios. Puede que Darío supiera que, algunas décadas atrás, ese mismo Dios había rescatado de un horno ardiente a tres hebreos jóvenes. Como no podía abolir la ley que había firmado, seguramente esperaba que Jehová librara a Daniel. Por tanto, arrojaron a este al foso de los leones.c A continuación “fue traída una piedra, y fue colocada en la boca del foso, y el rey la selló con su anillo de sellar y con el anillo de sellar de sus grandes, para que nada se cambiara en el caso de Daniel” (Daniel 6:16, 17).
LA SITUACIÓN DA UN GIRO ESPECTACULAR
17, 18. a) ¿Qué indica que Darío estaba angustiado por la situación de Daniel? b) ¿Qué sucedió cuando el rey regresó al foso de los leones a la mañana siguiente?
17 Abatido, Darío regresó a su palacio. Los músicos no tocaron para él, ya que no estaba de humor para divertirse. Por el contrario, pasó toda la noche en vela y ayunando. “Su propio sueño huyó de él.” Al alba, fue deprisa al foso de los leones y gritó con tristeza: “Oh Daniel, siervo del Dios vivo, ¿ha podido tu Dios a quien sirves con constancia rescatarte de los leones?” (Daniel 6:18-20). Para su asombro y completo alivio, una voz respondió.
18 “Oh rey, sigue viviendo aun hasta tiempos indefinidos.” Con ese saludo respetuoso, Daniel mostró que no le abrigaba ninguna animosidad, pues comprendía que Darío no era el verdadero causante de su persecución, sino los altos funcionarios y sátrapas envidiosos (compárese con Mateo 5:44; Hechos 7:60). Daniel pasó a decir: “Mi propio Dios envió a su ángel y cerró la boca de los leones, y no me han arruinado, puesto que delante de él se halló inocencia misma en mí; y también delante de ti, oh rey, ningún acto nocivo he hecho” (Daniel 6:21, 22).
19. ¿Cómo habían engañado y manipulado a Darío los altos funcionarios y los sátrapas?
19 ¡Cuánto debió de molestarle la conciencia a Darío al escuchar esas palabras! Él sabía desde el principio que Daniel no había hecho nada para que lo arrojaran al foso de los leones, y también estaba al tanto de que los altos funcionarios y los sátrapas habían tramado su ejecución y manipulado al rey para lograr sus fines egoístas. Al afirmar estos que “todos los altos funcionarios del reino” habían recomendado la aprobación del edicto, le dieron a entender que también se había consultado la cuestión con Daniel. Darío se encargaría más tarde de aquellos taimados individuos, pero primero ordenó que sacaran a Daniel del foso de los leones. Milagrosamente, este no había sufrido ni un rasguño (Daniel 6:23).
20. ¿Qué les ocurrió a los maliciosos enemigos de Daniel?
20 Ahora que Daniel estaba a salvo, Darío tenía otros asuntos que atender. “El rey dio orden, y trajeron a aquellos hombres físicamente capacitados que habían acusado a Daniel, y en el foso de los leones los arrojaron, a ellos, sus hijos y sus esposas; y no habían llegado al fondo del foso antes que los leones hubieran logrado el dominio sobre ellos, y trituraron todos sus huesos.”d (Daniel 6:24.)
21. ¿Qué contraste existía entre la Ley mosaica y las leyes de algunas culturas antiguas en cuanto al trato que se dispensaba a los familiares de los transgresores?
21 Parece desmesurado y cruel que se ejecutara, además de a los conspiradores, a sus esposas e hijos. La Ley que Dios dio mediante el profeta Moisés estipulaba algo muy distinto: “Padres no deben ser muertos a causa de hijos, ni hijos deben ser muertos a causa de padres. Cada cual debe ser muerto por su propio pecado” (Deuteronomio 24:16). Ahora bien, en algunas culturas antiguas no era insólito que la ejecución del autor de un delito grave significara también la de sus familiares. Puede que se hiciera así para que estos no pudieran vengarse posteriormente. Sin embargo, Daniel no tuvo absolutamente nada que ver con esta sentencia contra las familias de los altos funcionarios y los sátrapas. Lo más probable es que le doliera la calamidad que aquellos malvados individuos habían acarreado a sus familias.
22. ¿Qué nueva proclamación emitió Darío?
22 Ya sin los maquinadores altos funcionarios y sátrapas, Darío emitió una proclamación que decía: “De delante de mí ha sido emitida una orden de que, en todo dominio de mi reino, la gente ha de temblar y temer delante del Dios de Daniel. Porque él es el Dios vivo y Aquel que dura hasta tiempos indefinidos, y su reino es uno que no será reducido a ruinas, y su dominio es para siempre. Él está rescatando y librando y ejecutando señales y maravillas en los cielos y en la tierra, porque ha rescatado a Daniel de la garra de los leones” (Daniel 6:25-27).
SIRVAMOS A DIOS CON CONSTANCIA
23. ¿Qué ejemplo dio Daniel en lo relativo al empleo, y cómo podemos imitarlo?
23 Daniel es un magnífico ejemplo para todos los siervos de Dios de la actualidad. Su conducta fue irreprochable en todo momento. En las tareas seglares, “era digno de confianza y no se hallaba en él ninguna negligencia ni cosa corrupta” (Daniel 6:4). De forma similar, el cristiano ha de ser industrioso en su empleo. Claro está, eso no implica ser un individuo carente de escrúpulos que se afana por ser rico o que pisa a los demás para ascender en la empresa (1 Timoteo 6:10). Las Escrituras exigen que el cristiano cumpla con sus obligaciones seglares con honradez y entrega, “como para Jehová” (Colosenses 3:22, 23; Tito 2:7, 8; Hebreos 13:18).
