Beneficios de amar la Palabra de Dios
“Ámala [la sabiduría], y ella te salvaguardará. [...] Te glorificará porque la abrazas.” (PROVERBIOS 4:6, 8.)
1. ¿Qué implica el verdadero amor a la Palabra de Dios?
LEER la Biblia es esencial para los cristianos. Sin embargo, su mera lectura no es de por sí indicación de que se ama la Palabra de Dios. ¿Qué podría decirse de alguien que leyera la Biblia, pero que luego practicara lo que esta condena? Obviamente, tal persona no amaría la Palabra de Dios como la amó el escritor del Salmo 119. Amar la Palabra de Dios significaría vivir en armonía con sus requisitos (Salmo 119:97, 101, 105).
2. ¿Que beneficios reporta la sabiduría basada en la Palabra de Dios?
2 Vivir en armonía con la Palabra de Dios requiere corregir constantemente la manera de pensar y de vivir. Tal proceder refleja sabiduría piadosa, que supone hacer una aplicación práctica del conocimiento y el entendimiento que se consiguen al estudiar la Biblia. “Ámala [la sabiduría], y ella te salvaguardará. Estímala altamente, y ella te ensalzará. Te glorificará porque la abrazas. Dará a tu cabeza una guirnalda de encanto; te otorgará una corona de hermosura.” (Proverbios 4:6, 8, 9.) Este es un buen incentivo para cultivar amor a la Palabra de Dios y dejarse guiar por ella. ¿Quién no quiere ser salvaguardado, ensalzado y glorificado?
Protección contra el daño permanente
3. ¿Por qué necesitan los cristianos más que nunca que se les salvaguarde, y de quiénes?
3 ¿De qué manera nos salvaguarda la sabiduría que conseguimos al estudiar y seguir la Palabra de Dios? Por una parte, nos salvaguarda de Satanás el Diablo. Jesús enseñó a sus seguidores a pedir en oración que se les librara del inicuo, Satanás (Mateo 6:13). En la actualidad, es muy urgente incluir esta petición en nuestras oraciones. Satanás y sus demonios fueron arrojados del cielo después de 1914, y por ello el Diablo tiene ‘gran cólera, sabiendo que le queda un corto espacio de tiempo’ (Revelación [Apocalipsis] 12:9, 10, 12). En esta fecha tardía su cólera debe estar al rojo vivo, pues está perdiendo la guerra contra aquellos que “observan los mandamientos de Dios y tienen la obra de dar testimonio de Jesús” (Revelación 12:17).
4. ¿Cómo se salvaguarda a los cristianos de las presiones y trampas satánicas?
4 En su ira, Satanás continúa fomentando dificultades y persecución violenta contra estos ministros cristianos, o poniendo otros obstáculos a su actividad. También intenta hacer que los proclamadores del Reino se interesen, por ejemplo, en la prominencia mundana, el ocio, la adquisición de bienes materiales y la búsqueda de placeres, más bien que en la obra de predicar el Reino. ¿Qué salvaguarda a los siervos fieles de Dios para que no se rindan ante la presión de Satanás ni caigan en sus trampas? La oración, la estrecha relación personal con Jehová y la fe en la seguridad de Sus promesas son sin duda factores fundamentales. Pero todo ello está relacionado con el conocimiento y acatamiento de los recordatorios de la Palabra de Dios. Estos nos llegan por medio de la lectura de la Biblia y las publicaciones bíblicas, la asistencia a las reuniones cristianas, el consejo bíblico que pueda darnos un hermano en la fe, o simplemente meditando con oración sobre los principios bíblicos que el espíritu de Dios nos ayuda a recordar (Isaías 30:21; Juan 14:26; 1 Juan 2:15-17).
5. ¿De qué maneras nos salvaguarda la sabiduría basada en la Palabra de Dios?
5 A los que aman la Palabra de Dios se les salvaguarda de otras maneras. Por ejemplo, estos evitan la angustia emocional y las enfermedades físicas que resultan de prácticas como el consumo de drogas, el fumar y la inmoralidad sexual (1 Corintios 5:11; 2 Corintios 7:1). No contribuyen al deterioro de las relaciones contando chismes ni hablando de manera descortés (Efesios 4:31). Tampoco les asalta la duda por ahondar en las engañosas filosofías de la sabiduría del mundo (1 Corintios 3:19). El amor a la Palabra de Dios los salvaguarda de todo aquello que pueda privarlos de su relación con Dios y de la esperanza de la vida eterna. Se mantienen ocupados ayudando al prójimo a poner fe en las maravillosas promesas de la Biblia, sabiendo que de esta manera ‘se salvarán a sí mismos y también a los que les escuchan’ (1 Timoteo 4:16).
