¿Ocupa Dios el primer lugar en su familia?
“Tienes que amar a Jehová tu Dios con todo tu corazón.” (MARCOS 12:29, 30.)
1. ¿Cuánta importancia tiene amar a Jehová?
“CUÁL mandamiento es el primero de todos?”, preguntó un escriba a Jesús. En vez de expresar su propia opinión, Jesús contestó la pregunta citando de la Palabra de Dios, a saber, de Deuteronomio 6:4, 5. Respondió: “El primero es: ‘Oye, oh Israel, Jehová nuestro Dios es un solo Jehová, y tienes que amar a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu mente y con todas tus fuerzas’”. (Marcos 12:28-30.)
2. a) ¿Qué oposición tuvo que afrontar Jesús? b) ¿Qué puede contribuir a que a veces sea difícil agradar a Jehová?
2 Para obedecer lo que Jesús llamó el primer mandamiento —el más importante—, hay que agradar siempre a Jehová. Así lo hizo Jesús, a pesar de que en cierta ocasión Pedro objetó al derrotero que él había escogido y a pesar de que sus propios familiares cercanos también se opusieron en otra ocasión. (Mateo 16:21-23; Marcos 3:21; Juan 8:29.) ¿Qué hará usted si se encuentra en una situación parecida? Suponga que sus familiares quieren que deje de estudiar la Biblia y de relacionarse con los testigos de Jehová. ¿Pondrá a Dios en primer lugar haciendo lo que le agrada a él? ¿Ocupa Dios el primer lugar en su vida aunque sus familiares se opongan a que le sirva?
El lazo de la oposición familiar
3. a) ¿Qué repercusión pueden tener en la familia las enseñanzas de Jesús? b) ¿Cómo pueden mostrar los familiares a quién le tienen más cariño?
3 Jesús no minimizó las dificultades que pueden surgir cuando la persona que acepta sus enseñanzas se enfrenta a la oposición de sus familiares. Dijo: “Los enemigos del hombre serán personas de su propia casa”. Sin embargo, pese a esa triste consecuencia, Jesús indicó a quién se debe poner en primer lugar al decir: “El que le tiene mayor cariño a padre o a madre que a mí no es digno de mí; y el que le tiene mayor cariño a hijo o a hija que a mí no es digno de mí”. (Mateo 10:34-37.) Ponemos a Jehová Dios primero si seguimos las enseñanzas de su Hijo, Jesucristo, que es “la representación exacta [del] mismo ser” de Dios. (Hebreos 1:3; Juan 14:9.)
4. a) Según dijo Jesús, ¿qué implicaba ser su seguidor? b) ¿En qué sentido deben los cristianos odiar a sus familiares?
4 En otra ocasión en que Jesús explicó lo que implica realmente ser un seguidor verdadero de él, dijo: “Si alguien viene a mí y no odia a su padre y madre y esposa e hijos y hermanos y hermanas, sí, y hasta su propia alma, no puede ser mi discípulo”. (Lucas 14:26.) Es obvio que no quiso decir que sus seguidores debían odiar literalmente a sus familiares, ya que mandó que las personas amaran incluso a sus enemigos. (Mateo 5:44.) Lo que quiso decir fue que sus seguidores debían amar a sus familiares menos que a Dios. (Compárese con Mateo 6:24.) En conformidad con este entendimiento, la Biblia indica que Jacob ‘odiaba’ a Lea y amaba a Raquel, es decir, que no amaba a Lea tanto como a su hermana, Raquel. (Génesis 29:30-32.) Jesús dijo que debemos odiar incluso nuestra propia “alma”, o vida, en otras palabras, amarla menos que a Jehová.
5. ¿Cómo se aprovecha astutamente Satanás de los lazos familiares?