24. ¿Cómo demostró Daniel que su postura en materia de adoración era inamovible?
24 En materia de adoración, la postura de Daniel era inamovible. Su costumbre de orar era del dominio público. Además, los altos funcionarios y los sátrapas sabían muy bien que Daniel tomaba su adoración a Dios tan en serio que seguiría practicándola aunque una ley se lo prohibiera. Fue todo un ejemplo para los cristianos de la actualidad, quienes también tienen fama de poner la adoración a Dios en primer lugar (Mateo 6:33). Esa prioridad debería hacerse patente a cuantos los observaran, ya que Jesús mandó a sus seguidores: “Resplandezca la luz de ustedes delante de los hombres, para que ellos vean sus obras excelentes y den gloria al Padre de ustedes que está en los cielos” (Mateo 5:16).
25, 26. a) ¿Qué pudiera pensar alguien en cuanto al proceder de Daniel? b) ¿Por qué consideró Daniel que un cambio en sus hábitos equivaldría a transigir?
25 Alguien quizá señale que Daniel pudo haber evitado la persecución orando a Jehová en secreto durante aquel período de treinta días. Al fin y al cabo, no se requiere ningún marco ni postura en particular para que Dios nos oiga, pues él puede percibir hasta las ‘meditaciones del corazón’ (Salmo 19:14). Sin embargo, Daniel consideró que cualquier cambio en sus hábitos equivaldría a transigir. ¿Por qué?
26 En vista de que todo el mundo conocía su costumbre respecto a la oración, ¿qué habría dado a entender si de repente la hubiera interrumpido? Era probable que quienes lo vieran llegaran a la conclusión de que Daniel temía al hombre y de que el decreto del rey estaba por encima de la ley de Jehová (Salmo 118:6). Pero los actos de Daniel demostraron que daba su devoción exclusivamente a Dios (Deuteronomio 6:14, 15; Isaías 42:8). Claro está que aquello no significó que desacatara la ley real con falta de respeto, pero tampoco transigió presa del miedo. Sencillamente, siguió orando en la cámara del techo, “como había estado haciendo regularmente” antes de que el rey promulgara el edicto.
27. ¿Cómo pueden los siervos de Dios de la actualidad imitar a Daniel en a) la sujeción a las autoridades superiores? b) la obediencia a Dios como gobernante más bien que a los hombres? c) el empeño por vivir en paz con todos los hombres?
27 Los siervos de Dios de la actualidad pueden aprender del ejemplo de Daniel. Se mantienen “en sujeción a las autoridades superiores” y obedecen las leyes del país en que viven (Romanos 13:1). Ahora bien, cuando las leyes de los hombres están en conflicto con las de Dios, el pueblo de Jehová adopta la misma postura que los apóstoles de Jesús, quienes declararon con valor: “Tenemos que obedecer a Dios como gobernante más bien que a los hombres” (Hechos 5:29). Los cristianos no fomentan con ello la insurrección o la rebelión; por el contrario, solo pretenden vivir en paz con todos los hombres, a fin de ‘seguir llevando una vida tranquila y quieta con plena devoción piadosa’ (1 Timoteo 2:1, 2; Romanos 12:18).
28. ¿En qué sentido sirvió Daniel a Dios “con constancia”?
28 Darío mencionó en dos ocasiones que Daniel servía a Dios “con constancia” (Daniel 6:16, 20). La raíz aramea de la palabra que se traduce por “constancia” significa “moverse en círculo”; denota la idea de un círculo continuo, de algo perpetuo. La integridad de Daniel era así. Seguía un curso previsible. Cuando se enfrentara a pruebas, fueran estas grandes o pequeñas, no habría duda alguna respecto a lo que Daniel haría. Seguiría el rumbo de lealtad y fidelidad a Jehová que se había trazado décadas antes.
29. ¿Cómo pueden beneficiarse del proceder fiel de Daniel los siervos de Jehová de la actualidad?
29 Los siervos de Dios de la actualidad desean imitar a Daniel. De hecho, el apóstol Pablo exhortó a todos los cristianos a considerar el ejemplo de hombres temerosos de Dios de la antigüedad. Señaló que por su fe “efectuaron justicia, obtuvieron promesas” y —en evidente alusión a Daniel— “taparon bocas de leones”. Que los siervos de Jehová de hoy día manifestemos la misma fe y constancia de Daniel y “corramos con aguante la carrera que está puesta delante de nosotros” (Hebreos 11:32, 33; 12:1).
[Notas]
a La existencia de un “foso de los leones” en Babilonia tiene el respaldo de varias inscripciones antiguas que muestran que los gobernantes orientales solían coleccionar animales salvajes.
b La cámara del techo era una habitación privada a la que la persona podía retirarse cuando no deseaba ser molestada.
c El foso de los leones probablemente fuera una cámara subterránea con una abertura superior. Puede que también tuviera puertas o rejas levadizas por las que entraban los animales.
d Las palabras “habían acusado” traducen una expresión aramea que también significa “habían calumniado”, lo que pone de relieve las intenciones maliciosas de los enemigos de Daniel.
¿QUÉ HA APRENDIDO?
• ¿Por qué decidió Darío el medo colocar a Daniel en un puesto encumbrado?
• ¿Qué astuto complot tramaron los altos funcionarios y los sátrapas? ¿Cómo rescató Jehová a Daniel?
• ¿Qué ha aprendido del ejemplo de fidelidad de Daniel?
[Ilustración a toda plana de la página 114]
[Ilustración a toda plana de la página 121]
[Ilustración de la página 127]
Daniel sirvió a Jehová “con constancia”. ¿Y usted?