6. ¿Cómo puede salvaguardarnos aun en circunstancias difíciles la sabiduría basada en la Palabra de Dios?
6 Es cierto que todos, aun los que amamos la Palabra de Dios, estamos sujetos al “tiempo y el suceso imprevisto” (Eclesiastés 9:11). Es inevitable que algunos seamos víctimas de desastres naturales, enfermedades graves, accidentes o de una muerte prematura. En cualquier caso, estamos salvaguardados. Ninguna calamidad puede dañar de manera permanente a quienes verdaderamente aman la Palabra de Dios. De modo que no deberíamos preocuparnos demasiado por lo que pueda suceder en el futuro. Después de haber tomado todas las precauciones razonables, es mejor dejar los asuntos en manos de Jehová y no permitir que la inseguridad de la vida actual nos arrebate la paz (Mateo 6:33, 34; Filipenses 4:6, 7). Tengamos presente la certeza de la esperanza de la resurrección y de una vida mejor cuando Dios ‘haga nuevas todas las cosas’ (Revelación 21:5; Juan 11:25).
Demostremos ser “tierra buena”
7. ¿Qué ilustración relató Jesús a las muchedumbres que acudieron a escucharle?
7 En una de las parábolas de Jesús se destaca la importancia de tener un punto de vista apropiado sobre la Palabra de Dios. Cuando Jesús proclamaba las buenas nuevas por Palestina, las muchedumbres se reunían para oírlo (Lucas 8:1, 4). Sin embargo, no todos amaban realmente la Palabra de Dios. Muchos acudían a oírle porque querían ver milagros o porque les gustaba su maravillosa manera de enseñar. Por ello, Jesús relató a las muchedumbres una ilustración: “Un sembrador salió a sembrar su semilla. Pues bien, al ir sembrando, parte de ella cayó a lo largo del camino y fue hollada, y las aves del cielo se la comieron. Otra parte cayó sobre la masa rocosa, y, después de brotar, se secó por no tener humedad. Otra parte cayó entre los espinos, y los espinos que crecieron con ella la ahogaron. Otra parte cayó sobre la tierra buena, y, después de brotar, produjo fruto de a ciento por uno” (Lucas 8:5-8).
8. ¿Qué representa la semilla de la ilustración de Jesús?
8 La parábola de Jesús indicó que la gente respondería de diferentes maneras a la predicación de las buenas nuevas, según su condición de corazón. La semilla que se siembra es “la palabra de Dios” (Lucas 8:11). O, según otra versión de la parábola, “la palabra del reino” (Mateo 13:19). Jesús pudo utilizar cualquiera de esas expresiones, porque el tema de la Palabra de Dios es el Reino celestial, con Jesucristo como Rey, mediante el cual Jehová vindicará Su soberanía y santificará Su nombre (Mateo 6:9, 10). Así, la semilla es de hecho el mensaje de las buenas nuevas que contiene la Palabra de Dios, la Biblia. Los testigos de Jehová destacan este mensaje del Reino cuando siembran la semilla tal como lo hizo el Sembrador original, Jesucristo. ¿Qué respuesta hallan?
9. ¿Qué representa la semilla que cae a) a lo largo del camino? b) sobre la roca? c) en terreno espinoso?
9 Jesús dijo que parte de la semilla cae en el camino y es hollada. Esta circunstancia hace alusión a las personas que están demasiado absortas en sus asuntos como para que la semilla del Reino arraigue en su corazón. Antes de que lleguen a amar la Palabra de Dios, “viene el Diablo y quita la palabra de su corazón para que no crean y sean salvos” (Lucas 8:12). Parte de la semilla cae en la roca. Esta alude a la gente que se siente atraída por el mensaje de la Biblia, pero que no permite que este afecte su corazón. Cuando se les presenta oposición o cuando resulta difícil seguir el consejo de la Biblia, “se apartan” porque no tienen raíz (Lucas 8:13). Luego están aquellos que oyen la palabra, pero que se hallan demasiado preocupados por “las inquietudes y las riquezas y los placeres de esta vida”. Con el tiempo “son completamente ahogados”, como en el caso de las plantas que los espinos sofocan (Lucas 8:14).
10, 11. a) ¿A quiénes representa la buena tierra? b) ¿Qué debemos hacer para ‘retener’ la Palabra de Dios en el corazón?