5 Como Creador y Dador de la vida, Jehová merece la devoción completa de todos sus siervos. (Revelación [Apocalipsis] 4:11.) El apóstol Pablo escribió: “Doblo mis rodillas ante el Padre, a quien toda familia en el cielo y en la tierra debe su nombre”. (Efesios 3:14, 15.) Jehová creó la familia de una manera tan maravillosa que sus miembros sienten cariño natural los unos por los otros. (1 Reyes 3:25, 26; 1 Tesalonicenses 2:7.) No obstante, Satanás el Diablo se aprovecha astutamente de este cariño natural de los parientes, que incluye el deseo de agradar a los seres queridos. Intensifica la oposición de los familiares, y a muchas personas que la afrontan se les hace muy difícil apegarse con firmeza a las verdades bíblicas. (Revelación 12:9, 12.)
Cómo hacer frente al desafío
6, 7. a) ¿Cómo puede ayudarse a los familiares a comprender la importancia del estudio de la Biblia y el compañerismo cristiano? b) ¿Cómo podemos demostrar que verdaderamente amamos a nuestros familiares?
6 ¿Qué hará usted si se ve obligado a elegir entre agradar a Dios y agradar a un familiar? ¿Se justificará diciendo que Dios no espera que estudiemos su Palabra y nos rijamos por sus principios si tal proceder provoca disensión en la familia? Medite en ello. Si usted cede y deja de estudiar la Biblia o de reunirse con los testigos de Jehová, ¿cómo comprenderán sus seres queridos que el adquirir conocimiento exacto de la Biblia es un asunto de vida o muerte? (Juan 17:3; 2 Tesalonicenses 1:6-8.)
7 Pudiéramos ilustrarlo de la siguiente manera: Puede que un familiar se dé a la bebida. ¿Le beneficiaría que usted pasara por alto o aprobara ese hábito? ¿Sería mejor rendirse y no hacer nada a fin de mantener la paz? No; probablemente concordará en que lo mejor sería intentar ayudarlo a superar su problema, aunque se enojara con usted y lo amenazara. (Proverbios 29:25.) Del mismo modo, si usted verdaderamente ama a sus familiares, no cederá cuando intenten obligarlo a dejar de estudiar la Biblia. (Hechos 5:29.) La única manera de ayudarlos a comprender que nuestra vida depende de que vivamos en conformidad con las enseñanzas de Cristo es permaneciendo firmes.
8. ¿Cómo nos beneficia el que Jesús haya hecho fielmente la voluntad de Dios?
8 A veces pudiera hacerse muy difícil poner a Dios en primer lugar. Pero recuerde: Satanás también logró que a Jesús le resultara difícil hacer la voluntad de Dios. Sin embargo, Jesús nunca cedió; aguantó incluso el sufrimiento indecible de un madero de tormento para nuestro beneficio. “Jesucristo [es] nuestro Salvador”, dice la Biblia. “Él murió por nosotros.” (Tito 3:6; 1 Tesalonicenses 5:10.) ¿Verdad que estamos agradecidos de que no cediera frente a la oposición? Gracias a que aguantó una muerte sacrificatoria, tenemos la perspectiva de vivir para siempre en un pacífico nuevo mundo de justicia si ejercemos fe en su sangre derramada. (Juan 3:16, 36; Revelación 21:3, 4.)
Podemos recibir un magnífico galardón
9. a) ¿Cómo pueden los cristianos ayudar a salvar a otras personas? b) ¿En qué situación se hallaba la familia de Timoteo?
9 ¿Sabía usted que también puede colaborar en la salvación de otras personas, entre ellas sus queridos familiares? El apóstol Pablo instó a Timoteo: “Persiste en estas cosas [que se te han enseñado], pues haciendo esto te salvarás a ti mismo y también a los que te escuchan”. (1 Timoteo 4:16.) Timoteo vivía en un hogar dividido, pues su padre, que era griego, no era creyente. (Hechos 16:1; 2 Timoteo 1:5; 3:14.) Aunque no sabemos si el padre de Timoteo se hizo creyente después, el comportamiento y la fidelidad de su esposa Eunice y de su hijo, Timoteo, favorecieron mucho la posibilidad de que llegara a serlo.
