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No separemos lo que Dios ha unidoLa Atalaya 2007 | 1 de mayo
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De esta manera los esposos deben estar amando a sus esposas como a sus propios cuerpos. El que ama a su esposa, a sí mismo se ama, porque nadie jamás ha odiado a su propia carne; antes bien, la alimenta y la acaricia, como también el Cristo hace con la congregación.
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No separemos lo que Dios ha unidoLa Atalaya 2007 | 1 de mayo
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Cómo cuidar a la esposa
10. ¿Cómo puede el esposo cuidar a la esposa?
10 El amor debe moverlo a usted, esposo, a cuidar a su esposa y a mostrarle su cariño de varias maneras. En primer lugar, dedíquele suficiente tiempo. De lo contrario, el amor que ella le tiene podría enfriarse. Piense, también, que su esposa quizá sienta que necesita más tiempo y atención de lo que usted cree. No basta con que afirme que la quiere. Ella necesita sentirse querida. Pablo escribió: “Que cada uno siga buscando, no su propia ventaja, sino la de la otra persona” (1 Corintios 10:24). El esposo amoroso debe asegurarse de saber cuáles son las verdaderas necesidades de la esposa (Filipenses 2:4).
11. ¿Qué efecto tiene en la relación de un esposo con Dios y con la congregación la forma en que él trata a su esposa? (Véase también la nota.)
11 Otra manera de cuidar a su esposa es tratándola con ternura, tanto de palabra como de obra (Proverbios 12:18). Pablo escribió en su carta a los Colosenses: “Esposos, sigan amando a sus esposas y no se encolericen amargamente con ellas” (Colosenses 3:19). Según cierta obra de consulta, esta última frase de Pablo puede traducirse “no la traten como una criada” o “no la conviertan en una esclava”. De seguro, el esposo que se comporta como un tirano —ya sea en privado o en público— no demuestra amor a su esposa. Al tratarla con aspereza, su propia relación con Dios se ve afectada. El apóstol Pedro escribió a los esposos: “Continúen morando con [sus esposas] de igual manera, de acuerdo con conocimiento, asignándoles honra como a un vaso más débil, el femenino, puesto que ustedes también son herederos con ellas del favor inmerecido de la vida, a fin de que sus oraciones no sean estorbadas” (1 Pedro 3:7).c
12. ¿Qué puede aprender el esposo cristiano de la forma en que Jesús trató a la congregación?
12 Nunca dé por sentado el amor de su esposa. Dele continuas muestras de cariño. La forma en que Jesús trató a la congregación sirve de modelo para los esposos cristianos. Él fue amable, bondadoso y misericordioso con sus discípulos, incluso cuando en repetidas ocasiones manifestaron malas tendencias; de ahí que pudiera decir a sus oyentes: “Vengan a mí, [...] porque soy de genio apacible y humilde de corazón, y hallarán refrigerio para sus almas” (Mateo 11:28, 29). El esposo cristiano imita a Jesús y trata a su esposa de la misma manera como él trató a la congregación. El hombre que de veras ama a su esposa, y que lo demuestra con sus palabras y sus actos, será para ella una fuente de auténtico refrigerio y felicidad.
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