10 Finalmente está la semilla que cae en buena tierra. Esta tiene que ver con la gente que recibe el mensaje “con un corazón excelente y bueno”. Naturalmente, todos quisiéramos creer que pertenecemos a esta categoría. Pero, al fin y al cabo lo que cuenta es el punto de vista de Dios (Proverbios 17:3; 1 Corintios 4:4, 5). Su Palabra dice que el hecho de tener “un corazón excelente y bueno” se demuestra por el modo de actuar desde el tiempo presente hasta la muerte o hasta que Dios ponga fin a este inicuo sistema de cosas. Está muy bien que nuestra respuesta inicial al mensaje del Reino sea positiva. Sin embargo, los que tienen un corazón excelente y bueno aceptan la Palabra de Dios y “la retienen y llevan fruto con aguante” (Lucas 8:15).
11 La única manera segura de retener la Palabra de Dios en nuestro corazón es leerla y estudiarla en privado y en compañía de nuestros hermanos en la fe. Ello incluye aprovecharse plenamente del alimento espiritual provisto por el conducto designado para atender los intereses espirituales de los verdaderos seguidores de Jesús (Mateo 24:45-47). Así, el amor motiva a los que retienen la Palabra de Dios en su corazón a ‘llevar fruto con aguante’.
12. ¿Qué fruto debemos llevar con aguante?
12 ¿Qué fruto produce la tierra excelente? En el mundo físico, la semilla se convierte en una planta que lleva fruto dotado de la misma clase de semilla, la cual luego puede sembrarse para que produzca más fruto. De igual modo, la semilla de la palabra crece en aquellos que tienen un corazón excelente y bueno, y los hace progresar en sentido espiritual hasta que ellos mismos pueden sembrar la semilla en el corazón de otras personas (Mateo 28:19, 20). Su obra de sembrar se caracteriza además por el aguante. Jesús mostró la importancia del aguante al sembrar cuando dijo: “El que haya aguantado hasta el fin es el que será salvo. Y estas buenas nuevas del reino se predicarán en toda la tierra habitada para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin” (Mateo 24:13, 14).
‘Llevemos fruto en toda buena obra’
13. ¿Cómo relacionó Pablo en oración el llevar fruto con el conocimiento de la Palabra de Dios?
13 El apóstol Pablo habló también de la necesidad de llevar fruto, y relacionó esta acción con la Palabra de Dios. Pidió en oración que a sus hermanos en la fe “se les [llenara] del conocimiento exacto de [la] voluntad [de Dios] en toda sabiduría y comprensión espiritual, para que [anduvieran] de una manera digna de Jehová a fin de que le [agradaran] plenamente mientras [seguían] llevando fruto en toda buena obra” (Colosenses 1:9, 10; Filipenses 1:9-11).
14-16. ¿Qué fruto producen los que aman la Palabra de Dios, según la oración de Pablo?
14 Pablo muestra así que conseguir conocimiento de la Biblia no es un fin en sí mismo, sino que el amor a la Palabra de Dios debe motivarnos a ‘andar de una manera digna de Jehová’ al ‘llevar fruto en toda buena obra’. ¿Qué buenas obras? La predicación de las buenas nuevas del Reino es la principal tarea que se ha encomendado a los cristianos en estos últimos días (Marcos 13:10). Además, los que aman la Palabra de Dios hacen todo lo posible por apoyar económicamente esta obra de manera regular. Lo consideran un privilegio, pues saben que “Dios ama al dador alegre” (2 Corintios 9:7). Sus contribuciones se utilizan para sufragar los gastos de funcionamiento de más de cien complejos de Betel, desde los que se dirige la actividad de la predicación del Reino y en algunos de los cuales se imprimen Biblias y publicaciones bíblicas. Esas contribuciones también ayudan a sufragar los gastos de grandes asambleas cristianas y de los superintendentes viajantes, misioneros y otros evangelizadores de tiempo completo.
15 Otras buenas obras tienen que ver con la construcción y mantenimiento de los centros que se usan para la adoración verdadera. El amor a la Palabra de Dios motiva a Sus siervos a no descuidar los Salones de Asambleas ni los Salones del Reino (compárese con Nehemías 10:39). Dado que el nombre de Dios aparece en la fachada de estos edificios, es muy importante que se mantengan limpios y atractivos tanto por dentro como por fuera, y que la conducta de los que asisten a ellos sea irreprochable (2 Corintios 6:3). A algunos cristianos les es posible hacer aún más. El amor a la Palabra de Dios los motiva a viajar largas distancias a fin de participar en la construcción de nuevos lugares de culto en zonas del mundo donde se les necesita debido a la falta de medios o de especialistas (2 Corintios 8:14).