10. ¿Cómo puede ayudar el cristiano a su cónyuge incrédulo?
10 Las Escrituras ponen de manifiesto que el esposo o la esposa que apoya firmemente las verdades bíblicas puede contribuir a la salvación de su cónyuge no cristiano ayudándole a hacerse creyente. El apóstol Pablo escribió: “Si algún hermano tiene esposa incrédula, y sin embargo ella está de acuerdo en morar con él, no la deje; y la mujer que tiene esposo incrédulo, y sin embargo él está de acuerdo en morar con ella, no deje a su esposo. Pues, esposa, ¿cómo sabes que no salvarás a tu esposo? O, esposo, ¿cómo sabes que no salvarás a tu esposa?”. (1 Corintios 7:12, 13, 16.) El apóstol Pedro explicó cómo puede la esposa salvar a su esposo, al exhortar: “Estén en sujeción a sus propios esposos, a fin de que, si algunos no son obedientes a la palabra, sean ganados sin una palabra por la conducta de sus esposas”. (1 Pedro 3:1.)
11, 12. a) ¿Qué galardón han recibido miles de cristianos, y qué hicieron para recibirlo? b) Relate una experiencia de alguien que haya sido recompensado por haber aguantado fielmente.
11 En los últimos años, miles de personas se han hecho testigos de Jehová después de haberse opuesto a la labor cristiana de sus parientes Testigos durante meses e incluso años. ¡Qué magnífico galardón para los cristianos que han permanecido firmes!, y ¡qué gran bendición para los anteriores opositores! Un anciano cristiano de 74 años dijo emocionado: “Con frecuencia doy las gracias a mi esposa e hijos por haberse mantenido fieles a la verdad durante los años en que me opuse a ellos”. Explica que por tres años rehusó tercamente dejar que su esposa le hablara de la Biblia. “Pero ella fue prudente —cuenta él—, y me predicaba mientras me daba masajes en los pies. ¡Cuánto agradezco que nunca se diera por vencida debido a mi oposición!”
12 Otro esposo que se oponía a su familia escribió: ‘Era el peor enemigo de mi esposa, porque la amenacé después que aprendió la verdad, y discutíamos todos los días; bueno, siempre era yo quien empezaba las peleas. Pero fue en vano; ella permaneció fiel a la Biblia. Durante doce años luché fieramente contra la verdad y contra mi esposa y mi hijo. Me porté con ellos como la encarnación del Diablo’. Con el tiempo, este hombre empezó a analizar su vida. ‘Me di cuenta de lo vil que había sido —dijo—. Leí la Biblia, y gracias a su instrucción, ahora soy un Testigo bautizado.’ Piense en el magnífico galardón que recibió la esposa: ¡ayudó a ‘salvar a su esposo’ por aguantar fielmente su oposición durante doce años!
Lecciones que aprendemos de Jesús
13. a) ¿Cuál es la lección principal que los esposos y las esposas deben aprender de la vida de Jesús? b) ¿Cómo pueden beneficiarse del ejemplo de Jesús las personas que encuentran difícil someterse a la voluntad de Dios?
13 La lección principal que los esposos y las esposas deben aprender de la vida de Jesús es que hay que obedecer a Dios. “Yo siempre hago las cosas que le agradan”, dijo Jesús, y añadió: “No busco mi propia voluntad, sino la voluntad del que me envió”. (Juan 5:30; 8:29.) Jesús fue obediente incluso en una ocasión en que le resultó desagradable un aspecto particular de la voluntad de Dios. “Si deseas, remueve de mí esta copa”, oró él, pero enseguida añadió: “Sin embargo, que no se efectúe mi voluntad, sino la tuya”. (Lucas 22:42.) Jesús no pidió que Dios cambiara su voluntad; mostró que en realidad lo amaba sometiéndose obedientemente a lo que fuera su voluntad para él. (1 Juan 5:3.) Poner siempre a Dios en primer lugar, como hizo Jesús, es de suma importancia, no solo para tener éxito en la soltería, sino también en el matrimonio y en la vida de familia. Veamos por qué.