16 ‘Llevar fruto en toda buena obra’ también significa atender las obligaciones familiares e interesarse por los compañeros cristianos. El amor a la Palabra de Dios hace que seamos sensibles a las necesidades de “los que están relacionados con nosotros en la fe” y que ‘practiquemos devoción piadosa en nuestra propia casa’ (Gálatas 6:10; 1 Timoteo 5:4, 8). A este respecto, es una buena obra visitar a los enfermos y consolar a los que están de duelo. También efectúan una obra excelente los ancianos de las congregaciones y los Comités de Enlace con los Hospitales que ayudan a quienes se enfrentan a situaciones médicas delicadas (Hechos 15:29). Luego están los muchos desastres, algunos de ellos naturales y otros causados por la insensatez humana. Con la ayuda del espíritu de Dios, los testigos de Jehová se han labrado una buena reputación en muchas partes de la Tierra al socorrer con prontitud a sus hermanos en la fe y otras víctimas de catástrofes y accidentes. Todo ello es parte del buen fruto que manifiestan los que aman la Palabra de Dios.
Gloriosos beneficios futuros
17, 18. a) ¿Qué logra la siembra de la semilla del Reino? b) ¿Qué impresionantes acontecimientos verán pronto los que aman la Palabra de Dios?
17 La siembra de la semilla del Reino continúa produciendo grandes beneficios para la humanidad. En los últimos años, más de trescientas mil personas han permitido anualmente que arraigue en su corazón el mensaje de la Palabra de Dios al grado de dedicar su vida a Jehová y simbolizar esa dedicación mediante el bautismo en agua. ¡Qué glorioso futuro les aguarda!
18 Los que aman la Palabra de Dios saben que pronto Jehová actuará para engrandecer su nombre. “Babilonia la Grande”, el imperio mundial de la religión falsa, será destruida (Revelación 18:2, 8). A continuación el Rey Jesucristo dará muerte a los que no quieran vivir en conformidad con la Palabra de Dios (Salmo 2:9-11; Daniel 2:44). Luego el Reino de Dios eliminará para siempre el crimen, la guerra y otros desastres. Ya no habrá necesidad de consolar a la gente por causa del dolor, la enfermedad o la muerte (Revelación 21:3, 4).
19, 20. ¿Qué glorioso futuro espera a los que verdaderamente aman la Palabra de Dios?
19 En aquel tiempo los que aman la Palabra de Dios efectuarán gloriosas buenas obras. Los supervivientes de Armagedón empezarán la gozosa tarea de transformar esta Tierra en un paraíso. Tendrán el emocionante privilegio de hacer los preparativos para satisfacer las necesidades de los humanos muertos que ahora descansan en la tumba y a quienes Dios tiene en su memoria con la perspectiva de recibir una resurrección (Juan 5:28, 29). Entonces los habitantes de la Tierra disfrutarán de la guía perfecta del Señor Soberano, Jehová, mediante su Hijo ensalzado, Jesucristo. ‘Se abrirán rollos’ que revelarán las instrucciones de Jehová para la vida en el nuevo mundo (Revelación 20:12).
20 Al debido tiempo de Jehová, el grupo completo de fieles cristianos ungidos habrá sido levantado para su recompensa celestial como ‘coherederos de Cristo’ (Romanos 8:17). Durante el Reinado de Mil Años de Cristo se elevará a la perfección mental y corporal a todos los seres humanos de la Tierra que amen la Palabra de Dios. Cuando demuestren su fidelidad en una prueba final, se les recompensará con la vida eterna y disfrutarán de “la gloriosa libertad de los hijos de Dios” (Romanos 8:21; Revelación 20:1-3, 7-10). ¡Qué maravilloso será ese tiempo! Sea que Jehová nos haya dado una esperanza celestial o terrenal, el amor permanente a su Palabra y la determinación de vivir según la sabiduría divina será una salvaguarda. Y, en el futuro, ‘nos glorificará porque la abrazamos’ (Proverbios 4:6, 8).
¿Sabe explicarlo?
◻ ¿Cómo nos salvaguarda el amor a la Palabra de Dios?
◻ ¿Qué representa la semilla de la ilustración de Jesús, y cómo se siembra?
◻ ¿Cómo podemos demostrar que somos “buena tierra”?
◻ ¿Qué beneficios pueden esperar los que aman la Palabra de Dios?
[Ilustración de la página 16]
La semilla de la ilustración de Jesús representa el mensaje de las buenas nuevas que contiene la Palabra de Dios
[Reconocimiento]
Garo Nalbandian
[Ilustración de la página 17]
Los testigos de Jehová imitan al Gran Sembrador
[Ilustraciones de la página 18]
Los supervivientes de Armagedón disfrutarán del fruto de la Tierra