14. ¿Qué razonamiento incorrecto han seguido algunos cristianos?
14 Como ya se mencionó, cuando los creyentes ponen a Dios primero, procuran permanecer con su cónyuge incrédulo, y en muchos casos pueden ayudarle a ponerse en el camino de la salvación. Puede que el matrimonio diste mucho de ser ideal aun cuando ambos cónyuges sean creyentes. Debido a las inclinaciones pecaminosas, los casados no siempre manifiestan amor a su cónyuge. (Romanos 7:19, 20; 1 Corintios 7:28.) Algunos van hasta el extremo de buscarse otro cónyuge, aunque no tengan base bíblica para divorciarse. (Mateo 19:9; Hebreos 13:4.) Alegan que este es el mejor proceder para ellos, que cuesta mucho someterse a la voluntad divina de que el esposo y la esposa permanezcan juntos. (Malaquías 2:16; Mateo 19:5, 6.) Este es sin lugar a dudas otro ejemplo de anteponer los pensamientos del hombre a los de Dios.
15. ¿Por qué es una protección poner a Dios primero?
15 Poner a Dios en primer lugar es una gran protección. Los matrimonios que lo hacen procuran permanecer juntos y resolver sus problemas siguiendo el consejo de la Palabra de Dios. De esta manera se ahorran los muchos dolores que vienen cuando se pasa por alto la voluntad divina. (Salmo 19:7-11.) Ilustra este hecho la experiencia de un matrimonio joven que, estando a punto de divorciarse, decidió seguir el consejo de la Biblia. Años después, la esposa reflexionó en lo feliz que había sido su matrimonio y dijo: “Tengo que sentarme a llorar cuando pienso en la posibilidad de haber vivido separada de mi esposo durante todos estos años. Luego oro a Jehová Dios y le doy gracias por su consejo y guía, que nos unió en esta relación tan feliz”.
Esposos y esposas, imiten a Cristo
16. ¿Qué ejemplo dio Jesús a los casados?
16 Jesús, que siempre puso a Dios en primer lugar en la vida, dio un maravilloso ejemplo a los casados, y estos hacen bien en prestarle atención cuidadosa. A los esposos se les insta a imitar la manera tierna como Jesús ejerce su jefatura sobre los miembros de la congregación cristiana. (Efesios 5:23.) Y las esposas cristianas pueden aprender del impecable ejemplo que dio Jesús de sujeción a Dios. (1 Corintios 11:3.)
17, 18. ¿De qué maneras dio Jesús un excelente ejemplo a los esposos?
17 La Biblia manda: “Esposos, continúen amando a sus esposas, tal como el Cristo también amó a la congregación y se entregó por ella”. (Efesios 5:25.) Una manera importante como Jesús demostró que amaba a su congregación de seguidores fue haciéndose su amigo íntimo. “Los he llamado amigos —dijo Jesús—, porque todas las cosas que he oído de mi Padre se las he dado a conocer a ustedes.” (Juan 15:15.) Piense en todo el tiempo que Jesús pasó hablando con sus discípulos, las muchísimas conversaciones que tuvo con ellos y la confianza que depositó en ellos. ¿No es ese un excelente ejemplo para los esposos?
18 Jesús mostró interés verdadero en sus discípulos y se encariñó sinceramente con ellos. (Juan 13:1.) Cuando no entendían bien sus enseñanzas, él apartaba tiempo para aclarárselas en privado con paciencia. (Mateo 13:36-43.) Esposo, ¿es de igual importancia para usted el bienestar espiritual de su esposa? ¿Pasa tiempo con ella a fin de asegurarse de que ambos comprenden y aman las verdades bíblicas? Jesús acompañó a sus apóstoles en el ministerio, y tal vez enseñó a cada uno individualmente. ¿Acompaña usted a su esposa en el ministerio, predicando de casa en casa y conduciendo estudios bíblicos con ella?
19. ¿Qué ejemplo dio Jesús a los esposos al tratar con las debilidades recurrentes de sus apóstoles?
19 Jesús dio un ejemplo sublime para los esposos, sobre todo al tratar con las imperfecciones de sus apóstoles. Durante la última cena percibió un espíritu de rivalidad constante entre ellos. ¿Los criticó severamente? No, sino que humildemente les lavó los pies a todos. (Marcos 9:33-37; 10:35-45; Juan 13:2-17.) ¿Muestra usted esa misma paciencia con su esposa? En vez de quejarse de una debilidad recurrente, ¿trata de ayudarla con paciencia y de llegar al corazón mediante su ejemplo? Es muy probable que ella responda a esa compasión amorosa tal como con el tiempo lo hicieron los apóstoles.
20. ¿Qué no deben olvidar las esposas cristianas, y quién les dio el ejemplo al respecto?
20 Las esposas también deben examinar el ejemplo de Jesús, que nunca olvidó que “la cabeza del Cristo es Dios”. Siempre se sometió a su Padre celestial. Así mismo, las esposas no deben olvidar que “la cabeza de la mujer es el varón”, es decir, que su esposo es su cabeza. (1 Corintios 11:3; Efesios 5:23.) El apóstol Pedro exhortó a las esposas cristianas a meditar en el ejemplo de “las mujeres santas” de la antigüedad, especialmente el de Sara, que “obedecía a Abrahán, llamándolo ‘señor’”. (1 Pedro 3:5, 6.)
21. ¿Por qué tuvieron éxito en el matrimonio Abrahán y Sara, y por qué fracasó el de Lot y su esposa?
21 Parece ser que Sara sacrificó un hogar cómodo en una ciudad próspera para vivir en tiendas de campaña en un país extranjero. ¿Por qué? ¿Porque prefería ese estilo de vida? No es muy probable. ¿Porque su esposo le pidió que lo hiciera? Sin duda este fue un factor, pues Sara amaba y respetaba a Abrahán por sus cualidades piadosas. (Génesis 18:12.) Pero la razón principal por la que acompañó a su esposo fue el amor a Jehová y el deseo sincero de seguir Su dirección. (Génesis 12:1.) Se complacía en obedecer a Dios. Por otro lado, la esposa de Lot vaciló en hacer la voluntad de Dios, y por esa razón miró atrás anhelando las posesiones que había dejado en la ciudad de Sodoma. (Génesis 19:15, 25, 26; Lucas 17:32.) Aquel matrimonio terminó trágicamente debido a que la esposa desobedeció a Dios.
22. a) ¿Qué examen de conciencia es prudente que hagan los miembros de la familia? b) ¿Qué analizaremos en el siguiente estudio?
22 Por eso, si usted está casado, es esencial que se pregunte: ‘¿Ocupa Dios el primer lugar en nuestra familia? ¿Procuro realmente cumplir con el papel que Dios me ha asignado en la familia? ¿Me esfuerzo sinceramente por amar a mi cónyuge y ayudarle a conseguir o mantener una buena relación con Jehová?’. En la mayoría de las familias también hay hijos. En el siguiente estudio examinaremos el papel que desempeñan los padres y la importancia de que tanto ellos como sus hijos pongan a Dios en primer lugar.
¿Recuerda usted?
◻ ¿Qué efecto pueden tener en muchas familias las enseñanzas de Jesús?
◻ ¿Qué galardón han recibido miles de cristianos firmes?
◻ ¿Qué ayudará a los cónyuges a evitar la inmoralidad y el divorcio?
◻ ¿Qué pueden aprender los esposos del ejemplo de Jesús?
◻ ¿Cómo pueden contribuir las esposas a que su matrimonio sea feliz?
[Ilustración en la página 10]
¿Cómo contribuyó Sara a que su matrimonio tuviera éxito?